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CAPÍTULO 14

La lamentación del rey Citraketu

En este capítulo decimocuarto, Parīkṣit Mahārāja pregunta a su maestro espiritual, Śukadeva Gosvāmī, cómo es posible que un demonio como Vṛtrāsura llegase a ser un devoto excelso. En relación con esto, se explica la vida anterior de Vṛtrāsura; esto nos remite a la historia del rey Citraketu, que cayó víctima de la lamentación ante la muerte de su hijo.

De entre los muchos millones de entidades vivientes, el número de seres humanos es muy pequeño, y, de entre los seres humanos sinceramente religiosos, solo algunos tienen el deseo sincero de liberarse de la existencia material. De entre muchos miles de personas que aspiran a liberarse de la existencia material, puede que una se libere de la relación con personas indeseables o de la contaminación material. Y de entre muchos millones de personas que han llegado a esa etapa liberada, tal vez una llegue a ser devota del Señor Nārāyaṇa. Por lo tanto, es muy difícil hallar a uno de esos devotos. Puesto que el bhakti, el servicio devocional, no es algo corriente, Parīkṣit Mahārāja estaba asombrado de ver que un asura hubiera podido elevarse a la excelsa posición de devoto. Para resolver esa duda, Parīkṣit Mahārāja preguntó a Śukadeva Gosvāmī, quien entonces habló de la vida anterior de Vṛtrāsura, cuando era Citraketu, el rey de Śūrasena.

Citraketu, que no tenía hijos, tuvo la fortuna de encontrarse con el gran sabio Aṅgirā. Al preguntarle el sabio sobre su bienestar, el rey le expresó su tristeza. Entonces, por la gracia del gran sabio, la primera esposa del rey, Kṛtadyuti, dio a luz un niño, que fue causa de felicidad y de lamentación. El rey y todas las personas en el palacio se sintieron muy felices con el nacimiento de aquel hijo. Sin embargo, las coesposas de Kṛtadyuti se llenaron de envidia, de modo que, al poco tiempo, envenenaron al niño. Ante la muerte de su hijo, el rey Citraketu se sintió completamente abrumado. Entonces fueron a verlo Nārada Muni y Aṅgirā.

Texto

śrī-parīkṣid uvāca
rajas-tamaḥ-svabhāvasya
brahman vṛtrasya pāpmanaḥ
nārāyaṇe bhagavati
katham āsīd dṛḍhā matiḥ

Palabra por palabra

śrī-parīkṣit uvāca — el rey Parīkṣit preguntó; rajaḥ — de la modalidad de la pasión; tamaḥ — y de la modalidad de la ignorancia; sva-bhāvasya — con una naturaleza; brahman — ¡oh, erudito brāhmaṇa!; vṛtrasya — de Vṛtrāsura; pāpmanaḥ — que supuestamente era pecaminoso; nārāyaṇe — en el Señor Nārāyaṇa; bhagavati — la Suprema Personalidad de Dios; katham — cómo; āsīt — había; dṛḍhā — muy fuerte; matiḥ — conciencia.

Traducción

El rey Parīkṣit preguntó a Śukadeva Gosvāmī: ¡Oh, erudito brāhmaṇa!, generalmente los demonios son pecadores obsesionados con las modalidades de la pasión y la ignorancia. Siendo así, ¿cómo es posible que Vṛtrāsura alcanzase un amor tan sublime por la Suprema Personalidad de Dios, Nārāyaṇa?

Significado

En el mundo material, todos están obsesionados con las modalidades de la pasión y la ignorancia. Sin embargo, quien no supere esas modalidades y se sitúe en el plano de la bondad, no tiene posibilidad de llegar a ser un devoto puro. Esto lo confirma el Señor Kṛṣṇa en el Bhagavad-gītā (7.28):

yeṣāṁ tv anta-gataṁ pāpaṁ
janānāṁ puṇya-karmaṇām
te dvandva-moha-nirmuktā
bhajante māṁ dṛḍha-vratāḥ

«Aquellos que han observado una conducta piadosa en vidas anteriores y en la presente, y cuyas acciones pecaminosas están completamente erradicadas, se liberan de la dualidad de la ilusión y se ocupan en Mi servicio con determinación». Vṛtrāsura estaba del lado de los demonios, de modo que Mahārāja Parīkṣit se preguntaba cómo era posible que hubiera llegado a ser un devoto tan elevado.

Texto

devānāṁ śuddha-sattvānām
ṛṣīṇāṁ cāmalātmanām
bhaktir mukunda-caraṇe
na prāyeṇopajāyate

Palabra por palabra

devānām — de los semidioses; śuddha-sattvānām — cuyas mentes están purificadas; ṛṣīṇām — de grandes personas santas; ca — y; amala-ātmanām — que han purificado su existencia; bhaktiḥ — servicio devocional; mukunda-caraṇe — a los pies de loto de Mukunda, el Señor, que puede dar la liberación; na — no; prāyeṇa — casi siempre; upajāyate — adquiere.

Traducción

Los semidioses situados en el plano de la modalidad de la bondad, y los grandes sabios purificados de la suciedad del disfrute material, muy rara vez ofrecen servicio devocional puro a los pies de loto de Mukunda. [Por lo tanto, ¿cómo es posible que Vṛtrāsura llegase a ser un devoto tan elevado?].

Texto

rajobhiḥ sama-saṅkhyātāḥ
pārthivair iha jantavaḥ
teṣāṁ ye kecanehante
śreyo vai manujādayaḥ

Palabra por palabra

rajobhiḥ — con los átomos; sama-saṅkhyātāḥ — en la misma cantidad; pārthivaiḥ — de la Tierra; iha — en este mundo; jantavaḥ — las entidades vivientes; teṣām — de ellas; ye — aquellas que; kecana — algunas; īhante — actúan; śreyaḥ — por principios religiosos; vai — en verdad; manuja-ādayaḥ — los seres humanos y demás.

Traducción

En el mundo material hay tantas entidades vivientes como átomos. De entre ellas, solo unas pocas son seres humanos, y, de entre estas, pocas tienen interés en seguir principios religiosos.

Texto

prāyo mumukṣavas teṣāṁ
kecanaiva dvijottama
mumukṣūṇāṁ sahasreṣu
kaścin mucyeta sidhyati

Palabra por palabra

prāyaḥ — casi siempre; mumukṣavaḥ — personas interesadas en la liberación; teṣām — de ellas; kecana — algunas; eva — en verdad; dvija-uttama — ¡oh, el mejor de los brāhmaṇas!; mumukṣūṇām — de aquellas que desean ser liberadas; sahasreṣu — en muchos miles; kaścit — alguna; mucyeta — pueda ser realmente liberada; sidhyati — alguna es perfecta.

Traducción

¡Oh, el mejor de los brāhmaṇas, Śukadeva Gosvāmī!, de entre muchas personas que siguen principios religiosos, solo unas pocas desean liberarse del mundo material. De entre muchos miles que desean la liberación, tal vez haya una que la alcance, abandonando el apego material por la sociedad, la amistad, el amor, el país, el hogar, la esposa y los hijos. Y, de entre muchos miles de personas liberadas, es muy difícil hallar una que haya podido entender el verdadero significado de la liberación.

Significado

Hay cuatro clases de hombres: karmīs, jñānīs, yogīs y bhaktas. Este verso se refiere especialmente a los karmīs y a los jñānīs. El karmī trata de ser feliz en el mundo material pasando de un cuerpo a otro. Su objetivo es el bienestar físico, aquí o en otro planeta. Sin embargo, esa persona, cuando se eleva al plano del jñāna, aspira a liberarse del cautiverio material. De entre muchas personas que aspiran a la liberación, tal vez una la logre en el curso de su vida, abandonando los apegos por la sociedad, la amistad, el amor, el país, la familia, la esposa y los hijos. De entre muchas de esas personas liberadas que se encuentran en la etapa de vānaprastha, puede que una comprenda la importancia de la vida de sannyāsī, aceptando por completo esa orden de vida de renuncia.

Texto

muktānām api siddhānāṁ
nārāyaṇa-parāyaṇaḥ
su-durlabhaḥ praśāntātmā
koṭiṣv api mahā-mune

Palabra por palabra

muktānām — de aquellos que están liberados durante esta vida (desapegados de los placeres corporales de la sociedad, la amistad y el amor); api — incluso; siddhānām — que son perfectos (pues comprenden que el bienestar del cuerpo es algo insignificante); nārāyaṇa-parāyaṇaḥ — la persona que ha llegado a la conclusión de que Nārāyaṇa es el Supremo; su-durlabhaḥ — que muy rara vez se halla; praśānta — completamente pacífica; ātmā — cuya mente; koṭiṣu — de millones y trillones (koti significa diez millones; en plural significa millones y trillones); api — incluso; mahā-mune — ¡oh, gran sabio!

Traducción

¡Oh, gran sabio!, de entre muchos millones de personas liberadas y perfectas en el conocimiento de la liberación, tal vez una sea devota del Señor Nārāyaṇa, Kṛṣṇa. Hallar a uno de esos devotos completamente pacíficos es algo extraordinariamente difícil.

Significado

Śrīla Viśvanātha Cakravartī Ṭhākura ofrece el siguiente comentario para este verso: El simple hecho de desear la liberación, mukti, no es suficiente; es necesario liberarse realmente. Quien comprende lo inútil que es el modo de vida materialista, avanza en el cultivo de conocimiento, y se sitúa en la orden de vānaprastha, desapegado de la familia, la esposa y los hijos. A partir de entonces, debe seguir progresando hasta el nivel de sannyāsa, la verdadera orden de renuncia, para nunca más caer en los sufrimientos de la vida materialista. Pero desear la liberación no significa haberla logrado. Muy rara vez llega alguien a liberarse. En verdad, son muchos los hombres que entran en la orden de sannyāsa para obtener la liberación, pero sus imperfecciones les llevan a apegarse de nuevo a las mujeres, las actividades materiales, las obras de beneficencia social, etc.

A los jñānīs, yogīs y karmīs carentes de servicio devocional se les considera ofensores. Śrī Caitanya Mahāprabhu dice: māyāvādī kṛṣṇe aparādhī: Quien piensa que todo es māyā, en lugar de pensar que todo es Kṛṣṇa, recibe el nombre de aparādhī, ofensor. Los māyāvādīs, los impersonalistas, son ofensores contra los pies de loto de Kṛṣṇa, pero, aun así, se les puede incluir entre los siddhas, es decir, entre aquellos que han comprendido el ser. Por lo menos han comprendido qué es la vida espiritual, de modo que se les puede considerar más próximos a la perfección espiritual. Si se elevan al plano de nārāyaṇa-parāyaṇa, es decir, si se vuelven devotos del Señor Nārāyaṇa, se sitúan por encima del jīvan-mukta, la persona liberada o perfecta. Para ello necesitan una inteligencia superior.

Hay dos tipos de jñānīs. Unos sienten inclinación por el servicio devocional, y otros por la iluminación impersonal. Los impersonalistas, por lo general, se someten a grandes esfuerzos sin beneficio tangible; por eso se dice que están buscando arroz donde ya solo hay cáscaras (sthūla-tuṣāvaghātinaḥ). Los jñānīs del otro tipo, cuyo jñāna está mezclado con bhakti, también pueden dividirse en dos clases: los que son devotos de la forma de la Suprema Personalidad de Dios, aunque la consideran falsa, y los que comprenden la verdadera forma espiritual de la Suprema Personalidad de Dios, sac-cid-ānanda-vigraha. Los devotos māyāvādīs adoran a Nārāyaṇa, Viṣṇu, con la idea de que Viṣṇu ha aceptado una forma de māyā, y que la verdad suprema es, en realidad, impersonal. El devoto puro, sin embargo, nunca piensa que Viṣṇu ha recibido un cuerpo de māyā; saben perfectamente que la Verdad Absoluta original es la Persona Suprema. Ese devoto está verdaderamente situado en el plano del conocimiento. Nunca se funde en la refulgencia del Brahman. Como se afirma en el Śrīmad-Bhāgavatam (10.2.32):

ye ’nye ’ravindākṣa vimukta-māninas
tvayy asta-bhāvād aviśuddha-buddhayaḥ
āruhya kṛcchreṇa paraṁ padaṁ tataḥ
patanty adho ’nādṛta-yuṣmad-aṅghrayaḥ

«¡Oh, Señor!, la inteligencia de los que se consideran liberados, pero carecen de devoción, es impura. Aunque alcancen el elevado nivel de la liberación por medio de rigurosas penitencias y austeridades, es seguro que volverán a caer a la existencia material, pues no se refugian en Tus pies de loto». Este punto se confirma en el Bhagavad-gītā (9.11), donde el Señor dice:

avajānanti māṁ mūḍhā
mānuṣīṁ tanum āśritam
paraṁ bhāvam ajānanto
mama bhūta-maheśvaram

«Los necios se burlan de Mí cuando desciendo con forma humana. No conocen Mi naturaleza trascendental como Señor Supremo de todo cuanto existe». Los sinvergüenzas (mūḍhas), cuando ven que Kṛṣṇa actúa exactamente igual que un ser humano, ridiculizan la forma trascendental del Señor, pues no conocen Su forma y Sus actividades trascendentales, paraṁ bhāvam. En el Bhagavad-gītā (9.12) la descripción de esas personas se completa de la siguiente manera:

moghāśā mogha-karmāṇo
mogha-jñānā vicetasaḥ
rākṣasīm āsurīṁ caiva
prakṛtiṁ mohinīṁ śritāḥ

«Aquellos que están confundidos de ese modo son atraídos por opiniones demoníacas y ateas. En esa condición de engaño, verán defraudadas sus esperanzas de liberarse, sus actividades fruitivas, y su cultivo de conocimiento». Esas personas no saben que el cuerpo de Kṛṣṇa no es material. El cuerpo de Kṛṣṇa y el alma de Kṛṣṇa no son diferentes; sin embargo, los hombres de poca inteligencia ven a Kṛṣṇa como un ser humano, de modo que se ríen de Él. No pueden entender que una persona como Kṛṣṇa pueda ser el origen de todo (govindam ādi-puruṣaṁ tam ahaṁ bhajāmi). A esas personas se las califica de moghāśāḥ, es decir, defraudadas en sus esperanzas. Todas sus aspiraciones de futuro fracasarán. Se las califica de moghāśāḥ incluso si aparentemente se ocupan en servicio devocional, pues en última instancia desean fundirse en la refulgencia del Brahman.

Aquellos que aspiran a elevarse a los planetas celestiales mediante el servicio devocional también acabarán defraudados, pues no es ese el resultado del servicio devocional. Sin embargo, también ellos reciben la oportunidad de ocuparse en servicio devocional y purificarse. Como se afirma en el Śrīmad-Bhāgavatam (1.2.17):

śṛṇvatāṁ sva-kathāḥ kṛṣṇaḥ
puṇya-śravaṇa-kīrtanaḥ
hṛdy antaḥ-stho hy abhadrāṇi
vidhunoti suhṛt satām

«Śrī Kṛṣṇa, la Personalidad de Dios, que es el Paramātmā [la Superalma] que está en el corazón de todos y el benefactor del devoto veraz, limpia de deseos de disfrute material el corazón del devoto que saborea Sus mensajes, que son virtuosos en sí mismos cuando se escuchan y cantan del modo adecuado».

Nadie puede llegar a ser un devoto puro mientras no limpie de impurezas lo más hondo del corazón. Por eso en este verso se emplea la palabra sudurlabhaḥ («que es muy difícil de encontrar»). Es prácticamente imposible encontrar a un devoto puro, no ya entre cientos o miles, sino entre millones de almas perfectas y liberadas. Por esa razón, en este verso se emplean las palabras koṭiṣv api. Śrīla Madhvācārya presenta las siguientes citas del Tantra Bhāgavata:

nava-koṭyas tu devānām
ṛṣayaḥ sapta-koṭayaḥ
nārāyaṇāyanāḥ sarve
ye kecit tat-parāyaṇāḥ

«Hay noventa millones de semidioses y setenta millones de sabios, todos los cuales son nārāyaṇāyana, es decir, devotos del Señor Nārāyaṇa. De entre ellos, solo unos poco son nārāyaṇa-parāyaṇa».

nārāyaṇāyanā devā
ṛṣy-ādyās tat-parāyaṇāḥ
brahmādyāḥ kecanaiva syuḥ
siddho yogya-sukhaṁ labhan

La diferencia entre los siddhas y los nārāyaṇa-parāyaṇas es que estos últimos son devotos directos, mientras que los siddhas son aquellos que se ocupan en diversos tipos de yoga místico.

Texto

vṛtras tu sa kathaṁ pāpaḥ
sarva-lokopatāpanaḥ
itthaṁ dṛḍha-matiḥ kṛṣṇa
āsīt saṅgrāma ulbaṇe

Palabra por palabra

vṛtraḥ — Vṛtrāsura; tu — pero; saḥ — él; katham — cómo; pāpaḥ — aunque pecaminoso (con el cuerpo de un demonio); sarva-loka — de los tres mundos; upatāpanaḥ — la causa del sufrimiento; ittham — semejante; dṛḍha-matiḥ — de inteligencia firme y fija; kṛṣṇe — en Kṛṣṇa; āsīt — había; saṅgrāme ulbaṇe — en el gran fuego ardiente de la batalla.

Traducción

Vṛtrāsura se encontraba en el ardiente fuego de la batalla y era un demonio infame y pecaminoso, siempre empeñado en causar problemas y ansiedades a los demás. ¿Cómo es posible que semejante demonio llegara a ser tan consciente de Kṛṣṇa?

Significado

Se ha explicado que es muy difícil encontrar a un nārāyaṇa-parāyaṇa, un devoto puro, incluso entre millones de millones de personas. Por esa razón, Mahārāja Parīkṣit estaba sorprendido de que Vṛtrāsura, que estaba empeñado en causar problemas y ansiedades a los demás, fuese uno de esos devotos, incluso en un campo de batalla. ¿Cuál era la razón de que Vṛtrāsura fuese tan avanzado?

Texto

atra naḥ saṁśayo bhūyāñ
chrotuṁ kautūhalaṁ prabho
yaḥ pauruṣeṇa samare
sahasrākṣam atoṣayat

Palabra por palabra

atra — en relación con esto; naḥ — nuestra; saṁśayaḥ — duda; bhūyān — grande; śrotum — escuchar; kautūhalam — gran deseo; prabho — ¡oh, mi Señor!; yaḥ — aquel que; pauruṣeṇa — por valentía y fuerza; samare — en el combate; sahasra-akṣam — al Señor Indra, que tiene mil ojos; atoṣayat — complació.

Traducción

Mi querido señor, Śukadeva Gosvāmī, Vṛtrāsura era un demonio pecaminoso, pero, aun así, demostró el valor del más glorioso de los kṣatriyas y satisfizo al Señor Indra en el combate. ¿Cómo es posible que ese demonio fuese un gran devoto del Señor Kṛṣṇa? Estas contradicciones me han creado grandes dudas, y me hacen arder de deseo por escuchar tu explicación.

Texto

śrī-sūta uvāca
parīkṣito ’tha sampraśnaṁ
bhagavān bādarāyaṇiḥ
niśamya śraddadhānasya
pratinandya vaco ’bravīt

Palabra por palabra

śrī-sūtaḥ uvāca — Śrī Sūta Gosvāmī dijo; parīkṣitaḥ — de Mahārāja Parīkṣit; atha — así; sampraśnam — la pregunta perfecta; bhagavān — el más poderoso; bādarāyaṇiḥ — Śukadeva Gosvāmī, el hijo de Vyāsadeva; niśamya — escuchar; śraddadhānasya — de su discípulo, que era tan fiel en la comprensión de la verdad; pratinandya — felicitando; vacaḥ — palabras; abravīt — habló.

Traducción

Śrī Sūta Gosvāmī dijo: Tras escuchar la inteligente pregunta de Mahārāja Parīkṣit, Śukadeva Gosvāmī, el sabio más poderoso, se dispuso a responder a su discípulo con mucho afecto.

Texto

śrī-śuka uvāca
śṛṇuṣvāvahito rājann
itihāsam imaṁ yathā
śrutaṁ dvaipāyana-mukhān
nāradād devalād api

Palabra por palabra

śrī-śukaḥ uvāca — Śrī Śukadeva Gosvāmī dijo; śṛṇuṣva — por favor, escucha; avahitaḥ — con gran atención; rājan — ¡oh, rey!; itihāsam — historia; imam — esta; yathā — tal y como; śrutam — escuchada; dvaipāyana — de Vyāsadeva; mukhāt — de la boca; nāradāt — de Nārada; devalāt — de Devala Ṛṣi; api — también.

Traducción

Śrī Śukadeva Gosvāmī dijo: ¡Oh, rey!, te contaré la historia que yo mismo escuché de labios de Vyāsadeva, Nārada y Devala. Por favor, escucha con atención.

Texto

āsīd rājā sārvabhaumaḥ
śūraseneṣu vai nṛpa
citraketur iti khyāto
yasyāsīt kāmadhuṅ mahī

Palabra por palabra

āsīt — había; rājā — un rey; sārva-bhaumaḥ — emperador de toda la superficie del globo; śūraseneṣu — en el país de Śūrasena; vai — en verdad; nṛpa — ¡oh, rey!; citraketuḥ — Citraketu; iti — así; khyātaḥ — célebre; yasya — de quien; āsīt — estaba; kāma-dhuk — abasteciendo de todo lo necesario; mahī — la Tierra.

Traducción

¡Oh, rey Parīkṣit!, en la provincia de Śūrasena vivía un rey llamado Citraketu, que gobernaba sobre toda la Tierra. Durante su reinado, la Tierra producía todo lo necesario para la vida.

Significado

La afirmación más importante de este verso es que, en tiempos del rey Citraketu, la Tierra producía absolutamente todo lo necesario para la vida. Como se afirma en el Īśopaniṣad (mantra 1):

īśāvāsyam idaṁ sarvaṁ
yat kiñca jagatyāṁ jagat
tena tyaktena bhuñjīthā
mā gṛdhaḥ kasya svid dhanam

«El Señor controla y posee todo lo animado e inanimado que existe en el universo. Por lo tanto, únicamente debemos aceptar lo que nos sea necesario, la parte que nos haya sido asignada, y no debemos aceptar otras cosas, saben bien a quién pertenecen». Kṛṣṇa, el controlador supremo, ha creado el mundo material, que es completamente perfecto y no carece de nada. El Señor abastece a las entidades vivientes de todo lo que necesitan, y lo hace por medio de la Tierra, que es la fuente de aprovisionamiento. Cuando hay un buen gobernante, esa fuente produce en abundancia todo lo necesario para la vida. Sin embargo, sin ese buen gobernante, surge la escasez. Ese es el significado de la palabra kāmadhuk. En otro pasaje del Bhāgavatam (1.10.4), se dice: kāmaṁ vavarṣa parjanyaḥ sarva-kāma-dughā mahī: «Durante el reinado de Mahārāja Yudhiṣṭhira, las nubes vertían todo el agua que la gente necesitaba, y la Tierra producía en abundancia todo lo que los hombres requerían». Tenemos experiencia de que, en algunas estaciones del año, las lluvias generan abundancia, mientras que en otras estaciones reina la escasez. No tenemos control sobre la productividad de la Tierra, que, por naturaleza, está por entero bajo el control de la Suprema Personalidad de Dios. Con Su orden, el Señor puede hacer que la Tierra produzca suficiente o insuficientemente. Si la Tierra es gobernada por un rey piadoso que sigue los mandamientos de los śāstras, de modo natural las lluvias caerán con regularidad, y la producción de la Tierra bastará para proveer a todos los hombres. La explotación dejará de existir, pues todo el mundo tendrá bastante. Entonces desaparecerán de modo natural el mercado negro y otras formas de corrupción. Ningún líder puede resolver los problemas del hombre por el mero hecho de gobernar; es necesario que posea dotes espirituales. Tiene que ser como Mahārāja Yudhiṣṭhira, Parīkṣit Mahārāja o Rāmacandra. Entonces, todos los habitantes de la Tierra serán muy felices.

Texto

tasya bhāryā-sahasrāṇāṁ
sahasrāṇi daśābhavan
sāntānikaś cāpi nṛpo
na lebhe tāsu santatim

Palabra por palabra

tasya — de él (del rey Citraketu); bhāryā — de esposas; sahasrāṇām — de miles; sahasrāṇi — miles; daśa — diez; abhavan — había; sāntānikaḥ — perfectamente capaz de engendrar hijos; ca — y; api — aunque; nṛpaḥ — el rey; na — no; lebhe — obtuvo; tāsu — en ellas; santatim — un hijo.

Traducción

Citraketu tenía diez millones de esposas, pero, aunque estaba capacitado para engendrar hijos, ninguna de ellas pudo darle un descendiente. El azar quiso que todas ellas fuesen estériles.

Texto

rūpaudārya-vayo-janma-
vidyaiśvarya-śriyādibhiḥ
sampannasya guṇaiḥ sarvaiś
cintā bandhyā-pater abhūt

Palabra por palabra

rūpa — con belleza; audārya — magnanimidad; vayaḥ — juventud; janma — nacimiento aristocrático; vidyā — educación; aiśvarya — opulencia; śriya-ādibhiḥ — riqueza, etc.; sampannasya — dotado de; guṇaiḥ — con buenas cualidades; sarvaiḥ — todas; cintā — ansiedad; bandhyā-pateḥ — de Citraketu, el marido de muchas esposas esteriles; abhūt — había.

Traducción

Citraketu, el marido de tantos millones de esposas, estaba dotado de belleza, magnanimidad y juventud. Había nacido en una familia elevada, gozaba de una educación completa, y era rico y opulento. Sin embargo, pese a todas esas cualidades, estaba lleno de ansiedad, pues no tenía ningún hijo.

Significado

Al parecer, como su primera esposa no pudo darle ningún hijo, el rey se casó con una segunda esposa, y, a partir de ahí, con la tercera, la cuarta, etc. Sin embargo, ninguna de ellas pudo darle hijos. Había nacido en una opulenta familia aristocrática y poseía riquezas, educación y belleza, pero, a pesar de esos bienes materiales en cuestión de janmaiśvarya-śruta-śrī, el rey estaba muy afligido, pues, a pesar de tener tantas esposas, no tenía ningún hijo. Sin duda, su dolor era natural. Vida de gṛhastha no significa tener esposa pero no tener hijos. Cāṇakya Paṇḍita dice: putra-hīnaṁ gṛhaṁ śūnyam: Para el hombre de familia que no tiene hijos varones, el hogar es como un desierto. El rey se sentía verdaderamente desdichado por no haber tenido ningún hijo; esa es la razón por la que se había casado tantas veces. Los kṣatriyas están especialmente autorizados a casarse con más de una esposa, y así lo hizo el rey. A pesar de ello, no tenía descendencia.

Texto

na tasya sampadaḥ sarvā
mahiṣyo vāma-locanāḥ
sārvabhaumasya bhūś ceyam
abhavan prīti-hetavaḥ

Palabra por palabra

na — no; tasya — de él (Citraketu); sampadaḥ — las grandes opulencias; sarvāḥ — todas; mahiṣyaḥ — las reinas; vāma-locanāḥ — de ojos muy atractivos; sārva-bhaumasya — del emperador; bhūḥ — tierra; ca — también; iyam — esto; abhavan — eran; prīti-hetavaḥ — fuentes de placer.

Traducción

Todas sus reinas tenían el rostro hermoso y los ojos atractivos, pero ni las opulencias que poseía, ni sus cientos de miles de esposas, ni las tierras de las que era señor absoluto, eran fuente de felicidad para él.

Texto

tasyaikadā tu bhavanam
aṅgirā bhagavān ṛṣiḥ
lokān anucarann etān
upāgacchad yadṛcchayā

Palabra por palabra

tasya — de él; ekadā — en cierta ocasión; tu — pero; bhavanam — al palacio; aṅgirāḥ — Aṅgirā; bhagavān — muy poderoso; ṛṣiḥ — sabio; lokān — planetas; anucaran — viajando; etān — a estos; upāgacchat — vino; yadṛcchayā — repentinamente.

Traducción

En cierta ocasión, el poderoso sabio Aṅgirā, que viajaba por todo el universo sin ocupación determinada, quiso visitar el palacio del rey Citraketu.

Texto

taṁ pūjayitvā vidhivat
pratyutthānārhaṇādibhiḥ
kṛtātithyam upāsīdat
sukhāsīnaṁ samāhitaḥ

Palabra por palabra

tam — a él; pūjayitvā — después de adorar; vidhi-vat — conforme a las reglas y regulaciones para recibir huéspedes ilustres; pratyutthāna — levantándose del trono; arhaṇa-ādibhiḥ — ofrecer adoración, etc.; kṛta-atithyam — quien recibió la hospitalidad; upāsīdat — se sentó cerca; sukha-āsīnam — que estaba cómodamente sentado; samāhitaḥ — controlando la mente y los sentidos.

Traducción

Nada más ver al sabio, Citraketu se levantó del trono y se dispuso a adorarlo. Ofreciéndole comida y agua para beber, cumplió con su deber de anfitrión de un huésped ilustre. Una vez que el ṛṣi estuvo cómodamente sentado, el rey, dominando la mente y los sentidos, se sentó en el suelo a los pies del ṛṣi.

Texto

maharṣis tam upāsīnaṁ
praśrayāvanataṁ kṣitau
pratipūjya mahārāja
samābhāṣyedam abravīt

Palabra por palabra

mahā-ṛṣiḥ — el gran sabio; tam — a él (al rey); upāsīnam — sentándose cerca; praśraya-avanatam — postrándose humildemente; kṣitau — en el suelo; pratipūjya — felicitar; mahārāja — ¡oh, rey Parīkṣit!; samābhāṣya — dirigiéndose; idam — esto; abravīt — dijo.

Traducción

¡Oh, rey Parīkṣit!, cuando Citraketu, después de haberse postrado humildemente, se sentó a sus pies de loto, el gran sabio le felicitó por su humildad y su hospitalidad, dirigiéndose a él con las siguientes palabras.

Texto

aṅgirā uvāca
api te ’nāmayaṁ svasti
prakṛtīnāṁ tathātmanaḥ
yathā prakṛtibhir guptaḥ
pumān rājā ca saptabhiḥ

Palabra por palabra

aṅgirāḥ uvāca — el gran sabio Aṅgirā dijo; api — si; te — de ti; anāmayam — salud; svasti — prosperidad; prakṛtīnām — de los elementos de tu realeza (séquito y atributos); tathā — así como; ātmanaḥ — de tu cuerpo, tu mente y tu alma; yathā — como; prakṛtibhiḥ — por los elementos de la naturaleza material; guptaḥ — protegida; pumān — la entidad viviente; rājā — el rey; ca — también; saptabhiḥ — por siete.

Traducción

El gran sabio Aṅgirā dijo: Mi querido rey, espero que tu cuerpo, tu mente, tu séquito y tus atributos de rey se encuentren bien. Cuando los siete componentes de la naturaleza material [la energía material total, el ego y los cinco objetos de complacencia de los sentidos] ejercen su función correctamente, la entidad viviente que se encuentra dentro de los elementos materiales es feliz. Sin esos siete elementos no es posible la existencia. Del mismo modo, un rey está siempre protegido por siete elementos: su instructor (svāmī o guru), sus ministros, su reino, su castillo, su tesoro, su realeza y sus amigos.

Significado

En su comentario del Bhāgavatam, Śrīdhara Svāmī presenta la siguiente cita:

svāmy-amātyau janapadā
durga-draviṇa-sañcayāḥ
daṇḍo mitraṁ ca tasyaitāḥ
sapta-prakṛtayo matāḥ

Un rey no está solo. En primer lugar, tiene a su maestro espiritual, la guía suprema. Después están sus ministros, su reino, sus fortificaciones, su tesoro, su sistema legal y jurídico, y sus amigos o aliados. Cuando estos siete elementos cumplen su función debidamente, el rey es feliz. Del mismo modo, como se explica en el Bhagavad-gītā (dehino 'smin yathā dehe), la entidad viviente, el alma, está dentro de la cubierta material del mahat-tattva, el ego y los pañca-tan-mātrā, los cinco objetos de complacencia de los sentidos. Cuando el conjunto de esos siete elementos cumple su función correctamente, la entidad experimenta bienestar. Por lo general, el rey puede ser feliz cuando se ve rodeado de un clima de tranquilidad y obediencia. Por esa razón, el gran sabio Aṅgirā Ṛṣi preguntó al rey por su salud personal y por la condición de prosperidad de estos siete factores. Cuando preguntamos a un amigo si todo le va bien, nuestro interés no se limita a su propia persona, sino que también nos interesamos por su familia, por su fuente de ingresos, y por sus asistentes o sirvientes. Cuando todo está bien, la persona puede ser feliz.

Texto

ātmānaṁ prakṛtiṣv addhā
nidhāya śreya āpnuyāt
rājñā tathā prakṛtayo
naradevāhitādhayaḥ

Palabra por palabra

ātmānam — él mismo; prakṛtiṣu — bajo estos siete elementos de la realeza; addhā — directamente; nidhāya — situar; śreyaḥ — felicidad suprema; āpnuyāt — puede obtener; rājñā — por el rey; tathā — así también; prakṛtayaḥ — los elementos subordinados de la realeza; nara-deva — ¡oh, rey!; āhita-adhayaḥ — ofrecer riquezas y otros artículos.

Traducción

¡Oh, rey!, ¡oh, señor de la humanidad!, el rey que depende de esas personas y sigue sus instrucciones es feliz. Del mismo modo, quienes le rodean también son felices si siguen sus instrucciones y obsequian al rey con sus regalos y actividades.

Significado

En este verso se describe la verdadera felicidad del rey y de sus subordinados. El rey, aunque se encuentre en una posición suprema, no debe limitarse a dar órdenes a sus subordinados; a veces debe seguir sus instrucciones. Del mismo modo, los subordinados deben depender del rey. Esa dependencia mutua hará que todos sean felices.

Texto

api dārāḥ prajāmātyā
bhṛtyāḥ śreṇyo ’tha mantriṇaḥ
paurā jānapadā bhūpā
ātmajā vaśa-vartinaḥ

Palabra por palabra

api — si; dārāḥ — esposas; prajā — súbditos; amātyāḥ — y secretarios; bhṛtyāḥ — sirvientes; śreṇyaḥ — comerciantes; atha — así como; mantriṇaḥ — ministros; paurāḥ — habitantes del palacio; jānapadāḥ — los gobernadores de las provincias; bhūpāḥ — terratenientes; ātma-jāḥ — hijos; vaśa-vartinaḥ — bajo tu completo control.

Traducción

¡Oh, rey!, ¿tienes bajo control a tus esposas, a tus súbditos, a los secretarios, a los sirvientes y a los comerciantes que venden especias y aceites? ¿Dominas perfectamente también a tus ministros, a los que viven en tu palacio, a los gobernadores de las provincias, a tus hijos y a todos los que dependen de ti?

Significado

Entre el rey o señor y sus subordinados tiene que haber una relación de dependencia mutua. Si colaboran, ambos pueden ser felices.

Texto

yasyātmānuvaśaś cet syāt
sarve tad-vaśagā ime
lokāḥ sapālā yacchanti
sarve balim atandritāḥ

Palabra por palabra

yasya — de quien; ātmā — mente; anuvaśaḥ — bajo control; cet — si; syāt — pueda ser; sarve — todos; tat-vaśa-gāḥ — bajo su control; ime — esos; lokāḥ — los mundos; sa-pālāḥ — con sus gobernadores; yacchanti — ofrecen; sarve — todos; balim — tributos; atandritāḥ — liberándose de la pereza.

Traducción

Si el rey tiene la mente bajo perfecto control, todos los miembros de su familia y los funcionarios del gobierno se subordinan a él. Los gobernadores de las provincias pagan los impuestos puntualmente y sin resistencia. ¿Qué diremos entonces de los sirvientes de menos categoría?

Significado

Aṅgirā Ṛṣi preguntó al rey si también su mente estaba bajo control. Esto es de suma importancia para la felicidad.

Texto

ātmanaḥ prīyate nātmā
parataḥ svata eva vā
lakṣaye ’labdha-kāmaṁ tvāṁ
cintayā śabalaṁ mukham

Palabra por palabra

ātmanaḥ — de ti; prīyate — está complacida; na — no; ātmā — la mente; parataḥ — debido a otras causas; svataḥ — debido a ti mismo; eva — en verdad; — o; lakṣaye — puedo ver; alabdha-kāmam — no alcanzar los objetivos deseados; tvām — tú; cintayā — por ansiedad; śabalam — pálido; mukham — rostro.

Traducción

¡Oh, rey Citraketu!, observo que tu mente no está complacida. Pareces no haber alcanzado el objetivo que deseabas. ¿Eres tú la causa, o es por culpa de otro? Tu rostro está pálido y refleja una profunda ansiedad.

Texto

evaṁ vikalpito rājan
viduṣā munināpi saḥ
praśrayāvanato ’bhyāha
prajā-kāmas tato munim

Palabra por palabra

evam — así; vikalpitaḥ — preguntado; rājan — ¡oh, rey Parīkṣit!; viduṣā — muy erudito; muninā — por el filósofo; api — aunque; saḥ — él (el rey Citraketu); praśraya-avanataḥ — que se inclinó llevado por la humildad; abhyāha — contestó; prajā-kāmaḥ — deseando descendencia; tataḥ — a continuación; munim — al gran sabio.

Traducción

Śukadeva Gosvāmī dijo: ¡Oh, rey Parīkṣit!, el gran sabio Aṅgirā lo sabía todo, pero aun así hizo estas preguntas al rey. El rey Citraketu, que deseaba un hijo, se inclinó entonces con gran humildad y habló al gran sabio de la siguiente manera.

Significado

Como la cara es el espejo del alma, una persona santa puede estudiar el estado de la mente de una persona observando su rostro. Cuando Aṅgirā Ṛṣi señaló la palidez del rey Citraketu, este explicó la causa de su ansiedad de la siguiente manera.

Texto

citraketur uvāca
bhagavan kiṁ na viditaṁ
tapo-jñāna-samādhibhiḥ
yogināṁ dhvasta-pāpānāṁ
bahir antaḥ śarīriṣu

Palabra por palabra

citraketuḥ uvāca — el rey Citraketu contestó; bhagavan — ¡oh, muy poderoso sabio!; kim — qué; na — no; viditam — es entendido; tapaḥ — por austeridad; jñāna — conocimiento; samādhibhiḥ — y por samādhi (trance, meditación trascendental); yoginām — por los grandes yogīs o devotos; dhvasta-pāpānām — que están completamente libres de reacciones pecaminosas; bahiḥ — externamente; antaḥ — internamente; śarīriṣu — en las almas condicionadas, que tienen cuerpos materiales.

Traducción

El rey Citraketu dijo: ¡Oh, gran señor, Aṅgirā!, gracias a la austeridad, el conocimiento y el samadhi trascendental, tú estás libre de todas las reacciones de la vida pecaminosa. Por esa razón, como yogī perfecto, puedes entenderlo todo, tanto interna como externamente, acerca de nosotros, las almas condicionadas en un cuerpo material.

Texto

tathāpi pṛcchato brūyāṁ
brahmann ātmani cintitam
bhavato viduṣaś cāpi
coditas tvad-anujñayā

Palabra por palabra

tathāpi — aun; pṛcchataḥ — preguntar; brūyām — hablaré; brahman — ¡oh, gran brāhmaṇa!; ātmani — en la mente; cintitam — ansiedad; bhavataḥ — a ti; viduṣaḥ — que lo saben todo; ca — y; api — aunque; coditaḥ — inspirado; tvat — tuya; anujñayā — por la orden.

Traducción

¡Oh, gran alma!, aunque eres consciente de todo, me preguntas por qué estoy lleno de ansiedad. Así pues, para satisfacer tu orden te revelaré la causa.

Texto

loka-pālair api prārthyāḥ
sāmrājyaiśvarya-sampadaḥ
na nandayanty aprajaṁ māṁ
kṣut-tṛṭ-kāmam ivāpare

Palabra por palabra

loka-pālaiḥ — por grandes semidioses; api — incluso; prārthyāḥ — deseables; sāmrājya — un gran imperio; aiśvarya — opulencia material; sampadaḥ — posesiones; na nandayanti — no dan placer; aprajam — por no tener hijos varones; mām — a mí; kṣut — hambre; tṛṭ — sed; kāmam — deseando satisfacer; iva — como; apare — otros objetos de disfrute de los sentidos.

Traducción

Del mismo modo que una persona afligida por el hambre y la sed no se conforma con placeres externos como collares de flores o pasta de sándalo, yo no estoy complacido con mi imperio, mi opulencia y mis posesiones, cosas estas que incluso los grandes semidioses desean. La razón es que no tengo ningún hijo.

Texto

tataḥ pāhi mahā-bhāga
pūrvaiḥ saha gataṁ tamaḥ
yathā tarema duṣpāraṁ
prajayā tad vidhehi naḥ

Palabra por palabra

tataḥ — por lo tanto, debido a esto; pāhi — por favor, salva; mahā-bhāga — ¡oh, gran sabio!; pūrvaiḥ saha — junto con mis antepasados; gatam — que han ido; tamaḥ — a las tinieblas; yathā — de modo que; tarema — podamos atravesar; duṣpāram — muy difícil de atravesar; prajayā — por engendrar un hijo; tat — eso; vidhehi — por favor, haz; naḥ — por nosotros.

Traducción

¡Oh, gran sabio!, por favor, sálvanos a mí y a mis antepasados, que van a descender a las tinieblas del infierno debido a que no tengo descendencia. Haz algo, por favor, para que pueda tener un hijo que nos libere de las condiciones infernales.

Significado

En la civilización védica, el hombre se casa para poder tener un hijo varón que ofrezca oblaciones a sus antepasados. Conforme a esta responsabilidad, el rey Citraketu deseaba engendrar un hijo, a fin de que él y sus antepasados pudieran liberarse de las regiones más oscuras. Estaba preocupado por las ofrendas de piṇḍa, las oblaciones, que necesitaría en su próxima vida, no solo para él, sino también para sus antepasados. Por esa razón, rogó al sabio Aṅgirā que le favoreciese de alguna forma, de modo que pudiera tener un hijo.

Texto

śrī-śuka uvāca
ity arthitaḥ sa bhagavān
kṛpālur brahmaṇaḥ sutaḥ
śrapayitvā caruṁ tvāṣṭraṁ
tvaṣṭāram ayajad vibhuḥ

Palabra por palabra

śrī-śukaḥ uvāca — Śrī Śukadeva Gosvāmī dijo; iti — así; arthitaḥ — ante el ruego; saḥ — él (Aṅgirā Ṛṣi); bhagavān — el muy poderoso; kṛpāluḥ — que era muy misericordioso; brahmaṇaḥ — del Señor Brahmā; sutaḥ — hijo (nacido de la mente del Señor Brahmā); śrapayitvā — tras hacer cocinar; carum — una oblación concreta de arroz dulce; tvāṣṭram — dirigida al semidiós llamado Tvaṣṭā; tvaṣṭāram — a Tvaṣṭā; ayajat — adoró; vibhuḥ — el gran sabio.

Traducción

Satisfaciendo el ruego de Mahārāja Citraketu, Aṅgirā Ṛṣi, que nació de la mente del Señor Brahmā, se mostró muy misericordioso con él. El sabio, que era una personalidad muy poderosa, celebró un sacrificio en el que ofreció oblaciones de arroz dulce a Tvaṣṭā.

Texto

jyeṣṭhā śreṣṭhā ca yā rājño
mahiṣīṇāṁ ca bhārata
nāmnā kṛtadyutis tasyai
yajñocchiṣṭam adād dvijaḥ

Palabra por palabra

jyeṣṭhā — la mayor; śreṣṭhā — la más perfecta; ca — y; — aquella que; rājñaḥ — del rey; mahiṣīṇām — entre todas las reinas; ca — también; bhārata — ¡oh, Mahārāja Parīkṣit, el mejor de los Bhāratas!; nāmnā — de nombre; kṛtadyutiḥ — Kṛtadyuti; tasyai — a ella; yajña — del sacrificio; ucchiṣṭam — los remanentes de alimento; adāt — entregó; dvijaḥ — el gran sabio (Aṅgirā).

Traducción

¡Oh, Parīkṣit Mahārāja, el mejor de los Bhāratas!, el gran sabio Aṅgirā dio los remanentes del alimento ofrecido en el yajña a Kṛtadyuti, la primera esposa de Citraketu, la más perfecta entre sus millones de reinas.

Texto

athāha nṛpatiṁ rājan
bhavitaikas tavātmajaḥ
harṣa-śoka-pradas tubhyam
iti brahma-suto yayau

Palabra por palabra

atha — a continuación; āha — dijo; nṛpatim — al rey; rājan — ¡oh, rey Citraketu!; bhavitā — habrá; ekaḥ — uno; tava — tuyo; ātmajaḥ — hijo; harṣa-śoka — júbilo y lamentación; pradaḥ — que dará; tubhyam — a ti; iti — así; brahma-sutaḥ — Aṅgirā Ṛṣi, el hijo del Señor Brahmā; yayau — partió.

Traducción

A continuación, el gran sabio dijo al rey: «¡Oh, gran rey!, ahora tendrás un hijo que será causa de júbilo y también de lamentación». Diciendo esto, el sabio se marchó, sin esperar la respuesta de Citraketu.

Significado

La palabra harṣa significa «júbilo», y śoka significa «lamentación». Al saben que pronto iba a tener un hijo, el rey no cabía en sí de júbilo, y esa gran alegría le impidió entender correctamente la afirmación del sabio Aṅgirā. Él entendió que el nacimiento de su futuro hijo le iba a suponer una gran alegría, pero que ese hijo, como único descendiente del rey, estaría orgulloso de su imperio y de sus enormes riquezas, y no sería demasiado obediente. Así, el rey se sentía satisfecho, pues pensaba: «Que venga un hijo. No importa que no sea muy obediente». Un proverbio bengalí dice que es mejor tener un tío ciego que no tener tío. El rey aceptó esa filosofía, pensando que un hijo desobediente era mejor que no tener ningún hijo. El gran sabio Cāṇakya Paṇḍita dice:

ko ’rthaḥ putreṇa jātena
yo na vidvān na dhārmikaḥ
kāṇena cakṣuṣā kiṁ vā
cakṣuḥ pīḍaiva kevalam

«¿De qué sirve un hijo que no es devoto ni erudito? Ese hijo es como un ojo ciego y enfermo, que siempre causa sufrimiento». Sin embargo, la contaminación del mundo material es tan fuerte que hace desear hijos aunque sean inútiles. La historia del rey Citraketu ilustra esa actitud.

Texto

sāpi tat-prāśanād eva
citraketor adhārayat
garbhaṁ kṛtadyutir devī
kṛttikāgner ivātmajam

Palabra por palabra

— ella; api — incluso; tat-prāśanāt — por comer los remanentes de alimento del gran sacrificio; eva — en verdad; citraketoḥ — del rey Citraketu; adhārayat — llevó; garbham — embarazo; kṛtadyutiḥ — la reina Kṛtadyuti; devī — la diosa; kṛttikā — Kṛttikā; agneḥ — de Agni; iva — como; ātma-jam — un hijo.

Traducción

Del mismo modo que Kṛttikādevī concibió un hijo llamado Skanda [Kārttikeya] tras recibir de Agni el semen del Señor Śiva, Kṛtadyuti quedó embarazada tras recibir el semen de Citraketu y comer los remanentes de alimento del yajña celebrado por Aṅgirā.

Texto

tasyā anudinaṁ garbhaḥ
śukla-pakṣa ivoḍupaḥ
vavṛdhe śūraseneśa-
tejasā śanakair nṛpa

Palabra por palabra

tasyāḥ — de ella; anudinam — día tras día; garbhaḥ — embrión; śukla-pakṣe — durante la quincena del cuarto creciente; iva — como; uḍupaḥ — la Luna; vavṛdhe — creció gradualmente; śūrasena-īśa — del rey de Śūrasena; tejasā — por el semen; śanakaiḥ — poco a poco; nṛpa — ¡oh, rey Parīkṣit!

Traducción

Tras recibir la reina Kṛtadyuti el semen de Mahārāja Citraketu, el rey de Śūrasena, su vientre fue creciendo poco a poco, ¡oh, rey Parīkṣit!, como la Luna que crece en la quincena brillante.

Texto

atha kāla upāvṛtte
kumāraḥ samajāyata
janayan śūrasenānāṁ
śṛṇvatāṁ paramāṁ mudam

Palabra por palabra

atha — a continuación; kāle upāvṛtte — a su debido tiempo; kumāraḥ — el hijo; samajāyata — nació; janayan — creando; śūrasenānām — de los habitantes de Śūrasena; śṛṇvatām — escuchando; paramām — el más elevado; mudam — deleite.

Traducción

Después, a su debido tiempo, el rey fue padre de un hijo. Al conocer la noticia, todos los habitantes del estado de Śūrasena se sintieron muy complacidos.

Texto

hṛṣṭo rājā kumārasya
snātaḥ śucir alaṅkṛtaḥ
vācayitvāśiṣo vipraiḥ
kārayām āsa jātakam

Palabra por palabra

hṛṣṭaḥ — muy feliz; rājā — el rey; kumārasya — de su hijo recién nacido; snātaḥ — haber bañado; śuciḥ — estar purificado; alaṅkṛtaḥ — estar adornado con alhajas; vācayitvā — haber hecho que se dijesen; āśiṣaḥ — palabras de bendición; vipraiḥ — por brāhmaṇas eruditos; kārayām āsa — hizo que se celebrase; jātakam — la ceremonia de nacimiento.

Traducción

Pero el más complacido era el rey Citraketu. Después de tomar un baño purificatorio, se adornó con alhajas e hizo que brāhmaṇas eruditos ofreciesen bendiciones al niño y celebrasen la ceremonia de su nacimiento.

Texto

tebhyo hiraṇyaṁ rajataṁ
vāsāṁsy ābharaṇāni ca
grāmān hayān gajān prādād
dhenūnām arbudāni ṣaṭ

Palabra por palabra

tebhyaḥ — a ellos (a los brāhmaṇas eruditos); hiraṇyam — oro; rajatam — plata; vāsāṁsi — ropas; ābharaṇāni — adornos; ca — también; grāmān — aldeas; hayān — caballos; gajān — elefantes; prādāt — dio como caridad; dhenūnām — de vacas; arbudāni — grupos de cien millones; ṣaṭ — seis.

Traducción

A los brāhmaṇas que participaron en la ceremonia ritual, el rey, como caridad, les obsequió con oro, plata, ropas, adornos, aldeas, caballos y elefantes, además de sesenta karors [seiscientos millones] de vacas.

Texto

vavarṣa kāmān anyeṣāṁ
parjanya iva dehinām
dhanyaṁ yaśasyam āyuṣyaṁ
kumārasya mahā-manāḥ

Palabra por palabra

vavarṣa — derramó, dio como caridad; kāmān — todas las cosas deseables; anyeṣām — de otros; parjanyaḥ — una nube; iva — como; dehinām — de todas las entidades vivientes; dhanyam — con el deseo de aumentar la opulencia; yaśasyam — un aumento de la fama; āyuṣyam — y un aumento de la duración de la vida; kumārasya — del niño recién nacido; mahā-manāḥ — el generoso rey Citraketu.

Traducción

Como una nube que derrama agua sobre la tierra sin hacer distinciones, el generoso rey Citraketu, con el deseo de aumentar la fama, la opulencia y la longevidad de su hijo, fue para todos como una lluvia de todas las cosas que pudieran desearse.

Texto

kṛcchra-labdhe ’tha rājarṣes
tanaye ’nudinaṁ pituḥ
yathā niḥsvasya kṛcchrāpte
dhane sneho ’nvavardhata

Palabra por palabra

kṛcchra — con gran dificultad; labdhe — obtenido; atha — a continuación; rāja-ṛṣeḥ — del piadoso rey Citraketu; tanaye — por el hijo; anudinam — día tras día; pituḥ — del padre; yathā — del mismo modo que; niḥsvasya — de un hombre pobre; kṛcchra-āpte — ganadas tras muchas dificultades; dhane — por riquezas; snehaḥ — afecto; anvavardhata — aumentaba.

Traducción

Cuando un pobre consigue algún dinero tras pasar muchas dificultades, su afecto por ese dinero aumenta día a día. Del mismo modo, el rey Citraketu había recibido un hijo tras pasar por muchas dificultades, y su afecto por él aumentaba con el paso de los días.

Texto

mātus tv atitarāṁ putre
sneho moha-samudbhavaḥ
kṛtadyuteḥ sapatnīnāṁ
prajā-kāma-jvaro ’bhavat

Palabra por palabra

mātuḥ — de la madre; tu — también; atitarām — excesivamente; putre — por el hijo; snehaḥ — afecto; moha — por ignorancia; samudbhavaḥ — producido; kṛtadyuteḥ — de Kṛtadyuti; sapatnīnām — de las coesposas; prajā-kāma — de un deseo de tener hijos; jvaraḥ — una fiebre; abhavat — había.

Traducción

Al igual que el padre, la madre del bebé también vio aumentar en exceso su atracción por el niño, al que prestaba cada vez mayor atención. Las otras esposas, viendo al hijo de Kṛtadyuti, estaban muy agitadas por el deseo de tener hijos. Ese deseo era violento como una fiebre.

Texto

citraketor atiprītir
yathā dāre prajāvati
na tathānyeṣu sañjajñe
bālaṁ lālayato ’nvaham

Palabra por palabra

citraketoḥ — del rey Citraketu; atiprītiḥ — excesiva atracción; yathā — tal y como; dāre — a la esposa; prajā-vati — que concibió un hijo; na — no; tathā — como esta; anyeṣu — a las otras; sañjajñe — surgió; bālam — el hijo; lālayataḥ — cuidando de; anvaham — constantemente.

Traducción

A medida que criaban a su hijo con el mayor esmero, el rey Citraketu sentía aumentar su cariño por la reina Kṛtadyuti; sin embargo, su cariño por las demás esposas, que no tenían hijos, era cada vez menor.

Texto

tāḥ paryatapyann ātmānaṁ
garhayantyo ’bhyasūyayā
ānapatyena duḥkhena
rājñaś cānādareṇa ca

Palabra por palabra

tāḥ — ellas (las reinas que no tenían hijos); paryatapyan — se lamentaban; ātmānam — a sí mismas; garhayantyaḥ — condenando; abhyasūyayā — por envidia; ānapatyena — por no tener hijos; duḥkhena — por infelicidad; rājñaḥ — del rey; ca — también; anādareṇa — debido a la falta de atención; ca — también.

Traducción

Las demás reinas se sentían muy desdichadas por no tener hijos. Como el rey no les prestaba atención, se renegaban de sí mismas y se lamentaban, llenas de envidia.

Texto

dhig aprajāṁ striyaṁ pāpāṁ
patyuś cāgṛha-sammatām
suprajābhiḥ sapatnībhir
dāsīm iva tiraskṛtām

Palabra por palabra

dhik — toda condena; aprajām — sin hijos varones; striyam — sobre una mujer; pāpām — llena de actividades pecaminosas; patyuḥ — por el esposo; ca — también; a-gṛha-sammatām — que no es honrada en el hogar; su-prajābhiḥ — que tienen hijos; sapatnībhiḥ — por coesposas; dāsīm — una sirvienta; iva — igual que; tiraskṛtām — deshonrada.

Traducción

En el hogar, una esposa sin hijos varones es tenida en menos por el esposo y deshonrada por sus coesposas como si fuese una sirvienta. Ciertamente, esa mujer se ve condenada en todo aspecto debido a su vida pecaminosa.

Significado

Cāṇakya Paṇḍita afirma:

mātā yasya gṛhe nāsti
bhāryā cāpriya-vādinī
araṇyaṁ tena gantavyaṁ
yathāraṇyaṁ tathā gṛham

«Sin una madre en el hogar, y con una esposa que no es dulce en sus palabras, es mejor irse al bosque. Para quien se encuentra en esa situación, vivir en el hogar y vivir en el bosque, es lo mismo». Análogamente, para una mujer que no tiene hijos varones, que no es tenida en cuenta por su esposo y recibe de sus coesposas el mismo trato que una sirvienta, irse al bosque es mejor que permanecer en el hogar.

Texto

dāsīnāṁ ko nu santāpaḥ
svāminaḥ paricaryayā
abhīkṣṇaṁ labdha-mānānāṁ
dāsyā dāsīva durbhagāḥ

Palabra por palabra

dāsīnām — de las sirvientas; kaḥ — qué; nu — en verdad; santāpaḥ — lamentación; svāminaḥ — al esposo; paricaryayā — por ofrecer servicio; abhīkṣṇam — constantemente; labdha-mānānām — honradas; dāsyāḥ — de la sirvienta; dāsī iva — como una sirvienta; durbhagāḥ — enormemente desdichadas.

Traducción

Hasta las sirvientas que se ocupan constantemente en servir al esposo son honradas por él, de forma que no tienen de qué lamentarse. Nosotras, sin embargo, hacemos de sirvientas de la sirvienta; somos enormemente desdichadas.

Texto

evaṁ sandahyamānānāṁ
sapatnyāḥ putra-sampadā
rājño ’sammata-vṛttīnāṁ
vidveṣo balavān abhūt

Palabra por palabra

evam — así; sandahyamānānām — de las reinas, que ardían constantemente en el fuego de la lamentación; sapatnyāḥ — de la coesposa, Kṛtadyuti; putra-sampadā — debido a su opulencia, al tener un hijo; rājñaḥ — por el rey; asammata-vṛttīnām — sin ser muy favorecidas; vidveṣaḥ — envidia; balavān — muy fuerte; abhūt — se hizo.

Traducción

Śrī Śukadeva Gosvāmī continuó: Dejadas de lado por su marido, las coesposas de Kṛtadyuti, al ver la opulencia de Kṛtadyuti, que tenía un hijo, ardían constantemente de envidia, una envidia cada vez más fuerte.

Texto

vidveṣa-naṣṭa-matayaḥ
striyo dāruṇa-cetasaḥ
garaṁ daduḥ kumārāya
durmarṣā nṛpatiṁ prati

Palabra por palabra

vidveṣa-naṣṭa-matayaḥ — cuya inteligencia se perdió debido a la envidia; striyaḥ — las mujeres; dāruṇa-cetasaḥ — de corazón muy duro; garam — veneno; daduḥ — administraron; kumārāya — al niño; durmarṣāḥ — sin poder tolerar; nṛpatim — al rey; prati — sobre.

Traducción

La envidia llegó a ser tan grande que perdieron la inteligencia. Su corazón se hizo muy duro, y, sin poder tolerar la indiferencia del rey, finalmente envenenaron al niño.

Texto

kṛtadyutir ajānantī
sapatnīnām aghaṁ mahat
supta eveti sañcintya
nirīkṣya vyacarad gṛhe

Palabra por palabra

kṛtadyutiḥ — la reina Kṛtadyuti; ajānantī — sin ser consciente de; sapatnīnām — de sus coesposas; agham — el acto pecaminoso; mahat — muy grande; suptaḥ — durmiendo; eva — en verdad; iti — así; sañcintya — pensando; nirīkṣya — mirando a; vyacarat — paseaba; gṛhe — en el hogar.

Traducción

Sin sospechar que sus coesposas habían envenenado a su hijo, la reina Kṛtadyuti paseaba por la casa creyéndole profundamente dormido. No se daba cuenta de que había muerto.

Texto

śayānaṁ suciraṁ bālam
upadhārya manīṣiṇī
putram ānaya me bhadre
iti dhātrīm acodayat

Palabra por palabra

śayānam — acostado; su-ciram — durante mucho tiempo; bālam — el hijo; upadhārya — pensando; manīṣiṇī — muy inteligente; putram — al hijo; ānaya — trae; me — a mí; bhadre — ¡oh, querida amiga!; iti — así; dhātrīm — a la nodriza; acodayat — dio la orden.

Traducción

Cuando le pareció que su hijo llevaba ya mucho tiempo dormido, la reina Kṛtadyuti, que sin duda era muy inteligente, ordenó a la nodriza: «Querida amiga, por favor, tráeme a mi hijo».

Texto

sā śayānam upavrajya
dṛṣṭvā cottāra-locanam
prāṇendriyātmabhis tyaktaṁ
hatāsmīty apatad bhuvi

Palabra por palabra

— ella (la sirvienta); śayānam — acostado; upavrajya — ir a; dṛṣṭvā — ver; ca — también; uttāra-locanam — con los ojos en blanco (como los cadáveres); prāṇa-indriya-ātmabhiḥ — por el aire vital, los sentidos y la mente; tyaktam — abandonado; hatā asmi — ¡ahora estoy perdida!; iti — así; apatat — cayó; bhuvi — al suelo.

Traducción

La sirvienta se acercó al niño, que estaba acostado, y vio que tenía los ojos en blanco. Como no daba señales de vida y todos sus sentidos estaban inactivos, comprendió que estaba muerto. Al darse cuenta, inmediatamente gritó: «¡Ay de mí!, ¡estoy perdida!», y cayó al suelo.

Texto

tasyās tadākarṇya bhṛśāturaṁ svaraṁ
ghnantyāḥ karābhyām ura uccakair api
praviśya rājñī tvarayātmajāntikaṁ
dadarśa bālaṁ sahasā mṛtaṁ sutam

Palabra por palabra

tasyāḥ — de ella (la sirvienta); tadā — en ese momento; ākarṇya — escuchar; bhṛśa-āturam — lamentándose y muy agitada; svaram — la voz; ghnantyāḥ — golpear; karābhyām — con las manos; uraḥ — el pecho; uccakaiḥ — en voz alta; api — también; praviśya — entrar; rājñī — la reina; tvarayā — deprisa; ātmaja-antikam — cerca de su hijo; dadarśa — ella vio; bālam — al niño; sahasā — de pronto; mṛtam — muerto; sutam — hijo.

Traducción

Muy agitada, la nodriza se golpeaba el pecho con las manos y se lamentaba dando grandes voces. Al escuchar sus gritos, la reina acudió inmediatamente, y, al acercarse a su hijo, descubrió su repentina muerte.

Texto

papāta bhūmau parivṛddhayā śucā
mumoha vibhraṣṭa-śiroruhāmbarā

Palabra por palabra

papāta — cayó; bhūmau — al suelo; parivṛddhayā — muy aumentada; śucā — por la lamentación; mumoha — quedó inconsciente; vibhraṣṭa — sueltos; śiroruha — el cabello; ambarā — y el vestido.

Traducción

Entre grandes lamentos, con el cabello y las ropas desarreglados, la reina cayó al suelo inconsciente.

Texto

tato nṛpāntaḥpura-vartino janā
narāś ca nāryaś ca niśamya rodanam
āgatya tulya-vyasanāḥ suduḥkhitās
tāś ca vyalīkaṁ ruruduḥ kṛtāgasaḥ

Palabra por palabra

tataḥ — a continuación; nṛpa — ¡oh, rey!; antaḥpura-vartinaḥ — los habitantes del palacio; janāḥ — todo el mundo; narāḥ — los hombres; ca — y; nāryaḥ — las mujeres; ca — también; niśamya — escuchando; rodanam — gritos; āgatya — venir; tulya-vyasanāḥ — afligidos por igual; su-duḥkhitāḥ — con grandes lamentos; tāḥ — ellas; ca — y; vyalīkam — fingiendo; ruruduḥ — lloraron; kṛta-āgasaḥ — que habían cometido la ofensa (al envenenar).

Traducción

¡Oh, rey Parīkṣit!, aquellos gritos atrajeron inmediatamente a todos los habitantes del palacio, tanto hombres como mujeres. Compartiendo el mismo dolor, también ellos comenzaron a llorar. Con lágrimas fingidas y perfectamente conscientes de su ofensa, las reinas que habían envenenado al niño también lloraron.

Texto

śrutvā mṛtaṁ putram alakṣitāntakaṁ
vinaṣṭa-dṛṣṭiḥ prapatan skhalan pathi
snehānubandhaidhitayā śucā bhṛśaṁ
vimūrcchito ’nuprakṛtir dvijair vṛtaḥ
papāta bālasya sa pāda-mūle
mṛtasya visrasta-śiroruhāmbaraḥ
dīrghaṁ śvasan bāṣpa-kaloparodhato
niruddha-kaṇṭho na śaśāka bhāṣitum

Palabra por palabra

śrutvā — al escuchar; mṛtam — muerto; putram — el hijo; alakṣita-antakam — siendo desconocida la causa de la muerte; vinaṣṭa-dṛṣṭiḥ — sin poder ver bien; prapatan — cayendo constantemente; skhalan — resbalando; pathi — en el camino; sneha-anubandha — debido al afecto; edhitayā — aumentando; śucā — por la lamentación; bhṛśam — enormemente; vimūrcchitaḥ — perdiendo la consciencia; anuprakṛtiḥ — seguido por ministros y otros funcionarios; dvijaiḥ — por brāhmaṇas eruditos; vṛtaḥ — rodeado; papāta — cayó; bālasya — del muchacho; saḥ — él (el rey); pāda-mūle — a los pies; mṛtasya — del muchacho muerto; visrasta — sueltos; śiroruha — cabello; ambaraḥ — y el vestido; dīrgham — larga; śvasan — respiración; bāṣpa-kalā-uparodhataḥ — debido a que lloraba con los ojos llenos de lágrimas; niruddha-kaṇṭhaḥ — con la voz entrecortada; na — no; śaśāka — podía; bhāṣitum — hablar.

Traducción

Cuando saben que su hijo había muerto por causas desconocidas, el rey Citraketu perdió casi la vista. Avivada por el gran afecto que sentía por el niño, su lamentación crecía como un fuego ardiente; en el camino hacia dónde estaba el cadáver, resbalaba y caía al suelo una y otra vez. Rodeado por sus ministros y funcionarios, así como por los brāhmaṇas eruditos allí presentes, el rey se acercó al niño y cayó inconsciente a sus pies, con los cabellos y vestidos sueltos. Cuando volvió en sí, respiraba pesadamente, tenía los ojos llenos de lágrimas, y no podía hablar.

Texto

patiṁ nirīkṣyoru-śucārpitaṁ tadā
mṛtaṁ ca bālaṁ sutam eka-santatim
janasya rājñī prakṛteś ca hṛd-rujaṁ
satī dadhānā vilalāpa citradhā

Palabra por palabra

patim — al esposo; nirīkṣya — al ver; uru — enorme; śuca — con lamentación; arpitam — dolorido; tadā — en ese momento; mṛtam — muerto; ca — y; bālam — al niño; sutam — el hijo; eka-santatim — el único hijo de la familia; janasya — de todos los allí reunidos; rājñī — la reina; prakṛteḥ ca — así como de los funcionarios y ministros; hṛt-rujam — el dolor en lo más profundo del corazón; satī dadhānā — aumentar; vilalāpa — se lamentó; citradhā — de diversas maneras.

Traducción

La reina, al ver que su esposo, el rey Citraketu, estaba sumido en una gran lamentación, y que su hijo, el único hijo de la familia, había muerto, rompió en todo tipo de lamentaciones. Esto aumentó el dolor en lo más profundo del corazón de todos los habitantes del palacio, ministros y brāhmaṇas.

Texto

stana-dvayaṁ kuṅkuma-paṅka-maṇḍitaṁ
niṣiñcatī sāñjana-bāṣpa-bindubhiḥ
vikīrya keśān vigalat-srajaḥ sutaṁ
śuśoca citraṁ kurarīva susvaram

Palabra por palabra

stana-dvayam — sus dos pechos; kuṅkuma — con polvo de kuṅkuma (que las mujeres suelen utilizar); paṅka — ungüento; maṇḍitam — adornados; niṣiñcatī — humedecer; sa-añjana — mezcladas con el colirio de los ojos; bāṣpa — de lágrimas; bindubhiḥ — por gotas; vikīrya — suelto; keśān — cabello; vigalat — caía; srajaḥ — sobre el que la guirnalda de flores; sutam — por su hijo; śuśoca — se lamentó; citram — variada; kurarī iva — como un pájaro kurarī; su-svaram — con una voz muy dulce.

Traducción

La guirnalda de flores que adornaba la cabeza de la reina se desprendió, y sus cabellos se soltaron. Las lágrimas diluyeron el colirio de sus ojos y humedecieron sus pechos, cubiertos con polvo de kuṅkuma. Su fuerte llanto por la pérdida de su hijo era como el dulce sonido de un pájaro kurarī.

Texto

aho vidhātas tvam atīva bāliśo
yas tv ātma-sṛṣṭy-apratirūpam īhase
pare nu jīvaty aparasya yā mṛtir
viparyayaś cet tvam asi dhruvaḥ paraḥ

Palabra por palabra

aho — ¡ay! (expresión de intensa lamentación); vidhātaḥ — ¡oh, Providencia!; tvam — Tú; atīva — mucho; bāliśaḥ — inexperta; yaḥ — quien; tu — en verdad; ātma-sṛṣṭi — de Tu propia creación; apratirūpam — todo lo contrario; īhase — estás realizando y deseando; pare — mientras el padre o persona mayor; nu — en verdad; jīvati — vive; aparasya — del que nació después; — cuya; mṛtiḥ — muerte; viparyayaḥ — contradictoria; cet — si; tvam — Tú; asi — eres; dhruvaḥ — en verdad; paraḥ — un enemigo.

Traducción

¡Ay!, ¡oh, Providencia!, ¡oh, Creador!, en verdad eres inexperto en la creación, pues has causado la muerte de un hijo en vida de su padre; con ese acto vas en contra de las leyes de Tu propia creación. Si estás decidido a contradecir esas leyes, sin duda eres el enemigo de las entidades vivientes y no tienes la más mínima misericordia.

Significado

Esta es la forma en que el alma condicionada condena al creador supremo cuando le sobreviene la adversidad. A veces acusa a la Suprema Personalidad de Dios de ser injusto, puesto que, mientras unas personas son felices, otras no lo son. En este verso, la reina culpa a la suprema providencia de la muerte de su hijo. Según las leyes de la creación, el padre tiene que morir antes que el hijo. Si la providencia cambiase esas leyes conforme a sus caprichos, ciertamente, por su falta de misericordia, habría que considerarla la enemiga del ser creado. Pero, en realidad, quien está falto de experiencia no es el creador, sino el alma condicionada, que no sabe cómo funcionan las leyes de la actividad fruitiva y que, en su ignorancia, sin conocer las leyes de la naturaleza, critica a la Suprema Personalidad de Dios.

Texto

na hi kramaś ced iha mṛtyu-janmanoḥ
śarīriṇām astu tad ātma-karmabhiḥ
yaḥ sneha-pāśo nija-sarga-vṛddhaye
svayaṁ kṛtas te tam imaṁ vivṛścasi

Palabra por palabra

na — no; hi — en verdad; kramaḥ — orden cronológico; cet — si; iha — en el mundo material; mṛtyu — de muerte; janmanoḥ — y de nacimiento; śarīriṇām — de las almas condicionadas, que han recibido cuerpos materiales; astu — que haya; tat — eso; ātma-karmabhiḥ — por los resultados del propio karma (actividades fruitivas); yaḥ — el cual; sneha-pāśaḥ — lazo de afecto; nija-sarga — Tu propia creación; vṛddhaye — para aumentar; svayam — personalmente; kṛtaḥ — hecha; te — por Ti; tam — esa; imam — este; vivṛścasi — estás cortando.

Traducción

Mi Señor, tal vez digas que no hay ninguna ley que establezca que el padre tenga que morir en vida del hijo, o que el hijo tiene que nacer durante la vida del padre, pues la vida y la muerte dependen de las actividades fruitivas que se hayan realizado. Sin embargo, si la actividad fruitiva es tan poderosa como para que de ella dependan el nacimiento y la muerte, entonces no hay necesidad de ningún controlador o Dios. Es más, si dices que se necesita un controlador, debido a que la energía material no tiene poder para actuar, se Te puede responder diciendo que, si los lazos de afecto que Tú has creado se ven perturbados por la acción fruitiva, nadie criará a sus hijos con cariño, sino que todo el mundo les abandonará cruelmente a su suerte. Tú has cortado los lazos de afecto que impulsan al padre a criar al niño, y por ello das la impresión de ser inexperto y poco inteligente.

Significado

En la Brahma-saṁhitā se afirma: karmāṇi nirdahati kintu ca bhakti-bhājām: A quien ha emprendido el proceso de conciencia de Kṛṣṇa, el servicio devocional, no le afectan los resultados del karma. En este verso se enfatiza la importancia del karma según el punto de vista de la filosofía karma-mīmāṁsā, que postula que estamos forzados a actuar conforme a nuestro propio karma, cuyos resultados nos son dados por el controlador supremo. Las sutiles leyes del karma, que están bajo el control del Supremo, no puede entenderlas el alma condicionada corriente. Por esa razón, Kṛṣṇa dice que, cuando alguien puede entenderle a Él y la forma en que Él actúa, controlándolo todo mediante leyes sutiles, esa persona, por Su gracia, se libera inmediatamente. Eso es lo que afirma la Brahma-saṁhitā (karmāṇi nirdahati kintu ca bhakti-bhājām). Es necesario empeñarse sin reservas en el servicio devocional y dejarlo todo a la voluntad suprema del Señor. Eso nos dará la felicidad tanto en esta vida como en la siguiente.

Texto

tvaṁ tāta nārhasi ca māṁ kṛpaṇām anāthāṁ
tyaktuṁ vicakṣva pitaraṁ tava śoka-taptam
añjas tarema bhavatāpraja-dustaraṁ yad
dhvāntaṁ na yāhy akaruṇena yamena dūram

Palabra por palabra

tvam — tú; tāta — mi querido hijo; na — no; arhasi — debes; ca — y; mām — a mí; kṛpaṇām — muy pobre; anāthām — sin protector; tyaktum — abandonar; vicakṣva — mira; pitaram — al padre; tava — tuyo; śoka-taptam — afectado por tanta lamentación; ajñaḥ — fácilmente; tarema — podemos atravesar; bhavatā — por ti; apraja-dustaram — muy difícil de atravesar para quien no tiene hijos varones; yat — el cual; dhvāntam — el reino de la oscuridad; na yāhi — no te vayas; akaruṇena — cruel; yamena — con Yamarāja; dūram — no más lejos.

Traducción

Mi querido hijo, estoy desamparada y muy afligida. No abandones mi compañía. Mira cómo se lamenta tu padre. Estamos desamparados porque, sin un hijo, tendremos que sufrir en las regiones más oscuras del infierno. Tú eres nuestra única esperanza de salir de esas oscuras regiones. Por eso te ruego que dejes al cruel Yama y no vayas con él.

Significado

Los mandamientos védicos señalan que el matrimonio tiene la finalidad de traer al mundo a un hijo varón que pueda liberar a sus padres de las garras de Yamarāja. Si no tienen un hijo que ofrezca oblaciones a los pitās, es decir, a los antepasados, los esposos tendrán que sufrir en el reino de Yamarāja. El rey Citraketu estaba muy afligido, pues, si su hijo se iba con Yamarāja, él tendría que sufrir de nuevo. Esta ley sutil se aplica a los karmīs; el que se vuelve devoto ya no tiene por qué seguir con las leyes del karma.

Texto

uttiṣṭha tāta ta ime śiśavo vayasyās
tvām āhvayanti nṛpa-nandana saṁvihartum
suptaś ciraṁ hy aśanayā ca bhavān parīto
bhuṅkṣva stanaṁ piba śuco hara naḥ svakānām

Palabra por palabra

uttiṣṭha — por favor, levántate; tāta — mi querido hijo; te — ellos; ime — todos esos; śiśavaḥ — niños; vayasyāḥ — compañeros de juegos; tvām — a ti; āhvayanti — están llamando; nṛpa-nandana — ¡oh, hijo del rey!; saṁvihartum — para jugar con; suptaḥ — has dormido; ciram — durante mucho tiempo; hi — en verdad; aśanayā — por el hambre; ca — también; bhavān — tú; parītaḥ — vencido; bhuṅkṣva — por favor, come; stanam — del pecho (de tu madre); piba — bebe; śucaḥ — lamentación; hara — disipa; naḥ — de nosotros; svakānām — tus familiares.

Traducción

Mi querido hijo, llevas mucho tiempo dormido. Ahora, por favor, levántate. Tus amiguitos te llaman para que juegues con ellos. Debes de tener mucha hambre, así que, por favor, levántate, mama de mi pecho y pon fin a nuestra lamentación.

Texto

nāhaṁ tanūja dadṛśe hata-maṅgalā te
mugdha-smitaṁ mudita-vīkṣaṇam ānanābjam
kiṁ vā gato ’sy apunar-anvayam anya-lokaṁ
nīto ’ghṛṇena na śṛṇomi kalā giras te

Palabra por palabra

na — no; aham — yo; tanū-ja — mi querido hijo (nacido de mi cuerpo); dadṛśe — vi; hata-maṅgalā — por ser yo la más desdichada; te — tuya; mugdha-smitam — con encantadora sonrisa; mudita-vīkṣaṇam — con ojos cerrados; ānana-abjam — cara de loto; kiṁ — si; gataḥ — ido; asi — tú te has; a-punaḥ-anvayam — del cual no se regresa; anya-lokam — a otro planeta, al planeta de Yamarāja; nītaḥ — haber sido llevado; aghṛṇena — por el cruel Yamarāja; na — no; śṛṇomi — puedo escuchar; kalāḥ — muy agradables; giraḥ — balbuceos; te — tuyos.

Traducción

Mi querido hijo, soy muy desdichada, pues no podré ver de nuevo tu dulce sonrisa. Has cerrado los ojos para siempre. Por eso deduzco que has sido llevado de este planeta a otro, del que no regresarás. Mi querido hijo, nunca más podré escuchar tu dulce voz.

Texto

śrī-śuka uvāca
vilapantyā mṛtaṁ putram
iti citra-vilāpanaiḥ
citraketur bhṛśaṁ tapto
mukta-kaṇṭho ruroda ha

Palabra por palabra

śrī-śukaḥ uvāca — Śrī Śukadeva Gosvāmī dijo; vilapantyā — con la mujer que se estaba lamentando; mṛtam — muerto; putram — por el hijo; iti — así; citra-vilāpanaiḥ — con muchos lamentos; citraketuḥ — el rey Citraketu; bhṛśam — muy; taptaḥ — afligido; mukta-kaṇṭhaḥ — en voz alta; ruroda — lloraba; ha — en verdad.

Traducción

Śrī Śukadeva Gosvāmī continuó: En compañía de su esposa, que se lamentaba así por la muerte de su hijo, el rey Citraketu, profundamente apenado, lloraba y gemía con la boca abierta.

Texto

tayor vilapatoḥ sarve
dampatyos tad-anuvratāḥ
ruruduḥ sma narā nāryaḥ
sarvam āsīd acetanam

Palabra por palabra

tayoḥ — mientras los dos; vilapatoḥ — se lamentaban; sarve — todos; dam-patyoḥ — el rey, junto con su esposa; tat-anuvratāḥ — sus seguidores; ruruduḥ — lloraban y gemían; sma — en verdad; narāḥ — los varones; nāryaḥ — las mujeres; sarvam — todo el reino; āsīt — quedaron; acetanam — casi inconscientes.

Traducción

Al escuchar los lamentos de los reyes, todos sus seguidores, hombres y mujeres, se unieron a su llanto. Debido a lo repentino de la desgracia, todos los ciudadanos del reino estaban al borde del desvanecimiento.

Texto

evaṁ kaśmalam āpannaṁ
naṣṭa-saṁjñam anāyakam
jñātvāṅgirā nāma ṛṣir
ājagāma sanāradaḥ

Palabra por palabra

evam — así; kaśmalam — sufrimiento; āpannam — haber alcanzado; naṣṭa — perdida; saṁjñam — conciencia; anāyakam — sin ayuda; jñātvā — al saben; aṅgirāḥ — Aṅgirā; nāma — llamado; ṛṣiḥ — la persona santa; ājagāma — fue; sa-nāradaḥ — con Nārada Muni.

Traducción

El gran sabio Aṅgirā, cuando supo que el rey estaba casi muerto en un océano de lamentación, fue a verle en compañía de Nārada Ṛṣi.

Significado

Así terminan los significados de Bhaktivedanta correspondientes al capítulo decimocuarto del Canto Sexto del Śrīmad-Bhāgavatam, titulado «La lamentación del rey Citraketu».