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Śrīmad-bhāgavatam 4.17.5

Texto

sanat-kumārād bhagavato
brahman brahma-vid-uttamāt
labdhvā jñānaṁ sa-vijñānaṁ
rājarṣiḥ kāṁ gatiṁ gataḥ

Palabra por palabra

sanat-kumārāt — de Sanat-kumāra; bhagavataḥ — el muy poderoso; brahman — mi querido brāhmaṇa; brahma-vit-uttamāt — bien versado en el conocimiento védico; labdhvā — después de obtener; jñānam — conocimiento; sa-vijñānam — para aplicar en la práctica; rāja-ṛṣiḥ — el gran rey santo; kām — qué; gatim — destino; gataḥ — obtuvo.

Traducción

El gran rey santo, Mahārāja Pṛthu, recibió conocimiento de Sanat-kumāra, que era el más eminente erudito védico. Después de recibir ese conocimiento que se debe aplicar de forma práctica en la vida, ¿cómo alcanzó el rey santo el destino que deseaba?

Significado

Las sampradāyas vaiṣṇavas, es decir, los sistemas de sucesión discipular, son cuatro. Una sampradāya proviene del Señor Brahmā, otra de la diosa de la fortuna, otra de los Kumāras, encabezados por Sanat-kumāra, y la cuarta viene del Señor Śiva. Estos cuatro sistemas de sucesión discipular siguen vigentes en nuestros días. Como vemos en el ejemplo del rey Pṛthu, la persona sincera que desee recibir conocimiento védico trascendental debe aceptar un guru o maestro espiritual que represente a una de estas cuatro sucesiones discipulares. Está escrito que en Kali-yuga un mantra no tendrá efecto a menos que se reciba de una de esas sampradāyas. Han surgido muchas sampradāyas desautorizadas, que descarrían a la gente con mantras no respaldados por las autoridades. Los sinvergüenzas de esas supuestas sampradāyas no observan las reglas y regulaciones védicas. Aunque son adictos a toda clase de actividades pecaminosas, se atreven a ofrecer mantras, haciendo que la gente se descarríe. Sin embargo, las personas inteligentes saben que nunca obtendrán el éxito con esos mantras, y se niegan sistemáticamente a patrocinar a semejantes grupos espirituales de nuevo cuño. La gente debe guardarse mucho de esas disparatadas sampradāyas. Para tener más fácil acceso a la complacencia de los sentidos, las desdichadas gentes de la era de Kali aceptan mantras de esas supuestas sampradāyas. Sin embargo, Pṛthu Mahārāja mostró con su ejemplo que el conocimiento se debe recibir de una sampradāya fidedigna. Por consiguiente, aceptó a Sanat-kumāra como maestro espiritual.