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CAPÍTULO 1

La historia de la vida de Ajāmila

A lo largo del Śrīmad-Bhāgavatam se explican diez temas, entre los cuales están la creación, la creación secundaria y los sistemas planetarios. Śukadeva Gosvāmī, el orador del Śrīmad-Bhāgavatam, ha hablado ya de la creación, la creación secundaria y los sistemas planetarios en los Cantos Tercero, Cuarto y Quinto. Ahora, en los diecinueve capítulos de este Sexto Canto, hablará de poṣaṇa, la protección que brinda el Señor.

El primer capítulo narra la historia de Ajāmila, quien, a pesar de ser considerado un gran pecador, fue liberado por cuatro enviados de Viṣṇu, que fueron a rescatarle de los sirvientes de Yamarāja. Este capítulo explica con todo detalle su liberación al serle eliminadas las reacciones de su vida pecaminosa. Las actividades pecaminosas son causa de dolor tanto en esta vida como en la siguiente. Debemos tener plena certeza de que los sufrimientos de la vida siempre tienen su causa en la acción pecaminosa. En la senda del trabajo fruitivo es inevitable cometer actividades pecaminosas; por esa razón, la senda delkarma-kāṇḍa recomienda distintas formas de expiación. Sin embargo, esos métodos no nos liberan de la ignorancia, que es la raíz de la vida pecaminosa. Así pues, la tendencia a cometer actividades pecaminosas permanece incluso después de la expiación, que, por lo tanto, no es el método de purificación adecuado. Quien sigue la senda del conocimiento especulativo se libera de la vida pecaminosa al comprender las cosas tal y como son. Por lo tanto, la adquisición de conocimiento especulativo también se considera una forma de expiación. El que se ocupa en actividades fruitivas puede liberarse de la acción de la vida pecaminosa por medio de la austeridad, la penitencia, el celibato, el control de la mente y los sentidos, la veracidad y la práctica del yoga místico. Con el despertar del conocimiento también se pueden neutralizar las reacciones pecaminosas. Sin embargo, ninguno de esos métodos puede liberarnos de la tendencia a cometer actividades pecaminosas.

Con el bhakti-yoga, podemos evitar por completo la tendencia a cometer actividades pecaminosas; los demás métodos no son prácticos. Las Escrituras védicas, por lo tanto, establecen la conclusión de que el servicio devocional es más importante que los métodos de karma-kāṇḍa jñāna-kāṇḍa. Solo la senda del servicio devocional es auspiciosa para todos. Las actividades fruitivas y el conocimiento especulativo, por sí solos, no pueden darnos la liberación, pero el servicio devocional, libre de karma y de jñāna, es tan poderoso que, una vez fijada la mente en los pies de loto de Kṛṣṇa, contamos con la garantía de no tener que enfrentarnos a los yamadūtas, los mensajeros de Yamarāja, ni siquiera en sueños.

Para demostrar la fuerza del servicio devocional, Śukadeva Gosvāmī narró la historia de Ajāmila, un habitante de Kānyakubja (la actual Kanauj). Sus padres lo educaron en los principios regulativos y en el estudio de los Vedas, para que fuese un brāhmaṇa perfecto; pero, debido a su pasado, el joven brāhmaṇa se vio atraído a una prostituta, cuya compañía lo hizo caer y abandonar todos los principios regulativos. Ajāmila tuvo diez hijos con la prostituta, al menor de los cuales puso de nombre Nārāyaṇa. En el momento de la muerte, cuando los enviados de Yamarāja fueron a buscarlo, Ajāmila, lleno de miedo, gritó en voz alta el nombre de Nārāyaṇa, debido al apego que sentía por su hijo menor. De ese modo recordó al Nārāyaṇa original, el Señor Viṣṇu. Su canto del santo nombre de Nārāyaṇa no estaba completamente libre de ofensas, pero, sin embargo, surtió efecto. Tan pronto como cantó el santo nombre de Nārāyaṇa, hicieron su aparición los enviados del Señor Viṣṇu, quienes, seguidamente, entablaron una discusión con los sirvientes de Yamarāja; Ajāmila, al escuchar esa conversación, se liberó. Entonces pudo comprender el efecto nocivo de las actividades fruitivas, así como el carácter excelso del proceso de servicio devocional.

Texto

śrī-parīkṣid uvāca
nivṛtti-mārgaḥ kathita
ādau bhagavatā yathā
krama-yogopalabdhena
brahmaṇā yad asaṁsṛtiḥ

Palabra por palabra

śrī-parīkṣit uvāca — Mahārāja Parīkṣit dijo; nivṛtti-mārgaḥ — la senda de la liberación; kathitaḥ — explicada; ādau — en el comienzo; bhagavatā — por Tu Santidad; yathā — debidamente; krama — de modo gradual; yoga-upalabdhena — obtenida con el proceso de yoga; brahmaṇā — junto con el Señor Brahmā (tras llegar a Brahmaloka); yat — el modo por el que; asaṁsṛtiḥ — fin del ciclo de nacimientos y muertes.

Traducción

Mahārāja Parīkṣit dijo: ¡Oh, mi señor! ¡oh, Śukadeva Gosvāmī!, ya me has explicado [en el Segundo Canto] la senda de la liberación [nivṛtti-mārga]. Quien sigue esa senda tiene asegurada la elevación progresiva hasta el sistema planetario más elevado, Brahmaloka, desde donde ascenderá al mundo espiritual junto con el Señor Brahmā. De ese modo pone fin a su ciclo de nacimientos y muertes en el mundo material.

Significado

Mahārāja Parīkṣit era un vaiṣṇava; de modo que tras escuchar, al final del Quinto Canto, la descripción de las distintas condiciones de vida infernal, sintió una profunda preocupación por la manera de liberar a las almas condicionadas de las garras de māyā y llevarlas de regreso al hogar, de vuelta a Dios. Por esa razón, recordó a su maestro espiritual, Śukadeva Gosvāmī, la explicación que en el Segundo Canto había dado acerca de nivṛtti-marga, la senda de la liberación. En el momento de la muerte, Mahārāja Parīkṣit tuvo la gran fortuna de encontrar a Śukadeva Gosvāmī, y de preguntarle, en aquel momento crucial, acerca de la senda de la liberación. Śukadeva Gosvāmī apreció mucho su pregunta, y lo felicitó diciendo:

varīyān eṣa te praśnaḥ
kṛto loka-hitaṁ nṛpa
ātmavit-sammataḥ puṁsāṁ
śrotavyādiṣu yaḥ paraḥ

«Mi querido rey, tu pregunta es gloriosa, pues es de gran beneficio para todo tipo de personas. La respuesta a esa pregunta debe ser el principal tema de escucha, y cuenta con la aprobación de todos los trascendentalistas» (Bhāg. 2.1.1).

A Parīkṣit Mahārāja le sorprendía que las entidades vivientes que se encuentran en el estado condicionado no siguieran la senda de la liberación, el servicio devocional, y prefiriesen sufrir en tantas condiciones infernales. Esa es la cualidad delvaiṣṇava. Vāñchā-kalpa-tarubhyaś ca kṛpā-sindhubhya eva ca: El vaiṣṇava es un océano de misericordia. Para-duḥkha-duḥkhī: Sufre ante la desdicha ajena. Por esa razón, Parīkṣit Mahārāja, que sentía compasión por todas las almas condicionadas que sufren en la vida infernal, sugirió a Śukadeva Gosvāmī que continuase explicando la senda de la liberación, que ya había explicado al comienzo del Śrīmad-Bhāgavatam. En relación con esto es muy importante la palabra asaṁsṛti.Saṁsṛti se refiere a permanecer en la senda de nacimientos y muertes. Asaṁsṛti, por el contrario, se refiere a nivṛtti-mārga, la senda de la liberación; la persona que sigue esta senda pone fin al ciclo de nacimientos y muertes y se eleva progresivamente hasta Brahmaloka. No obstante, el devoto puro no siente interés por elevarse a los sistemas planetariossuperiores y, gracias a su práctica de servicio devocional (tyaktvā dehaṁ punar janma naiti), va inmediatamente de regreso al hogar, de vuelta a Dios. Parīkṣit Mahārāja estaba, por lo tanto, muy deseoso de que Śukadeva Gosvāmī le explicase la senda de la liberación para el alma condicionada.

En opinión de los ācāryas, la palabra krama-yogopalabdhena indica que el paso sucesivo por las etapas de karma-yoga jñāna-yoga, hasta llegar al nivel del bhakti-yoga, puede llevarnos a la liberación. El bhakti-yoga, sin embargo, es tan potente que no depende ni del karma-yoga ni del jñāna-yoga. Tanta es su potencia que, por el simple hecho de practicarbhakti-yoga, incluso una persona impía sin el menor mérito en karma-yoga, o un analfabeto completamente ajeno al jñāna-yoga, pueden, sin ningún género de dudas, elevarse hasta el mundo espiritual. Mām evaiṣyasy asaṁśayaḥ. En elBhagavad-gītā (8.7), Kṛṣṇa dice que, si seguimos el proceso de bhakti-yoga, es indudable que iremos de regreso a Dios, de vuelta al hogar, al mundo espiritual. No ocurre lo mismo con los yogīs, quienes, a veces, en lugar de ir directamente al mundo espiritual, desean visitar otros sistemas planetarios; esa es la razón de que se eleven hasta el sistema planetario en que habita el Señor Brahmā, como indica este verso con la palabra brahmaṇā. En el momento de la disolución, el Señor Brahmā, junto con todos los habitantes de Brahmaloka, regresa directamente al mundo espiritual. Esto se confirma en los Vedas de la siguiente manera:

brahmaṇā saha te sarve
samprāpte pratisañcare
parasyānte kṛtātmānaḥ
praviśanti paraṁ padam

«Debido a su posición excelsa, los habitantes de Brahmaloka, en el momento de la disolución, van directamente de regreso al hogar, de vuelta a Dios, junto con el Señor Brahmā».

Texto

pravṛtti-lakṣaṇaś caiva
traiguṇya-viṣayo mune
yo ’sāv alīna-prakṛter
guṇa-sargaḥ punaḥ punaḥ

Palabra por palabra

pravṛtti — por inclinación; lakṣaṇaḥ — caracterizado; ca — también; eva — en verdad; trai-guṇya — la tres modalidades de la naturaleza; viṣayaḥ — teniendo por objetivos; mune — ¡oh, gran sabio!; yaḥ — el cual; asau — esa; alīna-prakṛteḥ — del que no está libre de las garras de māyā; guṇa-sargaḥ — en las cuales se crean cuerpos materiales; punaḥ punaḥ — una y otra vez.

Traducción

¡Oh, gran sabio Śukadeva Gosvāmī!, la entidad viviente, mientras no se libera de la infección de las modalidades materiales de la naturaleza, tiene que recibir distintos tipos de cuerpos en los que disfrutar o sufrir, y manifiesta diversas inclinaciones conforme al cuerpo que recibe. Cuando actúa en función de esas tendencias, recorre la senda denominada pravṛtti-mārga, que le permite elevarse hasta los planetas celestiales, como ya has explicado [en el Tercer Canto].

Significado

En el Bhagavad-gītā (9.25), el Señor Kṛṣṇa explica:

yānti deva-vratā devān
pitṝn yānti pitṛ-vratāḥ
bhūtāni yānti bhūtejyā
yānti mad-yājino ’pi mām

«Los que adoren a los semidioses nacerán entre los semidioses; los que adoren a los antepasados irán a los antepasados; losque adoren a los fantasmas y espíritus nacerán entre esos seres; y los que Me adoren a Mí vivirán conmigo». Debido a la influencia de las modalidades de la naturaleza material, las entidades vivientes tienen diversas tendencias o propensiones, que las capacitan para alcanzar destinos diversos. Mientras tengamos apegos materiales, desearemos elevarnos a los planetas celestiales, llevados por la atracción al mundo material. La Suprema Personalidad de Dios, sin embargo, declara: «Los que Me adoran a Mí, vienen a Mí». Cuando no tenemos información acerca del Señor Supremo y de Su morada, nos conformamos con elevarnos a una posición material superior; sin embargo, cuando llegamos a la conclusión de que el mundo material no puede ofrecernos más que una sucesión de nacimientos y muertes, tratamos de ir de regreso al hogar, de vuelta a Dios. Quien alcanza ese destino, ya no tiene que regresar al mundo material (yad gatvā na nivartante tad dhāma paramaṁ mama). Esto lo expresa Śrī Caitanya Mahāprabhu en el Caitanya-caritāmṛta (Madhya 19.151):

brahmāṇḍa bhramite kona bhāgyavān jīva
guru-kṛṣṇa-prasāde pāya bhakti-latā-bīja

«Las entidades vivientes vagan por todo el universo conforme a su karma. Unas se elevan a los sistemas planetarios superiores, mientras otras descienden a los sistemas planetarios inferiores. De los muchos millones de entidades vivientes que vagan por el universo, solo la que es muy afortunada recibe, por la gracia de Kṛṣṇa, la oportunidad de relacionarse con un maestro espiritual genuino. Por la misericordia de Kṛṣṇa y del maestro espiritual, esa persona recibe la semilla de la enredadera del servicio devocional». Las entidades vivientes recorren todo el universo, yendo unas veces a los sistemas planetarios superiores, y otras a los planetas inferiores. Esa es la enfermedad material, que recibe el nombre de pravṛtti-mārga. La persona que se vuelve inteligente emprende la senda de nivṛtti-mārga, la senda de la liberación, y de ese modo, en lugar de recorrer una y otra vez el mundo material, va de regreso al hogar, de vuelta a Dios. Eso es lo que hay que hacer.

Texto

adharma-lakṣaṇā nānā
narakāś cānuvarṇitāḥ
manvantaraś ca vyākhyāta
ādyaḥ svāyambhuvo yataḥ

Palabra por palabra

adharma-lakṣaṇāḥ — caracterizados por actividades impías; nānā — diversos; narakāḥ — infiernos; ca — también; anuvarṇitāḥ — han sido explicados; manu-antaraḥ — el cambio de manus [en un día de Brahmā hay catorce manus]; ca — también; vyākhyātaḥ — ha sido explicado; ādyaḥ — el original; svāyambhuvaḥ — hijo directo del Señor Brahmā; yataḥ — donde.

Traducción

También has explicado [al final del Quinto Canto] las diversas formas de vida infernal, que son consecuencia de las actividades impías; has hablado también [en el Cuarto Canto] del primer manvantara, presidido por Svāyambhuva Manu, el hijo del Señor Brahmā.

Texto

priyavratottānapador
vaṁśas tac-caritāni ca
dvīpa-varṣa-samudrādri-
nady-udyāna-vanaspatīn
dharā-maṇḍala-saṁsthānaṁ
bhāga-lakṣaṇa-mānataḥ
jyotiṣāṁ vivarāṇāṁ ca
yathedam asṛjad vibhuḥ

Palabra por palabra

priyavrata — de Priyavrata; uttānapadoḥ — y de Uttānapāda; vaṁśaḥ — la dinastía; tat-caritāni — sus características; ca — también; dvīpa — planetas; varṣa — regiones; samudra — oceános y mares; adri — montañas; nadī — ríos; udyāna — jardines; vanaspatīn — y árboles; dharā-maṇḍala — del planeta Tierra; saṁsthānam — situación; bhāga — conforme a las divisiones; lakṣaṇa — diversas características; mānataḥ — y medidas; jyotiṣām — del Sol y otros astros; vivarāṇām — de los sistemas planetarios inferiores; ca — y; yathā — como; idam — esto; asṛjat — creado; vibhuḥ — la Suprema Personalidad de Dios.

Traducción

Mi querido señor, nos has hablado de las dinastías de los reyes Priyavrata y Uttānapāda, y has comentado sus características. La Suprema Personalidad de Dios creó el mundo material con sus muchos universos, sistemas planetarios, planetas y estrellas, y puso en ellos diversidad de regiones, mares, océanos, montañas, ríos, jardines y árboles, con sus respectivas características, repartidos entre el planeta Tierra, los astros del cielo y los sistemas planetarios inferiores. Nos has descrito con toda claridad esos planetas y a las entidades vivientes que los habitan.

Significado

Las palabras yathedam asṛjad vibhuḥ de este verso indican claramente que el Supremo, la Personalidad de Dios, que es grande y todopoderoso, creó todo el mundo material con toda su diversidad de planetas, estrellas, etc. Los ateos tratan de ocultar la mano del Señor, que está presente en toda creación, pero no saben explicar la existencia de todas estas creaciones si no hay tras ellas una inteligencia capacitada y un poder absoluto. Limitarse a imaginar o especular es una pérdida de tiempo. En el Bhagavad-gītā (10.8), el Señor dice: ahaṁ sarvasya prabhavo: «Yo soy el origen de todo»;mattaḥ sarvaṁ pravartate: «Todo lo que existe en la creación emana de Mí»; iti matvā bhajante māṁ budhā bhāva-samanvitāḥ: «Aquel que comprende perfectamente que Yo lo creo todo mediante Mi omnipotencia, se establece firmemente en el servicio devocional y se entrega por entero a Mis pies de loto». Por desdicha, las personas poco inteligentes no aciertan a comprender de inmediato la supremacía de Kṛṣṇa. Sin embargo, si se relacionan con devotos y leen libros autorizados, poco a poco podrán alcanzar el entendimiento adecuado, aunque pueda costarles muchas vidas. En el Bhagavad-gītā (7.19), Kṛṣṇa dice:

bahūnāṁ janmanām ante
jñānavān māṁ prapadyate
vāsudevaḥ sarvam iti
sa mahātmā sudurlabhaḥ

«Después de muchos nacimientos y muertes, aquel que verdaderamente posee conocimiento se rinde a Mí, sabiendo que Yo soy la causa de todas las causas y de todo lo que existe. Esa gran alma es muy poco frecuente». Vāsudeva, Kṛṣṇa, es el creador de todo, y Su energía se manifiesta en diversas maneras. Como se explica en el Bhagavad-gītā (7.4-5), en toda creación existe una combinación de la energía material (bhūmir āpo 'nalo vāyuḥ) y la energía espiritual, la entidad viviente. Ese mismo principio, la combinación del espíritu supremo y los elementos materiales, es, por lo tanto, la causa de la manifestación cósmica.

Texto

adhuneha mahā-bhāga
yathaiva narakān naraḥ
nānogra-yātanān neyāt
tan me vyākhyātum arhasi

Palabra por palabra

adhunā — ahora mismo; iha — en el mundo material; mahā-bhāga — ¡oh, muy afortunado y opulento Śukadeva Gosvāmī!; yathā — de modo que; eva — en verdad; narakān — todas las condiciones infernales por las que tienen que pasar los impíos; naraḥ — seres humanos; nānā — diversidades de; ugra — terribles; yātanān — condiciones de sufrimiento; na īyāt — no tengan que pasar; tat — eso; me — a mí; vyākhyātum arhasi — por favor, explica.

Traducción

¡Oh, muy afortunado y opulento Śukadeva Gosvāmī!, ahora, por favor, dime qué pueden hacer los seres humanos para no tener que pasar por los terribles sufrimientos de los mundos infernales.

Significado

En el capítulo veintiséis del Quinto Canto, Śukadeva Gosvāmī explicó que las personas que cometen actividades pecaminosas se ven obligadas a sufrir en los planetas infernales. Como devoto que es, Mahārāja Parīkṣit pregunta ahora acerca del modo de evitar esa situación. El vaiṣṇava es para-duḥkha-duḥkhī; en otras palabras, a nivel personal no tiene problemas, pero se siente muy desdichado al ver a los demás en dificultades. Prahlāda Mahārāja dijo: «Mi Señor, yo, personalmente, no tengo problemas, pues he aprendido a glorificar Tus cualidades trascendentales y a entrar en el trance del éxtasis. Sin embargo, sí tengo un problema, ya que pienso en esos necios y sinvergüenzas absortos en la felicidad temporal,māyā-sukha, sin conocimiento del servicio devocional que se Te ofrece». Este es el problema con que se enfrenta elvaiṣṇava. El vaiṣṇava se refugia plenamente en la Suprema Personalidad de Dios y, por lo tanto, está libre de problemas personales; pero su compasión por las caídas almas condicionadas lo lleva a pensar constantemente en cómo salvarlas de la vida infernal en este cuerpo y en el siguiente. Por eso Parīkṣit Mahārāja estaba ansioso de que Śukadeva Gosvāmī le explicase la manera de evitar que la humanidad se deslice hacia el infierno. Śukadeva Gosvāmī le había explicado ya el modo en que las personas entran en la vida infernal, y, del mismo modo, también podía explicarle la manera de salvarse de esa condición. Los hombres inteligentes deben aprovechar estas instrucciones. Sin embargo, por desdicha, el mundo entero carece de conciencia de Kṛṣṇa, y la gente sufre de la más densa de las ignorancias, sin ni siquiera creer en la existencia de otra vida después de esta. Es muy difícil convencerlos de que hay una próxima vida, pues, en su afán de obtener disfrute material, se han vuelto prácticamente locos. No obstante, nuestro deber, el deber de todo hombre cuerdo, es salvarlos. Mahārāja Parīkṣit es la representación del hombre que puede salvarlos.

Texto

śrī-śuka uvāca
na ced ihaivāpacitiṁ yathāṁhasaḥ
kṛtasya kuryān mana-ukta-pāṇibhiḥ
dhruvaṁ sa vai pretya narakān upaiti
ye kīrtitā me bhavatas tigma-yātanāḥ

Palabra por palabra

śrī-śukaḥ uvāca — Śrīla Śukadeva Gosvāmī dijo; na — no; cet — si; iha — en esta vida; eva — ciertamente; apacitim — neutralización, expiación; yathā — debidamente; aṁhasaḥ kṛtasya — cuando se han realizado actividades pecaminosas; kuryāt — realiza; manaḥ — con la mente; ukta — las palabras; pāṇibhiḥ — y con los sentidos; dhruvam — indudablemente; saḥ — esa persona; vai — en verdad; pretya — después de morir; narakān — diversas condiciones infernales; upaiti — obtiene; ye — que; kīrtitāḥ — ya se han descrito; me — por mí; bhavataḥ — a ti; tigma-yātanāḥ — en las cuales el sufrimiento es terrible.

Traducción

Śukadeva Gosvāmī contestó: Mi querido rey, en esta vida realizamos actos impíos con la mente, las palabras y el cuerpo; si no expiamos debidamente esas actividades antes de morir, neutralizándolas conforme a las indicaciones de la Manu-saṁhitā y otros dharma-śāstras, es seguro que, después de morir, tendremos que pasar por los planetas infernales y padecer terribles sufrimientos, como ya antes te he explicado.

Significado

Śrīla Viśvanātha Cakravartī Ṭhākura señala que, a pesar del hecho de que Mahārāja Parīkṣit era un devoto puro, Śukadeva Gosvāmī no le habló inmediatamente de la fuerza del servicio devocional. Como se afirma en el Bhagavad-gītā (14.26):

māṁ ca yo ’vyabhicāreṇa
bhakti-yogena sevate
sa guṇān samatītyaitān
brahma-bhūyāya kalpate

El servicio devocional es tan poderoso que, cuando alguien se entrega plenamente a Kṛṣṇa y a Su servicio devocional, las reacciones de su vida pecaminosa desaparecen de inmediato.

En otro pasaje del Gītā (18.66), el Señor Kṛṣṇa nos insta a abandonar todos los demás deberes y a entregarnos a Él. Esta es Su promesa: ahaṁ tvāṁ sarva-pāpebhyo mokṣayiṣyāmi: «Yo te liberaré de todas las reacciones pecaminosas y te daré la liberación». Así pues, Śukadeva Gosvāmī, el guru de Parīkṣit Mahārāja, podría haber respondido a sus preguntasexplicándole directamente los principios del bhakti; pero, a fin de probar la inteligencia de Parīkṣit Mahārāja, comenzó por recomendar el proceso de expiación propio de la senda de actividades fruitivas, karma-kāṇḍa. Las ochenta Escriturasautorizadas que tratan del karma-kāṇḍa, entre las cuales se encuentra la Manu-saṁhitā, reciben el nombre de dharma-śāstras. En esas Escrituras se nos aconseja neutralizar los actos pecaminosos con acciones fruitivas de otro tipo, y ese fue el método que Śukadeva Gosvāmī recomendó a Mahārāja Parīkṣit en un principio; en realidad, el que no sigue la senda del servicio devocional tiene que atenerse al criterio de esas Escrituras, realizando actos piadosos para neutralizar sus actos impíos. Esto es lo que se conoce con el nombre de expiación.

Texto

tasmāt puraivāśv iha pāpa-niṣkṛtau
yateta mṛtyor avipadyatātmanā
doṣasya dṛṣṭvā guru-lāghavaṁ yathā
bhiṣak cikitseta rujāṁ nidānavit

Palabra por palabra

tasmāt — por lo tanto; purā — antes; eva — en verdad; āśu — con gran rapidez; iha — en esta vida; pāpa-niṣkṛtau — para liberarnos de las reacciones de las actividades pecaminosas; yateta — debemos esforzarnos; mṛtyoḥ — muerte; avipadyata — no afectado por las enfermedades y la vejez; ātmanā — con un cuerpo; doṣasya — de las actividades pecaminosas; dṛṣṭvā — considerando; guru-lāghavam — la pesadez o ligereza; yathā — tal como; bhiṣak — un médico; cikitseta — trataría; rujām — de enfermedad; nidāna-vit — del experto en diagnosticar.

Traducción

Por lo tanto, antes de que nos llegue la muerte, y mientras el cuerpo tenga la fuerza suficiente, debemos darnos prisa por emprender el proceso de expiación prescrito en el śāstra; de lo contrario, perderemos el tiempo, y las reacciones de nuestros pecados aumentarán. Del mismo modo que un médico experimentado sabe diagnosticar una enfermedad y recetar un tratamiento en función de la gravedad del mal, nosotros debemos someternos al proceso de expiación adecuado a la gravedad de nuestros pecados.

Significado

Los dharma-śāstras, como la Manu-saṁhitā, establecen que si un hombre comete un asesinato, debe ser ahorcado, de modo que expíe su crimen con el sacrificio de su propia vida. En el pasado, este era el sistema vigente en todo el mundo; pero con el aumento del ateísmo, la pena capital está siendo abolida. Eso no es muy inteligente. En este verso se dice que el médico que sabe diagnosticar la gravedad de un mal, también sabe recetar las medicinas adecuadas. Si la enfermedad es muy grave, la medicina tiene que ser fuerte. El peso del pecado de un asesino es muy grande; por lo tanto, según la Manu-saṁhitā, los homicidas deben ser ajusticiados. El gobierno que ejecuta a un asesino se muestra misericordioso con él, pues, si no fuese ajusticiado en esta vida, tendría que ser matado y sufrir muchas veces en vidas futuras. La gente, que nada sabe de la siguiente vida ni de los complicados engranajes de la naturaleza, elabora sus propias leyes; sin embargo, sería mejor que consultasen debidamente los mandamientos establecidos en los śāstras y actuasen conforme a ellos. En la India, todavía hoy es frecuente que la comunidad hindú siga el consejo de eruditos expertos con respecto al modo de neutralizar las actividades pecaminosas. También en el cristianismo existe un proceso de confesión y penitencia. Por lo tanto, la expiación es necesaria, y debe llevarse a cabo en función de la gravedad de los pecados cometidos.

Texto

śrī-rājovāca
dṛṣṭa-śrutābhyāṁ yat pāpaṁ
jānann apy ātmano ’hitam
karoti bhūyo vivaśaḥ
prāyaścittam atho katham

Palabra por palabra

śrī-rājā uvāca — Parīkṣit Mahārāja contestó; dṛṣṭa — por ver; śrutābhyām — también por escuchar (de las Escrituras o libros de leyes); at — puesto que; pāpam — acto criminal, pecaminoso; jānan — conociendo; api — aunque; ātmanaḥ — de su ser; ahitam — dañino; karoti — actúa; bhūyaḥ — una y otra vez; vivaśaḥ — sin poder controlarse; prāyaścittam — expiación; atho — por lo tanto; katham — de qué sirve.

Traducción

Mahārāja Parīkṣit dijo: Sabemos que las actividades pecaminosas son dañinas, pues en la vida real vemos que los delincuentes son castigados por el gobierno y reciben el rechazo de la gente; también las Escrituras y los sabios eruditos nos indican que, si cometemos actos pecaminosos, en la siguiente vida seremos arrojados a los tormentos del infierno. Sin embargo, a pesar de ese conocimiento, nos vemos forzados una y otra vez a incurrir en pecados, incluso después de realizar actos de expiación. ¿De qué sirve entonces esa expiación?

Significado

En algunos grupos religiosos, el pecador acude a un sacerdote, confiesa sus pecados, paga una sanción, y denuevo vuelve a cometer y a confesar los mismos pecados. Esta es la conducta de los pecadores profesionales. Las observaciones de Parīkṣit Mahārāja indican que también hace cinco mil años era frecuente que los criminales expiasen sus delitos para de nuevo volver a cometerlos, como si algo les forzara a hacerlo. Por esa razón, Parīkṣit Mahārāja, basándose en su propia experiencia, veía que el proceso de pecar y expiar el pecado una y otra vez carece de sentido. Por muchos castigos que reciba, la persona apegada al disfrute de los sentidos cometerá actos pecaminosos una y otra vez, hasta que sea educada y aprenda la forma de abstenerse del disfrute de los sentidos. En el verso se emplea la palabra vivaśa, que indica que, incluso si no deseamos realizar actos pecaminosos, el hábito adquirido nos obligará a cometerlos. Por esa razón, Parīkṣit Mahārājaconsideró que el proceso de expiación no servía de mucho para salvarnos de las actividades pecaminosas. En el siguiente verso explica con más detalle las razones que le llevan a rechazar ese proceso.

Texto

kvacin nivartate ’bhadrāt
kvacic carati tat punaḥ
prāyaścittam atho ’pārthaṁ
manye kuñjara-śaucavat

Palabra por palabra

kvacit — a veces; nivartate — deja de; abhadrāt — de actividad pecaminosa; kvacit — a veces; carati — comete; tat — esa (actividad pecaminosa); punaḥ — de nuevo; prāyaścittam — el proceso de expiación; atho — por eso; apārtham — inútil; manye — yo considero; kuñjara-śaucavat — igual que el baño del elefante.

Traducción

A veces, una persona muy atenta a no cometer actos pecaminosos, vuelve a caer víctima del pecado. Por esa razón, ese proceso de sucesivos pecados y expiaciones me parece inútil. Es como el baño del elefante, que se mete en el agua para limpiarse y darse un baño, pero tan pronto como regresa a la orilla se arroja tierra sobre el cuerpo y la cabeza.

Significado

Ante la pregunta de Parīkṣit Mahārāja acerca de cómo puede liberarse el ser humano de las actividades pecaminosas, para no verse forzado a caer a los sistemas planetarios infernales después de morir, Śukadeva Gosvāmī respondió que el proceso para neutralizar la vida pecaminosa es la expiación. De ese modo, Śukadeva Gosvāmī puso a prueba la inteligencia de Mahārāja Parīkṣit, y este pasó el examen al negarse a aceptar que ese proceso fuera genuino. Parīkṣit Mahārāja está ahora esperando otra respuesta de su maestro espiritual, Śukadeva Gosvāmī.

Texto

śrī-bādarāyaṇir uvāca
karmaṇā karma-nirhāro
na hy ātyantika iṣyate
avidvad-adhikāritvāt
prāyaścittaṁ vimarśanam

Palabra por palabra

śrī-bādarāyaṇiḥ uvāca — Śukadeva Gosvāmī, el hijo de Vyāsadeva, contestó; karmaṇā — con actividades fruitivas; karma-nirhāraḥ — neutralización de actividades fruitivas; na — no; hi — en verdad; ātyantikaḥ — final; iṣyate — resulta posible; avidvat-adhikāritvāt — de carecer de conocimiento; prāyaścittam — verdadera expiación; vimarśanam — conocimiento completo del Vedānta.

Traducción

Śukadeva Gosvāmī, el hijo de Vedavyāsa, contestó: Mi querido rey, los actos destinados a neutralizar las acciones impías también son fruitivos, de modo que no van a liberarnos de la tendencia a la actividad fruitiva. Las personas que se someten a las reglas y regulaciones de la expiación no son nada inteligentes. En verdad, se hallan bajo la influencia de la ignorancia. Para quien no esté libre de la modalidad de la ignorancia, los intentos de neutralizar una acción con otra acción son inútiles, pues eso no arrancará la raíz de sus deseos. Así, aunque superficialmente parezca piadosa, esa persona manifestará, sinlugar a dudas, la tendencia a las actividades impías. Por lo tanto, la verdadera expiación es la iluminación en el conocimiento perfecto, el Vedānta, que nos permite entender la Verdad Absoluta Suprema.

Significado

El guru, Śukadeva Gosvāmī, ha puesto a prueba a Parīkṣit Mahārāja, y parece ser que el rey ha superado una fase del examen, al rechazar el proceso de expiación teniendo en cuenta las actividades fruitivas en él implícitas. Śukadeva Gosvāmī propone ahora el nivel del conocimiento especulativo. Pasando de karma-kāṇḍa jñāna-kāṇḍa, sugiere:prāyaścittaṁ vimarśanam: «La verdadera expiación es el conocimiento completo». Vimarśana se refiere al cultivo deconocimiento especulativo. En el Bhagavad-gītā, los karmīs, que carecen de conocimiento, son comparados a asnos. Dice Kṛṣṇa en el Bhagavad-gītā (7.15):

na māṁ duṣkṛtino mūḍhāḥ
prapadyante narādhamāḥ
māyayāpahṛta-jñānā
āsuraṁ bhāvam āśritāḥ

«Esos malvados sumamente necios, que son lo más bajo de la humanidad, a quienes la ilusión les ha robado el conocimiento, y que participan de la naturaleza atea de los demonios, no se entregan a Mí». Los karmīs que se ocupan en actospecaminosos y no conocen el verdadero objetivo de la vida reciben el calificativo de mūḍhas, asnos. La palabra vimarśana, sin embargo, se explica también en el Bhagavad-gītā (15.15), donde Kṛṣṇa dice: vedaiś ca sarvair aham eva vedyaḥ: El objetivo del estudio de los Vedas es comprender a la Suprema Personalidad de Dios. Quien estudia el Vedānta pero no comprende al Señor Supremo, y se limita a un cierto progreso en el conocimiento especulativo, sigue siendo el mismo mūḍha. Como se afirma en el Bhagavad-gītā (7.19), verdadero conocimiento es el que obtiene quien comprende a Kṛṣṇa y se entrega a Él (bahūnāṁ janmanām ante jñānavān māṁ prapadyate). Por lo tanto, para alcanzar la sabiduría y liberarnos de la contaminación material, debemos tratar de entender a Kṛṣṇa, pues de ese modo nos liberaremos, inmediatamente, de todas las actividades piadosas e impías, y de sus correspondientes reacciones.

Texto

nāśnataḥ pathyam evānnaṁ
vyādhayo ’bhibhavanti hi
evaṁ niyamakṛd rājan
śanaiḥ kṣemāya kalpate

Palabra por palabra

na — no; aśnataḥ — aquellos que comen; pathyam — adecuados; eva — en verdad; annam — alimentos; vyādhayaḥ — enfermedades de distintos tipos; abhibhavanti — superadas; hi — en verdad; evam — de manera similar; niyama-kṛt — quien sigue los principios regulativos; rājan — ¡oh, rey!; śanaiḥ — poco a poco; kṣemāya — para el bienestar; kalpate — se capacita.

Traducción

Mi querido rey, si un enfermo sigue la dieta pura y no contaminada prescrita por el médico, poco a poco llegará a curarse, y se verá libre de la infección de la enfermedad. Del mismo modo, si seguimos los principios regulativos del conocimiento, poco a poco avanzaremos hasta liberarnos de la contaminación material.

Significado

Si una persona cultiva conocimiento, aunque se base en la especulación mental, y sigue estrictamente los principios regulativos que se establecen en los śāstras y que se explican en el siguiente verso, poco a poco llega a purificarse. Por lo tanto, el plano del jñāna, o conocimiento especulativo, está por encima del plano del karma, o acción fruitiva. Desde el plano del karma hay muchísimas posibilidades de caer a condiciones infernales, pero la persona establecida en el nivel deljñāna se salva de la vida infernal, aunque todavía no está completamente libre de la infección. La dificultad estriba en que, cuando nos situamos en el plano del jñāna, pensamos que nos hemos liberado y nos hemos vuelto Nārāyaṇa, Bhagavān. Esa es otra fase de la ignorancia.

ye ’nye ’ravindākṣa vimukta-māninas
tvayy asta-bhāvād aviśuddha-buddhayaḥ
āruhya kṛcchreṇa paraṁ padaṁ tataḥ
patanty adho ’nādṛta-yuṣmad-aṅghrayaḥ

(Bhāg. 10.2.32)

La ignorancia lleva a la persona a especular y considerarse liberada de la contaminación material sin realmente estarlo. Por lo tanto, como no se refugia en los pies de loto de Kṛṣṇa, acaba cayendo, incluso si se eleva hasta el nivel de brahma-jñāna, elnivel de comprensión del Brahman. No obstante, los jñānīs por lo menos saben distinguir entre lo pecaminoso y lo piadoso, y actúan con gran prudencia conforme a los mandamientos de los śāstras.

Texto

tapasā brahmacaryeṇa
śamena ca damena ca
tyāgena satya-śaucābhyāṁ
yamena niyamena vā
deha-vāg-buddhijaṁ dhīrā
dharmajñāḥ śraddhayānvitāḥ
kṣipanty aghaṁ mahad api
veṇu-gulmam ivānalaḥ

Palabra por palabra

tapasā — mediante la austeridad o rechazo voluntario del disfrute material; brahmacaryeṇa — con el celibato (la primera austeridad); śamena — mediante el control de la mente; ca — y; damena — mediante el perfecto control de los sentidos; ca — y; tyāgena — con donaciones voluntarias de caridad para buenas causas; satya — mediante la veracidad; śaucābhyām — y porseguir los principios regulativos para mantener la limpieza externa e interna; yamena — evitando las maldiciones y la violencia; niyamena — con el canto regular del santo nombre del Señor; — y; deha-vāk-buddhi-jam — cometidos con el cuerpo, las palabras y la inteligencia; dhīrāḥ — las personas sobrias; dharma-jñāḥ — perfectamente imbuidos del conocimiento de los principios religiosos; śraddhayā anvitāḥ — dotadas de fe; kṣipanti — destruyen; agham — todo tipo de actividades pecaminosas; mahat api — aunque muy grandes y abominables; veṇu-gulmam — las enredaderas secas bajo los bambúes; iva — como; analaḥ — fuego.

Traducción

Para concentrar la mente, es necesario llevar una vida de celibato sin caer nunca. Es necesario someterse a la austeridad de abandonar voluntariamente el disfrute de los sentidos. Entonces hay que controlar la mente y los sentidos, ser caritativo, veraz, limpio, no violento, seguir los principios regulativos, y cantar con regularidad el santo nombre del Señor. De este modo, la persona sobria y fiel que conoce los principios religiosos se purifica temporalmente de todos los pecados cometidos con el cuerpo, las palabras y la mente. Esos pecados son como las hojas secas de las enredaderas al pie de los bambúes, quepueden ser quemadas por el fuego pero no pierden sus raíces, y vuelven a brotar a la primera oportunidad.

Significado

La palabra tapaḥ se explica en el smṛti-śāstrde la siguiente manera: manasaś cendriyāṇāṁ ca aikāgryaṁ paramaṁ tapaḥ: «El perfecto control de la mente y los sentidos y su concentración completa en un tipo de actividad se denomina tapaḥ». Nuestro movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa está enseñando la manera de concentrar la mente en el servicio devocional, lo cual constituye la forma de tapaḥ más elevada. La brahmacarya, la vida de celibato, comprende ocho aspectos: no hay que pensar en mujeres ni hablar acerca de la vida sexual; tampoco se debe coquetear con mujeres, mirarlas con lujuria, hablarles íntimamente o decidir ocuparse en relaciones sexuales; se deben evitar también los esfuerzos por ocuparse en el acto sexual, y el acto propiamente dicho. Es decir, ni siquiera hay que pensar en mujeres o mirarlas, y mucho menos hablar con ellas. Eso es lo que se denomina brahmacarya en su más pura expresión. Si unbrahmacārī o un sannyāsī hablan con una mujer a solas, siempre cabe la posibilidad de que tengan relaciones sexuales sin que nadie lo sepa. Por esa razón, el brahmacārī íntegro hace exactamente lo contrario. El brahmacārī perfecto no tiene dificultad en controlar la mente y los sentidos, es caritativo, veraz, etc. Sin embargo, para empezar es necesario controlar la lengua y el hábito de comer.

En la senda del servicio devocional, bhakti-mārga, hay que seguir estrictamente los principios regulativos, comenzando porcontrolar la lengua (sevonmukhe hi jihvādau svayam eva sphuraty adaḥ). La lengua (jihvā) se puede controlar con el canto del mahā-mantra Hare Kṛṣṇa, hablando solamente de temas relacionados con Kṛṣṇa, y absteniéndose por completo de alimentos que no hayan sido ofrecidos a Kṛṣṇa. Este control de la lengua nos permitirá seguir de modo natural labrahmacarya y demás procesos purificadores. En el verso siguiente se explica que la senda del servicio devocional es completamente perfecta, de modo que es superior a las sendas de las actividades fruitivas y del conocimiento. Śrīla Vīrarāghava Ācārya cita los Vedas para explicar que la austeridad supone la práctica de ayunos lo más completos posible (tapasānāśakena). También Śrīla Rūpa Gosvāmī nos advierte de que comer demasiado, atyāhāra, es un obstáculo en el progreso de la vida espiritual. Y en el Bhagavad-gītā (6.17), Kṛṣṇa dice además:

yuktāhāra-vihārasya
yukta-ceṣṭasya karmasu
yukta-svapnāvabodhasya
yogo bhavati duḥkha-hā

«Aquel que es regulado en sus hábitos de comer, dormir, trabajar y recrearse, puede mitigar los sufrimientos materiales mediante la práctica del sistema de yoga».

En el texto 14 es muy significativa la palabra dhīrāḥ, que significa «aquellos que permanecen imperturbables en toda circunstancia». En el Bhagavad-gītā (2.14), Kṛṣṇa dice a Arjuna:

mātrā-sparśās tu kaunteya
śītoṣṇa-sukha-duḥkha-dāḥ
āgamāpāyino ’nityās
tāṁs titikṣasva bhārata

«¡Oh, hijo de Kuntī!, la aparición temporal de la felicidad y la aflicción, y su desaparición a su debido tiempo, son como la aparición y desaparición de las estaciones del invierno y el verano. Tienen su origen en la percepción de los sentidos, ¡oh, vástago de Bhārata!, y hay que aprender a tolerarlas sin perturbarse». En la vida material estamos sujetos a muchas perturbaciones (adhyātmikaadhidaivika adhibhautika). Quien ha aprendido a tolerar esas perturbaciones en toda circunstancia recibe el nombre de dhīra.

Texto

kecit kevalayā bhaktyā
vāsudeva-parāyaṇāḥ
aghaṁ dhunvanti kārtsnyena
nīhāram iva bhāskaraḥ

Palabra por palabra

kecit — algunas personas; kevalayā bhaktyā — con la práctica de servicio devocional; vāsudeva — al Señor Kṛṣṇa, la omnipresente Suprema Personalidad de Dios; parāyaṇāḥ — completamente apegada (solo a ese servicio, sin depender de la austeridad, la penitencia, el cultivo de conocimiento o las actividades piadosas); agham — todo tipo de reacciones pecaminosas; dhunvanti — destruyen; kārtsnyena — por completo (sin posibilidad de que los deseos pecaminosos revivan); nīhāram — niebla; iva — como; bhāskaraḥ — el Sol.

Traducción

Raro es hallar a una persona que haya emprendido el servicio devocional de Kṛṣṇa de modo completo y puro; solo ella puede arrancar las malas hierbas de la acción pecaminosa sin posibilidad de que revivan. Para hacerlo, le basta con ocuparse en servicio devocional, del mismo modo que el sol puede disipar inmediatamente la niebla con sus rayos.

Significado

En el verso anterior, Śukadeva Gosvāmī dio el ejemplo de las hojas secas de las enredaderas que crecen al pie de los bambúes; esas hojas, aunque sean reducidas a cenizas por el fuego, acaban brotando de nuevo, debido a que su raíz sigue viva en el suelo. Análogamente, en el corazón de la persona que cultiva conocimiento pero que no goza del sabor del servicio devocional, los deseos pecaminosos pueden reaparecer en cualquier momento, ya que su raíz no ha sido destruida. Como se afirma en el Śrīmad-Bhāgavatam (10.14.4):

śreyaḥ-sṛtiṁ bhaktim udasya te vibho
kliśyanti ye kevala-bodha-labdhaye

Los especuladores realizan grandes esfuerzos por lograr una meticulosa comprensión del mundo material, y para ello distinguen entre las actividades piadosas y las actividades pecaminosas; sin embargo, como no están situados en el plano del servicio devocional, tienen tendencia a las actividades fruitivas, de modo que pueden caer y complicarse en esas actividades. Sin embargo, los deseos de disfrute material de quien se apega al servicio devocional se extinguen naturalmente, sin necesidad de esfuerzos específicos. Bhaktiḥ pareśānubhavo viraktir anyatra ca: A la persona avanzada en conciencia de Kṛṣṇa, las actividades materiales, tanto pecaminosas como piadosas, le resultan naturalmente desagradables. Esto demuestra si una persona se encuentra en estado de conciencia de Kṛṣṇa o no. Ambas actividades, piadosas e impías, se deben enrealidad a la ignorancia, pues la entidad viviente, como sirviente eterno de Kṛṣṇa, no tiene necesidad de actuar por la complacencia de sus propios sentidos. Por esa razón, tan pronto como vuelve al plano del servicio devocional, abandona su apego por las actividades pías e impías y centra su interés exclusivamente en lo que satisface a Kṛṣṇa. Este proceso, elbhakti, el servicio devocional de Kṛṣṇa (vāsudeva-parāyaṇa), nos libera de las reacciones de todas las actividades.

Mahārāja Parīkṣit era un gran devoto, de modo que podría no sentirse satisfecho con las respuestas de su guru, ŚukadevaGosvāmī, en relación con karma-kāṇḍa jñāna-kāṇḍa. Conociendo perfectamente el corazón de su discípulo, su guru, Śukadeva Gosvāmī, le explicó la felicidad trascendental del servicio devocional. La palabra kecit, que se emplea en esteverso, significa «algunas personas, pero no todos». No todo el mundo puede llegar al estado de conciencia de Kṛṣṇa. En elBhagavad-gītā (7.3), Kṛṣṇa explica:

manuṣyāṇāṁ sahasreṣu
kaścid yatati siddhaye
yatatām api siddhānāṁ
kaścin māṁ vetti tattvataḥ

«De entre muchos miles de hombres, puede que uno se esfuerce por alcanzar la perfección; y de entre aquellos que han logrado la perfección, dificilmente uno Me conoce en verdad». Prácticamente nadie conoce a Kṛṣṇa tal y como es, pues Kṛṣṇa no puede ser comprendido ni por medio de actividades piadosas ni con el logro del conocimiento especulativo más elevado. En realidad, el conocimiento más elevado consiste en comprender a Kṛṣṇa. Las personas sin inteligencia que no comprenden a Kṛṣṇa se sienten enormemente orgullosas, pensando que están liberadas o que se han vuelto Kṛṣṇa o Nārāyaṇa. Eso es ignorancia.

Śrīla Rūpa Gosvāmī, para indicar la pureza del bhakti, del servicio devocional, dice en el Bhakti-rasāmṛta-sindhu (1.1.11):

anyābhilāṣitā-śūnyaṁ
jñāna-karmādy-anāvṛtam
ānukūlyena kṛṣṇānu-
śīlanaṁ bhaktir uttamā

«El servicio amoroso trascendental al Supremo Señor Kṛṣṇa debe ofrecerse con actitud favorable y sin deseo de obtener beneficios materiales de las actividades fruitivas ni de la especulación filosófica. Eso recibe el nombre de servicio devocionalpuro». Śrīla Rūpa Gosvāmī añade que el bhakti es kleśaghnī śubhadā; esto significa que, al emprender la senda del servicio devocional, desaparecen por completo los esfuerzos innecesarios y los sufrimientos materiales de todo tipo, de modo que alcanzamos toda buena fortuna. El bhakti es tan poderoso que de él se dice que es mokṣa-laghutākṛt; en otras palabras, hace que la liberación pierda toda importancia.

Los no devotos, debido a su tendencia a cometer actividades fruitivas pecaminosas, tienen que padecer penalidades materiales. Debido a la ignorancia, el deseo de cometer actos pecaminosos permanece en sus corazones. Esos actos pecaminosos se dividen en tres categorías: pātakamahā-pātaka atipātaka, y en dos clases: prārabdha aprārabdha.Prārabdha se refiere a las reacciones pecaminosas por las que sufrimos en el presente, y aprārabdha son las fuentes de posibles sufrimientos futuros. Cuando las semillas (bīja) de las reacciones pecaminosas no han dado aún su fruto, las reacciones se denominan aprārabdha. Esas semillas de la acción pecaminosa, aunque son invisibles, son ilimitadas, y nadie puede determinar el momento en que se sembraron. Prārabdha, las reacciones pecaminosas que ya han dado fruto, son la causa del nacimiento en familias de baja clase y de las demás miserias que padecemos.

Sin embargo, cuando emprendemos la senda del servicio devocional, todas las fases de la vida pecaminosa, prārabdha,aprārabdha y bīja incluidas, quedan destruidas. En el Śrīmad-Bhāgavatam (11.14.19), el Señor Kṛṣṇa dice a Uddhava:

yathāgniḥ susamṛddhārciḥ
karoty edhāṁsi bhasmasāt
tathā mad-viṣayā bhaktir
uddhavaināṁsi kṛtsnaśaḥ

«Mi querido Uddhava, el servicio devocional relacionado conmigo es como un fuego ardiente que reduce a cenizas todo elcombustible de actividades pecaminosas que se le eche». La forma en que el servicio devocional acaba con las reacciones de la vida pecaminosa se explica en el Śrīmad-Bhāgavatam, en el pasaje en que el Señor Kapiladeva está instruyendo a Su madre, Devahūti. En uno de los versos (3.33.6), Devahūti dice:

yan-nāmadheya-śravaṇānukīrtanād
yat-prahvaṇād yat-smaraṇād api kvacit
śvādo ’pi sadyaḥ savanāya kalpate
kutaḥ punas te bhagavan nu darśanāt

«Mi querido Señor, si incluso una persona nacida en familia de comedores de perros, por el simple hecho de escuchar y repetir el canto de Tus glorias, ofrecerte respetos y recordarte, de inmediato llega a ser más elevado que un brāhmaṇa y se capacita para ejecutar sacrificios, ¿qué puede decirse entonces de aquel que Te ha visto directamente?».

En el Padma Purāṇa se afirma que las personas cuyos corazones están siempre apegados al servicio devocional del Señor Viṣṇu se liberan de inmediato de todas las reacciones de la vida pecaminosa. Esas reacciones, por lo general, se manifiestan en cuatro fases. Algunas están a punto de producir resultados, otras están en forma de semillas, otras permanecen sin manifestar, y algunas ya están produciendo su fruto. El servicio devocional anula de inmediato todas esas reacciones. Cuando en el corazón está presente el servicio devocional, los deseos de realizar actividades pecaminosas no encuentran lugar en él. La vida pecaminosa se debe a la ignorancia, que significa olvidar nuestra posición constitucional como sirvientes eternos de Dios. Sin embargo, en el estado de conciencia de Kṛṣṇa plena, comprendemos que somos sirvientes eternos de Dios.

En relación con esto, Śrīla Jīva Gosvāmī comenta que el bhakti puede dividirse en dos clases: (1) santatā, el servicio devocional que persiste sin interrupción, con fe y amor, y (2) kādācitkī, el servicio devocional que no persiste sin interrupción, pero que a veces cobra vida. El servicio devocional que fluye sin cesar (santatā) también puede dividirse en dos categorías: (1) servicio realizado con un ligero apego, y (2) servicio devocional espontáneo. A su vez, el servicio devocional intermitente (kādācitkī) puede dividirse en tres: (1) rāgābhāsamayī, el servicio devocional muy próximo al apego, (2) rāgābhāsa-śūnya-svarūpa-bhūtā, el servicio devocional en que no hay amor espontáneo pero sí un gusto por la posición constitucional de servicio, y (3) ābhāsa-rūpā, un ligero vislumbre de servicio devocional. En cuanto a la expiación, el más leve vislumbre deservicio devocional que se haya alcanzado deja fuera de lugar la necesidad de emprender el proceso de expiación,prāyaścitta. Por consiguiente, cuando se ha obtenido el amor espontáneo, o, en un nivel más elevado, el apego con amor, característicos del progreso en kādācitkī, la expiación es sin duda innecesaria. Las reacciones de la vida pecaminosa quedan arrancadas y destruidas incluso en la etapa de ābhāsa-rūpā bhakti. En opinión de Śrīla Jīva Gosvāmī, la palabra kārtsnyena significa que, incluso si existe el deseo de cometer actividades pecaminosas, ābhāsa-rūpā bhakti es suficiente para destruir las raíces de ese deseo. Es muy apropiado el ejemplo de bhāskara, el Sol. El aspecto ābhāsa del bhakti se compara a las primeras luces del alba, y todas nuestras actividades pecaminosas se comparan a la niebla. Como la niebla no se extiende portodo el cielo, el Sol no necesita más que manifestar sus primeros rayos para hacerla desaparecer por completo. De manera similar, la más ligera relación con el servicio devocional destruye de inmediato toda la niebla de la vida pecaminosa.

Texto

na tathā hy aghavān rājan
pūyeta tapa-ādibhiḥ
yathā kṛṣṇārpita-prāṇas
tat-puruṣa-niṣevayā

Palabra por palabra

na — no; tathā — tanto; hi — ciertamente; agha-vān — un hombre lleno de actividades pecaminosas; rājan — ¡oh, rey!; pūyeta — puede purificarse; tapaḥ-ādibhiḥ — por seguir los principios de austeridad, penitencia, brahmacarya y demás procesos purificatorios; yathā — tanto como; kṛṣṇa-arpita-prāṇaḥ — el devoto cuya vida es consciente de Kṛṣṇa por entero; tat-puruṣa-niṣevayā — por ocupar su vida en el servicio del representante de Kṛṣṇa.

Traducción

Mi querido rey, una persona pecaminosa puede purificarse por completo si se ocupa en el servicio de un devoto genuino del Señor y aprende con él a dedicar su vida a los pies de loto de Kṛṣṇa. Nadie puede purificarse por el simple hecho de someterse a austeridades y penitencias, ni por seguir el proceso de brahmacarya o cualquier otro de los métodos de expiación que antes expliqué.

Significado

Tat-puruṣa se refiere a un predicador del proceso de conciencia de Kṛṣṇa, como el maestro espiritual. Śrīla Narottama dāsa Ṭhākura ha dicho: chāḍiyā vaiṣṇava-sevā nistāra pāyeche kebā: «¿Quién puede liberarse de las garras de māyā sin servir a un maestro espiritual genuino, a un vaiṣṇava ideal?». Esta idea se expresa también en muchos otros pasajes de las Escrituras. El Śrīmad-Bhāgavatam (5.5.2) dice: mahat-sevāṁ dvāram āhur vimukteḥ: Quien desee liberarse de las garras de māyā debe relacionarse con un devoto puro, un mahātmāMahātmā es aquel que se ocupa las veinticuatro horas del día en el servicio amoroso del Señor. Como Kṛṣṇa dice en el Bhagavad-gītā (9.13):

mahātmānas tu māṁ pārtha
daivīṁ prakṛtim āśritāḥ
bhajanty ananya-manaso
jñātvā bhūtādim avyayam

«¡Oh, hijo de Pṛthā!, aquellos que no están bajo la ilusión, las grandes almas, se hallan bajo la protección de la naturalezadivina. Están plenamente ocupados en el servicio devocional, porque saben que Yo soy la Suprema Personalidad de Dios, original e inagotable». El mahātmā, por lo tanto, se caracteriza por su dedicación exclusiva al servicio de Kṛṣṇa. Si queremos liberarnos de las reacciones pecaminosas, despertar nuestra conciencia de Kṛṣṇa original y aprender el modo de amar a Kṛṣṇa, debemos ofrecer servicio a un vaiṣṇava. Ese es el resultado de mahātmā-sevā. Por supuesto, si nos ocupamos en el servicio de un devoto puro, las reacciones de nuestra vida pecaminosa quedarán inmediatamente destruidas. El servicio devocional es necesario, pero no para deshacernos de un insignificante montón de pecados, sino para despertar nuestro latente amor por Kṛṣṇa. Del mismo modo que la niebla se disipa con el primer rayo de la luz del Sol, nuestras reacciones pecaminosas se desvanecen de modo natural tan pronto como nos dedicamos al servicio de un devoto puro; no se necesita ningún esfuerzo adicional.

La palabra kṛṣṇa-arpita-prāṇaḥ se refiere al devoto que dedica su vida a servir a Kṛṣṇa y no se preocupa por salvarse de la senda de la vida infernal. El devoto es nārāyaṇa-parāyaṇa, o vāsudeva-parāyaṇa; esto significa que la senda de Vāsudeva, la vía devocional, es su vida y su alma. Nārāyaṇa-parāḥ sarve na kutaścana bibhyati (Bhāg. 6.17.28): Puede ira cualquier lugar sin sentir ningún temor. Hay una senda que lleva a la liberación en los sistemas planetarios superiores, y otra que conduce a los planetas infernales; pero al devoto nārāyaṇa-para no le importa el lugar al que deba ir; simplemente desea recordar a Kṛṣṇa, allí donde se encuentre. A ese devoto no le preocupan ni el cielo ni el infierno; simplemente está apegado a ofrecer servicio a Kṛṣṇa. Cuando se encuentra en condiciones infernales, el devoto las acepta como misericordia de Kṛṣṇa: tat te 'nukampāṁ susamīkṣamāṇaḥ (Bhāg. 10.14.8). No se queja, diciendo: «¡Ay!, yo soy un gran devoto de Kṛṣṇa y no merezco estos sufrimientos», sino que piensa: «Esto es misericordia de Kṛṣṇa». Mantener esa actitud le es posible al devoto que se ocupa en el servicio del representante de Kṛṣṇa. Ese es el secreto del éxito.

Texto

sadhrīcīno hy ayaṁ loke
panthāḥ kṣemo ’kuto-bhayaḥ
suśīlāḥ sādhavo yatra
nārāyaṇa-parāyaṇāḥ

Palabra por palabra

sadhrīcīnaḥ — apropiada; hi — ciertamente; ayam — esta; loke — en el mundo; panthāḥ — senda; kṣemaḥ — auspiciosa; akutaḥ-bhayaḥ — sin temor; su-śīlāḥ — de buena conducta; sādhavaḥ — personas santas; yatra — de donde; nārāyaṇa-parāyaṇāḥ — aquellos que han emprendido la senda de Nārāyaṇa, el servicio devocional, considerándola su vida y su alma.

Traducción

La senda de los devotos puros, que manifiestan buen comportamiento y están plenamente dotados con las mejores cualidades, es, en verdad, la más auspiciosa del mundo material. Está libre de temor, y es autorizada por los śāstras.

Significado

Nadie debe pensar que si una persona emprende la senda del bhakti es porque no puede realizar las ceremonias rituales que se recomiendan en la sección karma-kāṇḍa de los Vedas, o porque su educación insuficiente no le permite especular acerca de temas espirituales. Los māyāvādīs sostienen que la senda del bhakti es para las mujeres y los analfabetos; pero esa acusación no tiene fundamento. El bhakti es la senda que han seguido los eruditos más grandes, como los Gosvāmīs, el Señor Caitanya Mahāprabhu y Rāmānujācārya. Ellos son los verdaderos seguidores de la vía del bhakti, y,tanto si somos cultos y aristocráticos como si no, debemos seguir sus pasos. Mahājano yena gataḥ sa panthāḥ: Debemos seguir la senda de los mahājanas, de aquellos que han emprendido el servicio devocional (suśīlāḥ sādhavo yatra nārāyaṇa-parāyaṇāḥ), pues esas grandes personalidades son las personas perfectas. Como se afirma en el Śrīmad-Bhāgavatam (5.18.12):

yasyāsti bhaktir bhagavaty akiñcanā
sarvair guṇais tatra samāsate surāḥ

«Aquel que tiene una devoción inquebrantable por la Suprema Personalidad de Dios posee todas las buenas cualidades de los semidioses». Los poco inteligentes, sin embargo, no aciertan a comprender la senda del bhakti, de modo que dicen que elbhakti es para quienes no pueden celebrar ceremonias rituales o dedicarse a la especulación filosófica. La palabrasadhrīcīnaḥ de este verso nos confirma que la senda más apropiada es el bhakti, y no las vías de karma-kāṇḍa jñāna-kāṇḍa. Puede que los māyāvādīs sean suśīlāḥ sādhavaḥ (personas santas de buen comportamiento), pero, sin embargo, es muy dudoso que estén realmente progresando; ello se debe a que no han aceptado la senda del bhakti. Por otro lado, aquellos que siguen la senda de los ācāryas son suśīlāḥ sādhavaḥ, pero además siguen una vía que es akuto-bhaya, es decir, está libre de temor. Libres de temor, debemos seguir a los doce mahājanas y su línea de sucesión discipular, para, de ese modo, liberarnos de las garras de māyā.

Texto

prāyaścittāni cīrṇāni
nārāyaṇa-parāṅmukham
na niṣpunanti rājendra
surā-kumbham ivāpagāḥ

Palabra por palabra

prāyaścittāni — procesos de expiación; cīrṇāni — muy bien realizados; nārāyaṇa-parāṅmukham — un no devoto; na niṣpunanti — no puede purificarse; rājendra — ¡oh, rey!; surā-kumbham — una vasija de vino; iva — como; āpa-gāḥ — las aguas de los ríos.

Traducción

Mi querido rey, del mismo modo que una vasija de vino no se purifica ni después de lavarla en las aguas de muchos ríos, los no devotos no pueden purificarse mediante procesos de expiación, por muy bien que los realicen.

Significado

Para beneficiarse de los métodos de expiación, es necesario poseer, por lo menos, un poquito de devoción; delo contrario, no hay posibilidad de purificarse. Este verso deja bien claro que, sin un mínimo de devoción, quienes siguen los procesos de karma-kāṇḍa jñāna-kāṇḍa no podrán purificarse por el mero hecho de hacerlo. La palabra prāyaścittāni aparece en plural para referirse a las dos sendas, karma-kāṇḍa jñāna-kāṇḍa. En relación con esto, Narottama dāsa Ṭhākura dice: karma-kāṇḍa, jñāna-kāṇḍa, kevala viṣera bhāṇda; en ese verso compara las sendas de karma-kāṇḍa yjñāna-kāṇḍa con dos frascos de veneno. Las bebidas alcohólicas y el veneno entran en la misma categoría. Según este verso del Śrīmad-Bhāgavatam, la persona que ha escuchado durante mucho tiempo acerca de la senda del servicio devocional, pero sigue sin apegarse a ella y no es consciente de Kṛṣṇa, es como una vasija llena de vino. Sin un mínimo de servicio devocional, esa persona no podrá purificarse.

Texto

sakṛn manaḥ kṛṣṇa-padāravindayor
niveśitaṁ tad-guṇa-rāgi yair iha
na te yamaṁ pāśa-bhṛtaś ca tad-bhaṭān
svapne ’pi paśyanti hi cīrṇa-niṣkṛtāḥ

Palabra por palabra

sakṛt — una vez solamente; manaḥ — la mente; kṛṣṇa-pada-aravindayoḥ — a los dos pies de loto de Kṛṣṇa; niveśitam — completamente entregada; tat — de Kṛṣṇa; guṇa-rāgi — que de alguna forma está apegada a las cualidades, el nombre, la fama y los objetos; yaiḥ — por quien; iha — en este mundo; na — no; te — esas personas; yamam — Yamarāja, el superintendente de la muerte; pāśa-bhṛtaḥ — quienes llevan cuerdas (para apresar a los pecadores); ca — y; tat — sus; bhaṭān — enviados; svapne api — ni siquiera en sueños; paśyanti — ven; hi — en verdad; cīrṇa-niṣkṛtāḥ — que han realizado el tipo correcto de expiación.

Traducción

Las personas que se han entregado por completo a los pies de loto de Kṛṣṇa al menos una vez y sienten atracción por Su nombre, forma, cualidades y pasatiempos, aunque quizás no hayan llegado a una comprensión plena de Kṛṣṇa, están completamente libres de reacciones pecaminosas, pues, han adoptado el verdadero método de expiación. Esas almasentregadas no se encuentran, ni siquiera en sueños, con Yamarāja ni sus enviados, que llevan cuerdas para atar a los pecadores.

Significado

En el Bhagavad-gītā (18.66), Kṛṣṇa dice:

sarva-dharmān parityajya
mām ekaṁ śaraṇaṁ vraja
ahaṁ tvāṁ sarva-pāpebhyo
mokṣayiṣyāmi mā śucaḥ

«Abandona toda clase de religión y sencillamente entrégate a Mí. Yo te liberaré de toda reacción pecaminosa. No temas». En este verso se explica el mismo principio (sakṛn manaḥ kṛṣṇa-padāravindayoḥ). Si, mediante el estudio del Bhagavad-gītā, decidimos entregarnos a Kṛṣṇa, de inmediato quedaremos libres de toda reacción pecaminosa. También es significativo el hecho de que Śukadeva Gosvāmī, tras repetir varias veces las palabras vāsudeva-parāyaṇa nārayaṇa-parāyaṇa, finalmente diga kṛṣṇa-padāravindayoḥ. De ese modo indica que Kṛṣṇa es el origen de Nārāyaṇa y de Vāsudeva. Aunque Nārāyaṇa y Vāsudeva no son diferentes de Kṛṣṇa, por el simple hecho de entregarnos a Kṛṣṇa también nos entregamos por completo a todas Sus expansiones, como Nārāyaṇa, Vāsudeva y Govinda. Como Kṛṣṇa dice en el Bhagavad-gītā (7.7):mattaḥ parataraṁ nānyat: «No hay verdad superior a Mí». La Suprema Personalidad de Dios tiene muchos nombres y muchas formas, pero la forma suprema es Kṛṣṇa (kṛṣṇas tu bhagavān svayam). Por esa razón, Kṛṣṇa recomienda a los devotos neófitos que se entreguen solamente a Él (mām ekam). Como los devotos neófitos no pueden entender la naturaleza de las formas de Nārāyaṇa, Vāsudeva y Govinda, Kṛṣṇa dice directamente: mām ekam. Esto se subraya también en este verso con las palabras kṛṣṇa-padāravindayoḥ. Nārāyaṇa no habla personalmente, pero Kṛṣṇa, Vāsudeva, sí lo hace, como,por ejemplo, en el Bhagavad-gītā. Por consiguiente, seguir las directrices del Bhagavad-gītā es lo mismo que entregarse a Kṛṣṇa, y esa entrega es la perfección más elevada del bhakti-yoga.

Parīkṣit Mahārāja ha preguntado a Śukadeva Gosvāmī cómo podemos salvarnos de caer a las diversas condiciones de vida infernal, y en este verso, Śukadeva Gosvāmī responde que un alma que se ha entregado a Kṛṣṇa no puede caer a la existencia infernal, naraka. Y no solo eso: no verá a Yamarāja y a sus enviados, que son quienes podrían llevarla allí, ni siquiera en sueños. En otras palabras, quien desee salvarse de caer a la vida infernal, naraka, debe entregarse plenamente a Kṛṣṇa. La palabra sakṛt es significativa porque indica que una sola vez que nos entreguemos sinceramente a Kṛṣṇa es suficiente para salvarnos, incluso si por casualidad caemos de nuevo en actividades pecaminosas. Por eso Kṛṣṇa dice en el Bhagavad-gītā (9.30):

api cet su-durācāro
bhajate mām ananya-bhāk
sādhur eva sa mantavyaḥ
samyag vyavasito hi saḥ

«Aunque alguien cometa la acción más abominable, si está ocupado en servicio devocional, debe ser considerado un santo, pues está apropiadamente situado en su determinación». Aquel que no olvida a Kṛṣṇa ni por un momento, está a salvo, incluso si, por casualidad, cae en actividades pecaminosas.

En el segundo capítulo del Bhagavad-gītā (2.40), el Señor dice también:

nehābhikrama-nāśo ’sti
pratyavāyo na vidyate
svalpam apy asya dharmasya
trāyate mahato bhayāt

«En este empeño no hay pérdida ni disminución, y un pequeño avance en esta senda puede proteger del más peligroso tipo de temor».

En otro pasaje del Gīta (6.40), el Señor dice: na hi kalyāṇa-kṛt kaścid durgatiṁ tāta gacchati: «Aquel que realiza actospiadosos nunca es vencido por el mal». La actividad kalyāṇa (auspiciosa) más elevada es entregarse a Kṛṣṇa. Esa es la única senda que nos permite salvarnos de caer a la vida infernal. Esto lo confirma Śrīla Prabhodhānanda Sarasvatī de la siguiente manera:

kaivalyaṁ narakāyate tri-daśa-pūr ākāśa-puṣpāyate
durdāntendriya-kāla-sarpa-paṭalī protkhāta-daṁṣṭrāyate
viśvaṁ pūrṇa-sukhāyate vidhi-mahendrādiś ca kīṭāyate
yat-kāruṇya-kaṭākṣa-vaibhavavatāṁ taṁ gauram eva stumaḥ

(Caitanya-candrāmṛta 5)

Las actividades pecaminosas de aquel que se ha entregado a Kṛṣṇa se comparan a una serpiente que ha perdido sus venenosos colmillos (protkhāta-daṁṣṭrāyate). Esa serpiente ya no da miedo. Por supuesto, no debemos cometer actividades pecaminosas apoyándonos en el hecho de habernos entregado a Kṛṣṇa. No obstante, si llega a ocurrir que una persona que se ha entregado a Kṛṣṇa incurre en actos pecaminosos debido a sus hábitos pasados, esas acciones pecaminosas no tienen efectos destructivos. Por lo tanto, debemos apegarnos firmemente a los pies de loto de Kṛṣṇa y servirle bajo la dirección del maestro espiritual. De ese modo, estaremos libres de temor, akuto-bhaya, en toda circunstancia.

Texto

atra codāharantīmam
itihāsaṁ purātanam
dūtānāṁ viṣṇu-yamayoḥ
saṁvādas taṁ nibodha me

Palabra por palabra

atra — en relación con esto; ca — también; udāharanti — dan como ejemplo; imam — este; itihāsam — la historia (de Ajāmila); purātanam — que es muy antigua; dūtānām — de los enviados; viṣṇu — del Señor Viṣṇu; yamayoḥ — y de Yamarāja; saṁvādaḥ — la discusión; tam — esa; nibodha — trata de entender; me — de mí.

Traducción

En relación con esto, los sabios eruditos y las personas santas cuentan un episodio histórico muy antiguo, que trata de una discusión entre los enviados del Señor Viṣṇu y los de Yamarāja. Por favor, escucha mi relato.

Significado

A veces los hombres poco inteligentes menosprecian los Purāṇas, o historias antiguas, considerándolos mitológicos. En realidad, los relatos de los Purāṇas, las antiguas historias del universo, son reales, aunque no siguen orden cronológico. Los Purāṇas registran los hechos más importantes ocurridos durante muchos millones de años, no solo en esteplaneta, sino también en otros planetas del universo. Por esa razón, todos los sabios iluminados y eruditos védicos citan los episodios de los Purāṇas cuando hablan. Para Śrīla Rūpa Gosvāmī, los Purāṇas son tan importantes como los propiosVedas. En relación con esto, en el Bhakti-rasāmṛta-sindhu cita el siguiente verso del Brahma-yāmala:

śruti-smṛti-purāṇādi-
pañcarātra-vidhiṁ vinā
aikāntikī harer bhaktir
utpātāyaiva kalpate

«El servicio devocional que se ofrece al Señor ignorando Escrituras védicas autorizadas como los Upaniṣads, los Purāṇas y el Nārada-pañcarātra, no es más que un trastorno innecesario para la sociedad». El devoto de Kṛṣṇa no debe ceñirse exclusivamente a los Vedas, sino también a los Purāṇas. No hay que cometer la necedad de considerarlos mitológicos. Si fuesen mitológicos, Śukadeva Gosvāmī no se habría tomado la molestia de recitar los antiguos episodios históricos relacionados con la vida de Ajāmila. El comienzo de la historia es el siguiente.

Texto

kānyakubje dvijaḥ kaścid
dāsī-patir ajāmilaḥ
nāmnā naṣṭa-sadācāro
dāsyāḥ saṁsarga-dūṣitaḥ

Palabra por palabra

kānya-kubje — en la ciudad de Kānyakubja (Kanauj, una ciudad cercana a Kanpur); dvijaḥ — brāhmaṇa; kaścit — cierto; dāsī-patiḥ — el esposo de una prostituta o mujer de baja clase; ajāmilaḥ — Ajāmila; nāmnā — de nombre; naṣṭa-sat-ācāraḥ — que perdió todas las cualidades brahmínicas; dāsyāḥ — de la prostituta o sirvienta; saṁsarga-dūṣitaḥ — contaminado por la relación.

Traducción

En la ciudad de Kānyakubja vivía un brāhmaṇa llamado Ajāmila, que se casó con una criada que era prostituta, y que, por relacionarse con aquella mujer de baja clase, perdió todas sus cualidades brahmínicas.

Significado

Lo malo de la relación ilícita con mujeres es que nos hace perder todas las cualidades brahmínicas. En la India existe todavía hoy una clase de sirvientes, los śūdras, cuyas esposas reciben el nombre de śūdrāṇīs y suelen servir como criadas. A veces hay personas lujuriosas que establecen relaciones con esas mujeres, criadas y barrenderas, pues entre las clases sociales superiores no pueden dar rienda suelta a sus hábitos mujeriegos, estrictamente prohibidos por las convenciones sociales. Ajāmila, un brāhmaṇa joven y bien cualificado, perdió todas sus cualidades brahmínicas por relacionarse con una prostituta; sin embargo, al final de su vida se salvó, debido a que con anterioridad había comenzado el proceso de bhakti-yoga. En un verso anterior, Śukadeva Gosvāmī ha hablado de la persona que se entrega, aunque solo sea una vez, a los pies de loto del Señor (manaḥ kṛṣṇa-padāravindayoḥ), o que simplemente comienza el proceso de bhakti-yoga. El bhakti-yoga comienza con śravaṇaṁ kīrtanaṁ viṣṇoḥ, la escucha y el canto de los nombres del Señor Viṣṇu, como en el mahā-mantra: Hare Kṛṣṇa, Hare Kṛṣṇa, Kṛṣṇa Kṛṣṇa, Hare Hare/ Hare Rāma, Hare Rāma, Rāma Rāma, Hare Hare. El canto es el comienzo del bhakti-yoga. Por esa razón, Śrī Caitanya Mahāprabhu declara:

harer nāma harer nāma
harer nāmaiva kevalam
kalau nāsty eva nāsty eva
nāsty eva gatir anyathā

«En esta era de riñas e hipocresía, el único modo de alcanzar la liberación consiste en cantar el santo nombre del Señor. No hay otra manera. No hay otra manera. No hay otra manera». El proceso de cantar el santo nombre del Señor siempre es extraordinariamente eficaz; pero en esta era de Kali, su eficacia es aún mayor. Śukadeva Gosvāmī ilustrará ahora esa eficacia práctica a través de la historia de Ajāmila, que fue liberado de manos de los yamadūtas por el simple hecho de cantar el santo nombre de Nārāyaṇa. En principio, Mahārāja Parīkṣit había preguntado cómo salvarse de caer en el infierno o en manos de losyamadūtas. Para responderle y convencer a Parīkṣit Mahārāja de la potencia del bhakti-yoga, que comienza con el simplecanto del santo nombre del Señor, Śukadeva Gosvāmī cita este viejo ejemplo histórico. Todas las grandes autoridades delbhakti-yoga recomiendan el proceso devocional que comienza con el canto del santo nombre de Kṛṣṇa (tan-nāma-grahaṇādibhiḥ).

Texto

bandy-akṣaiḥ kaitavaiś cauryair
garhitāṁ vṛttim āsthitaḥ
bibhrat kuṭumbam aśucir
yātayām āsa dehinaḥ

Palabra por palabra

bandī-akṣaiḥ — arrestar a alguien injustamente; kaitavaiḥ — engañar en el juego o en los dados; cauryaiḥ — cometer robos; garhitām — condenadas; vṛttim — profesiones; āsthitaḥ — que había adoptado (debido a su relación con una prostituta); bibhrat — mantener; kuṭumbam — a su esposa e hijos, que dependían de él; aśuciḥ — ser muy pecaminoso; yātayām āsa — hizo sufrir; dehinaḥ — a otras entidades vivientes.

Traducción

Aquel brāhmaṇa caído, Ajāmila, hacía sufrir a los demás; les arrestaba, les engañaba en el juego, o les asaltaba directamente. Esa fue su forma de ganarse el sustento y mantener a su esposa e hijos.

Significado

Este verso nos indica hasta qué punto se degrada una persona por el simple hecho de entregarse a la vida sexual ilícita con una prostituta. Con mujeres castas o aristocráticas no hay posibilidad de vida sexual ilícita; esas relaciones solo son posibles con śūdras poco castas. Cuanto más se permiten la prostitución y la vida sexual ilícita en la sociedad, mayor es el incentivo de los estafadores, ladrones, bandidos, borrachos y jugadores. Por lo tanto, lo primero que aconsejamos a todos los discípulos de este movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa es que eviten la vida sexual ilícita, que es por donde empieza toda vida abominable, y que trae consigo el consumo de carne, los juegos de azar y la ingestión de alcohol, drogas, etc. Por supuesto, la continencia es muy difícil; pero a quien se entrega por entero a Kṛṣṇa le resulta perfectamente posible, ya que, si es consciente de Kṛṣṇa, todos esos hábitos abominables poco a poco acaban resultándole desagradables. Sinembargo, la sociedad que permite el aumento de la vida sexual ilícita se condena a sí misma, pues se llena de bandidos, ladrones, estafadores. etc.

Texto

evaṁ nivasatas tasya
lālayānasya tat-sutān
kālo ’tyagān mahān rājann
aṣṭāśītyāyuṣaḥ samāḥ

Palabra por palabra

evam — de este modo; nivasataḥ — vivir; tasya — de él (Ajāmila); lālayānasya — mantener; tat — de ella (la śūdrāṇī); sutān — hijos; kālaḥ — tiempo; atyagāt — pasó; mahān — una gran cantidad; rājan — ¡oh, rey!; aṣṭāśītyā — ochenta y ocho; āyuṣaḥ — de la duración de la vida; samāḥ — años.

Traducción

Mi querido rey, en esas actividades pecaminosas y abominables destinadas a mantener a su numerosa familia, desperdició su tiempo hasta cumplir ochenta y ocho años.

Texto

tasya pravayasaḥ putrā
daśa teṣāṁ tu yo ’vamaḥ
bālo nārāyaṇo nāmnā
pitroś ca dayito bhṛśam

Palabra por palabra

tasya — de él (Ajāmila); pravayasaḥ — que era muy viejo; putrāḥ — hijos; daśa — diez; teṣām — de todos ellos; tu — pero; yaḥ — el que; avamaḥ — el más joven; bālaḥ — niño; nārāyaṇaḥ — Nārāyaṇa; nāmnā — de nombre; pitroḥ — de los padres; ca — y; dayitaḥ — querido; bhṛśam — muy.

Traducción

El viejo Ajāmila tenía diez hijos, el menor de los cuales era el pequeño Nārāyaṇa. Nārāyaṇa, al ser el menor de todos, era, de modo natural, muy querido por sus padres.

Significado

La palabra pravayasaḥ nos revela el carácter pecaminoso de Ajāmila, pues, a pesar de sus ochenta y ocho años, tenía un hijo muy pequeño. Según la cultura védica, al cumplir los cincuenta años hay que abandonar el hogar; no hay que seguir en casa procreando más hijos. La vida sexual se permite durante veinticinco años, entre los veinticinco y los cuarenta y cinco, o, a lo sumo, los cincuenta. A partir de esa edad, hay que abandonar el hábito sexual, irse del hogar para llevar vida de vānaprastha, y, finalmente, entrar en la orden de sannyāsa. Pero Ajāmila, debido a su relación con la prostituta, perdió toda su cultura brahmínica y fue un gran pecador, incluso en su supuesta vida de casado.

Texto

sa baddha-hṛdayas tasminn
arbhake kala-bhāṣiṇi
nirīkṣamāṇas tal-līlāṁ
mumude jaraṭho bhṛśam

Palabra por palabra

saḥ — él; baddha-hṛdayaḥ — estando muy apegado; tasmin — a ese; arbhake — niño pequeño; kala-bhāṣiṇi — que no podía hablar claramente, sino con palabras inconexas; nirīkṣamāṇaḥ — al ver; tat — sus; līlām — pasatiempos (como caminar y hablar a su padre); mumude — disfrutaba; jaraṭhaḥ — el viejo; bhṛśam — mucho.

Traducción

El anciano Ajāmila estaba muy apegado a los balbuceos del niño y a sus torpes movimientos. Siempre estaba cuidándole, y disfrutaba de sus actividades.

Significado

En este verso se menciona claramente que el pequeño Nārāyaṇa todavía no sabía hablar ni caminar bien. El anciano estaba muy apegado al niño; disfrutaba de sus actividades; y como el niño se llamaba Nārāyaṇa, siempre cantaba elsanto nombre de Nārāyaṇa. En realidad se dirigía a su hijo menor, y no al Nārāyaṇa original; pero el nombre de Nārāyaṇa es tan poderoso que, por el simple hecho de cantar el nombre de su hijo, Ajāmila se estaba purificando (harer nāma harer nāma harer nāmaiva kevalam). Por esta razón, Śrīla Rūpa Gosvāmī ha declarado que si nuestra mente se siente de alguna manera atraída por el santo nombre de Kṛṣṇa (tasmāt kenāpy upāyena manaḥ kṛṣṇe niveśayet), nos hallamos en la senda de la liberación. En la sociedad hindú, los padres tienen la costumbre de dar a sus hijos nombres como Kṛṣṇadāsa, Govinda dāsa, Nārāyaṇa dāsa y Vṛndāvana dāsa. De ese modo cantan los nombres de Kṛṣṇa, Govinda, Nārāyaṇa y Vṛndāvana y tienen posibilidad de purificarse.

Texto

bhuñjānaḥ prapiban khādan
bālakaṁ sneha-yantritaḥ
bhojayan pāyayan mūḍho
na vedāgatam antakam

Palabra por palabra

bhuñjānaḥ — mientras comía; prapiban — mientras bebía; khādan — mientras masticaba; bālakam — al niño; sneha-yantritaḥ — apegado con cariño; bhojayan — alimentar; pāyayan — dar algo de beber; mūḍhaḥ — el hombre necio; na — no; veda — entendía; āgatam — había llegado; antakam — la muerte.

Traducción

Mientras masticaba y comía su alimento, Ajāmila llamaba al niño para que comiera con él, y cuando bebía, lo llamaba para que también él bebiese. Siempre dedicado a cuidar del niño y a pronunciar su nombre, Nārāyaṇa, Ajāmila no se daba cuenta de que su tiempo se agotaba y la muerte se le echaba encima.

Significado

La Suprema Personalidad de Dios es bondadoso con el alma condicionada. Aquel hombre había olvidado por completo a Nārāyaṇa, pero, al llamar a su hijo, decía: «Nārāyaṇa, por favor, ven a comer esto», «Nārāyaṇa, por favor, ven a tomar la leche». Por esa razón, de una forma u otra se había apegado al nombre de Nārāyaṇa. Esto recibe el nombre deajñāta-sukṛti. Aunque llamaba a su hijo, sin darse cuenta estaba pronunciando el nombre de Nārāyaṇa; el santo nombre de la Suprema Personalidad de Dios tiene tanta potencia trascendental, que su canto estaba siendo registrado y tenido en cuenta.

Texto

sa evaṁ vartamāno ’jño
mṛtyu-kāla upasthite
matiṁ cakāra tanaye
bāle nārāyaṇāhvaye

Palabra por palabra

saḥ — ese Ajāmila; evam — así; vartamānaḥ — vivir; ajñaḥ — necio; mṛtyu-kāle — en la hora de la muerte; upasthite — llegó; matim cakāra — concentró su mente; tanaye — en su hijo; bāle — el niño; nārāyaṇa-āhvaye — cuyo nombre era Nārāyaṇa.

Traducción

Cuando le llegó la hora de la muerte, el necio Ajāmila pensaba solamente en su hijo Nārāyaṇa.

Significado

En el Segundo Canto del Śrīmad-Bhāgavatam (2.1.6), Śukadeva Gosvāmī dice:

etāvān sāṅkhya-yogābhyāṁ
svadharma-pariniṣṭhayā
janma-lābhaḥ paraḥ puṁsām
ante nārāyaṇa-smṛtiḥ

«La máxima perfección de la vida humana, ya sea que se logre mediante el conocimiento completo de la materia y del espíritu, mediante la adquisición de poderes místicos, o mediante el perfecto desempeño de los deberes prescritos, consiste en recordar a la Personalidad de Dios al final de la vida». Sea como fuere, Ajāmila cantó, consciente o inconscientemente, el nombre de Nārāyaṇa en el momento de la muerte (ante nārāyaṇa-smṛtiḥ); debido a ello, por el simple hecho de concentrar la mente en el nombre de Nārāyaṇa, alcanzó la perfección completa.

Otra cosa que se puede concluir es que Ajāmila, como era hijo de un brāhmaṇa, se había acostumbrado a adorar a Nārāyaṇa en su juventud, pues en todo hogar brahmínico se adora la nārāyaṇa-śīlā. En la India, ese sistema sigue todavía en vigor; la adoración de Nārāyaṇa, nārāyaṇa-sevā, está presente en todo hogar brahmínico estricto. De modo que el contaminado Ajāmila estaba llamando a su hijo, pero al concentrar su mente en el santo nombre de Nārāyaṇa, recordó al Nārāyaṇa que había adorado con gran fe en su juventud.

En relación con esto, Śrīla Śrīdhara Svāmī expresa su veredicto con las siguientes palabras: etac ca tad-upalālanādi-śrī-nārāyaṇa-namoccāraṇa-māhātmyena tad-bhaktir evābhūd iti siddhāntopayogitvenāpi draṣṭavyam: «Conforme albhaktisiddhānta, se debe concluir que Ajāmila se elevó al plano del bhakti, aun sin ser consciente de ello, gracias a su canto constante del nombre de su hijo, Nārāyaṇa». Del mismo modo, Śrīla Vīrarāghava Ācārya presenta la siguiente opinión: evaṁ vartamānaḥ sa dvijaḥ mṛtyu-kāle upasthite satyajño nārāyaṇākhye putra eva matiṁ cakāra matim āsaktām akarod ity arthaḥ: «Aunque estaba cantando el nombre de su hijo en el momento de la muerte, su mente se concentró en el santo nombre de Nārāyaṇa». Semejante es la opinión de Śrīla Vijayadhvaja Tīrtha:

mṛtyu-kāle deha-viyoga-lakṣaṇa-kāle mṛtyoḥ sarva-doṣa-pāpa-harasya harer anugrahāt kāle datta-jñāna-lakṣaṇe upasthite hṛdi prakāśite tanaye pūrṇa-jñāne bāle pañca-varṣa-kalpe prādeśa-mātre nārāyaṇāhvaye mūrti-viśeṣe matiṁ smaraṇa-samarthaṁ cittaṁ cakāra bhaktyāsmarad ity arthaḥ.

Directa o indirectamente, Ajāmila recordó realmente a Nārāyaṇa en el momento de morir (ante nārāyaṇa-smṛtiḥ).

Texto

sa pāśa-hastāṁs trīn dṛṣṭvā
puruṣān ati-dāruṇān
vakra-tuṇḍān ūrdhva-romṇa
ātmānaṁ netum āgatān
dūre krīḍanakāsaktaṁ
putraṁ nārāyaṇāhvayam
plāvitena svareṇoccair
ājuhāvākulendriyaḥ

Palabra por palabra

saḥ — esa persona (Ajāmila); pāśa-hastān — con cuerdas en las manos; trīn — tres; dṛṣṭvā — al ver; puruṣān — personas; ati-dāruṇān — de espantoso aspecto; vakra-tuṇḍān — de rostros retorcidos; ūrdhva-romṇaḥ — con vellos erizados en el cuerpo; ātmānam — el ser; netum — para llevarse; āgatān — llegaron; dūre — a poca distancia; krīḍanaka-āsaktam — dedicado a su juego; putram — a su hijo; nārāyaṇa-āhvayam — llamado Nārāyaṇa; plāvitena — con ojos llenos de lágrimas; svareṇa — con su voz; uccaiḥ — en voz muy alta; ājuhāva — llamó; ākula-indriyaḥ — lleno de ansiedad.

Traducción

Ajāmila vio entonces a tres individuos de aspecto extraño, de rostros feroces y retorcidos, con cuerpos deformes cubiertos de vellos erizados. Traían cuerdas en las manos y habían ido para llevárselo a la morada de Yamarāja. Ajāmila se sintió muy confuso al verles y, llevado del apego, llamó a voces a su hijo, que jugaba a muy poca distancia. Fue así como, por una u otra razón, cantó el santo nombre de Nārāyaṇa con lágrimas en los ojos.

Significado

La persona que realiza actividades pecaminosas, las lleva a cabo con el cuerpo, la mente y las palabras. Esa es la razón de que fuesen tres los mensajeros que fueron a llevarse a Ajāmila a la morada de Yamarāja. Ajāmila tuvo la gran fortuna de cantar las cuatro sílabas del hari-nāma Nārāyaṇa, y por ello, a pesar de que solo estaba llamando a su hijo, también los mensajeros de Nārāyaṇa, los viṣṇudūtas, hicieron acto de presencia inmediatamente. Ajāmila tenía tanto miedo de las cuerdas de Yamarāja que cantó el nombre del Señor con los ojos repletos de lágrimas. Sin embargo, la realidad es que nunca quiso cantar el santo nombre de Nārāyaṇa; su intención era llamar a su hijo.

Texto

niśamya mriyamāṇasya
mukhato hari-kīrtanam
bhartur nāma mahārāja
pārṣadāḥ sahasāpatan

Palabra por palabra

niśamya — al escuchar; mriyamāṇasya — del moribundo; mukhataḥ — de la boca; hari-kīrtanam — el canto del santo nombre de la Suprema Personalidad de Dios; bhartuḥ nāma — el santo nombre de su Señor; mahā-rāja — ¡oh, rey!; pārṣadāḥ — los sirvientes de Viṣṇu; sahasā — inmediatamente; āpatan — llegaron.

Traducción

Mi querido rey, los sirvientes de Viṣṇu, los viṣṇudūtas, al escuchar el santo nombre de su Señor en labios del moribundo Ajāmila, que, presa de una enorme ansiedad, lo había cantado sin cometer ofensas, se presentaron inmediatamente en el lugar.

Significado

Śrīla Viśvanātha Cakravartī Ṭhākura señala: hari-kīrtanaṁ niśamyāpatan, katham-bhūtasya bhartur nāma bruvataḥ: Los mensajeros del Señor Viṣṇu fueron porque Ajāmila había cantado el santo nombre de Nārāyaṇa. No se pararon a considerar la razón que le llevó a cantar, aunque Ajāmila, mientras cantaba el nombre de Nārāyaṇa, en realidad pensaba en su propio hijo. Por el simple hecho de escucharle cantar el santo nombre del Señor, los mensajeros del Señor Viṣṇu, losviṣṇudūtas, de inmediato descendieron para proteger a Ajāmila. La verdadera finalidad del hari-kīrtana es la glorificación del santo nombre, la forma, los pasatiempos y las cualidades del Señor. Ajāmila, sin embargo, no estaba glorificando ni la forma, ni las cualidades, ni el nombre del Señor; simplemente cantó el santo nombre. Ese canto, no obstante, fue suficiente para purificarle de todas las actividades pecaminosas. Los viṣṇudūtas descendieron inmediatamente, en cuanto escucharon cantar el nombre de su amo. En relación con esto, Śrīla Vijayadhvaja Tīrtha señala: anena putra-sneham antareṇa prācīnādṛṣṭa-balād udbhūtayā bhaktyā bhagavan-nāma-saṅkīrtanaṁ kṛtam iti jñāyate: «Ajāmila cantó el nombre de Nārāyaṇa debido al excesivo apego que sentía por su hijo. Aun así, debido a la buena fortuna derivada del servicio devocional ofrecido a Nārāyaṇa en el pasado, parece ser que cantó el santo nombre completamente en actitud de servicio devocional y sin ofensas».

Texto

vikarṣato ’ntar hṛdayād
dāsī-patim ajāmilam
yama-preṣyān viṣṇudūtā
vārayām āsur ojasā

Palabra por palabra

vikarṣataḥ — arrancar; antaḥ hṛdayāt — de dentro del corazón; dāsī-patim — al esposo de la prostituta; ajāmilam — Ajāmila; yama-preṣyān — los mensajeros de Yamarāja; viṣṇu-dūtāḥ — los sirvientes del Señor Viṣṇu; vārayām āsuḥ — prohibieron; ojasā — con voces resonantes.

Traducción

Los enviados de Yamarāja estaban arrancando el alma de lo más hondo del corazón de Ajāmila, el esposo de la prostituta, pero los mensajeros del Señor Viṣṇu, los viṣṇudūtas, se lo prohibieron con voces resonantes.

Significado

El vaiṣṇava, la persona que se ha entregado a los pies de loto del Señor Viṣṇu, es siempre protegido por los mensajeros del Señor Viṣṇu. En el mismo instante en que Ajāmila cantó el santo nombre de Nārāyaṇa, los viṣṇudūtas aparecieron en el lugar y ordenaron a los yamadūtas que no le tocasen. Con sus resonantes voces, los viṣṇudūtas amenazaron a los yamadūtas con castigarles si persistían en su intento de arrancar el alma de Ajāmila del corazón. Los mensajeros de Yamarāja tienen jurisdicción sobre todas las entidades vivientes pecaminosas, pero los mensajeros del Señor Viṣṇu, los viṣṇudūtas, pueden castigar a cualquiera que haga daño a un vaiṣṇava, aun si se trata del propio Yamarāja.

Los científicos materialistas, con sus instrumentos materiales, no saben dar con la posición del alma dentro del cuerpo, pero este verso explica claramente que el alma está en lo más profundo del corazón (hṛdaya); del corazón es de donde losyamadūtas estaban extrayendo el alma de Ajāmila. De manera similar, sabemos que la Superalma, el Señor Viṣṇu, también está dentro del corazón (īśvaraḥ sarva-bhūtānāṁ hṛd-deśe 'rjuna tiṣṭhati). En los Upaniṣads se dice que la Superalma y el alma individual viven en el mismo árbol, el cuerpo, como dos pájaros amigos. La Suprema Personalidad de Dios es tan bondadoso con el alma original que, cuando esta transmigra de un cuerpo a otro, el Señor va con ella. Por eso se dice que la Superalma es un amigo. Además, conforme al deseo y al karma del alma individual, el Señor, por medio de la acción demāyā, le crea otro cuerpo.

En el cuerpo, el corazón es un dispositivo mecánico. En el Bhagavad-gītā (18.61) el Señor explica:

īśvaraḥ sarva-bhūtānāṁ
hṛd-deśe ’rjuna tiṣṭhati
bhrāmayan sarva-bhūtāni
yantrārūḍhāni māyayā

«El Señor Supremo Se encuentra en el corazón de todos, ¡oh, Arjuna!, y dirige los movimientos de todas las entidades vivientes, que están situadas como en una máquina hecha de energía material». Yantra se refiere a una máquina, como, porejemplo, un automóvil. El conductor de la máquina del cuerpo es el alma individual, quien es, además, su director o propietario, pero el propietario supremo es la Suprema Personalidad de Dios. Nuestro cuerpo ha sido creado a través de la acción demāyā (karmaṇā daiva-netreṇa), y nuestras actividades en esta vida determinan la creación de otro vehículo, también bajo la supervisión de daivī māyā (daivī hy eṣā guṇa-mayī mama māyā duratyayā). Cuando llega el momento, se decide de inmediato nuestro siguiente cuerpo, y tanto el alma individual como la Superalma pasan a esa determinada máquina corporal. Ese es el proceso de transmigración. Durante la transmigración de un cuerpo al siguiente, el alma es llevada por los mensajeros de Yamarāja y puesta en un determinado tipo de vida infernal (naraka), a fin de que se acostumbre a las condiciones de vida de su siguiente cuerpo.

Texto

ūcur niṣedhitās tāṁs te
vaivasvata-puraḥsarāḥ
ke yūyaṁ pratiṣeddhāro
dharma-rājasya śāsanam

Palabra por palabra

ūcuḥ — contestaron; niṣedhitāḥ — ante la prohibición; tān — a los mensajeros del Señor Viṣṇu; te — ellos; vaivasvata — de Yamarāja; puraḥ-sarāḥ — los asistentes o mensajeros; ke — quiénes; yūyam — todos ustedes; pratiṣed-dhāraḥ — que se enfrentan; dharma-rājasya — del rey de los principios religiosos, Yamarāja; śāsanam — la jurisdicción de su dominio.

Traducción

Ante esta prohibición, los mensajeros de Yamarāja, el hijo del dios del Sol, contestaron: Señores, ¿quiénes son, que tienen la osadía de desafiar la autoridad de Yamarāja?

Significado

Ajāmila, por sus actividades pecaminosas, se hallaba bajo la jurisdicción de Yamarāja, el juez supremo designado para sopesar los pecados de las entidades vivientes. Cuando se les prohibió tocar a Ajāmila, los enviados de Yamarāja se sorprendieron mucho, pues, en los tres mundos, jamás nadie les había impedido cumplir con su deber.

Texto

kasya vā kuta āyātāḥ
kasmād asya niṣedhatha
kiṁ devā upadevā yā
yūyaṁ kiṁ siddha-sattamāḥ

Palabra por palabra

kasya — de quién son sirvientes; — o; kutaḥ — de dónde; āyātāḥ — han venido; kasmāt — cuál es la razón; asya — (el llevarnos) a este Ajāmila; niṣedhatha — están prohibiendo; kim — o bien; devāḥ — semidioses; upadevāḥ — semidioses menores; yāḥ — quién; yūyam — todos ustedes; kim — o bien; siddha-sat-tamāḥ — los mejores entre los seres perfectos, los devotos puros.

Traducción

Queridos señores, ¿a quién sirven?, ¿de dónde han venido?, y ¿por qué nos prohíben tocar el cuerpo de Ajāmila? ¿Son semidioses de los planetas celestiales?, ¿o acaso semidioses menores?; ¿son los mejores de los devotos?

Significado

La palabra más significativa de este verso es siddha-sattamāḥ, que significa «los mejores entre los perfectos». En el Bhagavad-gītā (7.3), se dice: manuṣyāṇāṁ sahasreṣu kaścid yatati siddhaye: De entre millones de personas, puede que una trate de ser siddha, perfecta, o, en otras palabras, autorrealizada. La persona autorrealizada sabe que no es el cuerpo, sino un alma espiritual (ahaṁ brahmāsmi). En la actualidad, prácticamente nadie es consciente de este hecho, pero aquel que lo comprende ha alcanzado la perfección y, por lo tanto, es un siddha. Cuando alguien entiende que el alma es parte integral del alma suprema, y en consecuencia se ocupa en el servicio devocional del alma suprema, alcanza la posición de siddha-sattama. Entonces está preparado para vivir en los planetas Vaikuṇṭhas o en Kṛṣṇaloka. La palabra siddha-sattama, por lo tanto, se refiere al devoto liberado, el devoto puro.

Como sirvientes de Yamarāja, que también es uno de los siddha-sattamas, los yamadūtas sabían que los siddha-sattamas están por encima de los semidioses y de los semidioses menores, y, por lo tanto, por encima de todas las entidades vivientes del mundo material. Así pues, los yamadūtas preguntaron a los viṣṇudūtas cuál era la razón de su presencia ante un pecador que estaba a punto de morir.

También se debe señalar que Ajāmila todavía no estaba muerto, pues los yamadūtas trataban de arrancarle el alma del corazón. Sin embargo, no pudieron hacerlo; de modo que Ajāmila todavía no estaba muerto. Esto se explicará en versos posteriores. Durante la discusión entre los yamadūtas y los viṣṇudūtas, Ajāmila yacía en estado inconsciente. En la conclusión de la disputa se decidirá quién tiene derecho al alma de Ajāmila.

Texto

sarve padma-palāśākṣāḥ
pīta-kauśeya-vāsasaḥ
kirīṭinaḥ kuṇḍalino
lasat-puṣkara-mālinaḥ
sarve ca nūtna-vayasaḥ
sarve cāru-caturbhujāḥ
dhanur-niṣaṅgāsi-gadā-
śaṅkha-cakrāmbuja-śriyaḥ
diśo vitimirālokāḥ
kurvantaḥ svena tejasā
kim arthaṁ dharma-pālasya
kiṅkarān no niṣedhatha

Palabra por palabra

sarve — todos ustedes; padma-palāśa-akṣāḥ — con ojos como los pétalos de una flor de loto; pīta — amarilla; kauśeya — seda; vāsasaḥ — llevando ropas; kirīṭinaḥ — con yelmos; kuṇḍalinaḥ — con pendientes; lasat — resplandecientes; puṣkara-mālinaḥ — con un collar de flores de loto; sarve — todos ustedes; ca — también; nūtna-vayasaḥ — muy jóvenes; sarve — todos ustedes; cāru — muy hermosos; catuḥ-bhujāḥ — con cuatro brazos; dhanuḥ — arco; niṣaṅga — aljaba con flechas; asi — espada; gadā — maza; śaṅkha — caracola; cakra — disco; ambuja — flor de loto; śriyaḥ — adornados con; diśaḥ — todas las direcciones; vitimira — sin oscuridad; ālokāḥ — extraordinaria iluminación; kurvantaḥ — manifestando; svena — por su propia; tejasā — refulgencia; kim artham — qué objeto tiene; dharma-pālasya — de Yamarāja, que mantiene los principios religiosos; kiṅkarān — sirvientes; naḥ — nosotros; niṣedhatha — nos están prohibiendo.

Traducción

Los mensajeros de Yamarāja dijeron: Sus ojos son como los pétalos de la flor de loto. Vestidos con sedas amarillas, y adornados con collares de flores de loto y maravillosos yelmos y pendientes, tienen un aspecto fresco y juvenil. Sus cuatro largos brazos están embellecidos con arcos y aljabas de flechas, y con espadas, mazas, caracolas, discos y flores de loto. Su refulgencia ha disipado las tinieblas de este lugar con una luz extraordinaria. Y bien, señores, ¿por qué impiden nuestro trabajo?

Significado

Las ropas, el aspecto físico y la conducta de una persona nos permiten conocerla un poco y hacernos una ideade su posición incluso antes de haber sido presentados. Así pues, los yamadūtas se sorprendieron mucho cuando vieron a los viṣṇudūtas, y les dijeron: «Por su aspecto físico, parecen caballeros muy nobles, y su poder celestial es tan grande que han disipado las tinieblas del mundo material con su refulgencia. ¿Por qué se molestan entonces en impedirnos cumplir con nuestro deber?». Más adelante veremos que los yamadūtas, los sirvientes de Yamarāja, se equivocaron al considerar a Ajāmila un pecador. No sabían que, a pesar de toda una vida de pecado, se había purificado gracias al canto constante del santo nombre de Nārāyaṇa. En otras palabras, el que no es vaiṣṇava no puede comprender las actividades de otro vaiṣṇava.

En estos versos se describen con detalle las ropas y el aspecto físico de los habitantes de Vaikuṇṭhaloka. Van adornados con collares de flores y ropas de seda amarilla, y tienen cuatro brazos, en los que sostienen diversas armas. De modo que son manifiestamente parecidos al Señor Viṣṇu, pues han alcanzado la liberación sārūpya; sin embargo, a pesar de tener los mismos rasgos que Nārāyaṇa, actúan como sirvientes. Todos los habitantes de Vaikuṇṭhaloka saben perfectamente que su amo es Nārāyaṇa, Kṛṣṇa, y que todos ellos son Sus sirvientes. Son todos almas autorrealizadas nitya-mukta, pues están liberados eternamente. Aunque podrían hacerse pasar por Nārāyaṇa o Viṣṇu, nunca lo hacen; siempre permanecen conscientes de Kṛṣṇa y sirven al Señor con gran fidelidad. Esa es la atmósfera de Vaikuṇṭhaloka. Del mismo modo, aquel que aprenda a ser fiel en el servicio del Señor Kṛṣṇa a través del movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa, vivirá siempre en Vaikuṇṭhaloka, sin nada que ver con el mundo material.

Texto

śrī-śuka uvāca
ity ukte yamadūtais te
vāsudevokta-kāriṇaḥ
tān pratyūcuḥ prahasyedaṁ
megha-nirhrādayā girā

Palabra por palabra

śrī-śukaḥ uvāca — Śrī Śukadeva Gosvāmī dijo; iti — así; ukte — ser hablados; yamadūtaiḥ — por los mensajeros de Yamarāja; te — ellos; vāsudeva-ukta-kāriṇaḥ — que siempre están dispuestos a cumplir las órdenes del Señor Vāsudeva (por ser acompañantes personales del Señor Viṣṇu que han obtenido la liberación de sālokya); tān — a ellos; pratyūcuḥ — contestaron; prahasya — sonriendo; idam — esto; megha-nirhrādayā — resonantes como una estruendosa nube; girā — con voces.

Traducción

Śukadeva Gosvāmī continuó: Tras escuchar las palabras de los mensajeros de Yamarāja, los sirvientes de Vāsudeva sonrieron y, con voces tan profundas como el estruendoso sonido de las nubes, dijeron las siguientes palabras.

Significado

Los yamadūtas estaban sorprendidos de ver que los viṣṇudūtas, a pesar de su cortesía, estaban oponiéndose a la ley de Yamarāja. Los viṣṇudūtas, a su vez, estaban sorprendidos de que los yamadūtas, aunque decían ser sirvientes de Yamarāja, el juez supremo de los principios religiosos, no fuesen conscientes de los principios de la acción religiosa. Por eso los viṣṇudūtas sonrieron pensando: «¿Qué tontería están diciendo? Si de verdad fuesen sirvientes de Yamarāja, deberían saber que Ajāmila no es candidato adecuado para que ellos se lo lleven».

Texto

śrī-viṣṇudūtā ūcuḥ
yūyaṁ vai dharma-rājasya
yadi nirdeśa-kāriṇaḥ
brūta dharmasya nas tattvaṁ
yac cādharmasya lakṣaṇam

Palabra por palabra

śrī-viṣṇudūtāḥ ūcuḥ — los benditos mensajeros del Señor Viṣṇu hablaron; yūyam — todos ustedes; vai — en verdad; dharma-rājasya — del rey Yamarāja, que conoce los principios religiosos; yadi — si; nirdeśa-kāriṇaḥ — mensajeros; brūta — hablen; dharmasya — de principios religiosos; naḥ — a nosotros; tattvam — la verdad; yat — la cual; ca — también; adharmasya — de actividades impías; lakṣaṇam — características.

Traducción

Los benditos mensajeros del Señor Viṣṇu, los viṣṇudūtas, dijeron: Si de verdad son sirvientes de Yamarāja, tienen que explicarnos el sentido de los principios religiosos y las características de la irreligión.

Significado

Esta pregunta de los viṣṇudūtas a los yamadūtas es muy importante. El sirviente debe conocer lasinstrucciones de su amo. Como los sirvientes de Yamarāja decían estar cumpliendo las órdenes de su señor, los viṣṇudūtas, con mucha inteligencia, les pidieron que explicasen las características de los principios religiosos e irreligiosos. El vaiṣṇava conoce a la perfección esos principios, pues está bien versado en las instrucciones de la Suprema Personalidad de Dios. El Señor Supremo dice: sarva-dharmān parityajya mām ekaṁ śaraṇaṁ vraja: «Abandona toda clase de religión y sencillamente entrégate a Mí». Por lo tanto, el principio esencial de la religión es la entrega a la Suprema Personalidad de Dios. Todos aquellos que, en lugar de entregarse a Kṛṣṇa, se han entregado a los principios de la naturaleza material, son impíos, sea cual sea su posición material. Como no son conscientes de los principios de la religión, no se entregan a Kṛṣṇa; por esa razón, se les considera pecadores sinvergüenzas, los más bajos de entre los hombres, necios carentes de conocimiento. Como Kṛṣṇa dice en el Bhagavad-gītā (7.15):

na māṁ duṣkṛtino mūḍhāḥ
prapadyante narādhamāḥ
māyayāpahṛta-jñānā
āsuraṁ bhāvam āśritāḥ

«Esos malvados sumamente necios, que son lo más bajo de la humanidad, a quienes la ilusión les ha robado el conocimiento, y que participan de la naturaleza atea de los demonios, no se entregan a Mí». Quien no se ha entregado a Kṛṣṇa, no conoce el verdadero principio de la religión; de lo contrario, se habría entregado.

La pregunta de los viṣṇudūtas era muy acertada. Un representante de otra persona debe conocer perfectamente la misión de esa persona. Por lo tanto, los devotos del movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa deben comprender perfectamente la misión de Kṛṣṇa y del Señor Caitanya; de lo contrario, la gente les considerará unos necios. Todos los devotos, y en especial los predicadores, deben conocer la filosofía de conciencia de Kṛṣṇa, de modo que no sean insultados y puestos en ridículo en el curso de su prédica.

Texto

kathaṁ svid dhriyate daṇḍaḥ
kiṁ vāsya sthānam īpsitam
daṇḍyāḥ kiṁ kāriṇaḥ sarve
āho svit katicin nṛṇām

Palabra por palabra

katham svit — por qué medios; dhriyate — se impone; daṇḍaḥ — castigo; kim — qué; — o; asya — de este; sthānam — el lugar; īpsitam — deseable; daṇḍyāḥ — merecedor de castigo; kim — o bien; kāriṇaḥ — actores fruitivos; sarve — todos; āho svit — o bien; katicit — algunos; nṛṇām — de los seres humanos.

Traducción

¿Cuál es el proceso para imponer un castigo? ¿Quién merece realmente ser castigado?; ¿acaso todos los karmīs ocupados en actividades fruitivas, o solo algunos de ellos?

Significado

Quien tiene el poder de castigar a otros no debe hacerlo indiscriminadamente. Hay infinidad de entidades vivientes; la mayoría de ellas están en el mundo espiritual y son nitya-mukta, es decir, están eternamente liberadas. No tiene sentido someter a juicio a esas entidades vivientes liberadas. Solo una pequeña parte de las entidades vivientes, quizá una cuarta parte del total, están en el mundo material. Y de las entidades vivientes del mundo material, la mayoría —ocho millones de los 8 400 000 especies de vida— son inferiores al ser humano y no pueden ser castigadas, pues están sujetas al ciclo evolutivo bajo las leyes de la naturaleza material. Los seres humanos, que gozan de una conciencia avanzada, tienen que responder por sus actos, pero no todos ellos merecen ser castigados. Los que se ocupan en actividades piadosas elevadas están más allá de todo castigo. El castigo es solo para quienes se ocupan en actividades pecaminosas. Por esa razón, losviṣṇudutas preguntaron concretamente acerca de quién merece ser castigado y quién no. ¿En qué se basa el juicio?, ¿cuál es el principio básico de la autoridad? Estas fueron las preguntas de los viṣṇudūtas.

Texto

yamadūtā ūcuḥ
veda-praṇihito dharmo
hy adharmas tad-viparyayaḥ
vedo nārāyaṇaḥ sākṣāt
svayambhūr iti śuśruma

Palabra por palabra

yamadūtāḥ ūcuḥ — los mensajeros de Yamarāja dijeron; veda — por los cuatro Vedas (Sāma, Yajur, Ṛg Atharva); praṇihitaḥ — prescritos; dharmaḥ — principios religiosos; hi — en verdad; adharmaḥ — principios irreligiosos; tat-viparyayaḥ — lo contrario de eso (lo que no viene respaldado por los mandamientos de los Vedas); vedaḥ — los Vedas, libros de conocimiento; nārāyaṇaḥ sākṣāt — directamente la Suprema Personalidad de Dios (al ser las palabras de Nārāyaṇa); svayam-bhūḥ — que nacen por sí solos, autosuficientes (cuyo único origen es la respiración de Nārāyaṇa, y que no han sido aprendidos de nadie); iti — así; śuśruma — hemos escuchado.

Traducción

Los yamadūtas contestaron: Lo que se prescribe en los Vedas constituye el dharma, los principios religiosos, y lo contrario es irreligión. Los Vedas son directamente la Suprema Personalidad de Dios, Nārāyaṇa, y nacen por sí solos. Así lo hemos escuchado de labios de Yamarāja.

Significado

Los sirvientes de Yamarāja han dado una buena respuesta. En lugar de inventarse sus propios principios religiosos o irreligiosos, explicaron lo que habían escuchado de la autoridad, Yamarāja. Mahājano yena gataḥ sa panthāḥ: Debemos seguir al mahājana, la persona autorizada. Yamarāja es una de las doce autoridades. Por lo tanto, los sirvientes deYamarāja, los yamadūtas, contestaron con perfecta claridad cuando dijeron śuśruma («hemos escuchado»). En la civilización actual es frecuente inventar principios religiosos imperfectos por medio de maquinaciones especulativas. Eso no esdharma. Eso es no saber distinguir entre dharma adharma. Por eso, y como se afirma al principio del Śrīmad-Bhāgavatamdharmaḥ projjhita-kaitavo 'tra: El dharma no respaldado por los Vedas queda excluido del śrīmad-bhāgavata-dharma. El bhāgavata-dharma comprende solo aquello que ha sido dado por la Suprema Personalidad de Dios. El bhāgavata-dharma es sarva-dharmān parityajya mām ekaṁ śaraṇaṁ vraja: Hay que aceptar la autoridad de la Suprema Personalidad de Dios y entregarse a Él y a todo lo que Él dice. Eso es dharma. Arjuna, por ejemplo, pensando que la violencia era adharma, rechazaba la idea de luchar; pero Kṛṣṇa le instó a luchar. Por haber seguido las órdenes de Kṛṣṇa,Arjuna es un verdadero dharmī, ya que la orden de Kṛṣṇa es dharma. En el Bhagavad-gītā (15.15), Kṛṣṇa dice: vedaiś ca sarvair aham eva vedyaḥ: «El verdadero objetivo del conocimiento, veda, es conocerme a Mí». Aquel que conoce a Kṛṣṇa perfectamente está liberado. Como Kṛṣṇa dice en el Bhagavad-gītā (4.9):

janma karma ca me divyam
evaṁ yo vetti tattvataḥ
tyaktvā dehaṁ punar janma
naiti mām eti so ’rjuna

«¡Oh, Arjuna!, aquel que conoce la naturaleza trascendental de Mi advenimiento y actividades, al abandonar el cuerpo no vuelve a nacer en este mundo material, sino que alcanza Mi morada eterna». Aquel que comprende a Kṛṣṇa y sigue Su orden es un candidato para ir de regreso al hogar, de vuelta a Dios. Se puede establecer la conclusión de que dharma, la religión, es aquello que ha sido ordenado en los Vedas, y adharma, la irreligión, lo que no viene respaldado en los Vedas.

El dharma no es, en realidad, una creación de Nārāyaṇa. Como se afirma en los Vedasasya mahato bhūtasya niśvasitam etad yad ṛg-vedaḥ iti: Los mandamientos del dharma emanan de la respiración de Nārāyaṇa, la entidad viviente suprema. Nārāyaṇa existe y respira eternamente, y, por lo tanto, el dharma, los mandamientos de Nārāyaṇa, también existen eternamente. Śrīla Madhvācārya, el ācārya original de los seguidores de la Mādhva-gauḍīya-sampradāya, dice:

vedānāṁ prathamo vaktā
harir eva yato vibhuḥ
ato viṣṇv-ātmakā vedā
ity āhur veda-vādinaḥ

Las trascendentales palabras de los Vedas emanaron de la boca de la Suprema Personalidad de Dios. Por lo tanto, los principios védicos deben considerarse principios vaiṣṇavas, pues Viṣṇu es el origen de los Vedas. Los Vedas contienen solo instrucciones de Viṣṇu, y aquel que sigue los principios védicos es un vaiṣṇava«Vaiṣṇava» no se refiere a un miembro de una comunidad artificial del mundo material. Como explica el Bhagavad-gītā (vedaiś ca sarvair aham eva vedyaḥ),vaiṣṇava es aquel que verdaderamente conoce los Vedas.

Texto

yena sva-dhāmny amī bhāvā
rajaḥ-sattva-tamomayāḥ
guṇa-nāma-kriyā-rūpair
vibhāvyante yathā-tatham

Palabra por palabra

yena — por quien (Nārāyaṇa); sva-dhāmni — aunque está en Su propia morada, el mundo espiritual; amī — todas estas; bhāvāḥ — manifestaciones; rajaḥ-sattva-tamaḥ-mayāḥ — creadas por las tres modalidades de la naturaleza material (pasión, bondad e ignorancia); guṇa — cualidades; nāma — nombres; kriyā — actividades; rūpaiḥ — y con formas; vibhāvyante — se manifiestan en diversidad; yathā-tatham — con toda exactitud.

Traducción

La causa suprema de todas las causas, Nārāyaṇa, Se encuentra en Su propia morada en el mundo espiritual; no obstante, Él controla toda la manifestación cósmica por medio de las tres modalidades de la naturaleza material (sattva-guṇa, rajo-guṇa ytamo-guṇa). De este modo, cada entidad viviente recibe distintas cualidades, distinto nombre [como brāhmaṇa, kṣatriya, vaiśyay śūdra], distintos deberes correspondientes a la institución de varṇāśrama, y distinta forma. Nārāyaṇa es, pues, la causa de toda la manifestación cósmica.

Significado

Los Vedas nos informan:

na tasya kāryaṁ karaṇaṁ ca vidyate
na tat-samaś cābhyadhikaś ca dṛśyate
parāsya śaktir vividhaiva śrūyate
svābhāvikī jñāna-bala-kriyā ca

(Śvetāśvatara Upaniṣad 6.8)

Nārāyaṇa, la Suprema Personalidad de Dios, es todopoderoso, omnipotente. Como tiene gran variedad de energías, puede permanecer en Su propia morada y, sin el menor esfuerzo, supervisar y manejar toda la manifestación cósmica por medio de la interacción de las tres modalidades de la naturaleza material (sattva-guṇarajo-guṇa tamo-guṇa). Esas interacciones son causa de la creación de distintas formas, cuerpos, actividades y cambios, todos los cuales se manifiestan de modo perfecto. Como el Señor es perfecto, todo funciona como si Él estuviese interviniendo y supervisándolo directamente. Sin embargo, los ateos, cubiertos por las tres modalidades de la naturaleza material, no pueden ver que Nārāyaṇa es la causa suprema que está en el trasfondo de todas las actividades. Como Kṛṣṇa dice en el Bhagavad-gītā (7.13):

tribhir guṇamayair bhāvair
ebhiḥ sarvam idaṁ jagat
mohitaṁ nābhijānāti
mām ebhyaḥ param avyayam

«Engañado por las tres modalidades, el mundo entero no Me conoce: Yo estoy por encima de las modalidades y soy inagotable». Los agnósticos, carentes de inteligencia, viven ilusionados (mohita) por las tres modalidades de la naturaleza material, y no pueden entender que Nārāyaṇa, Kṛṣṇa, es la causa suprema de todas las actividades. Como se afirma en la Brahma-saṁhitā (5.1):

īśvaraḥ paramaḥ kṛṣṇaḥ
sac-cid-ānanda-vigrahaḥ
anādir ādir govindaḥ
sarva-kāraṇa-kāraṇam

«Kṛṣṇa, a quien se conoce como Govinda, es el controlador supremo. Él tiene un cuerpo espiritual, bienaventurado y eterno. Él es el origen de todo. No tiene ningún otro origen, porque es la causa de todas las causas».

Texto

sūryo ’gniḥ khaṁ marud devaḥ
somaḥ sandhyāhanī diśaḥ
kaṁ kuḥ svayaṁ dharma iti
hy ete daihyasya sākṣiṇaḥ

Palabra por palabra

sūryaḥ — el dios del Sol; agniḥ — el fuego; kham — el cielo; marut — el aire; devaḥ — los semidioses; somaḥ — la Luna; sandhyā — la tarde; ahanī — el día y la noche; diśaḥ — las direcciones; kam — el agua; kuḥ — la tierra; svayam — personalmente; dharmaḥ — Yamarāja, o la Superalma; iti — así; hi — en verdad; ete — todos estos; daihyasya — de una entidad viviente corporificada en los elementos materiales; sākṣiṇaḥ — testigos.

Traducción

El Sol, el fuego, el cielo, el aire, los semidioses, la Luna, la tarde, el día, la noche, las direcciones, el agua, la tierra y la Superalma misma son testigos de las actividades de la entidad viviente.

Significado

Los miembros de algunos grupos religiosos, especialmente los cristianos, no creen en las reacciones delkarma. Una vez tuvimos una discusión con un profesor cristiano muy culto; sostenía que, para castigar a alguien, lo normal es que antes se interrogue a los testigos de sus fechorías, y entonces preguntaba: ¿dónde están los testigos responsables deque suframos las reacciones del karma pasado? En este verso, los yamadūtas le responden. El alma condicionada cree que puede actuar furtivamente, sin que nadie vea sus actividades pecaminosas, pero los śāstras nos indican que hay muchos testigos, entre los cuales están el Sol, el fuego, el cielo, el aire, la Luna, los semidioses, la tarde, el día, la noche, las direcciones, el agua, la tierra y la misma Superalma, que acompaña al alma individual en su corazón. ¿Hacen falta más testigos? Hay testigos, y existe, además, el Señor Supremo; esa es la razón de que tantas entidades vivientes se eleven a los sistemas planetarios superiores o se degraden a los sistemas planetarios inferiores, llegando incluso a los planetas infernales. No hay inconsistencia alguna, pues el Dios Supremo organiza y dispone todo de modo perfecto (svābhāvikī jñāna-bala-kriyā ca). Los testigos que se mencionan en este verso se mencionan también en otras Escrituras védicas:

āditya-candrāv anilo ’nalaś ca
dyaur bhūmir āpo hṛdayaṁ yamaś ca
ahaś ca rātriś ca ubhe ca sandhye
dharmo ’pi jānāti narasya vṛttam

Texto

etair adharmo vijñātaḥ
sthānaṁ daṇḍasya yujyate
sarve karmānurodhena
daṇḍam arhanti kāriṇaḥ

Palabra por palabra

etaiḥ — por todos estos (testigos, comenzando por el dios del Sol); adharmaḥ — desviación de los principios regulativos; vijñātaḥ — se sabe; sthānam — el lugar adecuado; daṇḍasya — del castigo; yujyate — se acepta como; sarve — todos; karma-anurodhena — considerando las actividades realizadas; daṇḍam — castigo; arhanti — merecen; kāriṇaḥ — los que han cometido actividades pecaminosas.

Traducción

Candidatos al castigo son aquellos que, según confirman todos estos testigos, se han desviado de sus deberes regulativos prescritos. Todo el que se ocupa en actividades fruitivas, se expone a recibir el castigo que corresponde a sus actos pecaminosos.

Texto

sambhavanti hi bhadrāṇi
viparītāni cānaghāḥ
kāriṇāṁ guṇa-saṅgo ’sti
dehavān na hy akarma-kṛt

Palabra por palabra

sambhavanti — hay; hi — en verdad; bhadrāṇi — actividades piadosas, auspiciosas; viparītāni — todo lo contrario (actividades pecaminosas, no auspiciosas); ca — también; anaghāḥ — ¡oh, intachables habitantes de Vaikuṇṭha!; kāriṇām — de los trabajadores fruitivos; guṇa-saṅgaḥ — contaminación de las tres modalidades de la naturaleza; asti — hay; deha-vān — todo el que ha recibido este cuerpo material; na — no; hi — en verdad; akarma-kṛt — sin realizar actividades.

Traducción

¡Oh, habitantes de Vaikuṇṭha!, ustedes son intachables, pero los que habitan en el mundo material, tanto si son piadosos como si realizan actividades impías, son todos karmīs. Como están contaminados por las tres modalidades de la naturaleza y tienen que actuar conforme a ellas, pueden realizar actividades tanto de un tipo como de otro. Quien ha recibido un cuerpo material no puede estar inactivo, y para quien actúa bajo las modalidades de la naturaleza material, la acción pecaminosa es inevitable. Por lo tanto, todas las entidades vivientes del mundo material merecen ser castigadas.

Significado

La diferencia entre los seres humanos y los no humanos está en que del ser humano se espera un comportamiento acorde a los mandatos de los Vedas. Por desdicha, los hombres se inventan sus propias maneras de actuar, sin tener en cuenta los Vedas. Por esa razón, todos ellos incurren en actos pecaminosos y merecen ser castigados.

Texto

yena yāvān yathādharmo
dharmo veha samīhitaḥ
sa eva tat-phalaṁ bhuṅkte
tathā tāvad amutra vai

Palabra por palabra

yena — por la persona que; yāvān — en qué medida; yathā — de qué manera; adharmaḥ — actividades irreligiosas; dharmaḥ — actividades religiosas; — o; iha — en esta vida; samīhitaḥ — realizadas; saḥ — esa persona; eva — en verdad; tat-phalam — el resultado concreto de eso; bhuṅkte — disfruta o sufre; tathā — de ese modo; tāvat — en esa medida; amutra — en la siguiente vida; vai — en verdad.

Traducción

En la siguiente vida, la persona tiene que disfrutar o sufrir las reacciones correspondientes a su karma, en proporción a las actividades religiosas o irreligiosas realizadas en esta vida.

Significado

Como se afirma en el Bhagavad-gītā (14.18):

ūrdhvaṁ gacchanti sattva-sthā
madhye tiṣṭhanti rājasāḥ
jaghanya-guṇa-vṛtti-sthā
adho gacchanti tāmasāḥ

Los que actúan bajo la influencia de la modalidad de la bondad, se elevan a los sistemas planetarios superiores para ser semidioses; las personas corrientes que no realizan actos demasiado pecaminosos, permanecen en este sistema planetario intermedio; y los que cometen acciones pecaminosas abominables, descienden a la vida infernal.

Texto

yatheha deva-pravarās
trai-vidhyam upalabhyate
bhūteṣu guṇa-vaicitryāt
tathānyatrānumīyate

Palabra por palabra

yathā — tal como; iha — en esta vida; deva-pravarāḥ — ¡oh, los mejores entre los semidioses!; trai-vidhyam — tres tipos de atributos; upalabhyate — se obtienen; bhūteṣu — entre todas las entidades vivientes; guṇa-vaicitryāt — debido a la diversidad de la contaminación de las tres modalidades de la naturaleza; tathā — del mismo modo; anyatra — en otros lugares; anumīyate — se deduce.

Traducción

¡Oh, los mejores entre los semidioses!, en la vida podemos apreciar tres facetas distintas, que se deben a la contaminación de las tres modalidades de la naturaleza material. De ese modo, se dice que las entidades vivientes son pacíficas, inquietas o necias; felices, desdichadas o medianamente felices; religiosas, irreligiosas o semirreligiosas. Podemos deducir que esos tres tipos de naturaleza material actuarán de modo análogo en la siguiente vida.

Significado

Las acciones y reacciones de las tres modalidades de la naturaleza material se pueden ver en esta vida. Porejemplo, unas personas son muy felices, otras sufren mucho, y las hay que viven entre la felicidad y el sufrimiento. Ese es el resultado de su relación con las modalidades de la naturaleza material (bondad, pasión e ignorancia) en el pasado. Si en esta vida podemos distinguir esas diversidades, es fácil suponer que las entidades vivientes, conforme a su relación con las modalidades de la naturaleza material, también tendrán felicidad, sufrimiento o una mezcla de ambos en sus próximas vidas. Por lo tanto, lo mejor es cortar la relación con las tres modalidades de la naturaleza material y permanecer siempre trascendentales a esa contaminación. Eso solo es posible cuando nos dedicamos por entero al servicio devocional del Señor. Como Kṛṣṇa confirma en el Bhagavad-gītā (14.26):

māṁ ca yo ’vyabhicāreṇa
bhakti-yogena sevate
sa guṇān samatītyaitān
brahma-bhūyāya kalpate

«Aquel que se dedica por completo al servicio devocional, firme en toda circunstancia, trasciende de inmediato las modalidades de la naturaleza material y llega así al plano espiritual». Mientras no estemos completamente absortos en el servicio del Señor, estaremos expuestos a la contaminación de las tres modalidades de la naturaleza material, por lo cual tendremos que padecer sufrimientos o una mezcla de felicidad y sufrimiento.

Texto

vartamāno ’nyayoḥ kālo
guṇābhijñāpako yathā
evaṁ janmānyayor etad
dharmādharma-nidarśanam

Palabra por palabra

vartamānaḥ — el presente; anyayoḥ — del pasado y del futuro; kālaḥ — tiempo; guṇa-abhijñāpakaḥ — hace que se conozcan las cualidades; yathā — tal como; evam — así; janma — nacimiento; anyayoḥ — de las vidas pasadas y futuras; etat — este; dharma — principios religiosos; adharma — principios irreligiosos; nidarśanam — indicar.

Traducción

La llegada de la primavera nos descubre la naturaleza de todas las primaveras pasadas y futuras; del mismo modo, esta vida de felicidad, de sufrimiento o de mezcla de felicidad y sufrimiento, da testimonio de las actividades religiosas o irreligiosas de las vidas pasadas y futuras.

Significado

Nuestro pasado y nuestro futuro no son muy difíciles de comprender, pues el tiempo se halla bajo la contaminación de las tres modalidades de la naturaleza material. La llegada de la primavera trae consigo la acostumbrada manifestación de diversos tipos de flores y frutas; esto da pie a concluir que las primaveras del pasado también se adornaban con frutas y flores de similares características, y que lo mismo ocurrirá en primaveras futuras. Nuestros nacimientos y muertes se suceden en el marco del tiempo, y, conforme a la influencia de las modalidades de la naturaleza, recibimos distintos tipos de cuerpos y nos vemos expuestos a diversas condiciones.

Texto

manasaiva pure devaḥ
pūrva-rūpaṁ vipaśyati
anumīmāṁsate ’pūrvaṁ
manasā bhagavān ajaḥ

Palabra por palabra

manasā — con la mente; eva — en verdad; pure — en su morada, o dentro del corazón de todos en forma de Superalma; devaḥ — el semidiós Yamarāja (dīvyatīti devaḥ: cuando alguien está siempre brillante e iluminado, recibe el nombre de deva); pūrva-rūpam — la condición religiosa o irreligiosa del pasado; vipaśyati — observa completamente; anumīmāṁsate — considera; apūrvam — la condición futura; manasā — con su mente; bhagavān — que es omnipotente; ajaḥ — como el Señor Brahmā.

Traducción

El omnipotente Yamarāja es como el Señor Brahmā, pues, desde su propia morada o desde el corazón de todos, en forma de Paramātmā, observa mentalmente las actividades pasadas de la entidad viviente, y de ese modo comprende cómo actuará en vidas futuras.

Significado

No debemos pensar que Yamarāja es una entidad viviente cualquiera. Está al mismo nivel que el Señor Brahmā, y goza de la colaboración plena del Señor Supremo, que está en el corazón de todos. De ese modo, por la gracia de la Superalma, puede ver desde dentro el pasado, el presente y el futuro del ser vivo. La palabra anumīmāṁsate significa quepuede decidir tras consultar con la Superalma. Anu significa «seguir». En realidad, quien toma las decisiones con respecto a las siguientes vidas de la entidad viviente es la Superalma, y Yamarāja es quien las pone en práctica.

Texto

yathājñas tamasā yukta
upāste vyaktam eva hi
na veda pūrvam aparaṁ
naṣṭa-janma-smṛtis tathā

Palabra por palabra

yathā — tal como; ajñaḥ — un ser vivo ignorante; tamasā — en el sueño; yuktaḥ — ocupado; upāste — actúa conforme a; vyaktam — un cuerpo manifestado en un sueño; eva — ciertamente; hi — en verdad; na veda — no conoce; pūrvam — el cuerpo pasado; aparam — el siguiente cuerpo; naṣṭa — perdido; janma-smṛtiḥ — el recuerdo del nacimiento; tathā — del mismo modo.

Traducción

Una persona que duerme, actúa conforme al cuerpo manifestado en sus sueños y se identifica con él; del mismo modo, sin poder conocer las vidas pasadas y futuras, nos identificamos con nuestro cuerpo actual, que hemos adquirido debido a las acciones religiosas o irreligiosas que hayamos llevado a cabo en el pasado.

Significado

Un hombre se ocupa en actividades pecaminosas porque no sabe qué hizo en su vida anterior para recibir el cuerpo materialmente condicionado y sujeto a las tres miserias que ahora posee. En el Śrīmad-Bhāgavatam (5.5.4), Ṛṣabhadeva afirma: nūnaṁ pramattaḥ kurute vikarma: El ser humano que corre como un loco tras la complacencia de los sentidos no duda en actuar de modo pecaminoso. Yad-indriya-prītaya āpṛṇoti: Realiza actos pecaminosos con la única intención de complacer sus sentidos. Na sādhu manye: Eso no es bueno. Yata ātmano 'yam asann api kleśada āsa dehaḥ: Debido a esas acciones pecaminosas, recibirá otro cuerpo, en el que tendrá que sufrir del mismo modo que, en su cuerpo actual, sufre por sus actividades pecaminosas pasadas.

Debe entenderse que la persona que no posee conocimiento védico, siempre actúa ignorando lo que ha hecho en el pasado, lo que está haciendo en el presente y lo que sufrirá en el futuro. Vive en la más completa oscuridad. Por eso el mandamiento védico es: tamasi mā: «No permanezcas en la oscuridad». Jyotir gama: «Trata de ir hacia la luz». La luz, la iluminación, es el conocimiento védico, que puede ser comprendido por la persona que se eleva hasta el plano de la modalidad de la bondad o que trasciende la modalidad de la bondad ocupándose en el servicio devocional del maestro espiritual y del Señor Supremo. Esto se explica en el Śvetāśvatara Upaniṣad (6.23):

yasya deve parā bhaktir
yathā deve tathā gurau
tasyaite kathitā hy arthāḥ
prakāśante mahātmanaḥ

«A aquellas grandes almas que tienen una fe absoluta en el Señor y en el maestro espiritual se les revela de modo natural el significado del conocimiento védico». Los Vedas ordenan: tad-vijñānārthaṁ sa gurum evābhigacchet: Debemos acudir a un maestro espiritual dotado de conocimiento perfecto de los Vedas y recibir fielmente sus instrucciones, a fin de llegar a ser devotos del Señor. Entonces se nos revelará el conocimiento de los Vedas; así ya no tendremos que permanecer por más tiempo en la oscuridad de la naturaleza material.

La entidad viviente recibe un determinado tipo de cuerpo en función de su relación con las modalidades materiales de la naturaleza (bondad, pasión e ignorancia). Ejemplo de persona que se relaciona con la modalidad de la bondad es elbrāhmaṇa cualificado. Ese brāhmaṇa conoce el pasado, el presente y el futuro, pues consulta las Escrituras védicas y ve a través de los ojos del śāstra (śāstra-cakṣuḥ). Él puede comprender cuál fue su vida anterior, por qué se encuentra en su cuerpo actual, y cómo puede liberarse de las garras de māyā y no tener que aceptar más cuerpos materiales. Todo esto es posible desde el plano de la modalidad de la bondad. Sin embargo, las entidades vivientes, por lo general, se hallan inmersas en las modalidades de la pasión y la ignorancia.

En todo caso, es el criterio de la Suprema Personalidad de Dios, Paramātmā, el que determina si recibimos un cuerpo superior o inferior. Como se afirmó en el verso anterior:

manasaiva pure devaḥ
pūrva-rūpaṁ vipaśyati
anumīmāṁsate ’pūrvaṁ
manasā bhagavān ajaḥ

Todo depende de bhagavānajaḥ, el innaciente. ¿Qué razón hay para no complacer a Bhagavān y recibir un cuerpo mejor? La respuesta es ajñas tamasā, debido a la total ignorancia. La persona completamente inmersa en la oscuridad no puede saber cuál fue su vida pasada, ni cuál va a ser su vida futura; solo le interesa su cuerpo actual. Sin embargo, esa persona,dominada por la modalidad de la ignorancia y sin otro interés que su cuerpo actual, es como un animal, pese a tener un cuerpo humano, pues los animales, bajo la cubierta de la ignorancia, creen que el objetivo supremo de la vida y de la felicidad es comer lo más posible. El ser humano debe ser educado de manera que comprenda su vida pasada y cómo debe actuar para obtener una vida mejor en el futuro. Existe incluso un libro, la Bhṛgu-saṁhitā, que revela información acerca de las vidas pasadas, presentes y futuras, conforme a los cálculos astrológicos. De una forma u otra, debemos iluminarnos con respecto a nuestro pasado, presente y futuro. A quien trata de obtener el máximo disfrute de sus sentidos, sin ningún interés aparte delcuerpo, se le considera inmerso en la modalidad de la ignorancia. Su futuro es, verdaderamente, muy oscuro. El futuro siempre es oscuro para quien está completamente cubierto por la ignorancia. En esta era, la sociedad humana está especialmente cubierta por la modalidad de la ignorancia; por esa razón, la gente piensa que su cuerpo actual lo es todo, y no se preocupa ni por el pasado ni por el futuro.

Texto

pañcabhiḥ kurute svārthān
pañca vedātha pañcabhiḥ
ekas tu ṣoḍaśena trīn
svayaṁ saptadaśo ’śnute

Palabra por palabra

pañcabhiḥ — con los cinco sentidos para la acción (voz, brazos, piernas, ano y genitales); kurute — realiza; sva-arthān — sus intereses o deseos; pañca — los cinco objetos de los sentidos (sonido, forma, tacto, aroma y gusto); veda — conoce; atha — así; pañcabhiḥ — por los cinco sentidos de percepción (oído, visión, olfato, gusto y sensación); ekaḥ — el único; tu — pero; ṣoḍaśena — con esos quince elementos y la mente; trīn — de las tres categorías de la experiencia (felicidad, aflicción y una mezcla de ambas); svayam — él, la propia entidad viviente; saptadaśaḥ — el factor decimoséptimo; aśnute — disfruta.

Traducción

Por encima de los cinco sentidos de percepción, los cinco sentidos para la acción y los cinco objetos de los sentidos, está la mente, que es el decimosexto elemento. Por encima de la mente está el elemento decimoséptimo, el alma, la propia entidad viviente, que, en colaboración con los otros dieciséis, disfruta sola del mundo material. El ser vivo disfruta de tres tipos de situaciones: la felicidad, la aflicción, y la mezcla de ambas.

Significado

Todo el mundo se ocupa en actuar con las manos, las piernas y demás sentidos, a fin de alcanzar un determinado objetivo conforme a sus ideas e invenciones. Todos tratan de disfrutar de los cinco objetos de los sentidos, es decir, la forma, el sonido, el sabor, el aroma y el tacto, sin conocer el verdadero objetivo de la vida, que es satisfacer al Señor Supremo. Por haber desobedecido al Señor Supremo, se ven forzados a aceptar condiciones materiales, y, como no desean seguir las instrucciones de la Suprema Personalidad de Dios, tratan de mejorar su situación inventando soluciones. No obstante, el Señor Supremo es tan bondadoso que viene en persona a enseñar a la confundida entidad viviente a serle obediente en sus actos, de modo que, paso a paso, pueda ir de regreso al hogar, de vuelta a Dios, y alcanzar una vida eterna y pacífica de bienaventuranza y conocimiento. La entidad viviente tiene un cuerpo, que es una complicada combinación de elementos materiales, y con ese cuerpo lucha en solitario, como nos indican en este verso las palabras ekas tu. Un náufrago, por ejemplo, tiene que tratar de llegar a la orilla por sí solo. Tal vez haya muchos otros hombres y peces nadando, pero tendrá que valerse por sí mismo, pues nadie le va a ayudar. Este verso indica que el alma, el decimoséptimo elemento, tiene que actuar sola. Tratará de forjar sociedades, amistades y amores, pero, con excepción de Kṛṣṇa, el Señor Supremo, nadie podrá ayudarle. Por lo tanto, solo debe preocuparse de satisfacer a Kṛṣṇa. Eso es también lo que el propio Kṛṣṇa desea (sarva-dharmān parityajya mām ekaṁ śaraṇaṁ vraja). La gente, confundida por las condiciones materiales, trata de mantenerse unida; pero, aunque se esfuerzan por la unidad entre los hombres y las naciones, todos sus intentos son inútiles. En la lucha por la existencia, todo el mundo está solo contra los elementos de la naturaleza. Por eso, nuestra única esperanza es entregarnos a Kṛṣṇa, como Él mismo aconseja, pues con Su ayuda podemos liberarnos del océano de nesciencia. Śrī Caitanya Mahāprabhu ora:

ayi nanda-tanuja kiṅkaraṁ
patitaṁ māṁ viṣame bhavāmbudhau
kṛpayā tava pāda-paṅkaja-
sthita-dhūlī-sadṛśaṁ vicintaya

«¡Oh, Kṛṣṇa, amado hijo de Nanda Mahārāja!, yo soy Tu siervo eterno, pero, de una u otra forma, he caído en el océano de la nesciencia, y, aunque lucho sin descanso, no veo manera de salvarme. Si tuvieras la bondad de rescatarme y fijarme como una mota de polvo a Tus pies de loto, estaría a salvo».

También Bhaktivinoda Ṭhākura dice en una canción:

anādi karama-phale, paḍi’ bhavārṇava-jale,
taribāre nā dekhi upāya

«Mi querido Señor, no logro recordar cuando caí en este océano de nesciencia, pero, sea como fuere, no veo la manera de salvarme». Debemos recordar que todos somos responsables de nuestra propia vida. Solo quien alcanza el plano de la devoción pura por Kṛṣṇa se libera del océano de nesciencia.

Texto

tad etat ṣoḍaśa-kalaṁ
liṅgaṁ śakti-trayaṁ mahat
dhatte ’nusaṁsṛtiṁ puṁsi
harṣa-śoka-bhayārtidām

Palabra por palabra

tat — por lo tanto; etat — este; ṣoḍaśa-kalam — hecho de dieciséis partes (los diez sentidos, la mente y los cinco objetos de los sentidos); liṅgam — el cuerpo sutil; śakti-trayam — el efecto de las tres modalidades de la naturaleza material; mahat — insuperable; dhatte — da; anusaṁsṛtim — rotación y transmigración casi perpetua por distintos cuerpos; puṁsi — a la entidad viviente; harṣa — júbilo; śoka — lamentación; bhaya — miedo; ārti — miseria; dām — que da.

Traducción

El cuerpo sutil se compone de dieciséis partes: los cinco sentidos de adquisición de conocimiento, los cinco sentidos para laacción, los cinco objetos para el placer de los sentidos, y la mente. Ese cuerpo sutil es un efecto de las tres modalidades de la naturaleza material. Está compuesto de deseos muy fuertes, insuperables, y por ello es causa de que la entidad viviente transmigre de un cuerpo a otro, pasando por la vida humana, la vida animal y la vida de semidiós. La entidad viviente que recibe un cuerpo de semidiós, ciertamente se llena de júbilo; en el cuerpo humano, se lamenta sin cesar; y cuando recibe un cuerpo animal, siempre tiene miedo. Sin embargo, en cualquiera de las circunstancias su situación es miserable. Esa condición miserable se denomina saṁsṛti, o transmigración en la vida material.

Significado

En este verso se resume la esencia de la vida material condicionada. La entidad viviente, el decimoséptimo elemento, lucha en solitario, vida tras vida. Esa lucha se denomina saṁsṛti, vida material condicionada. En el Bhagavad-gītā se dice que la fuerza de la naturaleza material es insuperable (daivī hy eṣā guṇamayī mama māyā duratyayā). La naturaleza material atormenta a la entidad viviente en sus distintos cuerpos; pero si la entidad viviente se entrega a la Suprema Personalidad de Dios, se libera de su enredo, como se confirma en el Bhagavad-gītā (mām eva ye prapadyante māyām etāṁ taranti te). De ese modo, su vida alcanza el éxito.

Texto

dehy ajño ’jita-ṣaḍ-vargo
necchan karmāṇi kāryate
kośakāra ivātmānaṁ
karmaṇācchādya muhyati

Palabra por palabra

dehī — el alma corporificada; ajñaḥ — sin conocimiento perfecto; ajita-ṣaṭ-vargaḥ — que no ha dominado los sentidos de percepción y la mente; na icchan — sin desear; karmāṇi — actividades de beneficio material; kāryate — se ve forzada arealizar; kośakāraḥ — el gusano de seda; iva — como; ātmānam — él mismo; karmaṇā — con actividades fruitivas; ācchādya — cubriendo; muhyati — se confunde.

Traducción

La necia entidad viviente corporificada, incapaz de controlar la mente y los sentidos, se ve forzada a actuar en contra de sus propios deseos, conforme a la influencia de las modalidades de la naturaleza material. Es como el gusano de seda, que teje un capullo con su propia saliva y queda atrapado en él sin posibilidad alguna de salir. La entidad viviente, tras quedar atrapada en la red de sus propias actividades fruitivas, no encuentra la manera de liberarse. De ese modo, vive siempre confundida, y muere una y otra vez.

Significado

Como ya se ha explicado, la influencia de las modalidades de la naturaleza es muy fuerte. La entidad viviente enredada en distintos tipos de actividades fruitivas es como el gusano atrapado en su capullo. Sin la ayuda de la SupremaPersonalidad de Dios, es muy difícil que llegue a liberarse.

Texto

na hi kaścit kṣaṇam api
jātu tiṣṭhaty akarma-kṛt
kāryate hy avaśaḥ karma
guṇaiḥ svābhāvikair balāt

Palabra por palabra

na — no; hi — en verdad; kaścit — nadie; kṣaṇam api — ni por un momento; jātu — en ningún momento; tiṣṭhati — permanece; akarma-kṛt — sin hacer nada; kāryate — se ve obligado a realizar; hi — en verdad; avaśaḥ — de modo natural; karma — actividades fruitivas; guṇaiḥ — por las tres modalidades de la naturaleza material; svābhāvikaiḥ — que son producto de sus propias tendencias en vidas anteriores; balāt — por la fuerza.

Traducción

Ni una sola de las entidades vivientes puede permanecer inactiva, ni siquiera por un instante. Tienen que actuar conforme a su tendencia natural y en función de las tres modalidades de la naturaleza material, pues esa tendencia natural las fuerza a actuar de determinada manera.

Significado

La tendencia natural, svābhāvika, es el factor más importante de la acción. La tendencia natural es servir, pues la entidad viviente es sirviente eterno de Dios. La entidad viviente desea servir, pero debido a que ha olvidado su relación con el Señor Supremo, sirve bajo las modalidades de la naturaleza material e inventa distintas modalidades de servicio, como el socialismo, el humanitarismo y el altruismo. Sin embargo, es necesario que nos iluminemos con los principios delBhagavad-gītā y, aceptando la instrucción de la Suprema Personalidad de Dios, abandonemos todas las tendencias naturales de servicio material que se presentan bajo diversos nombres y emprendamos el servicio del Señor. La tendencia natural de la persona es la acción consciente de Kṛṣṇa, pues la verdadera naturaleza de la entidad viviente es espiritual. El ser humano, siendo esencialmente espíritu, tiene la obligación de entender que debe regirse por la tendencia espiritual, sin dejarse arrastrar por las tendencias materiales. En relación con esto, Śrīla Bhaktivinoda Ṭhākura dice en una canción:

(miche) māyāra vaśe,      yāccha bhese’,
khāccha hābuḍubu, bhāi

«Mis queridos hermanos, están siendo arrastrados por las olas de la energía material, y sufren en muchas condiciones miserables. A veces se ahogan bajo las olas de la naturaleza material, y a veces son sacudidos como un náufrago que nadaen el océano». Bhaktivinoda Ṭhākura nos confirma que esa tendencia a ser azotados por las olas de māyā se puede transformar en la tendencia natural original, que es espiritual, cuando la entidad viviente llega a entender que su posición eterna es ser kṛṣṇa-dāsa, un sirviente de Dios, de Kṛṣṇa.

(jīva) kṛṣṇa-dāsa, ei viśvāsa,
karle ta’ āra duḥkha nāi

Si, en lugar de servir a māyā bajo distintas denominaciones, volvemos nuestra actitud de servicio hacia el Señor Supremo, estaremos a salvo, y no tendremos más dificultades. Y si, mediante la comprensión del conocimiento perfecto que el propio Kṛṣṇa nos da en las Escrituras védicas, volvemos a establecernos en nuestra tendencia natural original en la forma humana devida, alcanzaremos el éxito en la vida.

Texto

labdhvā nimittam avyaktaṁ
vyaktāvyaktaṁ bhavaty uta
yathā-yoni yathā-bījaṁ
svabhāvena balīyasā

Palabra por palabra

labdhvā — habiendo recibido; nimittam — la causa; avyaktam — invisible o desconocida para la persona; vyakta-avyaktam — manifestado y no manifestado, o los cuerpos denso y sutil; bhavati — llega a ser; uta — ciertamente; yathā-yoni — semejante a la madre; yathā-bījam — semejante al padre; sva-bhāvena — por la tendencia natural; balīyasā — que es muy poderosa.

Traducción

La causa invisible del cumplimiento de los deseos del ser vivo son sus actividades fruitivas, piadosas o impías. Esa causa invisible es la raíz de los diversos cuerpos de la entidad viviente, la cual, llevada por su intenso deseo, nace en una determinada familia y recibe un cuerpo que es semejante, o bien al de su madre, o bien al de su padre. Los cuerpos denso y sutil se crean conforme a su deseo.

Significado

El cuerpo denso es un producto del cuerpo sutil. Como se afirma en el Bhagavad-gītā (8.6):

yaṁ yaṁ vāpi smaran bhāvaṁ
tyajaty ante kalevaram
taṁ tam evaiti kaunteya
sadā tad-bhāva-bhāvitaḥ

«El estado de existencia que se recuerda al abandonar el cuerpo, ¡oh, hijo de Kuntī!, es el estado que, indefectiblemente, se va a alcanzar». Las actividades del cuerpo denso crean la atmósfera del cuerpo sutil en el momento de la muerte. Así pues, el cuerpo denso actúa durante la vida y el cuerpo sutil actúa en el momento de la muerte. El cuerpo sutil, que recibe el nombre de liṅga, o cuerpo de deseo, es el trasfondo sobre el que se forma un determinado cuerpo denso, semejante, o bien al de la madre, o bien al del padre. Según el Ṛg Veda, si en el momento del acto sexual la madre emite mayor cantidad de secreciones que el padre, el bebé recibirá un cuerpo femenino, y si son más abundantes las del padre, su cuerpo será masculino. Se trata de leyes sutiles de la naturaleza, que actúan conforme al deseo de la entidad viviente. Cuando el ser humano aprende la manera de transformar su cuerpo sutil mediante el cultivo de conciencia de Kṛṣṇa, en el momento de la muerte ese cuerpo sutil le creará un cuerpo denso apropiado para que sea devoto de Kṛṣṇa; o, si ha alcanzado un grado de perfección aún mayor, ya no recibirá ningún cuerpo material, sino que obtendrá de inmediato un cuerpo espiritual e irá de regreso al hogar, de vuelta a Dios. Ese es el proceso de transmigración del alma. Por lo tanto, está claro que lo más deseable no es tratar de unir a la sociedad humana mediante pactos basados en una inalcanzable complacencia de los sentidos, sino enseñar a la gente a ser consciente de Kṛṣṇa y a regresar al hogar, de vuelta a Dios. Esto es cierto ahora y, verdaderamente, en todo momento.

Texto

eṣa prakṛti-saṅgena
puruṣasya viparyayaḥ
āsīt sa eva na cirād
īśa-saṅgād vilīyate

Palabra por palabra

eṣaḥ — esta; prakṛti-saṅgena — debido al contacto con la naturaleza material; puruṣasya — de la entidad viviente; viparyayaḥ — una situación de olvido, o una posición difícil; āsīt — llega a ser; saḥ — esa posición; eva — en verdad; na — no; cirāt — que lleva mucho tiempo; īśa-saṅgāt — de la relación con el Señor Supremo; vilīyate — es superada.

Traducción

Debido al contacto con la naturaleza material, la entidad viviente se encuentra en una posición difícil; sin embargo, en la forma humana de vida tiene la posibilidad de superarla, si aprende a relacionarse con la Suprema Personalidad de Dios o Su devoto.

Significado

The word prakṛti means material nature, and puruṣa may also refer to the Supreme Personality of Godhead. If one wants to continue his association with prakṛti, the female energy of Kṛṣṇa, and be separated from Kṛṣṇa by the illusion that he is able to enjoy prakṛti, he must continue in his conditional life. If he changes his consciousness, however, and associates with the supreme, original person (puruṣaṁ śāśvatam), or with His associates, he can get out of the entanglement of material nature. As confirmed in Bhagavad-gītā (4.9), janma karma ca me divyam evaṁ yo vetti tattvataḥ: one must simply understand the Supreme Person, Kṛṣṇa, in terms of His form, name, activities and pastimes. This will keep one always in the association of Kṛṣṇa. Tyaktvā dehaṁ punar janma naiti mām eti so ’rjuna: thus after giving up his gross material body, one accepts not another gross body but a spiritual body in which to return home, back to Godhead. Thus one ends the tribulation caused by his association with the material energy. In summary, the living entity is an eternal servant of God, but he comes to the material world and is bound by material conditions because of his desire to lord it over matter. Liberation means giving up this false consciousness and reviving one’s original service to the Lord. This return to one’s original life is called mukti, as confirmed in Śrīmad-Bhāgavatam (muktir hitvānyathā rūpaṁ svarūpeṇa vyavasthitiḥ).

Texto

ayaṁ hi śruta-sampannaḥ
śīla-vṛtta-guṇālayaḥ
dhṛta-vrato mṛdur dāntaḥ
satya-vāṅ mantra-vic chuciḥ
gurv-agny-atithi-vṛddhānāṁ
śuśrūṣur anahaṅkṛtaḥ
sarva-bhūta-suhṛt sādhur
mita-vāg anasūyakaḥ

Palabra por palabra

ayam — esta persona (llamada Ajāmila); hi — en verdad; śruta-sampannaḥ — bien educado en el conocimiento védico; śīla — de buen carácter; vṛtta — buena conducta; guṇa — y buenas cualidades; ālayaḥ — el manantial; dhṛta-vrataḥ — firme en la práctica de los mandamientos védicos; mṛduḥ — muy manso; dāntaḥ — con perfecto control de la mente y los sentidos; satya-vāk — siempre veraz; mantra-vit — conocedor de la forma de cantar los himnos védicos; śuciḥ — siempre muy limpio y pulcro; guru — el maestro espiritual; agni — el dios del fuego; atithi — invitados; vṛddhānām — y de sus familiares mayores; śuśrūṣuḥ — ocupado en servir con sumo respeto; anahaṅkṛtaḥ — sin orgullo ni prestigio falso; sarva-bhūta-suhṛt — amistoso con todas las entidades vivientes; sādhuḥ — de buena conducta (nadie podía encontrar defectos en su carácter); mita-vāk — que procuraba no hablar de cosas inútiles; anasūyakaḥ — no envidioso.

Traducción

En sus comienzos, este brāhmaṇa, Ajāmila, estudió todas las Escrituras védicas. Era un modelo de buenas cualidades, buen carácter y buena conducta. Firmemente establecido en la práctica de todos los mandamientos védicos, era muy manso y amable; siempre tenía la mente y los sentidos bajo control. Además de ser muy puro, siempre decía la verdad y sabía cantar los mantras védicos. Ajāmila era muy respetuoso con su maestro espiritual, con el dios del fuego, con los invitados y con sus mayores. Estaba libre de prestigio falso. Era honrado, de conducta intachable, y benévolo con todas las entidades vivientes. Nunca hablaba de cosas inútiles y no envidiaba a nadie.

Significado

Los mensajeros de Yamarāja, los yamadūtas, están explicando qué es piadoso y qué impío, y la forma en que la entidad viviente queda enredada en el mundo material. Al explicar la historia de Ajāmila, los yamadūtas cuentan que, en sus comienzos, era un verdadero erudito en las Escrituras védicas. Era muy bondadoso con todos, de conducta intachable, limpio y pulcro; tenía todas las buenas cualidades. En otras palabras, era prácticamente un brāhmaṇa perfecto. Losbrāhmaṇas deben ser perfectamente piadosos, seguir todos los principios regulativos, y poseer todas las buenas cualidades. En estos versos se explican las características de la piedad. Śrīla Vīrarāghava Ācārya comenta que dhṛta-vrata significadhṛtaṁ vrataṁ strī-saṅga-rāhityātmaka-brahmacarya-rūpam. En otras palabras, Ajāmila fue un brahmacārī perfecto en el cumplimiento de las reglas y regulaciones del celibato; tenía muy buen corazón y era veraz, limpio y puro. En los siguientes versos se explicará cómo cayó de su posición, a pesar de todas esas buenas cualidades, hasta el extremo de verse amenazado por el castigo de Yamarāja.

Texto

ekadāsau vanaṁ yātaḥ
pitṛ-sandeśa-kṛd dvijaḥ
ādāya tata āvṛttaḥ
phala-puṣpa-samit-kuśān
dadarśa kāminaṁ kañcic
chūdraṁ saha bhujiṣyayā
pītvā ca madhu maireyaṁ
madāghūrṇita-netrayā
mattayā viślathan-nīvyā
vyapetaṁ nirapatrapam
krīḍantam anugāyantaṁ
hasantam anayāntike

Palabra por palabra

ekadā — en cierta ocasión; asau — este Ajāmila; vanam yātaḥ — fue al bosque; pitṛ — de su padre; sandeśa — la orden; kṛt — cumplir; dvijaḥ — el brāhmaṇa; ādāya — recoger; tataḥ — del bosque; āvṛttaḥ — regresar; phala-puṣpa — frutas y flores; samit-kuśān — dos tipos de hierbas, llamadas samit kuśa; dadarśa — vio; kāminam — muy lujurioso; kañcit — alguien; śūdram — un hombre de cuarta categoría; saha — junto con; bhujiṣyayā — una sirvienta o prostituta común; pītvā — después de beber; ca — también; madhu — néctar; maireyam — hecho de la flor soma; mada — por embriaguez; āghūrṇita — moviéndose; netrayā — sus ojos; mattayā — ebria; viślathat-nīvyā — cuyas ropas se habían aflojado; vyapetam — que habían perdido la compostura; nirapatrapam — sin temor de la opinión pública; krīḍantam — ocupados en disfrutar; anugāyantam — cantar; hasantam — sonreír; anayā — con ella; antike — muy cerca.

Traducción

Cierto día, a pedido de su padre, este brāhmaṇa, Ajāmila, fue al bosque a recoger frutas, flores y dos tipos de hierbas, llamadas samit y kuśa. Cuando volvía a casa, pasó cerca de un śūdra, un hombre de cuarta categoría, que, lleno de lujuria, abrazaba y besaba desvergonzadamente a una prostituta. El śūdra sonreía, cantaba y disfrutaba como si no hubiera nada de malo en lo que hacía. Habían bebido, y a ella, con la embriaguez, le daban vueltas los ojos y se le habían soltado las ropas. Ese era su estado cuando Ajāmila los vio.

Significado

Yendo por la calle, Ajāmila se encontró con un hombre de cuarta clase y una prostituta en una actitud descrita de un modo muy gráfico en este verso. En eras pasadas también podían encontrarse personas embriagadas, aunque no era muy frecuente. Sin embargo, en la era de Kali, ese pecado se ve por todas partes, pues ahora en todo el mundo la gente ha perdido la vergüenza. Hace muchísimo tiempo, Ajāmila, que era un perfecto brahmacārī, fue testigo de la escena del śūdra borracho y la prostituta, y eso le afectó. Hoy en día es muy común ver pecados de ese tipo, y debemos ser conscientes de la posición del estudiante brahmacārī que contempla semejante conducta. Si no es extraordinariamente fuerte en elcumplimiento de sus principios regulativos, le va a ser muy difícil mantener su determinación. No obstante, quien emprenda el proceso de conciencia de Kṛṣṇa con toda seriedad podrá resistir la provocación del pecado. En nuestro movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa prohibimos la vida sexual ilícita, el consumo de sustancias embriagantes, el comer carne y los juegos de azar. En Kali-yuga, ver a una mujer borracha y semidesnuda abrazada a un borracho es una escena de lo más común, especialmente en los países occidentales; ante semejante espectáculo, es muy difícil controlar los sentidos. Con todo, si por la gracia de Kṛṣṇa seguimos estrictamente los principios regulativos y cantamos el mantra Hare Kṛṣṇa, Kṛṣṇa, sin lugar a dudas, nos protegerá. En verdad, Kṛṣṇa dice que Su devoto nunca es vencido (kaunteya pratijānīhi na me bhaktaḥ praṇaśyati). Por esa razón, todos los discípulos que practican el proceso de conciencia de Kṛṣṇa deben cumplir fielmente los principios regulativos y mantenerse fijos en el canto del santo nombre del Señor. Si así lo hacen, no tendrán nada que temer. Y si no, se encontrarán en una posición muy peligrosa, especialmente en este Kali-yuga.

Texto

dṛṣṭvā tāṁ kāma-liptena
bāhunā parirambhitām
jagāma hṛc-chaya-vaśaṁ
sahasaiva vimohitaḥ

Palabra por palabra

dṛṣṭvā — por ver; tām — a ella (la prostituta); kāma-liptena — adornado con cúrcuma para encender los deseos sexuales; bāhunā — con el brazo; parirambhitām — abrazaba; jagāma — fue; hṛt-śaya — de deseos de disfrute en el corazón; vaśam — bajo el control; sahasā — de pronto; eva — en verdad; vimohitaḥ — ilusionado.

Traducción

El śūdra estrechaba a la prostituta entre sus brazos, adornados con polvo de cúrcuma. Al ver a aquella mujer, en el corazón deAjāmila despertaron los dormidos deseos de disfrute, y, bajo la influencia de la ilusión, quedó controlado por ellos.

Significado

Se explica que un cuerpo ungido de cúrcuma atrae los deseos lascivos del sexo opuesto. La palabra kāma-liptena indica que el śūdra se había ungido el cuerpo con cúrcuma para embellecerlo.

Texto

stambhayann ātmanātmānaṁ
yāvat sattvaṁ yathā-śrutam
na śaśāka samādhātuṁ
mano madana-vepitam

Palabra por palabra

stambhayan — tratar de dominar; ātmanā — con la inteligencia; ātmānam — la mente; yāvat sattvam — en la medida en que le fue posible; yathā-śrutam — por recordar la instrucción (de celibato, brahmacārya, ni siquiera mirar a las mujeres); na — no; śaśāka — pudo; samādhātum — contener; manaḥ — la mente; madana-vepitam — agitado por Cupido, el deseo de disfrute.

Traducción

Ajāmila, con paciencia, hizo todo lo que pudo por recordar las instrucciones de los śāstras, que aconsejan ni siquiera mirar a las mujeres. Con ayuda de ese conocimiento y de su intelecto, trató de dominar sus deseos lujuriosos, pero la fuerza de Cupido en su corazón le impidió controlar la mente.

Significado

Si no somos muy fuertes en el cultivo del conocimiento, la paciencia y el adecuado comportamiento físico, mental e intelectual, nos resultará sumamente difícil dominar los deseos de disfrute. Así pues, al ver a un hombre abrazando a una mujer joven y prácticamente ocupado en el acto sexual, ni siquiera ese brāhmaṇa perfectamente dotado, que reunía todas las cualidades antes descritas, pudo dominar los deseos de disfrute y abstenerse de satisfacerlos. La influencia de la vida materialista es tan poderosa, que es enormemente difícil dominarse, a no ser que gocemos de la protección especial que la Suprema Personalidad de Dios brinda a través del servicio devocional.

Texto

tan-nimitta-smara-vyāja-
graha-grasto vicetanaḥ
tām eva manasā dhyāyan
sva-dharmād virarāma ha

Palabra por palabra

tat-nimitta — por haberla visto; smara-vyāja — aprovechando que siempre pensaba en ella; graha-grastaḥ — víctima de un eclipse; vicetanaḥ — habiendo olvidado por completo su verdadera posición; tām — a ella; eva — ciertamente; manasā — con la mente; dhyāyan — meditar en; sva-dharmāt — los principios regulativos propios de los brāhmaṇas; virarāma ha — abandonó por completo.

Traducción

Del mismo modo que el Sol y la Luna son eclipsados por un planeta inferior, el brāhmaṇa perdió todo su buen juicio. Aprovechando la situación, siempre pensaba en la prostituta; al poco tiempo, la había empleado como sirvienta en su casa y había abandonado todos los principios regulativos de los brāhmaṇas.

Significado

Con este verso, Śukadeva Gosvāmī quiere que la mente del lector capte la idea de que Ajāmila, debido a la relación con la prostituta, arruinó su excelsa posición de brāhmaṇa hasta el punto de olvidar todas sus actividades brahmínicas. Sin embargo, al final de su vida, el canto de las cuatro sílabas del nombre de Nārāyaṇa le salvó del grave peligro de caer. Svalpam apy asya dharmasya trāyate mahato-bhayāt: Incluso una pequeña cantidad de servicio devocional puede salvarnos del mayor de los peligros. El servicio devocional, que comienza con el canto del santo nombre del Señor, es muy poderoso. Incluso el brāhmaṇa que cae de su gloriosa posición por entregarse a la vida sexual puede salvarse de toda clase de sufrimientos si, de una u otra forma, canta el santo nombre del Señor. Ese es el extraordinario poder del santo nombre del Señor. Por esa razón, en el Bhagavad-gītā se nos aconseja que no olvidemos el canto del santo nombre ni por un momento (satataṁ kīrtayanto māṁ yatantaś ca dṛḍha-vratāḥ). En el mundo material hay tantos peligros, que, por elevada que sea nuestra posición, podemos caer en cualquier instante. Sin embargo, si nos mantenemos siempre puros y firmes mediante el canto del mahā-mantra Hare Kṛṣṇa, estaremos a salvo sin duda alguna.

Texto

tām eva toṣayām āsa
pitryeṇārthena yāvatā
grāmyair manoramaiḥ kāmaiḥ
prasīdeta yathā tathā

Palabra por palabra

tām — a ella (la prostituta); eva — en verdad; toṣayām āsa — trató de complacer; pitryeṇa — que obtuvo del arduo trabajo de su padre; arthena — con el dinero; yāvatā — en la medida de lo posible; grāmyaiḥ — materiales; manaḥ-ramaiḥ — agradables para la mente de ella; kāmaiḥ — con obsequios para el disfrute de los sentidos; prasīdeta — ella estuviera satisfecha; yathā — de modo que; tathā — de ese modo.

Traducción

Fue así como Ajāmila comenzó a gastar todo el dinero que había heredado de su padre en obsequios materiales para tener contenta a la prostituta. Por satisfacerla, abandonó todas sus actividades brahmínicas.

Significado

En todo el mundo hay muchos ejemplos de personas que, incluso después de haberse purificado, se han sentido atraídos por una prostituta y han gastado en ella todo el dinero de su herencia. Ir tras las prostitutas es tan abominable que, por desear relaciones sexuales con una mujer de esa clase, un hombre puede arruinar por completo su personalidad,echar por tierra su elevada posición y perder todo su dinero. Por lo tanto, la vida sexual ilícita está estrictamente prohibida. El hombre debe vivir satisfecho con su legítima esposa, pues la más ligera desviación causará estragos. El gṛhastha consciente de Kṛṣṇa siempre debe tener esto bien presente. Debe sentirse satisfecho con una esposa, y vivir en paz cantando el mantra Hare Kṛṣṇa. Si no lo hace así, puede caer de su favorable posición en cualquier momento. Sirva como ejemplo el caso de Ajāmila.

Texto

viprāṁ sva-bhāryām aprauḍhāṁ
kule mahati lambhitām
visasarjācirāt pāpaḥ
svairiṇyāpāṅga-viddha-dhīḥ

Palabra por palabra

viprām — la hija de un brāhmaṇa; sva-bhāryām — su esposa; aprauḍhām — no muy mayor (joven); kule — de una familia; mahati — muy respetable; lambhitām — casado; visasarja — abandonó; acirāt — muy pronto; pāpaḥ — siendo pecaminoso; svairiṇyā — de la prostituta; apāṅga-viddha-dhīḥ — con la inteligencia herida por la lujuriosa mirada.

Traducción

El brāhmaṇa Ajāmila cayó víctima de la lujuriosa mirada de la prostituta, que le atravesó la inteligencia, y en su compañía cometió muchas actividades pecaminosas. Llegó hasta al extremo de dejar a su joven y bella esposa, que venía de una familia de brāhmaṇas muy respetable.

Significado

Es costumbre que los hijos hereden las propiedades y el dinero de su padre, y ese fue el caso de Ajāmila. Pero, ¿qué hizo con ese dinero? En lugar de emplearlo en servir a Kṛṣṇa, lo gastó en servir a una prostituta. Por lo tanto, merecía ser condenado y sufrir el castigo de Yamarāja. ¿Cómo le pudo ocurrir esto? Fue víctima de la peligrosa mirada lasciva de la prostituta.

Texto

yatas tataś copaninye
nyāyato ’nyāyato dhanam
babhārāsyāḥ kuṭumbinyāḥ
kuṭumbaṁ manda-dhīr ayam

Palabra por palabra

yataḥ tataḥ — siempre y cuando fuese posible; ca — y; upaninye — obtuvo; nyāyataḥ — del modo correcto; anyāyataḥ — incorrectamente; dhanam — dinero; babhāra — mantuvo; asyāḥ — de ella; kuṭum-binyāḥ — que tenía muchos hijos e hijas; kuṭumbam — a la familia; manda-dhīḥ — privado por completo de inteligencia; ayam — esa persona (Ajāmila).

Traducción

Este sinvergüenza nació en una familia brāhmaṇa, pero, por relacionarse con la prostituta, perdió la inteligencia. Sin reparar en medios, lícitos o ilícitos, se dedicó a conseguir dinero para mantener a los hijos de aquella mujer.

Texto

yad asau śāstram ullaṅghya
svaira-cāry ati-garhitaḥ
avartata ciraṁ kālam
aghāyur aśucir malāt

Palabra por palabra

yat — debido a; asau — este brāhmaṇa; śāstram ullaṅghya — pasar por alto las leyes del śāstra; svaira-cārī — obrando de modo irresponsable; ati-garhitaḥ — muy condenable; avartata — pasó; ciram kālam — mucho tiempo; agha-āyuḥ — cuya vida estuvo llena de actividades pecaminosas; aśuciḥ — impuro; malāt — debido a la impureza.

Traducción

Este brāhmaṇa consumió su larga vida de un modo irresponsable, pasando por alto todas las reglas y regulaciones de las Sagradas Escrituras, dándose al derroche y comiendo alimentos cocinados por una prostituta. Así pues, está lleno de pecados. Es impuro y está apegado a actividades prohibidas.

Significado

Los alimentos cocinados por hombres o mujeres impuros y pecaminosos, y especialmente por prostitutas, son de lo más contaminante. Ajāmila, que comía esos alimentos, merecía el castigo de Yamarāja.

Texto

tata enaṁ daṇḍa-pāṇeḥ
sakāśaṁ kṛta-kilbiṣam
neṣyāmo ’kṛta-nirveśaṁ
yatra daṇḍena śuddhyati

Palabra por palabra

tataḥ — por lo tanto; enam — a él; daṇḍa-pāṇeḥ — de Yamarāja, que está autorizado a castigar; sakāśam — en presencia; kṛta-kilbiṣam — que ha cometido habitualmente todas las actividades pecaminosas; neṣyāmaḥ — llevaremos; akṛta-nirveśam — que no se ha sometido al proceso de expiación; yatra — donde; daṇḍena — con castigo; śuddhyati — se purificará.

Traducción

Este hombre, Ajāmila, no se ha sometido al proceso de expiación. Por lo tanto, en vista de su vida pecaminosa, debemos llevarle ante Yamarāja para que reciba su castigo. Allí, en función de sus pecados, será castigado, y de ese modo se purificará.

Significado

Como los viṣṇudūtas les habían prohibido llevar a Ajāmila ante Yamarāja, los yamadūtas explicaron que lo correcto era que aquel hombre fuese llevado ante Yamarāja. Ajāmila no había expiado sus actos pecaminosos, de modo que iban a llevarle ante Yamarāja para que se purificase. La persona que comete un asesinato es pecaminosa, de modo que debe ser matada; en caso contrario, después de morir tendrá que sufrir muchas reacciones pecaminosas. Del mismo modo, el castigo de Yamarāja es un proceso de purificación para las personas más pecaminosas y abominables. Por esa razón, losyamadūtas pidieron a los viṣṇudūtas que no les impidieran llevar a Ajāmila ante Yamarāja.

Asi terminan los significados de Bhaktivedanta correspondientes al capítulo primero del Canto Sexto del Srīmad-Bhāgavatam, titulado «La historia de la vida de Ajāmila».