Skip to main content

Text 6

Sloka 6

Texto

Verš

puṁso varṣa-śataṁ hy āyus
tad-ardhaṁ cājitātmanaḥ
niṣphalaṁ yad asau rātryāṁ
śete ’ndhaṁ prāpitas tamaḥ
puṁso varṣa-śataṁ hy āyus
tad-ardhaṁ cājitātmanaḥ
niṣphalaṁ yad asau rātryāṁ
śete ’ndhaṁ prāpitas tamaḥ

Palabra por palabra

Synonyma

puṁsaḥ — de todo ser humano; varṣa-śatam — cien años; hi — en verdad; āyuḥ — duración de la vida; tat — de esa; ardham — mitad; ca — y; ajita-ātmanaḥ — de la persona que es sirviente de sus sentidos; niṣphalam — sin beneficio, sin sentido; yat — porque; asau — esa persona; rātryām — por la noche; śete — duerme; andham — ignorancia (olvidar su cuerpo y su alma); prāpitaḥ — completamente poseído por; tamaḥ — oscuridad.

puṁsaḥ — každé lidské bytosti; varṣa-śatam — sto let; hi — zajisté; āyuḥ — délka života; tat — z toho; ardham — polovina; ca — a; ajita-ātmanaḥ — toho, kdo je služebníkem svých smyslů; niṣphalam — bez užitku, beze smyslu; yat — protože; asau — ten člověk; rātryām — v noci; śete — spí; andham — nevědomost (zapomnění na své tělo a duši); prāpitaḥ — zcela pohroužen do; tamaḥ — temnota.

Traducción

Překlad

La vida del ser humano dura un máximo de cien años; pero el que no puede controlar los sentidos pierde por completo la mitad de esos años, pues, cubierto por la ignorancia, pasa doce horas durmiendo cada noche. De este modo, solamente vive cincuenta años.

Každý člověk žije nanejvýš sto let, ale pro toho, kdo nedokáže ovládat své smysly, je polovina těchto let zcela ztracena, neboť v noci dvanáct hodin spí, zahalený nevědomostí. Délka jeho života je tedy pouze padesát let.

Significado

Význam

El Señor Brahmā, los seres humanos y las hormigas viven cien años, pero esos cien años de vida son diferentes entre sí. Vivimos en un mundo relativo, en el cual los instantes temporales son también relativos y diferentes. Los cien años de Brahmā, por ejemplo, no son como los cien años del ser humano. ElBhagavad-gītā nos enseña que las doce horas diurnas de Brahmā equivalen a 4 300 000 veces 1 000 años (sahasra-yuga-paryantam ahar yad brahmaṇo viduḥ). De modo que los varṣa-śatam, los cien años, son relativamente distintos en función del tiempo, la persona y las circunstancias. En lo que se refiere a los seres humanos, el cálculo de este verso es correcto para la generalidad de la gente. De un máximo de cien años de vida, cincuenta se pierden durmiendo. El cuerpo tiene cuatro necesidades: comer, dormir, tener relaciones sexuales y defenderse, pero la persona que desee progresar en el cultivo de conciencia espiritual debe emplear en ello toda la duración de su vida, reduciendo esas actividades al mínimo. Eso le permitirá aprovechar todo su tiempo de vida.

Pán Brahmā, člověk i mravenec žijí sto let, ale jejich stoleté životy nejsou stejné. Tento svět je relativní a jeho relativní časová období se od sebe liší. Sto let Brahmy není stejných jako sto let lidské bytosti. Z Bhagavad-gīty víme, že Brahmův den (dvanáct hodin) trvá 4 300 000 krát 1 000 roků (sahasra-yuga-paryantam ahar yad brahmaṇo viduḥ). Varṣa-śatam neboli sto let se tedy relativně liší podle času, osoby a okolností. Pro lidské bytosti platí zde uvedený výpočet — i když se člověk dožívá až sta let, padesát let ztrácí spánkem. Jedení, spánek, sex a obavy k tělu neodmyslitelně patří, ale v zájmu plného využití svého života musí ten, kdo si přeje rozvinout duchovní vědomí, tyto činnosti omezit. To mu umožní jeho život dokonale zužitkovat.