Skip to main content

Capítulo 16

SEIZIÈME CHAPITRE

Sometiendo a Kāliya

Victoire sur Kāliya

Cuando el Señor Kṛṣṇa comprendió que el agua del río Yamunā estaba siendo contaminada por la serpiente negra Kāliya, tomó medidas contra él y lo hizo salir del Yamunā e irse a otra parte, y así el agua se purificó.

Lorsqu’Il comprit que les eaux de la Yamunā étaient polluées par Kāliya, le serpent noir, Śrī Kṛṣṇa entreprit de le punir et le chassa de la rivière, dont les eaux redevinrent pures.

Mientras Śukadeva Gosvāmī narraba esta historia, Mahārāja Parīkṣit se puso ansioso y quiso oír más acerca de los pasatiempos infantiles de Kṛṣṇa. Él le preguntó a Śukadeva Gosvāmī acerca de cómo Kṛṣṇa castigó a Kāliya, quien vivía en el agua desde hacía muchos años. En verdad, Mahārāja Parīkṣit se estaba entusiasmando más y más en lo referente a oír narrar los pasatiempos trascendentales de Kṛṣṇa, y Él hizo su pregunta con gran interés.

Mahārāja Parīkṣit, entendant cette histoire des lèvres de Śukadeva Gosvāmī, fut pris d’un désir plus ardent encore de connaître mieux les Divertissements d’enfance de Kṛṣṇa. Comment Kṛṣṇa avait-Il puni Kāliya, hôte indésirable, pendant de nombreuses années, de ces eaux saintes ? Mahārāja Parīkṣit s’enthousiasmait chaque heure davantage d’écouter les Divertissements sublimes de Kṛṣṇa ; c’est avec grand intérêt qu’il posa sa question.

Śukadeva Gosvāmī narró la historia de la siguiente manera: Dentro del río Yamunā había un gran lago, y en ese lago solía vivir la serpiente negra Kāliya. Debido a su veneno, toda el área estaba tan contaminada, que emanaba un vapor venenoso las veinticuatro horas del día. Si un ave tan solo pasaba por el sitio, inmediatamente caía en el agua y moría.
Debido al efecto venenoso de los vapores del Yamunā, todos los árboles y las hierbas que se hallaban cerca del la ribera del Yamunā se habían secado. El Señor Kṛṣṇa vio el efecto del veneno de la gran serpiente: todo el río que fluía ante Vṛndāvana era ahora letal.

Śukadeva Gosvāmī conta ainsi l’histoire de Kāliya : la rivière Yamunā formait un grand lac, où vivait le serpent noir. Si maléfique son venin, si infecte la souillure, que jour et nuit, sans arrêt, le lac répandait sur tous les environs des nuées de vapeurs nocives. Des oiseaux de passage, tous atteints par les miasmes, tombaient morts dans l’eau.

Par l’effet corrosif des vapeurs de la Yamunā, les arbres, les gazons et les herbes des berges et des alentours s’étaient desséchés. Śrī Kṛṣṇa vit les méfaits du grand serpent : les eaux de la rivière, qui couraient devant Vṛndāvana, étaient désormais mortelles.

Kṛṣṇa, quien había aparecido justamente para matar a todos los elementos indeseables del mundo, se subió inmediatamente a un gran árbol kadamba de la misma ribera del Yamunā. La flor del kadamba es una flor redonda y amarilla, que por lo general se ve solamente en el área de Vṛndāvana. Después de subir a la copa del árbol, Kṛṣṇa apretó Su cinturón de tela y, aleteando Sus brazos tal como un luchador, saltó a la mitad del lago venenoso. El árbol kadamba del cual Kṛṣṇa saltó era el único árbol que no estaba muerto. Algunos comentadores dicen que debido a que lo tocaron los pies de loto de Kṛṣṇa, el árbol inmediatamente revivió. En otros Purāṇas se afirma que Garuḍa, el eterno transportador de Viṣṇu, sabía que Kṛṣṇa llevaría a cabo esta acción en el futuro, así que él puso un poco de néctar en este árbol para preservarlo. Cuando el Señor Kṛṣṇa saltó al agua, el río inundó sus riberas como si algo muy grande hubiera caído en él. Esta exhibición de la fuerza de Kṛṣṇa no es en absoluto extraordinaria, porque Él es la fuente de toda fuerza.

Śrī Kṛṣṇa, qui parut en ce monde pour mettre fin aux actes des mauvais, aussitôt grimpa dans un grand arbre kadamba sur la rive même de la Yamunā. L’arbre kadamba porte une fleur ronde et jaune ; on en voit surtout dans la région de Vṛndāvana. Parvenu à la branche la plus haute, Il resserra Sa ceinture et, battant des bras comme un lutteur, plongea au cœur du lac empoisonné. Le kadamba duquel Kṛṣṇa Se jeta était le seul arbre encore vivant. Certains commentateurs disent qu’il reprit vie dès que le touchèrent les pieds pareils-au-lotus de Kṛṣṇa. Certains Purāṇas, par ailleurs, content que Garuḍa, l’éternel oiseau-porteur de Viṣṇu, sachant que cet arbre devrait dans l’avenir servir de tremplin à Kṛṣṇa, y versa, pour le préserver, du nectar. Quand Śrī Kṛṣṇa eut atteint les eaux de la Yamunā, la rivière grossit et inonda ses berges comme sous l’effet d’une masse gigantesque. Rien d’étonnant à cette preuve de puissance, car Kṛṣṇa est la Source intarissable de toute puissance.

Mientras Kṛṣṇa nadaba tal como un elefante grande y poderoso, hizo un sonido tumultuoso que la gran serpiente negra, Kāliya, pudo oír. El alboroto le resultaba intolerable a Kāliya, y este pudo comprender que se trataba de un intento de atacar su hogar. Por consiguiente, de inmediato se presentó ante Kṛṣṇa. Kāliya vio que en realidad valía la pena ver a Kṛṣṇa, porque Su cuerpo era muy bello y delicado: Su color semejaba el de una nube, y Sus piernas parecían una flor de loto. Kṛṣṇa estaba adornado con la Śrīvatsa, y con joyas y ropas amarillas. Él sonreía con una cara muy hermosa, y jugaba en el río Yamunā con una gran fuerza. Pero a pesar de los bellos rasgos de Kṛṣṇa Kāliya sintió gran ira dentro de su corazón, y así pues, atrapó a Kṛṣṇa mediante sus poderosos anillos. 

Nageant comme un éléphant dans toute sa force, Kṛṣṇa fit un bruit tumultueux, que ne manqua pas d’entendre le grand serpent noir Kāliya. Tapage intolérable ! Le monstre pouvait deviner qu’il s’agissait là d’une attaque. Il se présenta donc aussitôt devant Kṛṣṇa. Si beau, si délicat était le Corps de Kṛṣṇa que Kāliya pensa qu’il valait bien la peine de le voir ; Son teint était celui d’un nuage sombre, Ses jambes rappelaient la fleur de lotus. Il était paré du Śrīvatsa, de joyaux et d’habits jaunes. Son merveilleux visage souriait et Il S’ébattait avec une admirable puissance dans la rivière. Mais bien que fasciné, Kāliya sentit en son cœur bouillir la colère, et saisit le jeune Pâtre dans l’étreinte de ses puissants anneaux.

Viendo la forma increíble en la cual Kṛṣṇa estaba envuelto en los anillos de la serpiente, los afectuosos pastorcillos de vacas y los habitantes de Vṛndāvana inmediatamente se aturdieron de miedo. Ellos lo habían dedicado todo a Kṛṣṇa: sus vidas, sus pertenencias, su afecto, sus actividades —todo era para Kṛṣṇa—; y cuando lo vieron en esa condición, se sobrecogieron de miedo y cayeron al suelo. Todas las vacas, los toros y los terneritos se abrumaron de aflicción y comenzaron a mirarlo con gran ansiedad. Debido al temor, solo podían llorar de agonía y permanecer erguidos en la orilla, incapaces de ayudar a su amado Kṛṣṇa.

À cette vue invraisemblable, les petits pâtres affectueux et tous les habitants de Vṛndāvana furent pétrifiés de frayeur. Ils avaient voué à Kṛṣṇa toute leur existence, leurs biens, leur affection, leurs actes ; lorsqu’ils Le virent dans cette posture, la peur les envahit et ils tombèrent sur le sol. Les vaches, les bœufs et les petits veaux étaient tous noyés de chagrin, et jetèrent vers Kṛṣṇa un regard plein d’angoisse. Ils ne pouvaient que pleurer, enfermés dans une douleur profonde, et se tenir figés sur les berges de la rivière, incapables de porter secours à leur Bien-aimé.

Mientras esta escena ocurría en la ribera del Yamunā, se manifestaron malos presagios. La tierra temblaba, del cielo caían meteoritos, y los cuerpos de los hombres temblaban. Todas estas son indicaciones de un gran peligro inmediato. Observando esos signos desfavorables, los pastores de vacas, incluyendo a Mahārāja Nanda, se pusieron muy ansiosos debido al miedo. Al mismo tiempo, se les informó que Kṛṣṇa había ido al pastizal sin Su hermano mayor, Balarāma. Tan pronto como Nanda y Yaśodā y los pastores de vacas oyeron estas noticias, se pusieron aun más ansiosos. Debido a su gran afecto por Kṛṣṇa, inconscientes de la magnitud de las potencias de Kṛṣṇa, se abrumaron de aflicción y ansiedad porque no tenían nada más querido que Kṛṣṇa, y porque ellos lo dedicaron todo a Kṛṣṇa ­—vida, pertenencias, afecto, mente y actividades—. Debido a su gran afecto por Kṛṣṇa, pensaron: «¡Hoy Kṛṣṇa seguramente va a ser vencido!».

Alors se manifestèrent de noirs augures. La terre trembla, des météores tombèrent du ciel et le corps des hommes frémit. Tous ces signes laissent prévoir un danger immédiat, terrible. Observant ces sinistres présages, les pâtres restés au village, et avec eux Nanda Mahārāja, sentirent les mordre l’angoisse. Et à ce moment même, ils apprirent que Kṛṣṇa S’était rendu dans les pâturages sans Son Frère aîné, Balarāma. Ces nouvelles accrurent l’inquiétude de Nanda, de Yaśodā et de tous les pâtres. À cause de l’affection intense qu’ils portaient à Kṛṣṇa, inconscients de l’étendue de Ses puissances, ils furent submergés par le chagrin et l’angoisse : rien ne leur était plus cher que Kṛṣṇa, ils Lui avaient tout dédié, existence, possessions, affection, mental et actes. Leur attachement à Kṛṣṇa fit naître en eux cette pensée : « Aujourd’hui, sans doute. Kṛṣṇa connaîtra la défaite ! »

Todos los habitantes de Vṛndāvana salieron de la aldea para ver a Kṛṣṇa. La asamblea consistía en niños, jóvenes y viejos, mujeres, animales y todas las entidades vivientes; ellos sabían que Kṛṣṇa era su único medio de sustento. Mientras esto sucedía, Balarāma, quien es el amo de todo conocimiento, permaneció allí simplemente sonriendo. Él sabía cuan poderoso era Su hermano menor Kṛṣṇa, y sabía que no había ninguna causa de ansiedad cuando Kṛṣṇa peleaba con una serpiente ordinaria del mundo material. Por consiguiente, Él personalmente no participó para nada de su inquietud. Por otro lado, todos los habitantes de Vṛndāvana, estando perturbados, comenzaron a buscar a Kṛṣṇa siguiendo la impresión de Sus huellas sobre el suelo, y así se desplazaron hacia la ribera del Yamunā. Finalmente, siguiendo las huellas marcadas con la bandera, el arco y la caracola, los habitantes de Vṛndāvana llegaron a la ribera del río y vieron que todas las vacas y niños lloraban, contemplando a Kṛṣṇa envuelto en los anillos de la negra serpiente. Entonces, ellos se pusieron aun más abrumados de pena. 

Pour voir Kṛṣṇa, tous les habitants de Vṛndāvana étaient sortis du village. Dans l’assemblée, on comptait des enfants, des jeunes gens, des vieillards, des femmes, des animaux… toutes les espèces d’êtres vivants : Kṛṣṇa – ils le savaient – représentait leur unique soutien. Pendant cette scène, Balarāma, le Maître de tout savoir, Se tenait là, souriant. Il connaissait la toute-puissance de Son jeune Frère Kṛṣṇa : il n’y avait nulle raison de s’inquiéter à voir Kṛṣṇa combattre un serpent. Aussi Balarāma ne partageait-Il point l’accablement des autres. Toutefois, les habitants de Vṛndāvana, bouleversés, partirent à la recherche de Kṛṣṇa en suivant sur le sol les empreintes de Ses pieds, qui se dirigent vers la Yamunā. Enfin, conduits par les empreintes marquées de l’étendard, de l’arc et de la conque, ils parvinrent aux rives et virent vaches et jeunes pâtres sanglotant, et dans les eaux Kṛṣṇa ceint des anneaux du serpent noir. Alors, ils sombrèrent plus encore dans la peine. C’en était fini de Kṛṣṇa, et ils se fondirent dans un océan de chagrin.

Mientras Balarāma sonreía al ver su lamentación, todos los habitantes de Vrajabhūmi se sumergieron en el océano de la aflicción, porque pensaban que Kṛṣṇa estaba acabado. Aunque los residentes de Vṛndāvana no sabían mucho acerca de Kṛṣṇa, su amor por Él estaba más allá de toda comparación. Tan pronto como vieron que Kṛṣṇa estaba en el río Yamunā envuelto por la serpiente Kāliya y que todos los niños y las vacas se lamentaban, ellos simplemente comenzaron a pensar en la amistad de Kṛṣṇa, Su cara sonriente, Sus dulces palabras y Sus relaciones con ellos. Pensando en esto, y creyendo que su Kṛṣṇa estaba ahora bajo las garras de Kāliya, sintieron de inmediato que los tres mundos se habían quedado vacíos. El Señor Caitanya también dijo que Él veía vacíos los tres mundos ante la ausencia de Kṛṣṇa. Este es el estado más elevado del cultivo de conciencia de Kṛṣṇa. Casi todos los habitantes de Vṛndāvana tenían el más elevado y extático amor por Kṛṣṇa.

Or, Balarāma, de les voir ainsi s’affliger, souriait toujours. Ils ne connaissaient pas grand-chose de Kṛṣṇa, mais leur amour pour Lui était sans égal. Devant la vision horrible, voilà qu’ils repensèrent à l’amitié de Kṛṣṇa, à Son visage souriant, Ses douces paroles et Ses rapports avec eux. De tels souvenirs, avec la certitude que Kṛṣṇa, le Bien-aimé, était désormais la proie de Kāliya, leur donnèrent le sentiment que soudain les trois mondes étaient devenus vides. Śrī Caitanya Mahāprabhu dit également qu’Il sentait les trois mondes déserts en l’absence de Kṛṣṇa. Tel est le plus haut niveau de la conscience de Kṛṣṇa. Presque tous les habitants de Vṛndāvana connaissaient la plus haute extase spirituelle, l’amour de Kṛṣṇa.

Cuando madre Yaśodā llegó, quiso entrar en el río Yamunā, y al ser detenida, se desmayó. Otros amigos que estaban igualmente apesadumbrados, derramaban lágrimas como torrentes de lluvia o como las olas del río, pero a fin de hacer que madre Yaśodā volviera en sí, comenzaron a hablar en voz alta acerca de los pasatiempos trascendentales de Kṛṣṇa. Madre Yaśodā permaneció inmóvil, como si estuviera muerta, porque su conciencia estaba concentrada en el rostro de Kṛṣṇa. Nanda y todos aquellos que lo habían dedicado todo a Kṛṣṇa, incluyendo sus vidas, estaban listos para entrar en las aguas del Yamunā, pero el Señor Balarāma los detuvo, porque tenía perfecto conocimiento de que no había ningún peligro.

Lorsque Yaśodāmātā arriva sur les lieux, elle voulut se jeter dans la rivière ; comme on la retenait, elle s’évanouit. D’autres, dont la peine était profonde, pleuraient tant que leurs larmes rappelaient des vagues ou des torrents de pluie, mais, pour ranimer Mère Yaśodā, ils entreprirent de chanter d’une voix forte les sublimes Divertissements de Kṛṣṇa. Mère Yaśodā demeura figée, comme morte, car sa conscience s’était arrêtée sur le visage de Kṛṣṇa. Nanda et tous les autres, qui avaient tout donné à Kṛṣṇa, jusqu’à leur propre existence, s’apprêtaient à entrer dans les eaux de la Yamunā, mais Śrī Balarāmajī, fort du parfait savoir que nul danger ne menaçait Kṛṣṇa, les arrêta.

Durante dos horas, Kṛṣṇa permaneció como un niño ordinario atrapado en los anillos de Kāliya; pero cuando Él vio que todos los habitantes de Gokula —incluyendo a Su madre, Su padre, las gopīs, los niños y las vacas— estaban justamente a punto de morir, y que no tenían ningún refugio para salvarse de la muerte inminente, Kṛṣṇa inmediatamente se liberó. Él comenzó a expandir Su cuerpo, y cuando la serpiente trató de sostenerlo sintió una gran tensión. A causa del esfuerzo, sus anillos se aflojaron, y no tuvo ninguna otra alternativa mas que soltar de sus garras a la Personalidad de Dios, Kṛṣṇa. Kāliya se puso entonces muy enojado, y sus grandes cabezas se expandieron. Él exhaló vapores venenosos por su nariz, sus ojos se inflamaron como el fuego, y de su boca salieron llamas. La gran serpiente permaneció inmóvil por algún tiempo mirando a Kṛṣṇa. Lamiendo sus labios con lenguas bifurcadas, la serpiente miró a Kṛṣṇa con sus cabezas dobles, y su mirada estaba llena de veneno. Kṛṣṇa inmediatamente se abalanzó sobre él, exactamente como Garuḍa arremete contra una serpiente. Atacado de este modo, Kāliya buscó una oportunidad de morderlo, pero Kṛṣṇa se movió alrededor de él. Como Kṛṣṇa y Kāliya se movían en un círculo, la serpiente gradualmente se fatigó, y su fuerza pareció disminuir considerablemente. Kṛṣṇa inmediatamente bajó las cabezas de la serpiente y saltó sobre ellas. Los pies de loto del Señor se tiñeron de rojo por los rayos de las joyas de las cabezas de la serpiente. Entonces, aquel que es el artista original de todas las bellas artes, tales como la danza, comenzó a danzar sobre las cabezas de la serpiente, aunque estas se movían de un lado a otro. Al ver esto, los ciudadanos de los planetas superiores comenzaron a hacer llover flores, a tocar tambores y tocar diferentes tipos de flautas, y a cantar diferentes oraciones y canciones. En esta forma, todos los ciudadanos del cielo, tales como los Gandharvas, los Siddhas y los semidioses, se complacieron mucho.

Deux heures entières, Kṛṣṇa demeura dans l’étreinte des anneaux de Kāliya, comme un enfant ordinaire, mais voyant que tous les habitants de Gokula, y compris Sa mère, Son père, les gopīs, les jeunes pâtres et les vaches, étaient près de mourir de chagrin, et qu’ils n’avaient nul moyen d’y échapper, Kṛṣṇa Se libéra. Il dilata Son Corps, jusqu’à ce que le serpent, qui s’obstinait à Le retenir, ressente une insupportable tension, et lâche prise. Mais d’avoir dû laisser échapper le Seigneur, plus grande fut sa colère : il gonfla ses gigantesques nuques. De ses narines sortirent des fumées toxiques ; ses yeux flamboyaient et des flammes jaillissaient de ses bouches. Il resta figé quelques instants, le regard fixé sur Kṛṣṇa. Passant sur ses lèvres ses langues bifides, il regardait Kṛṣṇa ; ses nuques avaient doublé de taille et son regard même était plein de venin. Aussitôt, tel Garuḍa s’abattant sur un reptile, Kṛṣṇa fondit sur Kāliya. Lui crut l’occasion venue de mordre, mais le Seigneur Se jeta dans son dos. Kṛṣṇa et Kāliya tournèrent ainsi en rond, mais peu à peu, le monstre se fatigua et parut perdre beaucoup de sa puissance. Alors, Kṛṣṇa rabattit les têtes du serpent et sauta sur elles. Les pieds pareils-au-lotus du Seigneur se teintèrent des rayons rouges qui sortaient des joyaux incrustés sur les têtes du serpent. Puis, Artiste originel, Maître de tous les arts, Il Se met à danser sur les têtes de Kāliya, bien qu’elles ondulent, qu’elles roulent ici et là. À cette vue, les habitants des planètes supérieures jetèrent en pluie des fleurs, battirent leurs tambours, jouèrent de diverses flûtes, chantèrent hymnes et prières. Ainsi furent satisfaits les Gandharvas, les Siddhas, les devas, bref tous les êtres vivant sur les planètes édéniques.

Mientras Kṛṣṇa danzaba sobre sus cabezas, Kāliya trató de empujarlo hacia abajo con algunas de sus otras cabezas. Kāliya tenía alrededor de cien cabezas pero Kṛṣṇa las controló todas. Él comenzó a golpear violentamente a Kāliya con Sus pies de loto, y esto fue más que lo que la serpiente podía soportar. Gradualmente, Kāliya fue reducido a luchar por su propia vida. Vomitó toda clase de desechos y exhaló fuego. Mientras vomitaba material venenoso de su interior, la situación pecaminosa de Kāliya se redujo. Debido a la gran ira, comenzó a luchar por la existencia y trató de levantar una de sus cabezas para matar al Señor. El Señor inmediatamente capturó esa cabeza y la controló, pateándola y danzando sobre ella. En verdad, parecía como si la Suprema Personalidad de Dios, Viṣṇu, estuviera siendo adorado; los venenos que emanaban de la boca de la serpiente parecían ser ofrendas de flores. Kāliya comenzó entonces a vomitar sangre en lugar de veneno; estaba completamente fatigado. Todo su cuerpo parecía estar roto por las patadas del Señor. Dentro de su mente, sin embargo, comenzó a comprender que Kṛṣṇa era la Suprema Personalidad de Dios, y comenzó a rendirse a Él. Él comprendió plenamente que Kṛṣṇa era el Señor Supremo, el amo de todo.

Pendant que Kṛṣṇa dansait sur quelques-unes de ses têtes, Kāliya tentait, avec d’autres, de Le faire choir. Le monstre possédait environ cent têtes, mais Kṛṣṇa les maîtrisa sans exception. De Ses pieds pareils-au-lotus, Il Se mit à frapper Kāliya : voilà plus que le serpent ne pouvait tolérer ! Peu à peu, il en fut réduit à simplement lutter pour garder la vie. Il vomit des immondices de toutes sortes et cracha du feu. Plus il rejetait de poison, plus il s’affranchissait de ses péchés. Pris de colère furieuse, dans un ultime effort pour sauver son existence, il essaya, élevant une de ses têtes, de toucher à mort le Seigneur. Mais Lui S’empare de cette tête, et la maîtrise, et dansant, la foule de Ses pieds. On eut dit alors que Kāliya vouait son adoration à Dieu, la Personne Suprême, Śrī Viṣṇu ; les miasmes empoisonnés qui sortaient des bouches devinrent comme des fleurs portées en offrande. Désormais, au bout de ses forces, Kāliya rendit non plus du poison mais du sang. Tout son corps semblait brisé par les coups du Seigneur. En son mental, cependant, il finit par comprendre que Kṛṣṇa était Dieu, la Personne Suprême, et décida de s’abandonner à Lui. Kāliya vit dans Kṛṣṇa le Seigneur Suprême, le Maître de tout.

Las esposas de la serpiente, conocidas como las Nāgapatnīs, vieron que su esposo estaba siendo dominado por las patadas del Señor, en cuyo vientre permanece todo el universo. Las esposas de Kāliya se prepararon para adorar al Señor, aunque, en su prisa, sus vestidos, sus cabellos y sus ornamentos se desarreglaron. Ellas también se rindieron al Señor Supremo y comenzaron a orar. Ellas aparecieron ante Él, le presentaron su progenie, y le ofrecieron ansiosamente sus reverencias respetuosas, postrándose en la ribera del Yamunā. Las Nāgapatnīs sabían que Kṛṣṇa es el refugio de todas las almas rendidas, y ellas deseaban liberar a su esposo del peligro inminente, agradando al Señor con sus oraciones.

Les épouses de Kāliya, les Nāgapatnīs, virent leur bien-aimé réduit par les coups du Seigneur, en qui repose tout l’Univers. Elles s’apprêtaient à L’adorer, malgré leurs vêtements, leur chevelure et leurs parures défaits dans la hâte et le trouble. Elles aussi s’abandonnèrent au Seigneur Suprême, et Lui adressèrent des prières. Elles se montrèrent à Lui, avec leurs enfants, et tout inquiètes, se prosternant sur les berges de la Yamunā, Lui offrirent leur hommage respectueux. Les Nāgapatnīs savaient que Kṛṣṇa est le Refuge de toutes les âmes soumises ; en Le satisfaisant par leurs prières, elles voulaient délivrer leur époux du danger.

Las Nāgapatnīs comenzaron a ofrecer sus oraciones en la forma siguiente. «¡Oh, querido Señor!, Tú eres igual para con todos. Para Ti no hay ninguna distinción entre Tus hijos, Tus amigos o Tus enemigos. Por lo tanto, el castigo que Tú le has ofrecido tan bondadosamente a Kāliya es exactamente el conveniente. ¡Oh, Señor!, Tú has descendido especialmente con el propósito de aniquilar a toda clase de elementos perturbadores dentro del mundo, y debido a que Tú eres la Verdad Absoluta, no hay ninguna diferencia entre Tu misericordia y Tu castigo. Por consiguiente, creemos que este castigo aparente a Kāliya es realmente una bendición. Nosotras consideramos que Tu castigo es Tu gran misericordia para con nosotros, debido a que cuando castigas a alguien, debe sobreentenderse que las reacciones de sus actividades pecaminosas se erradican. Ya está claro que esta criatura que aparece en el cuerpo de una serpiente debe de haber estado sobrecargada con toda clase de pecados; si no, ¿cómo podría tener el cuerpo de una serpiente? Tu danza sobre sus cabezas reduce todos los resultados pecaminosos de sus acciones, las cuales son causadas por tener este cuerpo de serpiente. Por lo tanto, es muy propicio que Te hayas enojado y lo hayas castigado en esa forma. Estamos muy asombradas de ver cómo Te has complacido tanto con esta serpiente, que evidentemente ejecutó diversas actividades religiosas en sus vidas pasadas. Todos debieron de haberse complacido por su sometimiento a toda clase de penitencias y austeridades, y debe de haber ejecutado actividades de bienestar universal para todas las criaturas vivientes».

Ainsi prièrent les Nāgapatnīs : « Ô Seigneur, Tu Te montres égal envers tous. Tu ne fais nulle distinction entre fils, ami et ennemi. Aussi le châtiment qu’avec bonté Tu as infligé à Kāliya marque-t-il justice. Ô Seigneur, Tu es descendu en ce monde pour anéantir ceux qui en détruisent l’harmonie, mais parce que Tu es la Vérité Absolue, nulle différence ne sépare Ta miséricorde et Ton châtiment. La punition que Tu as infligée à Kāliya, pour nous plutôt semble une bénédiction. Car elle manifeste Ton infinie miséricorde : l’être que tu as puni voit s’effacer les conséquences de ses actes coupables. Qui doute que cet être reptilien devait foisonner de péchés de toutes sortes ? Sinon, pourquoi aurait-il obtenu la forme d’un serpent ? Ta danse sur ses têtes a réduit à rien les conséquences des actes pécheurs auxquels il a dû se livrer pour posséder un tel corps. Que Ta colère et ce châtiment sont de bon augure ! Quelle surprise, pour nous, de voir comment Tu as obtenu satisfaction de ce serpent ; lui, pour connaître Ta grâce, a dû certes accomplir dans ses existences antérieures des rites religieux. Il s’est certes soumis à diverses austérités, et a dû par là com-bler tous les êtres ; il a également dû entreprendre des œuvres charitables pour le bienfait de tous dans l’univers. »

Las Nāgapatnīs confirmaron que uno no puede ponerse en contacto con Kṛṣṇa sin haber efectuado actividades piadosas a manera de servicio devocional, en sus vidas anteriores. Así como el Señor Caitanya aconsejó en Su Śikṣāṣṭaka, uno tiene que ejecutar servicio devocional cantando humildemente el mantra Hare Kṛṣṇa, pensando que se es más bajo que una paja en la calle y sin esperar honor para sí mismo, sino más bien ofreciendo toda clase de honor a los demás. Las Nāgapatnīs se asombraron de que, aunque Kāliya tenía el cuerpo de una serpiente como resultado de atroces actividades pecaminosas, al mismo tiempo estaba en contacto con el Señor, hasta el grado en que los pies de loto del Señor estaban tocando sus cabezas. Indudablemente, este no era el resultado ordinario de las actividades piadosas. Estos dos hechos contradictorios las asombraban. Así pues, continuaron orando: «¡Oh, querido Señor!, estamos sencillamente atónitas de ver que él es tan afortunado como para tener el polvo de Tus pies de loto sobre su cabeza. Esta es una fortuna que las grandes personas santas tratan de alcanzar. Incluso la diosa de la fortuna se sometió a severas austeridades tan solo para obtener la bendición del polvo de Tus pies de loto, así que, ¿cómo es posible que Kāliya obtenga tan fácilmente este polvo sobre su cabeza? Hemos oído decir a las fuentes autoritativas, que, aquellos a quienes bendice el polvo de Tus pies de loto, no se preocupan ni siquiera por el más elevado puesto del universo —el puesto del Señor Brahmā—, ni por reinar en los planetas celestiales, ni por la soberanía de este planeta. Ni tampoco desean esas personas gobernar los planetas que están por encima de esta Tierra, tales como Siddhaloka; ni aspiran a los poderes místicos alcanzados mediante el proceso del yoga. Los devotos puros tampoco aspiran a la liberación de volverse uno contigo. Mi Señor, aunque este rey de las serpientes nació en una especie de vida que es creada por la cualidad de la ira, no obstante ha alcanzado algo muy, muy difícil de alcanzar. Las entidades vivientes que deambulan por este universo y obtienen diferentes especies de vida, pueden alcanzar muy fácilmente la más grande bendición, tan solo por medio de Tu misericordia».

Les Nāgapatnīs confirment ainsi que nul ne peut entrer en présence de Kṛṣṇa sans avoir, en des existences précédentes, accompli quelque acte vertueux dans le service de dévotion. Comme l’enseigne Śrī Caitanya dans Son Śikṣāṣṭaka, on doit exécuter le service de dévotion en chantant humblement le mantra Hare Kṛṣṇa, en se sentant plus bas qu’un fétu de paille sur le chemin et n’attendant d’autrui nul honneur mais offrant soi-même à autrui toutes formes de respect. Les Nāgapatnīs s’étonnaient : bien que doté, par ses graves fautes, d’un corps de serpent, Kāliya avait obtenu le contact du Seigneur, il avait obtenu que les pieds pareils-au-lotus de Ce dernier touchent ses têtes. Voilà certes qui ne relève pas des suites ordinaires d’un quelconque acte de vertu. Ces contradictions les laissaient perplexes. Elles poursuivirent donc ainsi leurs prières : « Ô Seigneur, nous sommes tout simplement stupéfaites de voir Kāliya fortuné au point de recevoir sur sa tête la poussière de Tes pieds pareils-au-lotus. Car c’est une faveur à laquelle aspirent tous les grands saints. La déesse de la fortune elle-même s’infligea de sévères austérités dans cet espoir ; comment, donc, ce serpent l’a-t-il réalisé si facilement, et sur sa tête ? Des maîtres nous ont appris que les êtres bénis de la poussière de Tes pieds pareils-au-lotus n’éprouvent pas même d’attrait pour la position la plus élevée dans l’univers, celle de Brahmā, ou bien le trône des planètes édéniques ; être souverain sur notre planète, ils ne le veulent pas non plus, ni sur les planètes au-delà, comme Siddhaloka ; ni obtenir les pouvoirs surnaturels du yogī. En purs bhaktas, ils n’aspirent jamais à la libération qui consiste à ne plus faire qu’Un avec Toi. Ô Seigneur, bien que né au sein d’espèces que nourrit l’ignorance la plus abominable, et sur qui règne la colère, ce roi des serpents a obtenu la chose la plus précieuse, la plus rare au monde. Les êtres qui dans cet univers errent à travers les différentes espèces de vie peuvent aisément connaître le plus grand bienfait, mais seulement par Ta grâce. »

También se confirma en el Śrī Caitanya-caritāmṛta que las entidades vivientes deambulan dentro del universo en diversas especies de vida, pero por la misericordia de Kṛṣṇa y del maestro espiritual pueden obtener la semilla del servicio devocional, y así su sendero de liberación puede despejarse.

Le Caitanya-caritāmṛta confirme lui aussi que les êtres vagabondent de par l’univers en diverses espèces de vie, mais qu’ils peuvent, par la miséricorde de Kṛṣṇa et du maître spirituel, accueillir la semence du service de dévotion et voir ainsi pour eux s’ouvrir le chemin de la libération.

«Por consiguiente, nosotras Te ofrecemos nuestras respetuosas reverencias —continuaron las Nāgapatnīs—. Querido Señor nuestro, debido a que Tú eres la Persona Suprema, Tú vives como la Superalma dentro de cada entidad viviente; aunque Tú eres trascendental a la manifestación cósmica, todo reposa en Ti. Tú eres el eterno e infatigable tiempo personificado. Toda la fuerza del tiempo existe en Ti; por lo tanto, Tú eres tanto el observador como la personificación del tiempo total, en la forma de pasado, presente y futuro, mes, día, hora, momento... todo. En otras palabras, ¡oh, Señor!, Tú puedes ver perfectamente todas las actividades que suceden en todo momento, en cada hora, en cada día, en cada año, en el pasado, en el presente y en el futuro. Tú Mismo eres la forma universal y, sin embargo, eres diferente de este universo. Tú eres simultáneamente uno con este universo y diferente del mismo. Por consiguiente, Te ofrecemos nuestras respetuosas reverencias. 

Les Nāgapatnīs continuèrent : « Nous T’offrons donc notre hommage respectueux, ô Seigneur bien-aimé, car Tu es la Personne Suprême, sise en chaque être en tant que le Paramātmā ; bien que Tu transcendes la manifestation cosmique, tout ce qui s’y trouve repose en Toi. Tu es la Personnification même du temps éternel, infatigable. La force du temps existe tout entière en Toi, Tu en possèdes la parfaite vision et représentes Toi-même l’Incarnation du temps dans sa totalité, sous toutes ses formes : passé, présent, futur, mois, jour, heures, instants. C’est pourquoi, ô Seigneur, Tu peux voir de vision parfaite toutes les activités qui se déroulent à tout moment, à chaque heure, jour, année, du passé, du présent ou du futur. Tu es Toi-même la forme universelle ; cependant, Tu demeures distinct de cet univers. Tu es en même temps identique à l’univers, et différent de lui. Ainsi, accepte de nouveau, sans cesse, notre hommage respectueux.

Tú Mismo eres todo el universo y, aun así, eres el creador de todo el universo. Tú eres el superintendente y sustentador de todo este universo, y Tú eres su causa original. Aunque Tú estás presente en él por medio de Tus tres encarnaciones cualitativas —Brahmā, Viṣṇu y Maheśvara— Tú eres trascendental a la creación material. Aunque Tú eres la causa de la aparición de todas las clases de entidades vivientes, de sus sentidos, sus vidas, sus mentes y su inteligencia, a Ti se Te debe comprender mediante Tu energía interna. Por consiguiente, permítasenos ofrecerte nuestras reverencias respetuosas. Tú eres ilimitado, más fino que lo más fino, el centro de toda creación y el conocedor de todo.

Tu es Toi-même l’univers tout entier, et pourtant Tu en es le Créateur. Tu le régis, Tu le maintiens, Tu en es la Cause originelle. Tu demeures au-delà de la création matérielle, bien que Tu y sois présent sous la forme des guṇa-avatāras : Brahmā, Viṣṇu et Maheśvara. Bien que Cause de la manifestation des innombrables êtres vivants, et de leurs sens, de leur existence, de leur mental, de leur intelligence, Tu ne peux être par eux réalisé qu’à travers Ton énergie interne. Nous T’offrons donc notre hommage respectueux, Toi le Sans-limite, le plus ténu que le plus ténu, le Centre de toute la création et le Connaissant de toutes choses.

Las diferentes variedades de especuladores filosóficos tratan de alcanzarte a Ti. Tú eres la meta última de todos los esfuerzos filosóficos, y a Ti Te describen de hecho todas las filosofías y las diferentes clases de doctrinas. Permítasenos ofrecerte nuestras reverencias respetuosas, porque Tú eres el origen de toda Escritura y la fuente del conocimiento. Tú eres la base de toda evidencia, y eres la Persona Suprema que puede otorgarnos el conocimiento supremo. Tú eres la causa de todas las clases de deseos y la causa de todas las clases de satisfacción. Tú eres los Vedas personificados; por lo tanto, Te ofrecemos nuestras reverencias respetuosas.

Les philosophes spéculatifs, des diverses écoles, s’efforcent de T’atteindre, Toi le But ultime de toutes tentatives philosophiques, Celui que décrivent en vérité toutes les philosophies, toutes les doctrines. Offrons à Ta Personne notre hommage respectueux, car Tu es l’Origine de toute Écriture et la Source du savoir. Tu es la Racine de toute vérité et la Personne Suprême, qui peut nous bénir du savoir suprême. De Toi tirent leur origine toutes les sortes de désirs, de Toi encore émanent toutes les sortes de satisfactions. Tu es les Vedas personnifiés. Nous T’offrons donc notre hommage respectueux.

»Nuestro querido Señor, Tú eres la Suprema Personalidad de Dios, Kṛṣṇa, y también eres el supremo disfrutador, que aparece ahora como el hijo de Vasudeva, quien es una manifestación del estado puro de la bondad. Tú eres la Deidad predominante de la mente y de la inteligencia, Pradyumna y Aniruddha, y eres el Señor de todos los vaiṣṇavas. Mediante Tu expansión como catur vyūha ­—o sea, Vāsudeva, Saṅkarṣaṇa, Aniruddha y Pradyumna— eres la causa del desarrollo de la mente y de la inteligencia. Solamente mediante Tus actividades, a las entidades vivientes las cubre el olvido o descubren su verdadera identidad. Esto también se confirma en el Bhagavad-gītā (capítulo décimo quinto): el Señor está situado como la Superalma en el corazón de cada quien, y debido a Su presencia, la entidad viviente o se olvida de sí misma o revive su identidad original. Nosotras podemos comprender parcialmente que Tú estás dentro de nuestros corazones como el testigo de todas nuestras actividades. Pero es muy difícil apreciar Tu presencia, aunque cada una de nosotras pueda hacerlo hasta cierto punto. Tú eres el controlador supremo, tanto de las energías materiales como de las espirituales; por lo tanto, aunque Tú eres diferente de esta manifestación cósmica, eres el líder supremo. Tú eres el testigo y creador y el ingrediente mismo de esta manifestación cósmica. Por consiguiente, Te ofrecemos nuestras respetuosas reverencias. 

« Ô Seigneur, Tu es Dieu, la Personne Suprême, Śrī Kṛṣṇa, le Bénéficiaire suprême, qui maintenant est apparu en tant que Fils de Vasudeva, lui-même une manifestation de la pure Vertu. Tu es Pradyumna et Aniruddha, les devas-maîtres du mental et de l’intelligence, ainsi que le Seigneur de tous les vaiṣṇavas. À travers Ton émanation de catur-vyūha, qui consiste en Vāsudeva, Saṅkarṣaṇa, Aniruddha et Pradyumna, Tu es la Source du développement du mental et de l’intelligence. C’est Toi seul qui fais que les êtres vivants soient couverts par l’oubli ou retrouvent leur identité véritable. Ce que confirme la Bhagavad-gītā (15.15) : le Seigneur est sis dans le cœur de chacun en tant que l’Âme Suprême, et Sa présence seule fait que l’être oublie ou ravive son identité originelle. S’il nous est donné de plus ou moins comprendre que Tu Te trouves dans notre cœur en tant que Témoin de tous nos actes, il nous est cependant bien difficile d’apprécier Ta présence, bien que nous le puissions dans une certaine mesure. Tu es le Maître ultime des énergies matérielles et spirituelles, et par là même, le Dirigeant suprême, bien que distinct de la manifestation cosmique. De cette dernière, Tu es le Créateur, le Témoin et l’Ingrédient même. Nous T’offrons notre hommage respectueux.

Querido Señor nuestro, en lo que concierne a la creación de esta manifestación cósmica, personalmente Tú no tienes que esforzarte por nada; expandiendo Tus diferentes tipos de energía ­—a saber, la modalidad de la bondad, la modalidad de la pasión y la modalidad de la ignorancia— puedes crear, mantener y aniquilar esta manifestación cósmica. Como el controlador de toda la energía y fuerza del tiempo, Tú puedes simplemente lanzar un vistazo sobre la naturaleza material, crear este universo y dar energía a las diferentes fuerzas de la naturaleza material, que actúan de diferentes maneras en las distintas criaturas. Por lo tanto, nadie puede estimar cómo se llevan a cabo Tus actividades en este mundo.

Tu n’as aucun effort personnel à fournir dans l’œuvre de création ; Tu peux créer, maintenir et anéantir la manifestation cosmique par le seul déploiement de Tes diverses énergies, des trois guṇas : la Vertu, la Passion et l’Ignorance. Maître de la force du temps, Tu peux, par un simple regard sur l’énergie matérielle, créer cet univers et donner l’énergie nécessaire aux diverses forces de la nature matérielle, qui agissent différemment en différentes créatures. Nul ne peut donc comprendre comment Tu agis en ce monde.

Querido Señor nuestro, aunque Tú Te has expandido en las tres principales Deidades de este universo —o sea, el Señor Brahmā, el Señor Viṣṇu y el Señor Śiva— para la creación, manutención y destrucción, Tu aparición como el Señor Viṣṇu es realmente para bendecir a las criaturas vivientes. Por consiguiente, para aquellos que son realmente pacíficos y que aspiran a la paz suprema, se recomienda la adoración de Tu aparición pacífica como el Señor Viṣṇu. 

Ô Seigneur, Tu T’es manifesté sous la forme des trois principales divinités de cet univers, Brahmā, Viṣṇu et Śiva, pour que s’opèrent la création, le maintien et la destruction, mais Ton Apparition en tant que Śrī Viṣṇu a pour but spécial le bienfait de tous les êtres. Aussi est recommandée à ceux qui vivent dans la paix et aspirent à la paix suprême l’adoration de Ton aspect paisible de Śrī Viṣṇu.

¡Oh, Señor!, Te estamos ofreciendo nuestras oraciones. Tú puedes apreciar que esta pobre serpiente va a dejar su vida. Tú sabes que en cuanto concierne a nosotras, las mujeres, nuestras vidas y todo son de nuestros esposos; por lo tanto, Te rogamos que bondadosamente perdones a Kāliya, nuestro esposo, porque si esta serpiente muere, entonces nos encontraremos en una gran dificultad. Míranos solamente, y perdona, por favor, a este gran ofensor. Querido Señor nuestro, toda criatura viviente es Tu progenie. Y Tú las mantienes a todas. Esta serpiente es también Tu progenie, y puedes perdonarla aunque Te haya ofendido, cosa que indudablemente ha hecho sin conocer Tu potencia. Te rogamos que sea excusado por esta vez. Querido Señor nuestro, Te ofrecemos nuestro servicio amoroso, porque todas somos eternas servidoras de Vuestra Señoría. Puedes ordenarnos y pedirnos que hagamos cualquier cosa que Tú quieras. Toda entidad viviente puede aliviarse de toda clase de desesperación si consiente en atenerse a Tus órdenes».

Ô Seigneur, nous Te soumettons nos prières. Tu le vois, ce malheureux serpent va perdre la vie. Tu sais que pour nous, femmes, notre existence même et tout ce que nous possédons réside en l’époux ; nous T’implorons, aie la bonté d’accorder Ton pardon à Kāliya, car s’il venait à mourir, nous, ses femmes, serions fort désemparées. Considère seulement notre sort, et non ses offenses. Cher Seigneur, chaque être est engendré de Toi, de chaque être Tu assures le maintien. Ce serpent est donc Ton fils ; oui, par ignorance de Tes pouvoirs, il a commis à Ton endroit des offenses graves, mais Tu peux pour cette fois les effacer, nous T’en implorons. Ô Seigneur, nous T’offrons avec amour notre service, car toutes nous sommes Tes éternelles servantes. Quoi que Tu désires, demande-le, et nous agirons selon Ton ordre. Quiconque accepte d’agir ainsi se trouve soulagé de tout désespoir. »

Después de que las Nāgapatnīs ofrecieron sus oraciones, el Señor Kṛṣṇa liberó a Kāliya de su castigo. Kāliya estaba ya inconsciente por haber sido golpeado por el Señor. Al recuperar la conciencia y ser librado del castigo, le volvió a Kāliya la fuerza vital y el poder de utilizar sus sentidos. Con las manos juntas, humildemente comenzó a orarle al Supremo Señor Kṛṣṇa: «Mi querido Señor, yo he nacido en una especie tal, que soy por naturaleza irascible y envidioso, estando en la región más oscura de la modalidad de la ignorancia. Vuestra Señoría sabe bien que es muy difícil abandonar nuestros instintos naturales, aunque por tales instintos la criatura viviente transmigre de un cuerpo a otro». Se confirma también en el Bhagavad-gītā que es muy difícil salirse de las garras de la naturaleza material, pero si alguien se entrega a la Suprema Personalidad de Dios, Kṛṣṇa, las modalidades de la naturaleza material ya no pueden actuar sobre él. «Mi querido Señor —continuó Kāliya—, Tú eres, por lo tanto, el creador original de todas las clases de modalidades de la naturaleza material, mediante las cuales este universo es creado. Tú eres la causa de las diferentes clases de mentalidades que poseen las entidades vivientes, mediante las cuales han obtenido diferentes variedades de cuerpos. Mi querido Señor, yo nací como serpiente; por lo tanto, soy muy irascible por instinto natural. ¿Cómo es posible entonces, sin Tu misericordia, abandonar la naturaleza que he adquirido? Es muy difícil salirse de las garras de Tu māyā. Por Tu māyā permanecemos esclavizados. Mi querido Señor, por favor, perdóname por mis tendencias materiales inevitables. Ahora puedes castigarme o salvarme como Tú lo desees».

Ayant entendu ces prières, Śrī Kṛṣṇa mit fin au châtiment de Kāliya, lequel, d’avoir été frappé par le Seigneur, était déjà tombé inconscient. En recouvrant la conscience, affranchi de son châtiment, il retrouva du même coup sa force vitale et l’acuité de ses sens. Les mains jointes, il se mit humblement à adresser des prières au Seigneur Suprême, Śrī Kṛṣṇa : « Ô Seigneur, j’ai pris naissance au sein d’une espèce qui veut que par nature je sois coléreux et jaloux, puisque baignant dans les plus épaisses ténèbres de l’ignorance. Ta Grâce sait combien il est difficile d’abandonner ses instincts naturels, bien qu’ils fassent que l’être transmigre d’un corps à un autre. » La Bhagavad-gītā dit également qu’il est fort malaisé de se défaire de l’emprise de la nature matérielle, mais elle ajoute que pour quiconque s’abandonne à Dieu, la Personne Suprême, Śrī Kṛṣṇa, il n’est plus question de l’influence des guṇas, de la nature matérielle. « Cher Seigneur, continua Kāliya, Tu es l’Origine de tous les guṇas, par quoi est créé l’univers, la Cause des diverses mentalités que possèdent les êtres, mentalités déterminant les corps qu’ils revêtiront. Ô Seigneur, Je suis né serpent et, d’instinct, porté à la colère. Comment donc, sans Ta Grâce, me serait-il possible d’abandonner cette nature, par moi acquise. Qu’il est difficile d’échapper aux griffes de Ta māyā, qui nous condamne à l’esclavage ! Ô Seigneur, pardonne, je T’en prie, mes fatales tendances matérielles. Tu peux me châtier ou me sauver à Ton gré. »

Después de oír esto, la Suprema Personalidad de Dios, quien actuaba como un pequeño niño humano, le ordenó esto a la serpiente: «Debes dejar este lugar inmediatamente e irte al océano. Parte sin demora. Puedes llevar contigo a toda tu progenie, tus esposas y todo lo que poseas. No contamines las aguas del Yamunā. Deja que las beban sin obstáculo Mis vacas y los pastorcillos de vacas». El Señor declaró entonces que la orden dada a la serpiente Kāliya debería ser recitada y oída por todos, para que nadie tuviera que temerle a Kāliya nunca más.

Entendant ces mots de Kāliya, Dieu, la Personne Suprême, qui jouait le rôle d’un petit enfant, commanda au serpent. « Quitte aussitôt ces lieux, et va vers l’océan. Pars sans délai. Avec toi, tu peux emmener toutes tes épouses, ta géniture et tes possessions. Ne pollue point les eaux de la Yamunā. Qu’elles désaltèrent sans risque Mes vaches et Mes amis les pâtres ! » Le Seigneur demanda ensuite que l’ordre qu’Il venait de donner au serpent Kāliya soit récité et entendu de tous, afin que nul ne craigne plus longtemps le monstre.

Cualquiera que oiga la narración de la serpiente Kāliya y su castigo, no tendrá que temerle más a las envidiosas actividades de las serpientes. El Señor también declaró: «Si alguien se baña en el lago Kāliya, donde Mis amigos pastorcillos y Yo nos hemos bañado, o si alguien, ayunando por un día, les ofrece oblaciones del agua de este lago a los antepasados, se librará de toda clase de reacciones pecaminosas». El Señor también le aseguró a Kāliya: «Tú viniste aquí por temor a Garuḍa, quien quería comerte en la bella tierra que está cerca del océano. Ahora, al ver las marcas que han quedado en tu cabeza, donde te he tocado con Mis pies de loto, Garuḍa, no te perturbará».

Quiconque entend le récit du serpent Kāliya et de son châtiment n’aura plus à craindre les mouvements jaloux des serpents. Le Seigneur déclara aussi : « Quiconque se baignera dans le lac de Kāliya, où Mes amis les pâtres et Moi-même nous sommes baignés, quiconque, après avoir observé le jeûne pendant une journée, offrira en oblation aux ancêtres l’eau de ce lac, se verra affranchi de toutes les suites de ses actes pécheurs. » Le Seigneur rassura également Kāliya : « Tu es venu en ces lieux par crainte de Garuḍa, qui voulait te dévorer sur la terre merveilleuse, en bordure de l’océan ; or, sache-le, désormais, voyant sur tes têtes les marques de Mes pieds pareils-au-lotus, jamais plus Garuḍa ne te causera de trouble. »

El Señor estaba complacido con Kāliya y sus esposas. Inmediatamente después de oír Su orden, las esposas comenzaron a adorarlo con grandes ofrendas de hermosos atavíos, flores, guirnaldas, joyas, ornamentos, pasta de sándalo, flores de loto y agradables frutas para comer. En esta forma, ellos complacieron al amo de Garuḍa, de quien estaban muy temerosos. Luego, obedeciendo las órdenes del Señor Kṛṣṇa, todos ellos dejaron el lago del Yamunā.

Le Seigneur était satisfait de Kāliya et de ses épouses. Dès qu’elles eurent entendu l’ordre du Seigneur, les Nāgapatnīs Lui vouèrent leur adoration en Lui offrant en abondance de beaux vêtements, des fleurs de lotus et autres, des guirlandes, des joyaux, des parures, de la pulpe de bois de santal et des fruits délicieux. Ainsi, elles donnèrent satisfaction au Maître de Garuḍa, l’aigle qu’elles redoutaient si fort ; puis, se pliant aux instructions de Śrī Kṛṣṇa, Kāliya, ses épouses et leur géniture quittèrent le lac que formait la Yamunā.

Así termina el significado de Bhaktivedanta, del capítulo décimo sexto del libro Kṛṣṇa, titulado: «Sometiendo a Kāliya».

Ainsi s’achèvent les enseignements de Bhaktivedanta  pour le seizième chapitre du Livre de Kṛṣṇa, intitulé:  « Victoire sur Kāliya ».