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Capítulo 4

Satī abandona el cuerpo

Texto

maitreya uvāca
etāvad uktvā virarāma śaṅkaraḥ
patny-aṅga-nāśaṁ hy ubhayatra cintayan
suhṛd-didṛkṣuḥ pariśaṅkitā bhavān
niṣkrāmatī nirviśatī dvidhāsa sā

Palabra por palabra

maitreyaḥ uvāca — Maitreya dijo; etāvat — tanto; uktvā — después de hablar; virarāma — guardó silencio; śaṅkaraḥ — el Señor Śiva; patnī-aṅga-nāśam — la destrucción del cuerpo de su esposa; hi — pues; ubhayatra — en ambos casos; cintayan — entendiendo; suhṛt-didṛkṣuḥ — tener un gran deseo de ver a sus familiares; pariśaṅkitā — estar asustada; bhavāt — de Śiva; niṣkrāmatī — saliendo; nirviśatī — entrando; dvidhā — dividida; āsa — estaba; — ella (Satī).

Traducción

El sabio Maitreya dijo: El Señor Śiva guardó silencio, viendo que Satī, tras escuchar sus palabras estaba indecisa. Satī tenía un gran deseo de ir a la casa de su padre para ver a sus familiares, pero al mismo tiempo le asustaba la advertencia del Señor Śiva. Llevada por los vaivenes de su mente, se movía como un columpio, saliendo de la habitación y volviendo a entrar.

Significado

En la mente de Satī se planteaba un conflicto entre obedecer las órdenes del Señor Śiva o ir a casa de su padre. Debido a la intensa pugna entre una y otra opción, Satī iba de un lado a otro de la habitación, como el péndulo de un reloj.

Texto

suhṛd-didṛkṣā-pratighāta-durmanāḥ
snehād rudaty aśru-kalātivihvalā
bhavaṁ bhavāny apratipūruṣaṁ ruṣā
pradhakṣyatīvaikṣata jāta-vepathuḥ

Palabra por palabra

suhṛt-didṛkṣā — del deseo de ver a sus familiares; pratighāta — prohibición; durmanāḥ — sintiéndose triste; snehāt — de afecto; rudatī — llorando; aśru-kalā — con lágrimas; ativihvalā — muy afligida; bhavam — al Señor Śiva; bhavānī — Satī; aprati-pūruṣam — sin igual o rival; ruṣā — con ira; pradhakṣyatī — fulminar; iva — como si; aikṣata — miró a; jāta-vepathuḥ — temblando.

Traducción

A Satī le supo muy mal que se le prohibiese ir a casa de su padre a ver a sus familiares. Debido al afecto que sentía por ellos, se le saltaron las lágrimas. Temblando y muy afligida, miró a su excepcional esposo, el Señor Śiva, como si fuera a fulminarlo con la mirada.

Significado

La palabra apratipūruṣam, que aparece en este verso, significa «aquel que no tiene igual». En el mundo material no hay nadie que sea igual al Señor Śiva en cuestión de ecuanimidad. Su esposa, Satī, sabía que él era ecuánime con todos; entonces, ¿por qué en ese caso se mostraba tan cruel con su esposa y no le permitía ir a casa de su padre? Eso era más de lo que ella podía soportar, y miró a su esposo como si estuviese a punto de fulminarlo con la mirada. En otras palabras, puesto que el Señor Śiva es el ātmā (śiva significa también ātmā), lo que en el verso se indica es que Satī estaba dispuesta a suicidarse. Otro significado de la palabra apratipūruṣa es «la persona que no tiene rival». Puesto que no podía convencer al Señor Śiva para que le permitiese ir, Satī se refugió en el arma secreta de las mujeres: el llanto, que obliga al marido a condescender con lo que su esposa proponga.

Texto

tato viniḥśvasya satī vihāya taṁ
śokena roṣeṇa ca dūyatā hṛdā
pitror agāt straiṇa-vimūḍha-dhīr gṛhān
premṇātmano yo ’rdham adāt satāṁ priyaḥ

Palabra por palabra

tataḥ — entonces; viniḥśvasya — resollando; satī — Satī; vihāya — dejar; tam — a él (el Señor Śiva); śokena — por desconsuelo; roṣeṇa — por ira; ca — y; dūyatā — afligida; hṛdā — con el corazón; pitroḥ — de su padre; agāt — se marchó; straiṇa — por su naturaleza femenina; vimūḍha — confundida; dhīḥ — inteligencia; gṛhān — a la casa; premṇā — por afecto; ātmanaḥ — de su cuerpo; yaḥ — quien; ardham — la mitad; adāt — dio; satām — al santo; priyaḥ — querida.

Traducción

A continuación, Satī dejó a su esposo, el Señor Śiva, quien por afecto le había dado la mitad de su cuerpo. Resollando de ira y desconsuelo, se marchó a casa de su padre. Fue un acto poco inteligente, que se debió a su condición de débil mujer.

Significado

Según el concepto védico de la vida familiar, el esposo da a su esposa la mitad de su cuerpo, y ella le da la mitad del suyo a su esposo. En otras palabras, un esposo sin esposa, o viceversa, una esposa sin esposo, están incompletos. Entre el Señor Śiva y Satī existía esa relación marital védica. A veces ocurre que, por debilidad, en la mujer se despierta una intensa atracción por la familia que dejó en la casa paterna, y eso es lo que le ocurrió a Satī. En este verso se indica concretamente que, por debilidad femenina, ella quería dejar a un esposo con tantas cualidades como el Señor Śiva. En otras palabras, la debilidad femenina está presente incluso en la relación entre marido y mujer. Por lo general, la causa de las separaciones matrimoniales es el comportamiento de la mujer; el divorcio se debe a la debilidad femenina. Lo mejor que puede hacer una mujer es regirse por las órdenes su esposo. Eso hace que la vida familiar discurra muy pacífica. Incluso en relaciones familiares tan elevadas como la de Satī y el Señor Śiva es posible que a veces surjan desavenencias, pero esas desavenencias no deben dar pie a que la esposa abandone la protección que le brinda su esposo. Si lo hace, debe entenderse que es por debilidad femenina.

Texto

tām anvagacchan druta-vikramāṁ satīm
ekāṁ tri-netrānucarāḥ sahasraśaḥ
sa-pārṣada-yakṣā maṇiman-madādayaḥ
puro-vṛṣendrās tarasā gata-vyathāḥ

Palabra por palabra

tām — a ella (Satī); anvagacchan — siguieron; druta-vikramām — marchándose a toda prisa; satīm — a Satī; ekām — sola; tri-netra — del Señor Śiva (que tiene tres ojos); anucarāḥ — los seguidores; sahasraśaḥ — a miles; sa-pārṣada-yakṣāḥ — con sus acompañantes personales y con los yakṣas; maṇimat-mada-ādayaḥ — Maṇimān, Mada, etc.; puraḥ-vṛṣa-indrāḥ — con el toro Nandī al frente; tarasā — deprisa; gata-vyathāḥ — sin temor.

Traducción

Cuando vieron que Satī se marchaba sola y a toda prisa, miles de discípulos del Señor Śiva, encabezados por Maṇimān y Mada y con su toro Nandī al frente, se apresuraron a seguirla, acompañados por los yakṣas.

Significado

Satī se iba a toda prisa para que su esposo no pudiera detenerla, pero enseguida la siguieron muchos miles de discípulos del Señor Śiva, encabezados por los yakṣas, Maṇimān y Mada. La palabra gata-vyathāḥ que se emplea en relación con esto significa «sin temor». A Satī no le importaba ir sola; por lo tanto, prácticamente no tenía miedo. También es significativa la palabra anucarāḥ, que indica que los discípulos del Señor Śiva siempre estaban dispuestos a sacrificarlo todo por él. Todos ellos pudieron entender el deseo de Śiva, que no quería que Satī fuese sola. Anucarāḥ significa «aquellos que enseguida pueden entender las intenciones de su señor».

Texto

tāṁ sārikā-kanduka-darpaṇāmbuja-
śvetātapatra-vyajana-srag-ādibhiḥ
gītāyanair dundubhi-śaṅkha-veṇubhir
vṛṣendram āropya viṭaṅkitā yayuḥ

Palabra por palabra

tām — a ella (Satī); sārikā — el pajarillo que ella mimaba; kanduka — pelota; darpaṇa — espejo; ambuja — flor de loto; śveta-ātapatra — sombrilla blanca; vyajana — cāmara; srak — collar de flores; ādibhiḥ — y otras cosas; gītā-ayanaiḥ — acompañada con música; dundubhi — tambores; śaṅkha — caracolas; veṇubhiḥ — con flautas; vṛṣa-indram — sobre el toro; āropya — poniendo; viṭaṅkitāḥ — decorado; yayuḥ — partieron.

Traducción

Los discípulos del Señor Śiva dispusieron un asiento para Satī a lomos de un toro, y le trajeron el pajarillo que ella solía mimar. Le llevaron una flor de loto, un espejo y otros objetos por el estilo para que disfrutase de ellos, y extendieron por encima de ella un gran dosel. Seguida por una banda que cantaba acompañándose de tambores, caracolas y trompetas, la procesión era tan pomposa como un cortejo real.

Texto

ābrahma-ghoṣorjita-yajña-vaiśasaṁ
viprarṣi-juṣṭaṁ vibudhaiś ca sarvaśaḥ
mṛd-dārv-ayaḥ-kāñcana-darbha-carmabhir
nisṛṣṭa-bhāṇḍaṁ yajanaṁ samāviśat

Palabra por palabra

ā — de todas partes; brahma-ghoṣa — con el sonido de los himnos védicos; ūrjita — decorado; yajña — sacrificio; vaiśasam — destrucción de animales; viprarṣi-juṣṭam — al que habían acudido grandes sabios; vibudhaiḥ — con semidioses; ca — y; sarvaśaḥ — en todas direcciones; mṛt — arcilla; dāru — madera; ayaḥ — hierro; kāñcana — oro; darbha — hierba kuśa; carmabhiḥ — pieles; nisṛṣṭa — hechos de; bhāṇḍam — animales y potes para el sacrificio; yajanam — sacrificio; samāviśat — entraron.

Traducción

Llegaron entonces a la casa de su padre, y entraron en el recinto en que se celebraba el sacrificio, donde todos estaban cantando los himnos védicos. Allí estaban reunidos los grandes sabios, brāhmaṇas y semidioses, y había muchos animales para el sacrificio, además de potes hechos de arcilla, piedra, oro, hierba o piel, todos los cuales eran indispensables para el sacrificio.

Significado

Cuando los sabios eruditos y los brāhmaṇas se reúnen para cantar mantras védicos, algunos de ellos se dedican también a debatir acerca de la conclusión de las Escrituras. Así pues, como algunos de los sabios y brāhmaṇas debatían mientras otros cantaban los mantras védicos, la atmósfera estaba saturada de vibraciones sonoras trascendentales. Esas vibraciones sonoras trascendentales se han simplificado en la vibración trascendental Hare Kṛṣṇa, Hare Kṛṣṇa, Kṛṣṇa Kṛṣṇa, Hare Hare / Hare Rāma, Hare Rāma, Rāma Rāma, Hare Hare. En esta era no es probable encontrarse con personas muy versadas en los senderos del entendimiento védico, porque la gente es muy torpe, perezosa y desgraciada. Por esa razón, el Señor Caitanya ha recomendado la vibración sonora de Hare Kṛṣṇa, que también se recomienda en el Śrīmad-Bhāgavatam (11.5.32): yajñaiḥ saṅkīrtana-prāyair yajanti hi sumedhasaḥ. En la época actual es imposible reunir todo lo necesario para un sacrificio, porque la población es pobre y no conoce los mantras védicos necesarios. Por lo tanto, en esta era se recomienda a la gente que se reúna y cante el mantra Hare Kṛṣṇa para satisfacer a la Suprema Personalidad de Dios, a quien acompañan Sus compañeros. Ese verso alude indirectamente al Señor Caitanya, que viene en compañía de Nityānanda, Advaita y otros. Ese es el proceso para ejecutar yajña en esta era.

Otro punto significativo de este verso es que había animales para el sacrificio, lo cual no significa que fuesen a matarlos. Los grandes sabios y almas iluminadas allí reunidos estaban ejecutando yajñas, y su nivel de iluminación se comprobaba mediante el sacrificio de animales, de la misma manera que la ciencia moderna experimenta con animales para determinar la efectividad de una determinada medicina. Los brāhmaṇas a quienes se había confiado la ejecución del yajña eran almas muy iluminadas, y para probar su capacidad, ofrecían al fuego un animal viejo, que salía rejuvenecido. Esa era la prueba de un mantra védico. Aquellos animales no estaban allí para ser matados y comidos. La auténtica finalidad de los sacrificios no es sustituir el papel del matadero, sino poner a prueba ciertos mantras védicos renovando la vida de algún animal. Los animales no se utilizaban por su carne, sino para comprobar el poder de los mantras védicos.

Texto

tām āgatāṁ tatra na kaścanādriyad
vimānitāṁ yajña-kṛto bhayāj janaḥ
ṛte svasṝr vai jananīṁ ca sādarāḥ
premāśru-kaṇṭhyaḥ pariṣasvajur mudā

Palabra por palabra

tām — a ella (Satī); āgatām — habiendo llegado; tatra — allí; na — no; kaścana — nadie; ādriyat — recibió; vimānitām — no recibiendo respetos; yajña-kṛtaḥ — de quien ejecutaba el sacrificio (Dakṣa); bhayāt — por miedo; janaḥ — persona; ṛte — excepto; svasṝḥ — sus propias hermanas; vai — en verdad; jananīm — madre; ca — y; sa-ādarāḥ — con respeto; prema-aśru-kaṇṭhyaḥ — con la garganta llena de lágrimas de afecto; pariṣasvajuḥ — abrazaron; mudā — con rostros alegres.

Traducción

Cuando Satī llegó con sus seguidores al lugar del sacrificio, nadie le brindó una buena acogida, pues todos los presentes temían a Dakṣa. Nadie le dio la bienvenida; solo su madre y sus hermanas, que, con lágrimas en los ojos y alegría en el rostro, salieron a recibirla y le ofrecieron palabras muy dulces.

Significado

Nadie dio una buena acogida a Satī, pero su madre y sus hermanas no pudieron evitarlo. Llevadas por su afecto natural, inmediatamente la abrazaron con lágrimas en los ojos y expresiones de cariño. Esto muestra que la mujer, en general, tiene buen corazón; ninguna medida artificial puede reprimir su amor y su afecto natural. Aunque los hombres allí presentes eran brāhmaṇas eruditos y semidioses, tenían miedo de Dakṣa, su superior, y como sabían que él se disgustaría si daban la bienvenida a Satī, no podían hacerlo, a pesar de que ese deseo estaba en sus mentes. Las mujeres por naturaleza tienen buen corazón, pero los hombres a veces tienen el corazón muy duro.

Texto

saudarya-sampraśna-samartha-vārtayā
mātrā ca mātṛ-ṣvasṛbhiś ca sādaram
dattāṁ saparyāṁ varam āsanaṁ ca sā
nādatta pitrāpratinanditā satī

Palabra por palabra

saudarya — de sus hermanas; sampraśna — con los saludos; samartha — adecuados; vārtayā — noticias; mātrā — por su madre; ca — y; mātṛ-svasṛbhiḥ — por sus tías; ca — y; sa-ādaram — además de respetos; dattām — que se le ofreció; saparyām — adoración, culto; varam — regalos; āsanam — un asiento; ca — y; — ella (Satī); na ādatta — no aceptó; pitrā — por su padre; apratinanditā — sin ser recibida; satī — Satī.

Traducción

Aunque fue recibida por su madre y sus hermanas, ella no dio respuesta a sus palabras de acogida, y aunque le ofrecieron un asiento y regalos, ella no aceptó nada, pues su padre no habló con ella, ni le dio la bienvenida interesándose por su bienestar.

Significado

Satī no aceptó los saludos de sus hermanas y su madre, pues no estaba nada satisfecha con el silencio de su padre. Satī era la hija menor de Dakṣa, y sabía que era su preferida. Pero ahora, debido a la relación que la unía con el Señor Śiva, Dakṣa olvidó todo el afecto que sentía por ella. Eso la entristeció mucho. El concepto corporal material es tan contaminante que incluso la más leve provocación acaba con cualquier relación de amor y afecto. Las relaciones basadas en el cuerpo son tan pasajeras, que aunque sintamos afecto por determinada persona, la menor provocación puede acabar con esa intimidad.

Texto

arudra-bhāgaṁ tam avekṣya cādhvaraṁ
pitrā ca deve kṛta-helanaṁ vibhau
anādṛtā yajña-sadasy adhīśvarī
cukopa lokān iva dhakṣyatī ruṣā

Palabra por palabra

arudra-bhāgam — no habiendo oblaciones para el Señor Śiva; tam — que; avekṣya — ver; ca — y; adhvaram — lugar del sacrificio; pitrā — por su padre; ca — y; deve — al Señor Śiva; kṛta-helanam — habiendo mostrado menosprecio; vibhau — al señor; anādṛtā — sin ser recibida; yajña-sadasi — en la asamblea de sacrificio; adhīśvarī — Satī; cukopa — se puso muy iracunda; lokān — los catorce mundos; iva — como si; dhakṣyatī — quemando; ruṣā — con ira.

Traducción

Presente en el recinto del sacrificio, Satī vio que no se estaban ofreciendo oblaciones para su esposo, el Señor Śiva. Luego comprendió que su padre no solo no había invitado al Señor Śiva, sino que además, cuando vio a la excelsa esposa del Señor Śiva, Dakṣa tampoco le dio la bienvenida. Viendo esto, se puso tan iracunda que miró a su padre como si fuese a quemarlo con los ojos.

Significado

La ofrenda de oblaciones al fuego mientras se canta el mantra védico svāhā es una ofrenda reverencial dirigida a todos los semidioses, grandes sabios y pitās, incluyendo al Señor Brahmā, el Señor Śiva y el Señor Viṣṇu. La costumbre es que Śiva sea uno de los destinatarios de las ofrendas, pero Satī, mientras se encontraba en el recinto del sacrificio, vio que los brāhmaṇas no pronunciaban el mantra para ofrecer oblaciones al Señor Śiva, namaḥ śivāya svāhā. No lo sentía por ella misma, pues venía dispuesta a correr el riesgo de presentarse en casa de su padre sin haber sido invitada, pero quería ver si su esposo estaba recibiendo el debido respeto o no. Ver a sus familiares, sus hermanas y su madre, no era tan importante; es más, no prestó atención al recibimiento que le brindaron, pues lo que más le preocupaba era que en aquel sacrificio se estaba insultando a su esposo. Cuando se dio cuenta de ello, se irritó muchísimo, y miró a su padre con tanta ira que parecía estar quemando a Dakṣa con los ojos.

Texto

jagarha sāmarṣa-vipannayā girā
śiva-dviṣaṁ dhūma-patha-śrama-smayam
sva-tejasā bhūta-gaṇān samutthitān
nigṛhya devī jagato ’bhiśṛṇvataḥ

Palabra por palabra

jagarha — comenzó a censurar; — ella; amarṣa-vipannayā — confusas debido a la ira; girā — con palabras; śiva-dviṣam — el enemigo del Señor Śiva; dhūma-patha — en sacrificios; śrama — con problemas; smayam — muy orgullosos; sva-tejasā — por su orden; bhūta-gaṇān — los fantasmas; samutthitān — dispuestos (a herir a Dakṣa); nigṛhya — detuvo; devī — Satī; jagataḥ — en presencia de todos; abhiśṛṇvataḥ — siendo escuchada.

Traducción

Los seguidores del Señor Śiva, los fantasmas, estaban a punto de herir o matar a Dakṣa, pero Satī les ordenó que se detuvieran. Estaba muy iracunda y llena de tristeza, y en ese estado de ánimo, habló censurando el proceso fruitivo de ejecuciones de sacrificio, y también a las personas que se enorgullecen de esos sacrificios innecesarios y complicados. Censuró especialmente a su padre, hablando en contra de él en presencia de todos.

Significado

La finalidad específica del proceso de ofrecer sacrificios es satisfacer a Viṣṇu, que recibe el nombre de Yajñeśa debido a que es el disfrutador de los frutos de los sacrificios. Esto se confirma también en el Bhagavad-gītā (5.29), donde el Señor dice: bhoktāraṁ yajña-tapasām. Él es el verdadero beneficiario de los sacrificios. Sin saber esto, los hombres poco inteligentes ofrecen sacrificios buscando beneficios materiales. La razón que lleva a personas como Dakṣa y sus seguidores a ejecutar sacrificios es el logro de beneficios materiales personales con vistas a la complacencia de los sentidos. Este verso censura ese tipo de sacrificios, considerándolos como un esfuerzo del que no se obtiene ningún verdadero beneficio, lo cual se confirma en el Śrīmad-Bhāgavatam. Podemos poner en práctica los mandamientos védicos de ofrecer sacrificios y otras actividades fruitivas, pero si esas actividades no despiertan en nosotros la atracción por Viṣṇu, son un esfuerzo inútil. Quien sienta amor por Viṣṇu debe sentir también amor y respeto por los devotos de Viṣṇu. Al Señor Śiva se le considera el más importante de los vaiṣṇavas. Vaiṣṇavānāṁ yathā śambhuḥ. De modo que cuando Satī vio que su padre estaba ejecutando grandes sacrificios pero no era respetuoso conel Señor Śiva que es el devoto más elevado, se puso muy furiosa. Esa ira es correcta; si alguien insulta a Viṣṇu o a un vaiṣṇava, debemos ponernos furiosos. El Señor Caitanya, que siempre predicó la no violencia, la mansedumbre y la humildad, también Se puso muy furioso cuando Jagāi y Mādhāi ofendieron a Nityānanda, y quería matarles. Cuando alguien blasfema o deshonra a Viṣṇu o a un vaiṣṇava, debemos ponernos furiosos. Narottama dāsa Ṭhākura ha dicho: krodha bhakta-dveṣi jane. Sentimos ira, y si esa ira la dirigimos contra una persona envidiosa de la Suprema Personalidad de Dios o de Su devoto, se convierte en una gran cualidad. Cuando una persona es ofensiva con Viṣṇu o con un vaiṣṇava, no debemos ser tolerantes. No hay nada de malo en la ira de Satī contra su padre, pues aunque fuese su padre, estaba tratando de insultar al vaiṣṇava más elevado. De manera que la ira de Satī contra su padre es digna de aplauso.

Texto

devy uvāca
na yasya loke ’sty atiśāyanaḥ priyas
tathāpriyo deha-bhṛtāṁ priyātmanaḥ
tasmin samastātmani mukta-vairake
ṛte bhavantaṁ katamaḥ pratīpayet

Palabra por palabra

devī uvāca — la bendita diosa dijo; na — no; yasya — de quien; loke — en el mundo material; asti — es; atiśāyanaḥ — sin rival; priyaḥ — querido; tathā — tan; apriyaḥ — enemigo; deha-bhṛtām — llevando cuerpos materiales; priya-ātmanaḥ — que es el más querido; tasmin — hacia el Señor Śiva; samasta-ātmani — el ser universal; mukta-vairake — que está libre de toda enemistad; ṛte — excepto; bhavantam — tú; katamaḥ — quién; pratīpayet — sería envidioso.

Traducción

La bendita diosa dijo: El Señor Śiva es el ser más querido de todas las entidades vivientes. No tiene rival. No quiere demasiado a nadie, y nadie es su enemigo. Nadie más que tú podría envidiar a ese ser universal, que está libre de toda enemistad.

Significado

En el Bhagavad-gītā (9.29), el Señor dice: samo ’haṁ sarva-bhūteṣu: «Yo soy ecuánime con todas las entidades vivientes». De manera similar, el Señor Śiva es una encarnación cualitativa de la Suprema Personalidad de Dios, de modo que tiene prácticamente las mismas cualidades que el Señor Supremo. Por consiguiente, es ecuánime con todos; nadie es amigo ni enemigo suyo, pero una persona de naturaleza envidiosa puede sentir enemistad hacia él. Por lo tanto, Satī acusó a su padre: «Nadie más que tú podría sentir envidia del Señor Śiva o ser enemigo suyo». En la asamblea había otros sabios y brāhmaṇas eruditos, pero no tenían envidia del Señor Śiva, a pesar de que todos ellos dependían de Dakṣa. De modo que nadie más que Dakṣa podía tener envidia de Śiva. Esa fue la acusación de Satī.

Texto

doṣān pareṣāṁ hi guṇeṣu sādhavo
gṛhṇanti kecin na bhavādṛśo dvija
guṇāṁś ca phalgūn bahulī-kariṣṇavo
mahattamās teṣv avidad bhavān agham

Palabra por palabra

doṣān — defectos; pareṣām — de los demás; hi — para; guṇeṣu — en las cualidades; sādhavaḥ — sādhus; gṛhṇanti — buscas; kecit — algunos; na — no; bhavādṛśaḥ — como tú; dvija — ¡oh, nacido por segunda vez!; guṇān — cualidades; ca — y; phalgūn — pequeñas; bahulī-kariṣṇavaḥ — realza mucho; mahat-tamāḥ — las personas más elevadas; teṣu — entre ellas; avidat — buscas; bhavān — tú; agham — el defecto.

Traducción

Dakṣa, dos veces nacido: Lo único que sabe hacer un hombre como tú es criticar las buenas cualidades ajenas. El Señor Śiva, sin embargo, no solo no critica a los demás, sino que cuando alguien tiene una buena cualidad, él la realza mucho más. Por desgracia, tú has criticado a un alma tan grande.

Significado

Aquí Satī, la hija del rey Dakṣa, se dirige a su padre con la palabra dvija, «nacido por segunda vez». Los «nacidos por segunda vez» son las clases superiores, es decir, los brāhmaṇas, los kṣatriyas y los vaiśyas. En otras palabras, el dvija no es un hombre corriente; se trata de aquel que ha estudiado las Escrituras védicas con un maestro espiritual y sabe distinguir entre el bien y el mal. Por esa razón, tiene el deber de entender de lógica y de filosofía. Satī, la hija de Dakṣa, le presentó razones bien fundadas. Hay personas de cualidades sublimes que solo tienen en cuenta las buenas cualidades de los demás. Como las abejas, que siempre están interesadas en la miel de las flores y hacen caso omiso de las espinas y los colores, las personas de cualidades sublimes, personas muy poco comunes, solo se paran a considerar las buenas cualidades de los demás, sin tener en cuenta las malas. El hombre común, sin embargo, sabe juzgar las cualidades según sean buenas o malas.

Entre esas almas excepcionales por su bondad también se pueden distinguir varios niveles; en el más elevado se encuentra el alma buena que aprecia la más insignificante cualidad en las personas y la realza. El Señor Śiva recibe también el nombre de Āśutoṣa, que califica al que se satisface con mucha facilidad y ofrece a cualquier persona las bendiciones más elevadas. Por ejemplo, en cierta ocasión, un devoto del Señor Śiva quiso la bendición de que cada vez que tocase a alguien en la cabeza, inmediatamente esa cabeza se separaría del tronco. El Señor Śiva se la concedió. Aunque la bendición que había pedido no era muy digna de elogio, pues el devoto quería matar a su enemigo, el Señor Śiva apreció la buena cualidad que el devoto había manifestado al adorarle y satisfacerle, y le concedió la bendición. De esa manera, el Señor Śiva consideró inmensamente buenas sus malas cualidades. Pero Satī acusó a su padre: «Tú eres justamente lo contrario. Aunque el Señor Śiva tiene tantísimas buenas cualidades y no tiene el menor defecto, tú le has considerado malo y le has criticado, considerando malas sus buenas cualidades; por ello, en lugar de elevarte con las almas más sublimes, te has convertido en el más caído. El hombre que aprecia la bondad de las cualidades de los demás es la más elevada de las almas, pero tú, que sin necesidad alguna has considerado malas las buenas cualidades ajenas, te has convertido en la más baja de las almas caídas».

Texto

nāścaryam etad yad asatsu sarvadā
mahad-vinindā kuṇapātma-vādiṣu
serṣyaṁ mahāpūruṣa-pāda-pāṁsubhir
nirasta-tejaḥsu tad eva śobhanam

Palabra por palabra

na — no; āścaryam — sorprendente; etat — esto; yat — que; asatsu — malvadas; sarvadā — siempre; mahat-vinindā — burlarse de las grandes almas; kuṇapa-ātma-vādiṣu — entre los que creen que el cuerpo muerto es el ser; sa-īrṣyam — envidia; mahā-pūruṣa — de grandes personalidades; pāda-pāṁsubhiḥ — por el polvo de los pies; nirasta-tejaḥsu — cuya gloria se ve rebajada; tat — eso; eva — ciertamente; śobhanam — muy bueno.

Traducción

No es sorprendente que las personas que han identificado su ser con el cuerpo material perecedero se empeñen en burlarse de las grandes almas. Esa envidia de los materialistas es muy buena, porque les hace caer. El polvo de los pies de las grandes personalidades rebaja su posición.

Significado

Todo depende de la fuerza del receptor. Bajo un sol ardiente, por ejemplo, muchas plantas y flores se secan, pero otras muchas crecen exuberantes. De modo que el que crezcan o se marchiten depende del receptor. De la misma manera: mahīyasāṁ pāda-rajo-’bhiṣekam: El polvo de los pies de loto de las grandes personalidades ofrece toda bendición al que lo recibe, pero el mismo polvo también puede hacer daño. Quienes ofenden los pies de loto de una gran personalidad, se marchitan; sus cualidades divinas disminuyen. Una gran alma puede perdonar las ofensas, pero Kṛṣṇa no disculpa las ofensas cometidas contra el polvo de los pies de esa gran alma, de la misma manera que nosotros, aunque podamos tolerar un sol abrasador en la cabeza, no podemos tolerar ese mismo sol en los pies. Un ofensor cae cada vez más bajo; por esa razón, de un modo natural continúa cometiendo ofensas contra los pies de la gran alma. Por lo general, las personas que cometen ofensas son las que se identifican erróneamente con el cuerpo perecedero. El rey Dakṣa estaba profundamente inmerso en el error de identificar el alma y el cuerpo; como era padre del cuerpo de Satī, pensó que su cuerpo era superior al cuerpo del Señor Śiva, y esa fue la causa de las ofensas que cometió contra sus pies de loto. Esa identificación errónea es característica de los poco inteligentes, cuyas actividades se basan en el concepto corporal de la vida. Y como consecuencia, cometen ofensas una y otra vez contra los pies de loto de las grandes almas. Al que basa su vida en ese concepto se le considera en la misma categoría animal que las vacas y los asnos.

Texto

yad dvy-akṣaraṁ nāma gireritaṁ nṛṇāṁ
sakṛt prasaṅgād agham āśu hanti tat
pavitra-kīrtiṁ tam alaṅghya-śāsanaṁ
bhavān aho dveṣṭi śivaṁ śivetaraḥ

Palabra por palabra

yat — el cual; dvi-akṣaram — compuesto de dos letras; nāma — llamado; girā īritam — tan solo con que la lengua lo pronuncie; nṛṇām — personas; sakṛt — una vez; prasaṅgāt — del corazón; agham — actividades pecaminosas; āśu — inmediatamente; hanti — destruye; tat — eso; pavitra-kīrtim — cuya fama es pura; tam — a él; alaṅghya-śāsanam — cuyas órdenes nunca se pasan por alto; bhavān — tú; aho — ¡oh!; dveṣṭi — envidias; śivam — al Señor Śiva; śiva-itaraḥ — que traes malos augurios.

Traducción

Satī continuó: Mi querido padre, al envidiar al Señor Śiva estás cometiendo la mayor de las ofensas, pues incluso su nombre, compuesto de dos sílabas, śi y va, purifica de todas las actividades pecaminosas. Nadie pasa por alto sus órdenes. El Señor Śiva es siempre puro, y excepto tú, nadie lo envidia.

Significado

De las entidades vivientes del mundo material, el Señor Śiva es el alma más grande, y esto hace que su nombre, Śiva, sea muy auspicioso para las personas que identifican el cuerpo y el alma. Si se refugian en el Señor Śiva, esas personas poco a poco llegarán a entender que no son el cuerpo material, sino almas espirituales. Śiva significa maṅgala, «auspicioso». En el cuerpo, el alma es auspiciosa. Ahaṁ brahmāsmi: «Yo soy Brahman». Esta comprensión es auspiciosa. Mientras no comprendamos nuestra identidad como almas, todo lo que hagamos será inauspicioso. Śiva significa «auspicioso», y los devotos del Señor Śiva poco a poco se elevan hasta el plano de identificación espiritual, pero eso no lo es todo. La vida auspiciosa comienza con la identificación espiritual, pero todavía hay más deberes: Tenemos que entender nuestra relación con el Alma Suprema. El verdadero devoto del Señor Śiva alcanza el plano de la iluminación espiritual, pero si no es lo bastante inteligente, se estanca en ese punto y no se eleva por encima de su comprensión de que es alma espiritual (ahaṁ brahmāsmi). Pero, si tiene suficiente inteligencia, debe seguir adelante, actuando como el Señor Śiva, que siempre está absorto en pensar en Vāsudeva. Como antes se explicó: sattvaṁ viśuddhaṁ vasudeva-śabditam: El Señor Śiva siempre está meditando en los pies de loto de Vāsudeva, Śrī Kṛṣṇa. Por lo tanto, para comprender la auspiciosa posición del Señor Śiva hay que adorar a Viṣṇu, pues en el Śiva Purāṇa el Señor Śiva dice que adorar al Señor Viṣṇu es la clase de adoración más elevada. Al Señor Śiva se le adora por ser el más grande devoto del Señor Viṣṇu. Sin embargo, no hay que cometer el error de considerar que el Señor Śiva y el Señor Viṣṇu están en el mismo nivel. Esa idea también es ateísmo. En el Vaiṣṇavīya Purāṇa se recalca que Viṣṇu, Nārāyaṇa, es la excelsa Personalidad Suprema de Dios, y que no hay que equiparar con Él a nadie, ni siquiera al Señor Śiva o al Señor Brahmā, ni, por supuesto, a los demás semidioses.

Texto

yat-pāda-padmaṁ mahatāṁ mano-’libhir
niṣevitaṁ brahma-rasāsavārthibhiḥ
lokasya yad varṣati cāśiṣo ’rthinas
tasmai bhavān druhyati viśva-bandhave

Palabra por palabra

yat-pāda-padmam — los pies de loto de quien; mahatām — de las personalidades elevadas; manaḥ-alibhiḥ — por las abejas de la mente; niṣevitam — estando ocupadas en; brahma-rasa — de felicidad trascendental (brahmānanda); āsava-arthibhiḥ — buscando el néctar; lokasya — del hombre común; yat — que; varṣati — cumple; ca — y; āśiṣaḥ — deseos; arthinaḥ — buscando; tasmai — hacia él (el Señor Śiva); bhavān — tú; druhyati — tienes envidia; viśva-bandhave — del amigo de todas las entidades vivientes que pueblan los tres mundos.

Traducción

Tú tienes envidia del Señor Śiva, que es el amigo de todas las entidades vivientes que pueblan los tres mundos. Él cumple todos los deseos del hombre común, y bendice también a las personalidades elevadas que buscan brahmānanda [felicidad trascendental], pues se ocupan en pensar en sus pies de loto.

Significado

Por lo común, hay dos clases de hombres. Unos, los marcadamente materialistas, quieren prosperidad material; sus deseos se cumplen si adoran al Señor Śiva, quien, siendo muy fácil de complacer, da pronto cumplimiento a los deseos materiales de los hombres comunes; por eso los hombres corrientes siempre están muy dispuestos a adorarle. Además de estos, los que están desengañados o asqueados del modo de vida materialista adoran al Señor Śiva para obtener la salvación, lo cual implica liberarse de la identificación material. El que entiende que no es un cuerpo material sino un alma espiritual, está liberado de la ignorancia. Ese don lo ofrece también el Señor Śiva. Por lo general, la gente practica la religión en busca de prosperidad económica, es decir, para conseguir dinero, pues con dinero pueden satisfacer los sentidos. Pero cuando se desengañan, desean brahmānanda espiritual, fundirse en el Supremo. Esos cuatro principios de la vida material —es decir: religión, prosperidad económica, complacencia de los sentidos y liberación— existen, y el Señor Śiva es el amigo tanto del hombre corriente como del hombre elevado en conocimiento espiritual. Así pues, para Dakṣa no era bueno hacerse enemigo de él. Incluso los vaiṣṇavas, que están por encima tanto de los hombres corrientes como de los hombres elevados de este mundo, adoran al Señor Śiva por ser el vaiṣṇava más elevado. Tenemos entonces que él es el amigo de todos, tanto de los hombres corrientes, como de los hombres elevados y de los devotos del Señor; de manera que nadie debe faltar al respeto al Señor Śiva o enemistarse con él.

Texto

kiṁ vā śivākhyam aśivaṁ na vidus tvad anye
brahmādayas tam avakīrya jaṭāḥ śmaśāne
tan-mālya-bhasma-nṛkapāly avasat piśācair
ye mūrdhabhir dadhati tac-caraṇāvasṛṣṭam

Palabra por palabra

kim — ¿quizás?; śiva-ākhyam — llamado Śiva; aśivam — inauspicioso; na viduḥ — no conocen; tvat anye — aparte de ti; brahma-ādayaḥ — Brahmā y otros; tam — a él (el Señor Śiva); avakīrya — suelto; jaṭāḥ — con el cabello enredado; śmaśāne — en el crematorio; tat-mālya-bhasma-nṛ-kapālī — con un collar de cráneos humanos, y untado con cenizas; avasat — relacionado; piśācaiḥ — con demonios; ye — quien; mūrdhabhiḥ — con la cabeza; dadhati — lugar; tat-caraṇa-avasṛṣṭam — caídas de sus pies de loto.

Traducción

¿Tú crees que el Señor Brahmā y otras personalidades, que son más grandes y respetables que tú, no conocen a ese personaje inauspicioso que lleva el nombre de «Señor Śiva»? Se relaciona con los demonios en el crematorio, lleva el cabello enmarañado y desordenado por todo el cuerpo, y un collar de cráneos humanos; además, se unta con cenizas del crematorio. Pero a pesar de todas esas cualidades inauspiciosas, grandes personalidades como Brahmā le rinden honores, aceptando las flores ofrecidas a sus pies de loto y sosteniéndolas con gran respeto sobre sus propias cabezas.

Significado

Para establecer la supremacía del Señor Śiva, su esposa, Satī, está afirmando que es inútil censurar a una gran personalidad como él. En primer lugar dijo: «Tú dices que el Señor Śiva es inauspicioso porque se relaciona con demonios en hornos crematorios, se cubre el cuerpo con las cenizas de los muertos y se adorna con un collar hecho de cráneos humanos. Has señalado muchísimos defectos, pero no sabes que su posición es siempre trascendental. Parece inauspicioso, pero ¿por qué personalidades de la talla de Brahmā honran el polvo de sus pies de loto, y sostienen sobre sus cabezas con gran respeto esos mismos collares que tú criticas?». Satī, como mujer casta y esposa del Señor Śiva, tenía el deber de dejar bien clara la elevada posición de su esposo, no solo con sentimientos, sino con pruebas. Las Escrituras védicas establecen la conclusión de que el Señor Śiva no es una entidad viviente común. No pertenece al nivel de la Suprema Personalidad de Dios, pero tampoco al de las entidades vivientes comunes. Brahmā, en la mayoría de los casos, es una entidad viviente común. A veces, cuando no hay ninguna entidad viviente cualificada, una expansión del Señor Viṣṇu ocupa el puesto de brahmā, pero, por lo general, el puesto está en manos de alguna entidad viviente muy piadosa de este universo. Por lo tanto, la posición constitucional del Señor Śiva es superior a la del Señor Brahmā, aunque el Señor Śiva apareció como hijo de Brahmā. En este verso se indica que incluso personalidades de la talla de Brahmā aceptan las flores supuestamente inauspiciosas y el polvo de los pies de loto del Señor Śiva. Los nueve grandes sabios descendientes de Brahmā, es decir, Marīci, Atri, Bhṛgu, etc., también tributan al Señor Śiva ese respeto, porque todos ellos saben que el Señor Śiva no es una entidad viviente común.

En muchos Purāṇas, a veces se afirma que un determinado semidiós ha alcanzado una posición tan elevada que está prácticamente al mismo nivel que la Suprema Personalidad de Dios, pero la conclusión de que el Señor Viṣṇu es la Suprema Personalidad de Dios se confirma en todas las Escrituras. En la Brahma-saṁhitā se explica que el Señor Śiva es como el requesón o el yogur. El requesón y la leche no son distintos. Como la leche se transforma en requesón, este en un sentido también es leche. Análogamente, el Señor Śiva en un sentido es la Suprema Personalidad de Dios, pero en otro sentido, no lo es, del mismo modo que el requesón es leche aunque tengamos que diferenciar entre uno y otro. Estas explicaciones se encuentran en las Escrituras védicas. Todas las menciones que encontremos de semidioses que están en posiciones aparentemente más elevadas que la Suprema Personalidad de Dios, son para atraer la atención del devoto hacia esos semidioses en particular. En el Bhagavad-gītā (9.25) también encontramos la afirmación de que, si alguien desea adorar a un semidiós en particular, la Suprema Personalidad de Dios, que está en el corazón de todos, hace que su apego por ese semidiós sea cada vez más grande de manera que pueda elevarse hasta la morada del semidiós al que adora. Yānti deva-vratā devān: Adorando a los semidioses podemos elevarnos hasta sus moradas; de la misma manera, adorando a la Suprema Personalidad de Dios, podemos elevarnos hasta el reino espiritual. Esto se afirma en diversos pasajes de las Escrituras védicas. Aquí Satī alaba al Señor Śiva, en parte a causa del respeto que personalmente siente por él, y en parte a causa de lo excelso de su posición, superior a las entidades vivientes comunes, y superior incluso al Señor Brahmā.

El sentido de la afirmación de Satī era que, teniendo en cuenta que el Señor Brahmā acepta la posición del Señor Śiva, Dakṣa, el padre de Satī, también debería reconocerla. Eso es lo que Satī quería poner de relieve. En realidad ella no fue a casa de su padre para participar en la ceremonia, aunque antes de venir alegase ante su esposo que quería ver a sus hermanas y a su madre. Solo era un pretexto, pues en realidad la idea que abrigaba en su corazón era convencer a su padre, Dakṣa, de que era inútil seguir teniendo envidia del Señor Śiva. Ese era su principal objetivo. No pudiendo convencerle, abandonó el cuerpo que él le había dado, como se verá en los siguientes versos.

Texto

karṇau pidhāya nirayād yad akalpa īśe
dharmāvitary asṛṇibhir nṛbhir asyamāne
chindyāt prasahya ruśatīm asatīṁ prabhuś cej
jihvām asūn api tato visṛjet sa dharmaḥ

Palabra por palabra

karṇau — los oídos; pidhāya — tapándose; nirayāt — debe irse; yat — si; akalpaḥ — incapaz; īśe — el amo; dharma-avitari — el controlador de la religión; asṛṇibhiḥ — por irresponsables; nṛbhiḥ — personas; asyamāne — que blasfemen; chindyāt — debe cortar; prasahya — por la fuerza; ruśatīm — difamando; asatīm — del blasfemo; prabhuḥ — uno puede; cet — si; jihvām — lengua; asūn — (su propia) vida; api — ciertamente; tataḥ — entonces; visṛjet — debe abandonar; saḥ — ese; dharmaḥ — es el proceso.

Traducción

Satī continuó: Si alguien escucha a un irresponsable blasfemar contra el amo y controlador de la religión, debe taparse los oídos y marcharse, en caso de que no pueda castigarlo. Pero si puede matarlo, entonces debe emplear la violencia, cortarle la lengua al blasfemo y matar al ofensor; después, debe abandonar su propia vida.

Significado

El argumento de Satī es que el difamador de una gran personalidad es la más baja de todas las criaturas. Pero, valiéndose del mismo argumento, Dakṣa también podría defenderse diciendo que él era un prajāpati y que, como tal, siendo el amo de muchas criaturas vivientes y uno de los grandes funcionarios para los asuntos más importantes del universo, su posición era tan elevada que ella, Satī, en lugar de difamarle, debería considerar sus buenas cualidades. La respuesta a este argumento es que Satī no difamaba, sino que defendía. Si pudiese, debería haberle cortado la lengua, por haber blasfemado contra el Señor Śiva. En otras palabras, el Señor Śiva es el protector de la religión, y por lo tanto, cualquiera que le difame debe recibir muerte inmediatamente. Después de matarle, se debe abandonar la propia vida. Ese es el proceso, pero Satī, como Dakṣa era su padre, decidió no matarle, sino abandonar su propia vida para expiar el gran pecado que había cometido al escuchar blasfemias contra el Señor Śiva. La instrucción enunciada en este verso del Śrīmad-Bhāgavatam es que bajo ningún concepto se deben tolerar las actividades de una persona que difama a una autoridad o blasfema en su contra. En esa situación, un brāhmaṇa no debe abandonar el cuerpo, pues si lo hiciera sería responsable de matar a un brāhmaṇa; por consiguiente, debe irse del lugar o taparse los oídos para no escuchar la blasfemia. Un kṣatriya tiene poder para castigar a cualquier hombre; por lo tanto, un kṣatriya debería cortarle la lengua y matar al ofensor. Pero en lo que respecta a vaiśyas y a śūdras, deben abandonar el cuerpo inmediatamente. Satī decidió abandonar el cuerpo, porque se consideró entre los śūdras y los vaiśyas. Como se afirma en el Bhagavad-gītā (9.32): striyo vaiśyā s tathā śūdrāḥ. Las mujeres, los trabajadores y la clase mercantil están en el mismo nivel. En consecuencia, puesto que a los vaiśyas y śūdras se les recomienda que si escuchan una blasfemia contra una persona gloriosa como el Señor Śiva, deben abandonar el cuerpo inmediatamente, ella decidió abandonar su vida.

Texto

atas tavotpannam idaṁ kalevaraṁ
na dhārayiṣye śiti-kaṇṭha-garhiṇaḥ
jagdhasya mohād dhi viśuddhim andhaso
jugupsitasyoddharaṇaṁ pracakṣate

Palabra por palabra

ataḥ — por lo tanto; tava — de ti; utpannam — recibido; idam — este; kalevaram — cuerpo; na dhārayiṣye — no cargaré; śiti-kaṇṭha-garhiṇaḥ — que has blasfemado contra el Señor Śiva; jagdhasya — que ha sido comida; mohāt — por error; hi — debido a; viśuddhim — la purificación; andhasaḥ — de comida; jugupsitasya — venenosa; uddharaṇam — vomitar; pracakṣate — declara.

Traducción

Por lo tanto, no voy a cargar más con este cuerpo indigno que he recibido de ti, que has blasfemado contra el Señor Śiva. Para quien haya tomado comida venenosa, el mejor tratamiento es vomitar.

Significado

Satī, siendo la representación de la potencia externa del Señor, tenía poder para destruir muchos universos que contuviesen a muchos Dakṣas. Pero, para salvar a su esposo de la acusación de haberse valido de su esposa Satī para matar a Dakṣa y no poder hacerlo él personalmente por estar en una posición inferior, ella decidió abandonar el cuerpo.

Texto

na veda-vādān anuvartate matiḥ
sva eva loke ramato mahā-muneḥ
yathā gatir deva-manuṣyayoḥ pṛthak
sva eva dharme na paraṁ kṣipet sthitaḥ

Palabra por palabra

na — no; veda-vādān — reglas y regulaciones de los Vedas; anuvartate — siguen; matiḥ — la mente; sve — en su propia; eva — ciertamente; loke — en el ser; ramataḥ — disfrutar; mahā-muneḥ — de trascendentalistas elevados; yathā — como; gatiḥ — el sendero; deva-manuṣyayoḥ — de los hombres y de los semidioses; pṛthak — por separado; sve — en su propio; eva — solo; dharme — deber propio de la ocupación; na — no; param — otro; kṣipet — debe criticar; sthitaḥ — estando situado.

Traducción

Es mejor cumplir con los propios deberes que criticar los ajenos. Los trascendentalistas elevados pueden a veces prescindir de las reglas y regulaciones de los Vedas, pues no necesitan seguirlas. Son como los semidioses, que viajan por el espacio mientras que los hombres comunes viajan por la superficie de la Tierra.

Significado

El comportamiento del trascendentalista más elevado parece idéntico al del alma condicionada más caída. El trascendentalista elevado puede pasar por encima de todas las regulaciones de los Vedas, de la misma manera que los semidioses viajan por el espacio y pasan por encima de las selvas y montañas de la superficie del globo, mientras que el hombre común, que carece de la capacidad de viajar por el espacio, tiene que enfrentarse con todos esos obstáculos. Aunque en apariencia no cumpla todas las reglas y regulaciones de los Vedas, el muy querido Señor Śiva no se ve afectado por esa desobediencia, pero un hombre común que desee imitarle, cometerá una equivocación. El hombre común debe observar todas las reglas y regulaciones de los Vedas que una persona situada en la posición trascendental no necesita observar. Dakṣa criticó al Señor Śiva por no observar las estrictas reglas y regulaciones védicas, pero Satī hizo hincapié en que él no tiene necesidad de observarlas. Se dice que las consideraciones de pureza o impureza no son para el que es poderoso como el sol o como el fuego. La luz del sol puede esterilizar un lugar impuro, pero cualquier otro que pase por ese lugar se contaminará. No debemos tratar de imitar al Señor Śiva; mejor, debemos seguir estrictamente los deberes prescritos para nuestra ocupación. Nunca se debe difamar a una gran personalidad como el Señor Śiva.

Texto

karma pravṛttaṁ ca nivṛttam apy ṛtaṁ
vede vivicyobhaya-liṅgam āśritam
virodhi tad yaugapadaika-kartari
dvayaṁ tathā brahmaṇi karma narcchati

Palabra por palabra

karma — actividades; pravṛttam — apegados al disfrute material; ca — y; nivṛttam — desapegados de la materia; api — ciertamente; ṛtam — verdad; vede — en los Vedas; vivicya — distintas; ubhaya-liṅgam — las características de cada una; āśritam — ordenadas; virodhi — contradictoria; tat — esa; yaugapada-eka-kartari — ambas actividades en una persona; dvayam — dos; tathā — de modo que; brahmaṇi — en el que está situado en el plano trascendental; karma — actividades; na ṛcchati — hace caso omiso.

Traducción

Las directrices de los Vedas regulan dos tipos de actividades: por un lado, las actividades de los apegados al disfrute material, y por otro, las actividades de los que están desapegados de la materia. Y, en función de sus actividades, también las personas pueden ser de dos tipos, bien diferenciados entre sí. Si alguien pretende ver las dos clases de actividades en una misma persona, se contradice. Pero la persona que está situada en el plano trascendental puede hacer caso omiso tanto de unas como de otras.

Significado

Los Vedas regulan las actividades de tal manera que el alma condicionada que ha venido a disfrutar del mundo material pueda hacerlo siguiendo una normas que, en última instancia, harán que se desapegue de ese disfrute material y se prepare para alcanzar la posición trascendental. Las cuatro órdenes sociales —brahmacarya, gṛhastha, vānaprastha y sannyāsa— educan a la persona para que poco a poco llegue al plano de la vida trascendental. Las actividades y la vestimenta de un gṛhastha, un hombre casado, son distintas de las de un sannyāsī, que está en la orden de vida renunciada. Es imposible que una persona adopte las dos órdenes a la vez. Un sannyāsī no puede comportarse como un hombre casado ni un hombre casado puede comportarse como un sannyāsī; pero, por encima de esos dos tipos de personas, es decir, por encima del que se ocupa en actividades materiales y por encima del que ha renunciado a las actividades materiales, se encuentra la persona trascendental a las dos clases de actividades. El Señor Śiva está en la posición trascendental, porque, como antes se explicó, internamente está siempre absorto en pensar en Vāsudeva. Por esa razón, sus actividades no encajan ni con las del gṛhastha ni con las del sannyāsī que está en la orden de vida de renuncia. Él está en la etapa paramahaṁsa, la etapa más elevada de perfección de la vida. Su posición trascendental se explica también en el Bhagavad-gītā (2.52-53), donde se afirma que aquel que se dedica plenamente al servicio trascendental del Señor, ejecutando actividades sin resultados fruitivos, se eleva a la posición trascendental. En ese momento, queda libre de la obligación de seguir los mandamientos védicos, es decir, las múltiples reglas y regulaciones de los Vedas. La persona que está por encima de las directrices de los mandamientos rituales de los Vedas que apuntan a la obtención de diversos objetos atractivos, y que está completamente absorta en pensamientos trascendentales, es decir, en pensar en la Suprema Personalidad de Dios con actitud de servicio devocional, se encuentra en la posición denominada buddhi-yoga o samādhi, éxtasis. Quien alcanza esa etapa queda fuera de la jurisdicción de las actividades védicas, tanto de las que apuntan al disfrute material como de las dirigidas a la renunciación.

Texto

mā vaḥ padavyaḥ pitar asmad-āsthitā
yā yajña-śālāsu na dhūma-vartmabhiḥ
tad-anna-tṛptair asu-bhṛdbhir īḍitā
avyakta-liṅgā avadhūta-sevitāḥ

Palabra por palabra

— no son; vaḥ — tuyas; padavyaḥ — opulencias; pitaḥ — ¡oh, padre!; asmat-āsthitāḥ — que nosotros poseemos; yāḥ — las cuales (opulencias); yajña-śālāsu — en el fuego de sacrificio; na — no; dhūma-vartmabhiḥ — por el sendero de los sacrificios; tat-anna-tṛptaiḥ — satisfechos con el alimento del sacrificio; asu-bhṛdbhiḥ — satisfaciendo las necesidades físicas; īḍitāḥ — alabados; avyakta-liṅgāḥ — de causa no manifiesta; avadhūta-sevitāḥ — obtenidas por las almas autorrealizadas.

Traducción

Mi querido padre, ni tú ni tus aduladores pueden siquiera imaginar la opulencia que nosotros poseemos, pues lo que les interesa a quienes se ocupan en actividades fruitivas mediante la ejecución de grandes sacrificios, es satisfacer las necesidades del cuerpo comiendo alimentos ofrecidos en sacrificio. Con solo desearlo, podemos manifestar nuestras opulencias; solo las grandes personalidades, que son almas renunciadas y autorrealizadas pueden lograr esto.

Significado

El padre de Satī tenía la impresión de que él, tanto en prestigio como en opulencia, era muy elevado, y de que había casado a su hija con una persona que, además de pobre, no tenía cultura. Tal vez estuviera pensando que aunque ella era una mujer casta, muy fiel a su esposo, la condición de este era muy de lamentar. Para contrarrestar esos pensamientos, Satī dijo que las personas materialistas, como Dakṣa y sus seguidores, a los que calificó de aduladores ocupados en actividades fruitivas, no podían entender la opulencia de su esposo. La posición de su esposo era distinta. Poseía todas las opulencias, pero no le gustaba mostrarlas. Por lo tanto, esas opulencias eran avyakta, no manifiestas. Pero si fuera necesario, el Señor Śiva, con tan solo desearlo, podría mostrar sus maravillosas opulencias, y esa predicción pronto se cumpliría. La opulencia del Señor Śiva se disfruta en forma de renunciación y amor por Dios, no como una manifestación material de métodos de complacencia de los sentidos. Esas opulencias son propias exclusivamente de personalidades como los Kumāras, Nārada, el Señor Śiva, etc.

En este verso se censura a los ejecutores de rituales védicos, a los que se ha calificado de dhūma-vartmabhiḥ, «aquellos que se mantienen a base de remanentes de alimento ofrecido en sacrificio». Los alimentos ofrecidos en sacrificio pueden ser de dos clases. La primera es el alimento ofrecido en sacrificios rituales fruitivos, y la segunda, la mejor, es el alimento ofrecido a Viṣṇu. En ambos casos, la Deidad que preside el altar del sacrificio es Viṣṇu, pero el objetivo de los ejecutores de rituales fruitivos es satisfacer a diversos semidioses, para recibir, a cambio, una cierta prosperidad material. Sin embargo, el verdadero sacrificio consiste en satisfacer al Señor Viṣṇu, y los remanentes de esos sacrificios son beneficiosos para el progreso en el servicio devocional. En este verso se censura, por su lentitud, el proceso de elevación mediante la ejecución de sacrificios que no tienen por objetivo a Viṣṇu. En palabras de Viśvanātha Cakravartī, los ejecutores de rituales son como cuervos, porque los cuervos se deleitan comiendo los remanentes de alimentos tirados al cubo de la basura. También Satī censura a todos los brāhmaṇas presentes en el sacrificio.

Tanto si el rey Dakṣa y sus aduladores podían entender la posición del Señor Śiva como si no, Satī quiso hacer comprender a su padre que no debía pensar que su esposo carecía de opulencia. Satī, la devota esposa del Señor Śiva, ofrece toda clase de opulencias materiales a los adoradores de su esposo. Este hecho se explica en el Décimo Canto del Śrīmad-Bhāgavatam. A veces parece que los adoradores del Señor Śiva son más opulentos que los adoradores del Señor Viṣṇu, debido a que Durgā, es decir, Satī, tiene a su cargo la superintendencia de las cosas materiales, y para glorificar a su esposo, puede ofrecer toda opulencia a los adoradores del Señor Śiva, mientras que los adoradores de Viṣṇu buscan la elevación espiritual, razón por la cual a veces su opulencia material disminuye. Estas cuestiones se comentan puntualmente en el Décimo Canto.

Texto

naitena dehena hare kṛtāgaso
dehodbhavenālam alaṁ kujanmanā
vrīḍā mamābhūt kujana-prasaṅgatas
taj janma dhig yo mahatām avadya-kṛt

Palabra por palabra

na — no; etena — por este; dehena — por el cuerpo; hare — al Señor Śiva; kṛta-āgasaḥ — habiendo cometido ofensas; deha-udbhavena — que es producto de tu cuerpo; alam alam — bastante; ku-janmanā — con un nacimiento despreciable; vrīḍā — vergüenza; mama — mi; abhūt — era; ku-jana-prasaṅgataḥ — de la relación con una mala persona; tat janma — ese nacimiento; dhik — vergonzoso; yaḥ — quien; mahatām — de las grandes personalidades; avadya-kṛt — un ofensor.

Traducción

Eres un ofensor contra los pies de loto del Señor Śiva, y para mi desgracia, mi cuerpo procede del tuyo. Siento mucha vergüenza del parentesco que me une a ti, y reniego de mí misma por tener un cuerpo contaminado por la relación con un ofensor contra los pies de loto de la más grande de las personalidades.

Significado

El Señor Śiva es el más grande de los devotos del Señor Viṣṇu. Las Escrituras dicen: vaiṣṇavānāṁ yathā śambhuḥ: Śambhu, el Señor Śiva, es el más grande de los devotos del Señor Viṣṇu. En los versos anteriores, Satī ha explicado que la posición del Señor Śiva es siempre trascendental, pues está situado en vāsudeva puro. Vāsudeva es el estado del cual nace Kṛṣṇa, Vāsudeva; de manera que el Señor Śiva es el devoto más grande del Señor Kṛṣṇa, y el comportamiento de Satī es ejemplar, porque nadie debe consentir blasfemias contra el Señor Viṣṇu o contra Su devoto. El pesar de Satī no se debe a su relación personal con el Señor Śiva, sino a los lazos de parentesco que hay entre su cuerpo y el de Dakṣa, que es un ofensor contra los pies de loto del Señor Śiva. Haber recibido el cuerpo de un padre como Dakṣa, le hace renegar de sí misma.

Texto

gotraṁ tvadīyaṁ bhagavān vṛṣadhvajo
dākṣāyaṇīty āha yadā sudurmanāḥ
vyapeta-narma-smitam āśu tadā ’haṁ
vyutsrakṣya etat kuṇapaṁ tvad-aṅgajam

Palabra por palabra

gotram — relación familiar; tvadīyam — tuya; bhagavān — el poseedor de todas las opulencias; vṛṣadhvajaḥ — el Señor Śiva; dākṣāyaṇī — Dākṣāyaṇī (la hija de Dakṣa); iti — así; āha — llama; yadā — cuando; sudurmanāḥ — muy deprimida; vyapeta — desaparecen; narma-smitam — mi optimismo y mi sonrisa; āśu — inmediatamente; tadā — entonces; aham — yo; vyutsrakṣye — voy a abandonar; etat — este (cuerpo); kuṇapam — cuerpo muerto; tvat-aṅga-jam — que procede de tu cuerpo.

Traducción

Debido al parentesco que me une contigo, nada más oír al Señor Śiva llamándome Dākṣāyaṇī, me deprimo y pierdo el optimismo y la sonrisa. Me siento muy triste de que mi cuerpo, que no es más que una bolsa, proceda de ti. Por esa razón, voy a abandonarlo.

Significado

La palabra dākṣāyaṇī significa «la hija del rey Dakṣa». A veces, en conversaciones informales entre los esposos, el Señor Śiva llamaba a Satī «hija del rey Dakṣa»; la sola mención de esa palabra hacía que Satī recordase su parentesco con el rey, y que inmediatamente se sintiera avergonzada, pues Dakṣa era la encarnación de todas las ofensas. Habiendo blasfemado injustamente contra una gran personalidad como el Señor Śiva, Dakṣa era la personificación de la envidia. Debido al contexto evocado con la palabra dākṣāyaṇī, Satī se sentía afligida nada más oírla, pues le recordaba que su cuerpo era el símbolo de todo lo ofensivo que Dakṣa llevaba dentro. Como su cuerpo era una constante fuente de desdicha, decidió abandonarlo.

Texto

maitreya uvāca
ity adhvare dakṣam anūdya śatru-han
kṣitāv udīcīṁ niṣasāda śānta-vāk
spṛṣṭvā jalaṁ pīta-dukūla-saṁvṛtā
nimīlya dṛg yoga-pathaṁ samāviśat

Palabra por palabra

maitreyaḥ uvāca — Maitreya dijo; iti — de este modo; adhvare — en el recinto del sacrificio; dakṣam — a Dakṣa; anūdya — hablando; śatru-han — ¡oh, aniquilador de enemigos!; kṣitau — en el suelo; udīcīm — mirando al norte; niṣasāda — se sentó; śānta-vāk — en silencio; spṛṣṭvā — después de tocar; jalam — agua; pīta-dukūla-saṁvṛtā — vestida con ropas amarillas; nimīlya — cerrar; dṛk — la vista; yoga-patham — el proceso de yoga místico; samāviśat — se absorbió.

Traducción

El sabio Maitreya dijo a Vidura: ¡Oh, aniquilador de enemigos!, diciendo estas palabras a su padre en el recinto del sacrificio, Satī se sentó en el suelo mirando hacia el norte. Vestida con ropas de color azafrán, tocó agua para santificarse y cerró los ojos para absorberse en el proceso del yoga místico.

Significado

Se dice que cuando alguien desea abandonar el cuerpo, se viste con ropas azafrán. Según parece, Satī se había cambiado de ropa, indicando con ello que iba a abandonar el cuerpo que Dakṣa le había dado. Como Dakṣa era padre de Satī, ella, en lugar de matarle, decidió que sería mejor destruir la parte de su cuerpo que era suya. De manera que decidió abandonar el cuerpo de Dakṣa mediante el proceso yóguico. Satī era la esposa del Señor Śiva, a quien se conoce con el nombre de Yogeśvara, «el mejor entre los yogīs», pues conoce todos los procesos místicos de yoga, y según parece, también Satī los conocía. O bien pudo haberlos aprendido de su esposo, o bien su iluminación se debía a que era la hija de un rey tan importante como Dakṣa. La perfección del yoga consiste en poder abandonar el cuerpo y liberar voluntariamente al ser de los elementos materiales que constituyen su envoltura corporal. Los yogīs que han alcanzado la perfección no se ven afectados por las leyes naturales de la muerte; esos yogīs perfectos pueden dejar el cuerpo en el momento en que lo deseen. Por lo general, el yogī comienza por alcanzar la madurez en el control del aire que circula por el cuerpo, hasta que sitúa el alma en el punto más alto del cerebro. Entonces, cuando el cuerpo estalla en llamas, el yogī puede ir al lugar que desee. Este sistema de yoga reconoce la existencia del alma, y es, por consiguiente, distinto del mal llamado proceso de yoga para el control de las células del cuerpo, que es un proceso de reciente invención. El verdadero proceso de yoga acepta la transmigración del alma de un planeta a otro y de un cuerpo a otro; de este incidente se desprende que Satī deseaba transferir su alma a otro cuerpo o a otra esfera.

Texto

kṛtvā samānāv anilau jitāsanā
sodānam utthāpya ca nābhi-cakrataḥ
śanair hṛdi sthāpya dhiyorasi sthitaṁ
kaṇṭhād bhruvor madhyam aninditānayat

Palabra por palabra

kṛtvā — después de situar; samānau — en equilibrio; anilau — los aires prāṇa y apāna; jita-āsanā — habiendo controlado la postura de sentarse; — Satī; udānam — el aire vital; utthāpya — elevar; ca — y; nābhi-cakrataḥ — en el círculo del ombligo; śanaiḥ — gradualmente; hṛdi — en el corazón; sthāpya — situar; dhiyā — con la inteligencia; urasi — hacia el conducto pulmonar; sthitam — haber sido situado; kaṇṭhāt — por la garganta; bhruvoḥ — de las cejas; madhyam — en medio; aninditā — la intachable (Satī); ānayat — elevó.

Traducción

En primer lugar se sentó en la postura prescrita, y a continuación llevó hacia arriba el aire vital hasta situarlo en la posición de equilibrio próxima al ombligo. Después elevó el aire vital, mezclado con la inteligencia, hasta el corazón, y luego, gradualmente hasta el conducto pulmonar, y desde ahí, hasta el entrecejo.

Significado

El proceso de yoga consiste en controlar en seis círculos específicos, denominados ṣaṭ-cakra, el aire que circula dentro del cuerpo. Se trata de elevar el aire desde el abdomen hasta el ombligo, del ombligo al corazón, del corazón a la garganta, de la garganta al entrecejo, y de ahí hasta el punto más alto del cerebro. En esto consiste, en esencia, la práctica del yoga. Antes de practicar el sistema de yoga en sí, hay que practicar las posturas de sentarse, pues ayudan en los ejercicios respiratorios que controlan los aires ascendentes y descendentes. Es una técnica muy elaborada, cuya práctica es imprescindible para alcanzar la etapa más perfecta del yoga, pero en esta era no es viable. En esta era nadie puede alcanzar la etapa perfecta de ese yoga, pero la gente se dedica a practicar posturas de sentarse, que más o menos vienen a ser ejercicios de gimnasia. Con esa gimnasia podemos mejorar la circulación de la sangre, y con ello, mantener el cuerpo sano, pero si nos limitamos a esos ejercicios de gimnasia, no podremos alcanzar la etapa de perfección más elevada. El proceso de yoga, según se explica en el Keśava-śruti, dicta el método mediante el cual podemos controlar a voluntad nuestra fuerza vital, y transmigrar de un cuerpo a otro o de un lugar a otro. Cualquier proceso trascendental de iluminación espiritual es suficiente para mantener el cuerpo sano, pues el cuerpo se mantiene fresco debido a la presencia del alma espiritual. Tan pronto como esta lo abandona, el cuerpo material comienza a descomponerse. Cualquier proceso espiritual mantiene el cuerpo sano sin necesidad de esfuerzos suplementarios, pero si alguien cree que el yoga no tiene más objeto que mantener el cuerpo sano, se equivoca. La verdadera perfección del yoga consiste en elevar el alma a una posición superior, es decir, liberarla del enredo material. Unos yogīs se esfuerzan por elevar el alma hasta los sistemas planetarios superiores, donde el nivel de vida no es como el de este planeta, y donde hay más comodidades materiales, mayor duración de la vida, y en general, más y mejores medios para alcanzar la autorrealización; otros yogīs se esfuerzan por elevarla hasta el mundo espiritual, los planetas Vaikuṇṭhas. El proceso de bhakti-yoga eleva al alma directamente hasta los planetas espirituales, donde la vida es eterna y plena de felicidad y conocimiento; por esa razón, se considera que el bhakti-yoga es el más grande de todos los sistemas de yoga.

Texto

evaṁ sva-dehaṁ mahatāṁ mahīyasā
muhuḥ samāropitam aṅkam ādarāt
jihāsatī dakṣa-ruṣā manasvinī
dadhāra gātreṣv anilāgni-dhāraṇām

Palabra por palabra

evam — de este modo; sva-deham — su propio cuerpo; mahatām — de los grandes santos; mahīyasā — muy adorable; muhuḥ — una y otra vez; samāropitam — sentada; aṅkam — en el regazo; ādarāt — respetuosamente; jihāsatī — deseando abandonar; dakṣa-ruṣā — por la ira que sentía contra Dakṣa; manasvinī — voluntariamente; dadhāra — situó; gātreṣu — en los miembros del cuerpo; anila-agni-dhāraṇām — meditación en el fuego y el aire.

Traducción

Fue así como, para abandonar su cuerpo, el mismo cuerpo que se había sentado respetuosa y afectuosamente en el regazo del Señor Śiva, a quien adoran los grandes sabios y santos, Satī, debido a la ira que su padre le inspiraba, comenzó a meditar en el aire ardiente del interior del cuerpo.

Significado

En este verso se describe al Señor Śiva como «la mejor de todas las grandes almas». A pesar de que el cuerpo de Satī había nacido de Dakṣa, el Señor Śiva solía adorarla sentándola en su regazo, gesto que se considera una gran muestra de respeto. De modo que el de Satī no era un cuerpo corriente; pero ella, a pesar de todo, decidió abandonarlo, pues estaba vinculado a Dakṣa, y por lo tanto, era una fuente de desdichas. Este ejemplo riguroso dado por Satī es digno de ser seguido. Hay que ser muy prudente en lo tocante a la relación con personas que no sean respetuosas con las autoridades superiores. Por consiguiente, en las Escrituras védicas se enseña que siempre hay que estar libre de la relación con ateos y no devotos, y que siempre hay que tratar de relacionarse con devotos, pues esa relación puede elevarnos al plano de la autorrealización. Ese mismo mandamiento se repite en muchos pasajes del Śrīmad-Bhāgavatam; quien desee liberarse de las garras de la existencia material, tiene que relacionarse con grandes almas, y quien desee continuar su vida en la existencia material, puede relacionarse con personas materialistas. El modo de vida materialista se basa en la vida sexual. Por esa razón, las Escrituras védicas rechazan tanto la adicción a la vida sexual como la relación con personas adictas a ella, pues esa relación no hará más que entorpecer el progreso espiritual de la persona. Sin embargo, quien se relacione con grandes personalidades, con devotos que sean grandes almas, se elevará al plano espiritual. Satīdevī decidió abandonar el cuerpo que había obtenido de Dakṣa, y quiso pasar a otro, en el cual pudiera tener con el Señor Śiva una relación completamente libre de contaminación. Por supuesto, se sabe que en su siguiente vida nacería como Pārvatī, la hija de los Himālayas, y que aceptaría de nuevo al Señor Śiva por esposo. La relación entre Satī y el Señor Śiva es eterna; su relación no se rompe ni siquiera cuando ella cambia de cuerpo.

Texto

tataḥ sva-bhartuś caraṇāmbujāsavaṁ
jagad-guroś cintayatī na cāparam
dadarśa deho hata-kalmaṣaḥ satī
sadyaḥ prajajvāla samādhijāgninā

Palabra por palabra

tataḥ — allí; sva-bhartuḥ — de su esposo; caraṇa-ambuja-āsavam — en el néctar de los pies de loto; jagat-guroḥ — del maestro espiritual supremo del universo; cintayatī — meditar; na — no; ca — y; aparam — no otro (que su esposo); dadarśa — vio; dehaḥ — su cuerpo; hata-kalmaṣaḥ — siendo destruidas las manchas de pecado; satī — Satī; sadyaḥ — pronto; prajajvāla — quemada; samādhi-ja-agninā — por el fuego producido por la meditación.

Traducción

Satī concentró totalmente su meditación en los santos pies de loto de su esposo, el Señor Śiva, quien es el maestro espiritual supremo del mundo entero. De esa manera, se limpió por completo de toda mancha de pecado, y meditando en los elementos ígneos, abandonó el cuerpo envuelta en un fuego ardiente.

Significado

Satī meditó de inmediato en los pies de loto de su esposo, el Señor Śiva, que es una de las tres grandes personalidades de Dios que se encargan de la administración del mundo material; el placer que experimentó con tan solo meditar en sus pies de loto fue tan grande, que se olvidó de todo lo relacionado con el cuerpo. Es cierto que ese placer era material, pues cambió su cuerpo por otro que también era material, pero este ejemplo nos permite valorar el placer que siente el devoto cuando concentra su mente y su atención en los pies de loto del Señor Supremo, Viṣṇu, Kṛṣṇa. La meditación en los pies de loto del Señor proporciona tanta felicidad trascendental que hace que lo olvidemos todo, con excepción de la forma trascendental del Señor. Esa es la perfección del samādhi yóguico, o éxtasis. En este verso se afirma que esa meditación la liberó de toda contaminación. ¿De qué contaminación se trataba? Se trataba de su concepto del cuerpo que había recibido de Dakṣa; sin embargo, sumida en trance, se olvidó de aquel vínculo corporal. Esto significa que cuando una persona se libera de todas las relaciones corporales del mundo material y simplemente asume la posición de sirviente eterno del Señor Supremo, debe entenderse que toda la contaminación de su apego material ha sido quemada por las ardientes llamas del éxtasis trascendental. No es necesaria la manifestación externa de ese fuego ardiente, pues cuando esa persona olvida todas sus relaciones corporales en el mundo material y se establece en su identidad espiritual, se dice que se ha liberado de toda contaminación material merced al fuego ardiente del samādhi yóguico, o éxtasis. Esa es la perfección suprema del yoga. Aquel que conserve sus relaciones corporales en el mundo material y presuma de ser un gran yogī, no es un yogī genuino. En el Śrīmad-Bhāgavatam (2.4.15), se afirma: yat-kīrtanaṁ yat-smaraṇaṁ: Con simplemente cantar el santo nombre de la Suprema Personalidad de Dios, recordar los pies de loto de Kṛṣṇa u ofrecer oraciones a la Suprema Personalidad de Dios, la persona se libera de inmediato de la contaminación material, es decir, del concepto corporal material, merced al ardiente fuego del éxtasis. Ese efecto se produce inmediatamente, sin la menor tardanza.

Según Śrī Jīva Gosvāmī, el hecho de que Satī abandonara el cuerpo significa que abandonó de corazón su relación con Dakṣa. Śrī Viśvanātha Cakravartī Ṭhākura comenta además que Satī, siendo la deidad superintendente de la potencia externa, cuando abandonó el cuerpo no recibió un cuerpo espiritual, sino que simplemente se marchó del cuerpo que había recibido de Dakṣa. Otros comentaristas dicen que entró inmediatamente en el vientre de Menakā, su futura madre. Abandonó el cuerpo que había recibido de Dakṣa, e inmediatamente pasó a otro cuerpo mejor, lo cual no quiere decir que obtuviera un cuerpo espiritual.

Texto

tat paśyatāṁ khe bhuvi cādbhutaṁ mahad
hā heti vādaḥ sumahān ajāyata
hanta priyā daivatamasya devī
jahāv asūn kena satī prakopitā

Palabra por palabra

tat — eso; paśyatām — de los que habían visto; khe — en el cielo; bhuvi — en la Tierra; ca — y; adbhutam — maravilloso; mahat — grande; — ¡oh!, ¡oh!; iti — de este modo; vādaḥ — clamor; su-mahān — tumultuoso; ajāyata — ocurrido; hanta — ¡ay!; priyā — la querida; daiva-tamasya — del semidiós más respetable (el Señor Śiva); devī — Satī; jahau — abandonó; asūn — la vida; kena — por Dakṣa; satī — Satī; prakopitā — enfadada.

Traducción

Cuando Satī, iracunda, aniquiló su cuerpo, por todo el universo se levantó un clamor tumultuoso. ¿Por qué razón Satī, la esposa del Señor Śiva, el semidiós más respetable, había abandonado el cuerpo de aquella manera?

Significado

Un clamor tumultuoso se levantó por todo el universo en las sociedades de los semidioses de los diversos planetas. Satī era hija de Dakṣa, el más grande de los reyes, y esposa del Señor Śiva, el más grande de los semidioses, pero estaba tan iracunda que abandonó el cuerpo. ¿Cómo era posible? Siendo hija y esposa de dos grandes personalidades, tenía todo lo que podía desear. Pero, aun así, estaba insatisfecha y abandonó el cuerpo. En verdad, era algo sorprendente. Ni siquiera rodeado de la mayor opulencia material se puede alcanzar la satisfacción completa. Bien fuera por el padre con el que estaba relacionada o por su relación con el más grande de los semidioses, Satī podía tener todo lo que desease. Aun así, por alguna razón, estaba insatisfecha. Por esto el Śrīmad-Bhāgavatam (1.2.6) explica que debemos obtener auténtica satisfacción (yayātmā suprasīdati); pero lo único que da satisfacción plena al ātmā —el cuerpo, la mente y el alma— es el servicio devocional a la Verdad Absoluta. Sa vai puṁsāṁ paro dharmo yato bhaktir adhokṣaje. Adhokṣaja significa «la Verdad Absoluta». Si conseguimos establecer nuestra relación de amor inquebrantable con la trascendental Personalidad Suprema de Dios, lograremos dará satisfacción completa; esa es la única posibilidad de satisfacción que existe, tanto en el mundo material como en cualquier otro lugar.

Texto

aho anātmyaṁ mahad asya paśyata
prajāpater yasya carācaraṁ prajāḥ
jahāv asūn yad-vimatātmajā satī
manasvinī mānam abhīkṣṇam arhati

Palabra por palabra

aho — ¡oh!; anātmyam — desdén; mahat — grande; asya — de Dakṣa; paśyata — tan solo mira; prajāpateḥ — del prajāpati; yasya — de quien; cara-acaram — todas las entidades vivientes; prajāḥ — descendencia; jahau — abandonó; asūn — el cuerpo; yat — por quien; vimatā — no respetada; ātma- — su propia hija; satī — Satī; manasvinī — voluntariamente; mānam — respeto; abhīkṣṇam — repetidamente; arhati — merecido.

Traducción

Dakṣa era prajāpati, el sustentador de todas las entidades vivientes, y Satī, además de ser casta, era una gran alma. Resultaba inconcebible que Dakṣa hubiera sido tan irrespetuoso con su propia hija como para que ella abandonase el cuerpo debido a su desprecio.

Significado

Es significativa la palabra anātmya. Ātmya significa «la vida del alma», y este verso indica que Dakṣa, aunque parecía vivo, en realidad era un cuerpo muerto. De no ser así, ¿cómo hubiera podido desdeñar a Satī, que era su propia hija? Como prajāpati, gobernador de todas las entidades vivientes, Dakṣa tenía el deber de velar por su sustento y su comodidad. En esas circunstancias, ¿cómo es que desdeñaba a su propia hija, que era la mujer más casta y excelsa, que era una gran alma, y que por lo tanto merecía que su padre le dispensase el trato más respetuoso? Para los grandes semidioses del universo la muerte de Satī como reacción a la ofensa de su padre, Dakṣa, era de lo más inconcebible.

Texto

so ’yaṁ durmarṣa-hṛdayo brahma-dhruk ca
loke ’pakīrtiṁ mahatīm avāpsyati
yad-aṅgajāṁ svāṁ puruṣa-dviḍ udyatāṁ
na pratyaṣedhan mṛtaye ’parādhataḥ

Palabra por palabra

saḥ — él; ayam — ese; durmarṣa-hṛdayaḥ — duro de corazón; brahma-dhruk — indigno de ser brāhmaṇa; ca — y; loke — en el mundo; apakīrtim — mala fama; mahatīm — amplia; avāpsyati — obtendrá; yat-aṅga-jām — cuya hija; svām — propia; puruṣa-dviṭ — el enemigo del Señor Śiva; udyatām — que estaba preparando; na pratyaṣedhat — no impidió; mṛtaye — de la muerte; aparādhataḥ — debido a sus ofensas.

Traducción

Dakṣa es tan duro de corazón que es indigno de ser brāhmaṇa; por haber ofendido a su hija, por no haber impedido su muerte, y por su gran envidia de la Suprema Personalidad de Dios, su mala fama se propagará por todas partes.

Significado

Aquí se explica que Dakṣa, siendo muy duro de corazón, no estaba cualificado para ser brāhmaṇa. Algunos comentaristas explican que la palabra brahma-dhruk significa brahma-bandhu, es decir, «amigo de los brāhmaṇas». La persona que nace en una familia de brāhmaṇas pero no tiene las cualidades brahmínicas recibe el nombre de brahma-bandhu. Por lo general, los brāhmaṇas tienen buen corazón y son tolerantes, pues tienen el poder de controlar los sentidos y la mente. Dakṣa, sin embargo, no era tolerante. El mero hecho de que su yerno, el Señor Śiva, no se hubiera levantado para ofrecerle muestras formales de respeto, le irritó y le insensibilizó tanto que consintió incluso la muerte de su hija más querida. Satī hizo lo que pudo para limar asperezas entre yerno y suegro, yendo a casa de su padre incluso sin haber sido invitada. En esa ocasión, Dakṣa debería haberla recibido, olvidando todas las rencillas pasadas. Pero tenía el corazón tan duro que era indigno de ser contado entre los āryas, entre los brāhmaṇas. Y su mala fama aún perdura. Dakṣa significa «experto», y recibió ese nombre debido a su habilidad para engendrar muchos cientos de miles de hijos. Cuando las personas demasiado materialistas y demasiado inclinadas a la vida sexual sufren la más mínima pérdida de prestigio, se vuelven tan duras de corazón que pueden consentir incluso la muerte de sus hijos.

Texto

vadaty evaṁ jane satyā
dṛṣṭvāsu-tyāgam adbhutam
dakṣaṁ tat-pārṣadā hantum
udatiṣṭhann udāyudhāḥ

Palabra por palabra

vadati — comentaban; evam — de este modo; jane — mientras la gente; satyāḥ — de Satī; dṛṣṭvā — después de ver; asu-tyāgam — la muerte; adbhutam — maravillosa; dakṣam — a Dakṣa; tat-pārṣadāḥ — los asistentes del Señor Śiva; hantum — a matar; udatiṣṭhan — se levantaron; udāyudhāḥ — empuñando las armas.

Traducción

Mientras la gente comentaba la asombrosa muerte voluntaria de Satī, los asistentes que la habían acompañado se dispusieron a matar a Dakṣa con sus armas.

Significado

Los asistentes que habían acompañado a Satī, lo habían hecho para protegerla de posibles desgracias, pero como no pudieron proteger a la esposa de su señor, decidieron morir por ella, no sin antes matar a Dakṣa. Todo asistente tiene el deber de proteger a su señor, y en caso de fracasar, su deber es morir.

Texto

teṣām āpatatāṁ vegaṁ
niśāmya bhagavān bhṛguḥ
yajña-ghna-ghnena yajuṣā
dakṣiṇāgnau juhāva ha

Palabra por palabra

teṣām — de ellos; āpatatām — que se acercaban; vegam — el impulso; niśāmya — después de ver; bhagavān — el poseedor de toda opulencia; bhṛguḥ — Bhṛgu Muni; yajña-ghna- ghnena — para matar a los destructores del yajña; yajuṣā — con himnos del Yajur Veda; dakṣiṇa-agnau — en el lado sur del fuego de sacrificio; juhāva — ofreció oblaciones; ha — ciertamente.

Traducción

Se abrieron paso violentamente, pero Bhṛgu Muni vio el peligro, y ofreciendo oblaciones en el lado sur del fuego de sacrificio, sin perder un instante pronunció unos himnos mántricos del Yajur Veda que podían provocar la muerte inmediata a los destructores de las ejecuciones de yajña.

Significado

He aquí un ejemplo de los actos maravillosos que se podían ejecutar con el canto de los poderosos himnos de los Vedas. En la era actual, la era de Kali, no hay posibilidad de encontrar personas expertas en el canto de mantras; esa es la razón de que en esta era estén prohibidos todos los sacrificios que se recomiendan en los Vedas. El único sacrificio recomendado para esta era es el canto del mantra Hare Kṛṣṇa, pues en Kali-yuga no hay posibilidad de reunir los fondos necesarios para ejecutar sacrificios, y mucho menos de encontrar brāhmaṇas expertos que puedan cantar los mantras a la perfección.

Texto

adhvaryuṇā hūyamāne
devā utpetur ojasā
ṛbhavo nāma tapasā
somaṁ prāptāḥ sahasraśaḥ

Palabra por palabra

adhvaryuṇā — por el sacerdote, Bhṛgu; hūyamāne — ofrecidas las oblaciones; devāḥ — semidioses; utpetuḥ — se manifestaron; ojasā — con gran fuerza; ṛbhavaḥ — los ṛbhus; nāma — denominados; tapasā — por penitencia; somam — Soma; prāptāḥ — habiendo obtenido; sahasraśaḥ — por los miles.

Traducción

Tan pronto como Bhṛgu Muni ofreció las oblaciones al fuego, se manifestaron muchos miles de semidioses, denominados ṛbhus. Todos ellos habían obtenido su fuerza de Soma, la Luna, y eran muy poderosos.

Significado

En el verso se explica que las oblaciones ofrecidas al fuego y el canto de los himnos del Yajur Veda hicieron que se manifestasen muchos semidioses, conocidos con el nombre de ṛbhus. Los brāhmaṇas como Bhṛgu Muni eran tan poderosos que, con solo cantar los mantras védicos, podían crear semidioses de gran poder. Los mantras aún se conocen, pero ya no queda nadie que pueda cantarlos. Con el canto de los mantras védicos, o del mantra gāyatrī o el ṛg-mantra, se puede obtener cualquier resultado apetecido. En la era de Kali, la era actual, el Señor Caitanya ha recomendado simplemente el canto de Hare Kṛṣṇa, con el cual se puede alcanzar toda perfección.

Texto

tair alātāyudhaiḥ sarve
pramathāḥ saha-guhyakāḥ
hanyamānā diśo bhejur
uśadbhir brahma-tejasā

Palabra por palabra

taiḥ — por ellos; alāta-āyudhaiḥ — armados con tizones encendidos; sarve — todos; pramathāḥ — los fantasmas; saha-guhyakāḥ — junto con los guhyakas; hanyamānāḥ — siendo atacados; diśaḥ — en todas direcciones; bhejuḥ — huyeron; uśadbhiḥ — incandescentes; brahma-tejasā — por medio del poder brahmínico.

Traducción

Cuando los semidioses ṛbhu atacaron a los fantasmas y guhyakas con leña a medio quemar tomada del fuego del yajña, los asistentes de Satī huyeron en todas direcciones y desaparecieron. Ello se debió simplemente a la acción de brahma-tejas, el poder brahmínico.

Significado

La palabra brahma-tejasā que se emplea en este verso es significativa. En aquellos días los brāhmaṇas eran tan poderosos que bastaba su deseo y el canto de un mantra védico para que pudieran realizar proezas maravillosas. Pero en la actual era de degradación, no hay brāhmaṇas de ese calibre. El sistema pāñcarātrika considera que en esta era la población está compuesta únicamente de śūdras, pues la cultura brahmínica se ha perdido. Pero si alguien da señales de entender la filosofía de conciencia de Kṛṣṇa, debe ser aceptado, de acuerdo con las regulaciones del smṛti vaiṣṇava, como brāhmaṇa en potencia, y debe recibir todo tipo de ayuda encaminada a que pueda obtener la perfección más elevada. En esta era caída, el Señor Caitanya nos ha dejado el más magnánimo de los regalos, poniendo la perfección más elevada de la vida a disposición de todo el que simplemente siga el proceso de cantar Hare Kṛṣṇa, proceso que puede hacer que todas las actividades de autorrealización tengan éxito.

Así terminan los significados de Bhaktivedanta correspondientes al capítulo cuarto del Canto Cuarto del Śrīmad-Bhāgavatam, titulado: «Satī abandona el cuerpo».