Skip to main content

Ilustración 46

Los comerciantes, los predicadores, los reyes y los estudiantes, que estuvieron confinados en sus casas durante los meses de junio, julio, agosto y septiembre, comienzan a salir y obtienen el éxito, tal como las almas perfectas obtienen el cuerpo requerido, tan pronto abandonan el actual.

A la gente en general - especialmente a los comerciantes, los predicadores, los reyes y los estudiantes - se le aconseja no abandonar sus hogares durante los cuatro meses de la estación lluviosa. Estos cuatro meses son conocidos como Cāturmāsya y existen para todos reglas específicas que cumplir en este período, en parte por razones de salud y en parte para la realización espiritual. Durante esta época, los mercaderes no pueden comerciar libremente; las almas dedicadas, como los sannyāsīs, los reyes no pueden salir a y los estudiantes no pueden ir a las escuelas, que están cerradas. Pero después del período de Cāturmāsya, todos ellos tienen libertad para salir y cumplir con sus deberes respectivos y, por hacerlo, pueden alcanzar los resultados que deseen.

Similarmente, no se puede lograr los efectos deseados de nuestras penitencias mientras no nos liberemos del cuerpo actual. Existen diferentes maneras de practicar los distintos tipos de yoga. Por lo tanto, es una tontería imaginar que podemos ir a otros planetas en nuestros cuerpos actuales. Si queremos ir a Devaloka, los planetas de semidioses, debemos obtener las cualificaciones requeridas. Lo mismo sucede si queremos regresar al reino de Dios. Si queremos quedarnos en este planeta, en una mejor condición de vida, también eso dependerá de los logros requeridos. En cualquier caso, esos logros pueden obtenerse sólo después de abandonar este cuerpo.

Los comerciantes, los predicadores, los reyes y los estudiantes, conforman las cuatro clases importantes de la sociedad humana. Los mercaderes deben preocuparse de que todo el mundo tenga su parte exacta del alimento que Dios ha dado como regalo. Los sannyāsīs predicadores, deben ir de puerta en puerta para predicar el significado de la conciencia de Dios; no para construir maṭhas y templos, sino para iluminar a la gente. El rey debe salir de su hogar para ver con sus propios ojos cómo marchan las cosas (Mahārāja Parīkṣit, mientras viajaba, vio a un hombre, Kali, intentando matar a una vaca, el rey inmediatamente lo castigó). Y los estudiantes deben acumular conocimiento dondequiera que se encuentre disponible. El trabajo combinado de estas cuatro clases está destinado al bienestar general de la sociedad.