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Capítulo 28

Purañjana se reencarna en mujer

Texto

nārada uvāca
sainikā bhaya-nāmno ye
barhiṣman diṣṭa-kāriṇaḥ
prajvāra-kāla-kanyābhyāṁ
vicerur avanīm imām

Palabra por palabra

nāradaḥ uvāca — el gran sabio Nārada continuó hablando; sainikāḥ — los soldados; bhaya-nāmnaḥ — de Bhaya (el Temor); ye — todos los cuales; barhiṣman — ¡oh, rey Prācīnabarhiṣat; diṣṭa-kāriṇaḥ — los mensajeros de la muerte; prajvāra — con Prajvāra; kāla-kanyābhyām — y con Kālakanyā; viceruḥ — viajaron; avanīm — por la Tierra; imām — esta.

Traducción

El gran sabio Nārada continuó: Mi querido rey Prācīnabarhiṣat, después de esto, el rey de los yavanas, cuyo otro nombre es Temor, viajó por todo el mundo junto con Prajvāra, Kālakanyā, y sus soldados.

Significado

El período de la vida inmediatamente anterior a la muerte es verdaderamente muy peligroso, ya que por entonces la persona tiene que sufrir la debilidad de la vejez y el ataque de muchas enfermedades. En este verso, a las enfermedades que atacan al cuerpo se comparan a soldados. No se trata de soldados corrientes, pues atacan bajo la guía del rey de los yavanas, que actúa como comandante en jefe. La palabra diṣṭa-kāriṇaḥ indica que él es su comandante. En la juventud, los hombres no se preocupan por la vejez, sino que tratan de saciar sus deseos de disfrute sexual, sin saber que, al final de la vida, esa promiscuidad sexual les va a traer muchas enfermedades, que perturbarán su cuerpo hasta el punto de hacerles rezar pidiendo la muerte. Cuanto más se disfruta de la vida sexual en la juventud, más se sufre en la vejez.

Texto

ta ekadā tu rabhasā
purañjana-purīṁ nṛpa
rurudhur bhauma-bhogāḍhyāṁ
jarat-pannaga-pālitām

Palabra por palabra

te — ellos; ekadā — una vez; tu — entonces; rabhasā — con gran fuerza; purañjana-purīm — la ciudad de Purañjana; nṛpa — ¡oh, rey!; rurudhuḥ — rodearon; bhauma-bhoga-āḍhyām — llena de disfrutes de los sentidos; jarat — vieja; pannaga — por la serpiente; pālitām — protegida.

Traducción

Un día, aquellos peligrosos soldados lanzaron un violento ataque contra la ciudad de Purañjana. La ciudad estaba llena de objetos para el disfrute sensorial, y la vieja serpiente la protegía.

Significado

El cuerpo, cuando se ocupa en la complacencia de los sentidos, se va debilitando día a día. Al final, la fuerza vital es tan débil que aquí se la compara con una serpiente débil. Ya antes hemos señalado esta comparación entre el aire vital y la serpiente. Cuando el aire vital que circula dentro del cuerpo se debilita, todo el cuerpo se debilita. Es entonces cuando arrecia el ataque de los signos de la muerte, es decir, de los peligrosos soldados de Yamarāja, el superintendente de la muerte. El sistema védico ordena que, antes de llegar a ese estado, el hombre debe abandonar el hogar y entrar en la orden de sannyāsa y predicar el mensaje de Dios el tiempo que le quede de vida. Por el contrario, si se queda en casa, servido por su querida esposa y sus queridos hijos, la complacencia de los sentidos le irá debilitando poco a poco. Por último, cuando llegue la muerte, no tendrá ningún tipo de bienes espirituales que llevarse. En la actualidad, ni siquiera el más anciano de la familia abandona el hogar, debido a la atracción que siente por la esposa, los hijos, el dinero, la opulencia, el lugar de residencia, etc. En los últimos momentos de la vida se pregunta quién va a proteger a su esposa, y cómo va a poder ella hacer frente a las grandes responsabilidades familiares. De esta forma, muy a menudo el hombre piensa en su esposa antes de morir. Según el Bhagavad-gītā (8.6):

yaṁ yaṁ vāpi smaran bhāvaṁ
tyajaty ante kalevaram
taṁ tam evaiti kaunteya
sadā tad-bhāva-bhāvitaḥ

«El estado de existencia que se recuerda al abandonar el cuerpo, ¡oh, hijo de Kuntī!, es el estado que, indefectiblemente, se va a alcanzar».

En el final, la persona piensa en aquello que ha hecho durante toda su vida. Así recibe otro cuerpo (dehāntara) conforme a los pensamientos y deseos que tenga al final de la vida. El que es muy adicto al hogar, en sus últimos momentos pensará, de manera natural, en su querida esposa. En consecuencia, en la siguiente vida recibirá un cuerpo de mujer, y obtendrá además los resultados de sus actividades, tanto piadosas como impías. En este capítulo se explicará detalladamente cómo el rey Purañjana recibió un cuerpo de mujer.

Texto

kāla-kanyāpi bubhuje
purañjana-puraṁ balāt
yayābhibhūtaḥ puruṣaḥ
sadyo niḥsāratām iyāt

Palabra por palabra

kāla-kanyā — la hija de Kāla; api — también; bubhuje — se apoderó de; purañjana-puram — la ciudad de Purañjana; balāt — por la fuerza; yayā — por quien; abhibhūtaḥ — abrumada; puruṣaḥ — una persona; sadyaḥ — inmediatamente; niḥsāratām — inutilidad; iyāt — obtiene.

Traducción

Poco a poco, Kālakanyā, con la ayuda de los peligrosos soldados, fue atacando a todos los habitantes de la ciudad de Purañjana, reduciéndoles a la más absoluta invalidez.

Significado

En las postrimerías de la vida, cuando el hombre es víctima de la incapacidad física de la vejez, su cuerpo se ve reducido a la más absoluta invalidez. Por consiguiente, el sistema educativo de los Vedas establece que, durante la infancia, el hombre debe formarse siguiendo los principios de brahmacarya; es decir, debe ocuparse por completo en el servicio del Señor, y no debe relacionarse nunca con mujeres. Después, el muchacho alcanza la juventud, y entre los veinte y los veinticinco años, puede casarse. Los hijos varones que engendre a esa edad, que es la idónea, crecerán fuertes y sanos. Hoy en día los jóvenes tienen muy poca potencia sexual, y debido a ello predomina la descendencia femenina. Cuando el esposo tiene más potencia sexual que la esposa, nace un hijo varón, pero si ella es más fuerte, nace una niña. Por lo tanto, la práctica del sistema de brahmacarya es esencial para quien desee concebir un hijo varón en su matrimonio. Más tarde, a los cincuenta años, hay que abandonar la vida familiar. El hijo ya es adulto, y el padre le entrega las responsabilidades familiares; los esposos entran entonces en la vida retirada y viajan por diversos lugares de peregrinaje. Cuando ambos pierden el apego por la familia y el hogar, la esposa regresa al hogar y vive bajo la tutela de sus hijos mayores, manteniéndose aparte de los asuntos familiares, y el esposo entra en la orden de sannyāsa, a fin de ofrecer algún servicio a la Suprema Personalidad de Dios.

Esa es la civilización perfecta. La misión específica de la forma humana de vida es la comprensión de Dios. Quien no haya podido emprender el proceso de conciencia de Kṛṣṇa desde el mismo principio de la vida, deberá educarse para aceptar esos principios al final. Por desgracia, ni a los niños se les está impartiendo esa educación, ni nadie puede abandonar la vida familiar, ni siquiera al final de la vida. Esa es la situación en que se encontraba la ciudad de Purañjana, como se explica de manera simbólica en estos versos.

Texto

tayopabhujyamānāṁ vai
yavanāḥ sarvato-diśam
dvārbhiḥ praviśya subhṛśaṁ
prārdayan sakalāṁ purīm

Palabra por palabra

tayā — por Kālakanyā; upabhujyamānām — ser tomada; vai — ciertamente; yavanāḥ — los yavanas; sarvataḥ-diśam — por todos los lados; dvārbhiḥ — por las puertas; praviśya — habiendo entrado; su-bhṛśam — mucho; prārdayan — causar sufrimiento; sakalām — por toda; purīm — la ciudad.

Traducción

Cuando Kālakanyā, la hija del Tiempo, atacó el cuerpo, los peligrosos soldados del rey de los yavanas entraron por las diversas puertas de la ciudad. Una vez dentro, causaron enormes sufrimientos a los ciudadanos.

Significado

El cuerpo tiene nueve puertas, que son los ojos, las fosas nasales, los oídos, la boca, el recto y los genitales. Ante los ataques de la incapacidad física de la vejez, en las puertas del cuerpo se manifiestan diferentes clases de enfermedades. Los ojos, por ejemplo, pierden poder y hay que utilizar lentes; los oídos son demasiado débiles y no pueden escuchar directamente, de modo que hay que ayudarse con algún aparato. Las fosas nasales están taponadas con moco, y hay que estar siempre aspirando algún preparado medicinal a base de amoníaco. De la misma manera, la boca está demasiado débil para masticar, y hacen falta dientes postizos. También el recto causa problemas, y la evacuación resulta muy difícil. A veces hay que administrar enemas, o hay que implantar una cánula mediante una operación quirúrgica para facilitar la salida de la orina. De esta forma, los soldados atacaron la ciudad de Purañjana por todas sus puertas. En la vejez, las enfermedades obstruyen todas las puertas del cuerpo, y hay que recurrir a muchas medicinas y operaciones quirúrgicas.

Texto

tasyāṁ prapīḍyamānāyām
abhimānī purañjanaḥ
avāporu-vidhāṁs tāpān
kuṭumbī mamatākulaḥ

Palabra por palabra

tasyām — cuando la ciudad; prapīḍyamānāyām — fue puesta en muchas dificultades; abhimānī — demasiado absorto; purañjanaḥ — el rey Purañjana; avāpa — obtuvo; uru — muchas; vidhān — clases; tāpān — dolores; kuṭumbī — hombre de familia; mamatā-ākulaḥ — demasiado absorto en el apego a la familia.

Traducción

Cuando Kālakanyā y los soldados pusieron en peligro la ciudad, el rey Purañjana, que estaba demasiado absorto en el apego por su familia, tuvo que enfrentarse a grandes dificultades debido al ataque de Yavana-rāja y Kālakanyā.

Significado

Cuando hablamos del cuerpo, nos referimos tanto al cuerpo denso externo, compuesto de diversos miembros, como a la mente, la inteligencia y el ego. En la vejez, todo ello se debilita ante el ataque de numerosas enfermedades. El propietario del cuerpo, el alma viviente, se apena profundamente al verse incapaz de emplear debidamente el campo de actividades. En el Bhagavad-gītā se explica claramente que la entidad viviente es el propietario del cuerpo (kṣetra-jña), y que el cuerpo es el campo de actividades (kṣetra). Cuando un campo se llena de espinos y de zarzas, a su propietario le resulta muy difícil trabajar en él. Esa es la situación del alma espiritual cuando las enfermedades convierten su cuerpo en una pesada carga. Además, el cuerpo recibe las cargas de la angustia y el deterioro general de las funciones corporales.

Texto

kanyopagūḍho naṣṭa-śrīḥ
kṛpaṇo viṣayātmakaḥ
naṣṭa-prajño hṛtaiśvaryo
gandharva-yavanair balāt

Palabra por palabra

kanyā — por la hija del Tiempo; upagūḍhaḥ — abrazado; naṣṭa-śrīḥ — privado de toda belleza; kṛpaṇaḥ — avaro; viṣaya-ātmakaḥ — adicto a la complacencia de los sentidos; naṣṭa-prajñaḥ — carente de inteligencia; hṛta-aiśvaryaḥ — desprovisto de opulencia; gandharva — por los gandharvas; yavanaiḥ — y por los yavanas; balāt — por la fuerza.

Traducción

Cuando Kālakanyā abrazó al rey Purañjana, este fue perdiendo toda su belleza. Debido a su excesiva adicción a la vida sexual, ahora tenía una inteligencia muy pobre, y había perdido toda su opulencia. Privado de todas sus posesiones, fue violentamente conquistado por los gandharvas y yavanas.

Significado

Cuando una persona atacada por la incapacidad física de la vejez se obstina en la complacencia de los sentidos, pierde poco a poco toda su belleza personal, su inteligencia y sus posesiones. Y entonces, no puede resistir el violento ataque de la hija del Tiempo.

Texto

viśīrṇāṁ sva-purīṁ vīkṣya
pratikūlān anādṛtān
putrān pautrānugāmātyāñ
jāyāṁ ca gata-sauhṛdām

Palabra por palabra

viśīrṇām — desordenada; sva-purīm — su propia ciudad; vīkṣya — ver; pratikūlān — elementos contrarios; anādṛtān — irrespetuosos; putrān — hijos; pautra — nietos; anuga — sirvientes; amātyān — ministros; jāyām — esposa; ca — y; gata-sauhṛdām — indiferente.

Traducción

El rey Purañjana vio entonces que en su ciudad reinaba el desorden, y que sus hijos, nietos, sirvientes y ministros se volvían contra él. También notó que su esposa adoptaba una actitud fría e indiferente.

Significado

Cuando una persona queda físicamente incapacitada, sus sentidos y sus órganos se debilitan. En otras palabras, dejan de estar bajo su control. Los sentidos y los objetos de los sentidos comienzan a ponerse en su contra. En esa condición de sufrimiento, todos le pierden el respeto, incluso los miembros de su familia, sus hijos, sus nietos y su esposa. Todos dejan de respetar la autoridad del señor de la casa. Nosotros queremos utilizar los sentidos para nuestra complacencia, y los sentidos, por su parte, necesitan también que el cuerpo les dé fuerza. El cabeza de familia mantiene a su familia para disfrutar, y de la misma manera, los miembros de la familia exigen de él que les proporcione disfrute. Cuando no les da suficiente dinero, pierden todo interés por él y no hacen caso de sus órdenes ni de sus deseos. Todo se debe a que ese hombre es un kṛpaṇa (avaro). Esta palabra, kṛpaṇa, que se emplea en el sexto verso del capítulo, se opone a brāhmaṇa. En la forma humana de vida debemos volvernos brāhmaṇas, lo cual significa que debemos entender la posición constitucional de la Verdad Absoluta, el Brahman, para luego ocuparnos en Su servicio desde la posición de vaiṣṇavas. Esa es la oportunidad que nos brinda la forma humana de vida; pero si no la aprovechamos como es debido, seremos kṛpaṇas, avaros. Avaro es el que gana dinero pero no lo gasta como es debido. La forma humana de vida está destinada especialmente para que podamos comprender el Brahman, para llegar a ser brāhmaṇas, pero si no la utilizamos como es debido, actuaremos como kṛpaṇas. De hecho, podemos ver que la persona que tiene dinero, pero no lo gasta, vive como un avaro y no es feliz nunca. De manera similar, aquel que arruina su inteligencia, debido a la complacencia de los sentidos, vive como un avaro durante toda su vida.

Texto

ātmānaṁ kanyayā grastaṁ
pañcālān ari-dūṣitān
duranta-cintām āpanno
na lebhe tat-pratikriyām

Palabra por palabra

ātmānam — él mismo; kanyayā — por Kālakanyā; grastam — abrazado; pañcālān — Pañcāla; ari-dūṣitān — afectado por los enemigos; duranta — insuperable; cintām — angustia; āpannaḥ — habiendo obtenido; na — no; lebhe — logró; tat — de eso; pratikriyām — neutralización.

Traducción

Cuando vio que toda su familia, sus parientes, sus seguidores, sus sirvientes, sus secretarios, y todos en general, se habían vuelto contra él, el rey Purañjana sintió una profunda angustia. Sin embargo, no podía hacer nada, pues Kālakanyā le dominaba por completo.

Significado

Cuando una persona se debilita por el ataque de la vejez, sus familiares, sirvientes y secretarios no le hacen el más mínimo caso. Él, por su parte, es incapaz de hacer frente a la situación. Su angustia es cada vez mayor, y se lamenta por su horrorosa condición.

Texto

kāmān abhilaṣan dīno
yāta-yāmāṁś ca kanyayā
vigatātma-gati-snehaḥ
putra-dārāṁś ca lālayan

Palabra por palabra

kāmān — objetos de disfrute; abhilaṣan — siempre anhelando intensamente; dīnaḥ — el pobre hombre; yāta-yāmān — desabridos; ca — también; kanyayā — por la influencia de Kālakanyā; vigata — perdido; ātma-gati — el verdadero propósito de la vida; snehaḥ — apego a; putra — hijos; dārān — esposa; ca — y; lālayan — manteniendo por cariño.

Traducción

Con la influencia de Kālakanyā, los objetos de disfrute perdieron su atractivo, pero el rey Purañjana conservaba sus deseos de disfrute; debido a ello, era muy desgraciado en todos los aspectos. No podía entender el propósito de la vida. Seguía sintiendo un gran afecto por su esposa y sus hijos, y se preocupaba por su sustento.

Significado

Esta es, exactamente, la posición de la civilización actual. Todo el mundo está ocupado en mantener el cuerpo, el hogar y la familia. Debido a ello, al final de la vida están confusos, sin saber qué es la vida espiritual y cuál es el propósito de la vida humana. En una civilización de complacencia sensorial no puede haber vida espiritual, porque las personas solo piensan en esta vida. La siguiente vida es una realidad, pero no se da ninguna información acerca de ella.

Texto

gandharva-yavanākrāntāṁ
kāla-kanyopamarditām
hātuṁ pracakrame rājā
tāṁ purīm anikāmataḥ

Palabra por palabra

gandharva — por los soldados gandharvas; yavana — y por los soldados yavanas; ākrāntām — conquistada; kāla-kanyā — por Kālakanyā (la hija del Tiempo); upamarditām — destruida; hātum — a abandonar; pracakrame — procedió; rājā — el rey Purañjana; tām — esa; purīm — ciudad; anikāmataḥ — sin desearlo.

Traducción

Los soldados yavanas y gandharvas conquistaron la ciudad del rey Purañjana; aunque el rey no deseaba abandonarla, las circunstancias le obligaron a hacerlo, pues Kālakanyā la destruyó por completo.

Significado

La entidad viviente, separada de la compañía de la Suprema Personalidad de Dios, trata de disfrutar del mundo material. Se le da la oportunidad de disfrutar en un determinado cuerpo, que puede ser desde un cuerpo de brahmā hasta un cuerpo de microbio. La historia védica de la creación nos enseña que la primera criatura viva fue el Señor Brahmā; él creó a los siete sabios y a otros prajāpatis para aumentar la población del universo. De modo que cada entidad viviente, conforme a su karma, es decir, conforme a sus actividades y deseos pasados, recibe un determinado tipo de cuerpo, ya sea un cuerpo de brahmā o uno de microbio o gusano del excremento. Debido a la prolongada relación con un determinado tipo de cuerpo material, y también debido a la gracia de Kālakanyā y su māyā adquiere un fuerte apego por ese cuerpo material, aunque es una morada de sufrimiento. Si tratamos de apartar a un gusano del excremento, veremos que no quiere irse; volverá al excremento. Lo mismo ocurrirá si tratamos de apartar a un cerdo de la suciedad en que vive comiendo excremento y pretendemos darle un lugar limpio: el cerdo no querrá irse. Podemos estudiar a todas las entidades vivientes, y veremos que todas rechazarán cualquier oferta que se les haga de una situación más confortable. Aunque al rey Purañjana le atacaban desde todos los flancos, él era reacio a abandonar la ciudad. En otras palabras, la entidad viviente no desea abandonar el cuerpo, sea cual sea la condición en que se encuentre. Sin embargo, se verá obligado a hacerlo, porque, después de todo, el cuerpo material no puede existir eternamente.

La entidad viviente desea disfrutar del mundo material de diferentes maneras; por ella la ley de la naturaleza le permite transmigrar de un cuerpo a otro, igual que la persona transmigra de un cuerpo de bebé a un cuerpo de niño, para luego pasar a ser un joven y un hombre. Ese proceso de transmigración es constante. En la etapa final, cuando el cuerpo denso está viejo e incapacitado, la entidad viviente es reacia a abandonarlo, a pesar de que ya no puede seguir usándolo. La existencia material y el cuerpo material no son una posición agradable, ¿por qué, entonces, no quiere irse la entidad viviente? Tan pronto como recibimos un cuerpo material, tenemos que dedicar grandes esfuerzos a mantenerlo. Hay muchos campos de actividad distintos, pero, en cualquier caso, todo el mundo tiene que esforzarse mucho para mantener el cuerpo material. Por desgracia, la sociedad no tiene información acerca de la transmigración del alma. Como la entidad viviente no tiene esperanza de entrar en el reino espiritual de vida eterna, bienaventuranza y conocimiento, quiere permanecer en su cuerpo actual, aunque sea un cuerpo inútil. Por lo tanto, en el mundo material no hay ninguna actividad más benéfica que la propagación del movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa.

Este movimiento está dando a la sociedad humana información acerca del reino de Dios. Dios existe, Kṛṣṇa existe, y todo el mundo puede regresar a Dios y vivir eternamente, con bienaventuranza y conocimiento. La persona consciente de Kṛṣṇa no tiene miedo de abandonar el cuerpo, porque su posición es siempre eterna. La persona consciente de Kṛṣṇa se ocupa eternamente en el servicio amoroso trascendental del Señor; por lo tanto, mientras vive en el cuerpo es feliz de ocuparse en el servicio amoroso del Señor, y cuando abandona el cuerpo, tambien alcanza una posición permanente en el servicio del Señor. Los devotos santos siempre están libres y liberados, mientras que los karmīs, que no conocen la vida espiritual ni el servicio amoroso trascendental del Señor, tienen mucho miedo de abandonar este podrido cuerpo material.

Texto

bhaya-nāmno ’grajo bhrātā
prajvāraḥ pratyupasthitaḥ
dadāha tāṁ purīṁ kṛtsnāṁ
bhrātuḥ priya-cikīrṣayā

Palabra por palabra

bhaya-nāmnaḥ — de Bhaya (temor); agra-jaḥ — mayor; bhrātā — hermano; prajvāraḥ — llamado Prajvāra; pratyupasthitaḥ — allí presente; dadāha — prendió fuego; tām — a aquella; purīm — ciudad; kṛtsnām — completamente; bhrātuḥ — a su hermano; priya-cikīrṣayā — para complacer.

Traducción

En esas circunstancias, el hermano mayor de Yavana-rāja, Prajvāra, prendió fuego a la ciudad para complacer a su hermano menor, cuyo nombre es Temor.

Significado

El sistema védico establece que los cadáveres deben quemarse, pero antes de la muerte hay otro fuego, la fiebre, que se denomina prajvāra, o viṣṇu-jvāra. La ciencia médica certifica que cuando a una persona le sube la fiebre por encima de los 42 grados, muere inmediatamente. Ese prajvāra, la fiebre alta, pone en un fuego ardiente a la entidad viviente que se encuentra en la última etapa de la vida.

Texto

tasyāṁ sandahyamānāyāṁ
sapauraḥ saparicchadaḥ
kauṭumbikaḥ kuṭumbinyā
upātapyata sānvayaḥ

Palabra por palabra

tasyām — cuando aquella ciudad; sandahyamānāyām — estaba ardiendo; sa-pauraḥ — junto con todos los ciudadanos; sa-paricchadaḥ — junto con todos los sirvientes y seguidores; kauṭumbikaḥ — el rey, que tenía muchos parientes; kuṭumbinyā — junto con su esposa; upātapyata — comenzó a sufrir el calor del fuego; sa-anvayaḥ — junto con los descendientes.

Traducción

Cuando la ciudad comenzó a arder, todos los súbditos y sirvientes del rey, además de sus familiares, hijos, nietos, esposas y demás parientes, estaban dentro del fuego. El rey Purañjana se sintió entonces muy desdichado.

Significado

El cuerpo tiene muchas partes, como los sentidos, las extremidades, la piel, los músculos, la sangre, la médula, etc., y en este verso se las representa simbólicamente como hijos, nietos, ciudadanos y subordinados. Ante el ataque de viṣṇu-jvāra, la fiebre es tan abrasadora que a veces la persona entra en coma. Eso significa que el cuerpo está sufriendo un dolor tan fuerte que la persona pierde la consciencia y no siente los sufrimientos por los que está pasando el cuerpo. En verdad, a la hora de la muerte, la entidad viviente está tan desamparada que, aunque no lo desea, se le obliga a abandonar un cuerpo y entrar en otro. En el Bhagavad-gītā se afirma que el hombre, mediante el progreso científico, puede mejorar las condiciones temporales de vida, pero no puede evitar los sufrimientos del nacimiento, la vejez, las enfermedades y la muerte, que estan bajo el control de la Suprema Personalidad de Dios por intermedio de la naturaleza material. Los necios no pueden entender un hecho tan simple. Ahora la gente está muy ocupada tratando de encontrar petróleo en medio del mar. Están muy ansiosos de proveerse de reservas de petróleo para el futuro, pero no hacen el menor intento de mejorar las condiciones del nacimiento, la vejez, las enfermedades y la muerte. La persona que está bajo la influencia de la ignorancia, sin saber nada acerca de su propia vida futura, está condenada al fracaso en todas sus actividades.

Texto

yavanoparuddhāyatano
grastāyāṁ kāla-kanyayā
puryāṁ prajvāra-saṁsṛṣṭaḥ
pura-pālo ’nvatapyata

Palabra por palabra

yavana — por los yavanas; uparuddha — atacada; āyatanaḥ — su morada; grastāyām — cuando fue capturada; kāla-kanyayā — por la hija del Tiempo; puryām — la ciudad; prajvāra-saṁsṛṣṭaḥ — con la proximidad de Prajvāra; pura-pālaḥ — el superintendente de la ciudad; anvatapyata — también se sintió muy afligido.

Traducción

El jefe de policía de la ciudad, la serpiente, vio que Kālakanyā estaba atacando a los ciudadanos, y se sintió muy afligida al ver que el lugar en que vivía ardía en llamas tras el ataque de los yavanas.

Significado

La entidad viviente está cubierta por dos tipos de cuerpos, uno denso y otro sutil. Podemos ver que el cuerpo denso se termina con la muerte, pero realidad el cuerpo sutil lleva a la entidad viviente a otro cuerpo denso. Los supuestos científicos contemporáneos no pueden ver la acción del cuerpo sutil, que lleva al alma de un cuerpo a otro. De manera simbólica se ha representado el cuerpo sutil como una serpiente, el jefe de policía de la ciudad. Cuando todo arde, ni siquiera el jefe de policía puede escapar del fuego. Cuando una ciudad no está siendo atacada ni arde en llamas, el jefe de policía puede imponer su autoridad sobre los ciudadanos, pero ante un ataque generalizado contra la ciudad no puede hacer nada. Cuando el aire vital iba a abandonar el cuerpo denso, el cuerpo sutil empezó también a sentir dolor.

Texto

na śeke so ’vituṁ tatra
puru-kṛcchroru-vepathuḥ
gantum aicchat tato vṛkṣa-
koṭarād iva sānalāt

Palabra por palabra

na — no; śeke — podía; saḥ — él; avitum — para proteger; tatra — allí; puru — mucha; kṛcchra — dificultad; uru — gran; vepathuḥ — sufrimiento; gantum — salir; aicchat — deseó; tataḥ — de allí; vṛkṣa — de un árbol; koṭarāt — del hueco; iva — como; sa-analāt — incendiado.

Traducción

Como una serpiente que vive en el hueco de un árbol y desea salir del bosque cuando este se incendia, el jefe de policía de la ciudad, la serpiente, deseaba abandonar la ciudad debido al intenso calor del fuego.

Significado

A las serpientes les es muy difícil huir del bosque cuando hay un incendio. Otros animales están dotados de patas largas y pueden huir, pero las serpientes, que solo pueden reptar, suelen morir abrasadas. En la etapa final, los miembros del cuerpo no se ven tan afectados como el aire vital.

Texto

śithilāvayavo yarhi
gandharvair hṛta-pauruṣaḥ
yavanair aribhī rājann
uparuddho ruroda ha

Palabra por palabra

śithila — debilitado; avayavaḥ — sus miembros; yarhi — cuando; gandharvaiḥ — por los gandharvas; hṛta — vencida; pauruṣaḥ — su fuerza física; yavanaiḥ — por los yavanas; aribhiḥ — por los enemigos; rājan — ¡oh, rey Prācīnabarhiṣat!; uparuddhaḥ — al ser detenido; ruroda — gritaba lamentándose; ha — en verdad.

Traducción

Lo soldados gandharvas y yavanas habían acabado por completo con la fuerza física de la serpiente y los miembros de su cuerpo se debilitaron. Cuando trató de abandonar el cuerpo, sus enemigos se lo impidieron. Al ver frustrados sus intentos, empezó a gritar lamentándose.

Significado

En la última etapa de la vida, como consecuencia de la enfermedad y debido a desequilibrios entre la bilis, el moco y el aire, las puertas del cuerpo quedan obstruidas. Entonces la entidad viviente no puede expresar claramente sus dificultades, y los familiares que la rodean escuchan los estertores, «ghura ghura», del moribundo. En el Mukunda-mālā-stotra, el rey Kulaśekhara afirma:

kṛṣṇa tvadīya-padapaṅkaja-pañjarāntam
adyaiva me viśatu mānasa-rāja-haṁsaḥ
prāṇa-prayāṇa-samaye kapha-vāta-pittaiḥ
kaṇṭhāvarodhana-vidhau smaraṇaṁ kutas te

Mi querido Kṛṣṇa, por favor, ayúdame a morir ahora mismo, para que así el cisne de mi mente pueda enredarse en el tallo de Tus pies de loto. De lo contrario, a la hora de mi último suspiro, cuando mi garganta esté obstruida, ¿cómo podré pensar en Ti». El cisne siente un gran placer cuando sumerge la cabeza en el agua y enreda su cuello en el tallo de la flor de loto. Ese juego le llena de alegría. Es una gran fortuna poder morir cuando estamos sanos y pensando en los pies de loto del Señor. Pero en la vejez, en el momento de la muerte, a veces la garganta se obstruye con moco o con aire. En esa situación, es posible que no podamos pronunciar Hare Kṛṣṇa, el mahā-mantra, y que nos olvidemos de Kṛṣṇa. Por supuesto, cuando alguien es muy consciente de Kṛṣṇa, es muy probable que no pueda olvidar a Kṛṣṇa en ninguna etapa de su vida, pues ha adquirido el hábito de cantar el mantra Hare Kṛṣṇa, especialmente cuando ve cerca la muerte.

Texto

duhitṝḥ putra-pautrāṁś ca
jāmi-jāmātṛ-pārṣadān
svatvāvaśiṣṭaṁ yat kiñcid
gṛha-kośa-paricchadam

Palabra por palabra

duhitṝḥ — hijas; putra — hijos; pautrān — nietos; ca — y; jāmi — nueras; jāmātṛ — yernos; pārṣadān — personas relacionadas con él; svatva — propiedad; avaśiṣṭam — que quedaba; yat kiñcit — todo lo que; gṛha — casa; kośa — riquezas atesoradas; paricchadam — enseres del hogar.

Traducción

El rey Purañjana comenzó entonces a pensar en sus hijas, hijos, nietos, nueras, yernos, sirvientes y demás personas relacionadas con él. Pensó también en su casa, en los enseres del hogar y en las pocas riquezas que había conseguido atesorar.

Significado

A veces una persona que está muy apegada al cuerpo material pide a un médico que le prolongue la vida por lo menos durante algún tiempo. Si puede prolongarle la vida durante unos minutos administrándole oxígeno u otras medicinas, el supuesto médico científico piensa que sus intentos han sido un éxito, aunque en última instancia el paciente va a morir. Eso recibe el nombre de lucha por la existencia. En el momento de la muerte, tanto el médico como el paciente todavía piensan en prolongar la vida, aunque los componentes del cuerpo están prácticamente muertos e inservibles.

Texto

ahaṁ mameti svīkṛtya
gṛheṣu kumatir gṛhī
dadhyau pramadayā dīno
viprayoga upasthite

Palabra por palabra

aham — yo; mama — mío; iti — así; svī-kṛtya — aceptar; gṛheṣu — en el hogar; ku-matiḥ — cuya mente está llena de pensamientos desagradables; gṛhī — el casado; dadhyau — vuelve su atención hacia; pramadayā — con su esposa; dīnaḥ — muy pobre; viprayoge — en el momento de la separación; upasthite — ocurrió.

Traducción

El rey Purañjana estaba muy apegado a su familia y los conceptos de «yo» y «mío». Debido al gran apego que sentía por su esposa, la situación en que se encontraba no podía ser más miserable. Cuando llegó el momento de la separación, sintió una gran tristeza.

Significado

Este verso deja bien claro que los pensamientos de disfrute material no se van a la hora de la muerte. Esto indica que la entidad viviente, el alma, viaja llevada por el cuerpo sutil, compuesto de mente, inteligencia y ego. La entidad viviente, debido al ego falso, todavía desea disfrutar del mundo material, y con la falta de disfrute material siente tristeza y pesar. Su intelecto no ha dejado de elaborar planes para mejorar su existencia; por esa razón, aunque abandona un cuerpo denso, el cuerpo sutil la lleva a otro cuerpo denso. Los ojos materiales no pueden ver la transmigración del cuerpo sutil; por ello, identificamos el afandono del cuerpo denso con el final de la persona. El cuerpo sutil elabora planes para el disfrute material, y el cuerpo denso es el instrumento para disfrutar de esos planes. Así pues el cuerpo denso puede compararse con la esposa, ya que esta es el agente de todo tipo de placer de los sentidos. Debido a la prolongada relación con el cuerpo denso, la entidad viviente siente una gran tristeza cuando tiene que separarse de él. La actividad mental de la entidad viviente la obliga a aceptar otro cuerpo denso y a continuar en la existencia material.

La palabra sánscrita strī significa «expansión». La esposa es un medio para multiplicar el número de objetos de atracción, en la forma de hijos, hijas, nietos, etc. El apego a los miembros de la familia cobra especial revelancia en el momento de la muerte. A menudo se ve que, en el momento mismo de abandonar el cuerpo, un hombre llama a su querido hijo para pedirle que cuide de su esposa y de todo lo demás. Dice: «Mi querido hijo, tengo que irme. Por favor, cuida de la familia». Esas son sus palabras, aunque ni siquiera conoce su propio destino.

Texto

lokāntaraṁ gatavati
mayy anāthā kuṭumbinī
vartiṣyate kathaṁ tv eṣā
bālakān anuśocatī

Palabra por palabra

loka-antaram — a una vida diferente; gatavati mayi — cuando haya ido; anāthā — sin esposo; kuṭumbinī — rodeada de todos los miembros de la familia; vartiṣyate — existirá; katham — cómo; tu — entonces; eṣā — esa mujer; bālakān — hijos; anuśocatī — lamentándose por.

Traducción

El rey Purañjana, lleno de ansiedad, pensaba: «¡Ay!, tantos hijos van a ser una gran carga para mi esposa. ¿Cómo podrá mantener una familia tan grande cuando yo abandone el cuerpo? ¡Ay! ¡Qué angustias pasará pensando en el sustento de la familia!

Significado

Todos estos pensamientos acerca de su esposa indican que el rey estaba muy absorto con la idea de la mujer. Una mujer casta suele ser una esposa muy obediente. Por esa causa, el esposo se apega a ella, y en el momento de la muerte piensa mucho en ella. En esa situación, como demuestra la vida de Purañjana es muy peligrosa. Cuando alguien, a la hora de morir, piensa en su esposa en lugar de pensar en Kṛṣṇa, es seguro que no va a regresar al hogar, de vuelta a Dios, sino que se verá obligado a aceptar un cuerpo de mujer y, de esa forma, comenzar un nuevo capítulo en la existencia material.

Texto

na mayy anāśite bhuṅkte
nāsnāte snāti mat-parā
mayi ruṣṭe susantrastā
bhartsite yata-vāg bhayāt

Palabra por palabra

na — nunca; mayi — cuando yo; anāśite — no había comido; bhuṅkte — ella comía; na — nunca; asnāte — no me había bañado; snāti — ella se bañaba; mat-parā — siempre consagrada a mí; mayi — cuando yo; ruṣṭe — estaba enfadado; su-santrastā — muy asustada; bhartsite — cuando yo reñía; yata-vāk — con palabras completamente controladas; bhayāt — por temor.

Traducción

El rey Purañjana comenzó entonces a pensar en lo que habían sido sus relaciones con su esposa. Recordó que su esposa no comía mientras él no hubiera terminado de almorzar, y que no se bañaba mientras él no hubiera terminado de bañarse, y que siempre estaba muy apegada a él, tanto que, si a veces él se enfadaba y le reñía, ella permanecía callada, tolerando su mala conducta.

Significado

La esposa siempre debe ser muy sumisa con su esposo. La sumisión y un comportamiento manso y subordinado son las cualidades de una esposa que hacen que su cónyuge siempre piense en ella. Para la vida familiar, es muy bueno que el esposo esté apegado a la esposa, pero para el avance espiritual, no lo es. Por esa razón, hay que hacer que todos los hogares sean conscientes de Kṛṣṇa. Si los esposos están muy apegados el uno al otro y son conscientes de Kṛṣṇa, ambos se beneficiarán, ya que Kṛṣṇa será el centro de su existencia. De lo contrario, si el esposo está demasiado apegado a su esposa, en su siguiente vida tendrá que nacer como mujer, y la mujer, si está demasiado apegada a su esposo, nacerá en su siguiente vida con cuerpo de hombre. Por supuesto, para la mujer es beneficioso nacer como hombre, pero el hombre que tiene que nacer como mujer sale perdiendo.

Texto

prabodhayati māvijñaṁ
vyuṣite śoka-karśitā
vartmaitad gṛha-medhīyaṁ
vīra-sūr api neṣyati

Palabra por palabra

prabodhayati — da buen consejo; — a mí; avijñam — necio; vyuṣite — cuando yo estaba lejos; śoka — por aflicción; karśitā — afligida y marchitándose; vartma — sendero; etat — este; gṛha-medhīyam — de responsabilidades domésticas; vīra-sūḥ — la madre de grandes héroes; api — aunque; neṣyati — ¿podrá ejecutar?

Traducción

El rey Purañjana pensó también en los buenos consejos que ella le daba cuando se encontraba confuso, y en cómo se afligía cuando él estaba lejos del hogar. Aunque ella era madre de muchos hijos y héroes, el rey seguía temiendo que no pudiera cargar con las responsabilidades de los asuntos domésticos.

Significado

A la hora de la muerte, el rey Purañjana estaba pensando en su esposa; eso se denomina conciencia contaminada. Tal como el Señor Kṛṣṇa explica en el Bhagavad-gītā (15.7):

mamaivāṁśo jīva-loke
jīva-bhūtaḥ sanātanaḥ
manaḥ-ṣaṣṭhānīndriyāṇi
prakṛti-sthāni karṣati

«Las entidades vivientes de este mundo condicionado son Mis partes fragmentarias eternas. Debido a la vida condicionada, sostienen una lucha muy dura con los seis sentidos, entre los que se incluye la mente».

La entidad viviente, en última instancia, es parte integral del Espíritu Supremo, Kṛṣṇa. En otras palabras, la posición constitucional de Kṛṣṇa y la posición constitucional de la entidad viviente son cualitativamente iguales. La única diferencia es que la entidad viviente es, eternamente, una partícula atómica del Espíritu Supremo. Mamaivāṁśo jīva-loke jīva-bhūtaḥ sanātanaḥ. En este mundo material de vida condicionada, la parte fragmentaria del Señor Supremo, el alma individual, sostiene una lucha que se debe a su mente y su conciencia contaminadas. Como parte integral del Señor Supremo, la entidad viviente debería pensar en Kṛṣṇa, pero aquí vemos que el rey Purañjana (la entidad viviente) está pensando en una mujer. La consecuencia de esa absorción de la mente en los objetos materiales es que la entidad viviente tiene que luchar por la existencia en el mundo material. El rey Purañjana está pensando en su esposa; por lo tanto, su lucha por la existencia en el mundo material no terminará con la muerte. Tal como se revela en los próximos versos, en su siguiente vida el rey Purañjana tuvo que aceptar un cuerpo de mujer, debido a que estaba demasiado absorto en pensar en su esposa. Así pues, la absorción de la mente en un estado de conciencia social, político, seudo religioso, nacional o comunitario, es causa de cautiverio. Durante su vida, la persona debe cambiar la naturaleza de sus actividades a fin de liberarse del cautiverio. Esto se confirma en el Bhagavad-gītā (3.9): yajñārthāt karmaṇo ’nyatra loko ’yaṁ karma-bandhanaḥ. Si no cambiamos la naturaleza de nuestra conciencia en esta vida, todo lo que hagamos en nombre del bien social, político, religioso, comunitario y nacional, será la causa de nuestro cautiverio. Eso significa que tendremos que continuar en la vida material condicionada. Como se explica en el Bhagavad-gītā (15.7): manaḥ-ṣaṣṭhānīndriyāṇi prakṛti-sthāni karṣati. Cuando la mente y los sentidos se ocupan en actividades materiales, la persona tiene que permanecer en la existencia material y luchar por lograr la felicidad. Esa lucha por la felicidad es una constante en todas las vidas de la entidad viviente. En realidad, en el mundo material nadie es feliz, pero esa lucha proporciona una falsa sensación de felicidad. La persona tiene que trabajar con gran esfuerzo, y cuando logra el resultado de su arduo trabajo, se considera feliz. En el mundo material, la gente no conoce la verdadera felicidad. Sukham ātyantikaṁ yat tad buddhi-grāhyam atīndriyam (Bg. 6.21). La verdadera felicidad debe percibirse con los sentidos trascendentales. Si no estamos purificados, los sentidos trascendentales no se manifiestan; y para purificar los sentidos, hay que emprender el proceso de conciencia de Kṛṣṇa y ocupar los sentidos en el servicio del Señor. Entonces la felicidad será verdadera, y tendrá lugar la liberación.

En el Bhagavad-gītā (15.8), se afirma:

śarīraṁ yad avāpnoti
yac cāpy utkrāmatīśvaraḥ
gṛhītvaitāni saṁyāti
vāyur gandhān ivāśayāt

«En el mundo material, la entidad viviente arrastra sus diferentes concepciones de la vida de un cuerpo a otro, tal como el aire transporta los aromas. De este modo, toma una clase de cuerpo, y de nuevo lo deja para tomar otro». El viento, cuando pasa por un jardín, transporta la fragancia de las rosas, y cuando pasa por un basurero, transporta el hedor de sustancias podridas. De manera similar, el rey Purañjana, la entidad viviente, hace pasar ahora el aire de su vida por su esposa, una mujer; como consecuencia, en su siguiente vida tendrá que aceptar un cuerpo de mujer.

Texto

kathaṁ nu dārakā dīnā
dārakīr vāparāyaṇāḥ
vartiṣyante mayi gate
bhinna-nāva ivodadhau

Palabra por palabra

katham — cómo; nu — en verdad; dārakāḥ — hijos; dīnāḥ — pobres; dārakīḥ — hijas; — o; aparāyaṇāḥ — que no tienen otra persona de quien depender; vartiṣyante — vivirán; mayi — cuando yo; gate — ido de este mundo; bhinna — rota; nāvaḥ — nave; iva — como; udadhau — en el mar.

Traducción

La preocupación del rey Purañjana no cesaba: «Mis hijos y mis hijas, que ahora dependen de mí por completo, ¿cómo podrán vivir y continuar su existencia cuando yo me haya ido de este mundo? Estarán en la misma situación que los pasajeros de una nave que naufraga en medio del mar».

Significado

A la hora de la muerte, todas las entidades vivientes se preocupan por el futuro de sus esposas e hijos. De la misma manera, el político se preocupa por el destino de su país o de su partido político. Excepto la persona plenamente consciente de Kṛṣṇa, en la siguiente vida todos tienen que aceptar un cuerpo conforme a su estado particular de conciencia. Purañjana está demasiado absorto en pensamientos acerca de su esposa e hijos; por consiguiente, tendrá que aceptar un cuerpo de mujer. De manera similar, el político o nacionalista que tiene un apego desmedido por su tierra natal, al final de su carrera política nacerá, sin duda alguna, en esa misma tierra. Por otra parte, la siguiente vida también se verá afectada por los actos que se realicen durante la actual. En ocasiones, los políticos cometen actos muy pecaminosos buscando su propia complacencia sensorial. No es raro que lleguen incluso a matar a sus oponentes. En su siguiente vida se les puede permitir que nazcan en su supuesta patria, pero tendrán que sufrir las reacciones de las actividades pecaminosas de su vida anterior.

Los científicos modernos ignoran por completo la ciencia de la transmigración. A los supuestos científicos no les gusta molestarse con esas cosas, porque si meditasen lo más mínimo en los problemas de la vida y en este sutil tema, verían que su futuro es muy negro. Por lo tanto, tratan de no pensar en el futuro y continúan cometiendo todo tipo de actividades pecaminosas en nombre de las necesidades sociales, políticas y nacionales.

Texto

evaṁ kṛpaṇayā buddhyā
śocantam atad-arhaṇam
grahītuṁ kṛta-dhīr enaṁ
bhaya-nāmābhyapadyata

Palabra por palabra

evam — así; kṛpaṇayā — con una mezquina; buddhyā — inteligencia; śocantam — lamentarse; a-tat-arhaṇam — por lo que no debería haberse lamentado; grahītum — para arrestar; kṛta-dhīḥ — el decidido rey de los yavanas; enam — a él; bhaya-nāmā — cuyo nombre era Temor; abhyapadyata — fue allí inmediatamente.

Traducción

El rey Purañjana no debería haberse lamentado por el destino de su esposa e hijos; sin embargo, lo hizo, debido a su inteligencia mezquina. Mientras tanto, Yavana-rāja, cuyo nombre era Temor, se acercó inmediatamente a él para arrestarlo.

Significado

Los necios no saben que toda alma individual es responsable de sus propias acciones y reacciones. En la infancia y la niñez, la entidad viviente es inocente, y sus padres tienen el deber de hacerle entender correctamente los valores de la vida. Cuando el niño es adulto, debe dejarse en sus manos la correcta puesta en práctica de los deberes de la vida. Los padres, después de morir, ya no pueden ayudarle. El padre puede dejar a sus hijos algunas propiedades para que resuelvan sus necesidades inmediatas, pero no debe estar demasiado absorto en pensar en cómo se las arreglará su familia después de su muerte. Esa es la enfermedad del alma condicionada. Además de cometer actividades pecaminosas para su propia complacencia sensorial, trata de amasar grandes riquezas para que sus hijos las hereden y puedan llevar una vida suntuosa de complacencia de los sentidos.

En todo caso, todo el mundo tiene temor a la muerte, y debido a ello la muerte recibe el nombre de bhaya, temor. Aunque el rey Purañjana estaba ocupado en pensar en su esposa e hijos, la muerte no le esperó. La muerte no espera a nadie, y cumple con su deber inmediatamente. Puesto que debe llevarse a la entidad viviente sin titubear, la muerte es la forma en que al final perciben a Dios los ateos, que desperdician sus vidas pensando en el país, la sociedad y los familiares, y dejando de lado el cultivo de conciencia de Kṛṣṇa. En este verso es muy significativa la palabra atad-arhaṇam, ya que significa que no debemos absorbernos demasiado en actividades dirigidas al bienestar de nuestra familia, patria, país y comunidad. Nada de eso nos ayudará a avanzar espiritualmente. Por desgracia, en la sociedad de hoy en día, los supuestos hombres educados no saben absolutamente nada del progreso espiritual. Aunque en la forma humana de vida tienen la oportunidad de progresar espiritualmente, se comportan como avaros. Utilizan mal su vida y la desperdician pensando en el bienestar material de sus familiares, sus compatriotas, su sociedad, etc. Nuestro verdadero deber es aprender cómo vencer a la muerte. En el Bhagavad-gītā (4.9), el Señor Kṛṣṇa explica el proceso para lograrlo:

janma karma ca me divyam
evaṁ yo vetti tattvataḥ
tyaktvā dehaṁ punar janma
naiti mām eti so ’rjuna

«¡Oh, Arjuna!, aquel que conoce la naturaleza trascendental de Mi advenimiento y actividades, al abandonar el cuerpo no vuelve a nacer en este mundo material, sino que alcanza Mi morada eterna».

Después de abandonar el cuerpo, la persona plenamente consciente de Kṛṣṇa no entra en otro cuerpo material, sino que regresa al hogar, de vuelta a Dios. Todo el mundo debe tratar de alcanzar esa perfección. Por desgracia, la gente, en lugar de hacer eso, está absorta en pensar en la sociedad, la amistad, el amor y los familiares. No obstante, el movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa está educando a la gente de todo el mundo e informándoles acerca de cómo vencer a la muerte. Hariṁ vinā na mṛtiṁ taranti. Nadie puede vencer a la muerte sin refugiarse en la Suprema Personalidad de Dios.

Texto

paśuvad yavanair eṣa
nīyamānaḥ svakaṁ kṣayam
anvadravann anupathāḥ
śocanto bhṛśam āturāḥ

Palabra por palabra

paśu-vat — como a un animal; yavanaiḥ — por los yavanas; eṣaḥ — Purañjana; nīyamānaḥ — arrestado y llevado; svakam — a su propia; kṣayam — morada; anvadravan — siguieron; anupathāḥ — sus asistentes; śocantaḥ — lamentándose; bhṛśam — mucho; āturāḥ — afligidos.

Traducción

Cuando los yavanas se llevaban al rey Purañjana a su morada, atándole como a un animal, los seguidores del rey se sintieron muy afligidos. Mientras se lamentaban, fueron obligados a ir con él.

Significado

Cuando Yamarāja y sus asistentes se llevan a una entidad viviente al lugar en que va a ser juzgada, la vida, el aire y los deseos, que son seguidores de la entidad viviente, también van con ella. Esto se confirma en los Vedas. Cuando Yamarāja se lleva o arresta a una entidad viviente (tam utkrāmantam), el aire vital también va con ella (prāṇo ’nūtkrāmati), y cuando el aire vital se ha ido (prāṇam anūtkrāmantam), todos los sentidos (sarve prāṇāḥ) se van también con ellos (anūtkrāmanti). Una vez que la entidad viviente y el aire vital han partido, el amasijo de materia compuesto de cinco elementos (tierra, agua, aire, fuego y éter) queda reducido a unos restos y desechos. La entidad viviente pasa entonces al tribunal de Yamarāja, que la juzga y decide cuál va a ser su próximo cuerpo. Esto no lo saben los científicos modernos. Toda entidad viviente es responsable de sus actividades en esta vida, y después de morir tiene que pasar por la corte de Yamarāja, donde se decide cuál va a ser su próximo cuerpo. Aunque abandona el cuerpo material denso, la entidad viviente continúa existiendo, con sus deseos y con las reacciones resultantes de sus actividades pasadas. Es Yamarāja quien, conforme a las acciones pasadas de la entidad viviente, decide cuál va a ser su próximo cuerpo.

Texto

purīṁ vihāyopagata
uparuddho bhujaṅgamaḥ
yadā tam evānu purī
viśīrṇā prakṛtiṁ gatā

Palabra por palabra

purīm — la ciudad; vihāya — habiendo abandonado; upagataḥ — salido; uparuddhaḥ — arrestada; bhujaṅgamaḥ — la serpiente; yadā — cuando; tam — a ella; eva — ciertamente; anu — después; purī — la ciudad; viśīrṇā — dispersa; prakṛtim — materia; gatā — convertida en.

Traducción

La serpiente, a quien ya habían arrestado los soldados de Yavana-rāja, y que estaba fuera de la ciudad, comenzó a seguir a su amo junto con los demás. Tan pronto como abandonaron la ciudad, esta fue inmediatamente demolida y quedó reducida a polvo.

Significado

Una vez que la entidad viviente ha sido arrestada, todos sus seguidores, es decir, el aire vital, los sentidos y los objetos de los sentidos, abandonan inmediatamente el cuerpo, que es un amasijo de materia. Cuando la entidad viviente y sus acompañantes se van, el cuerpo queda inactivo y se descompone en los elementos materiales básicos: tierra, agua, fuego, aire y éter. Cuando los habitantes de una ciudad sometida a un ataque enemigo abandonan la ciudad, el enemigo inmediatamente la saquea y la bombardea hasta dejarla reducida a polvo. Cuando decimos «Polvo eres y en polvo te convertirás», nos referimos al cuerpo. Cuando una ciudad está siendo atacada y bombardeada por sus enemigos, generalmente los ciudadanos se marchan de ella, y la ciudad deja de existir.

La persona que se dedica a mejorar una ciudad pero no tiene en cuenta a los ciudadanos, sus habitantes, es un necio. De manera similar, la entidad viviente que no está debidamente iluminada con conocimiento espiritual solo tiene en cuenta el cuerpo, sin saber que el factor más importante del cuerpo es el alma espiritual. El alma avanzada en conocimiento espiritual se salva de la transmigración eterna. Según el Bhāgavatam, los que están apegados al cuerpo son como vacas y asnos (sa eva go-kharaḥ). La vaca es un animal muy inocente, y el asno es una bestia de carga. El que trabaja conforme al concepto corporal, trabaja como lo haría un asno y no sabe cuál es su verdadero interés. Por eso se dice:

yasyātma-buddhiḥ kuṇape tri-dhātuke
sva-dhīḥ kalatrādiṣu bhauma ijya-dhīḥ
yat-tīrtha-buddhiḥ salile na karhicij
janeṣv abhijñeṣu sa eva go-kharaḥ

«El ser humano que identifica su ser con este cuerpo hecho de tres elementos, que considera que los subproductos del cuerpo son sus familiares, que considera adorable la tierra en que ha nacido, y que va a un lugar de peregrinaje solo para darse un baño, y no para entrar en contacto con los hombres de conocimiento trascendental que allí se encuentran, debe considerarse que es como un asno o una vaca» (Bhāg. 10.84.13).

Sin conciencia de Kṛṣṇa, la civilización humana es simplemente una civilización de animales inferiores. En una civilización de ese tipo, puede que a veces se estudie un cuerpo muerto o se analice el cerebro o el corazón. Sin embargo, ninguna parte del cuerpo es importante si no está en ella el alma espiritual. En una civilización moderna de vacas y asnos, los científicos tratan de encontrar algo de valor en el cerebro o en el corazón de un hombre muerto.

Texto

vikṛṣyamāṇaḥ prasabhaṁ
yavanena balīyasā
nāvindat tamasāviṣṭaḥ
sakhāyaṁ suhṛdaṁ puraḥ

Palabra por palabra

vikṛṣyamāṇaḥ — arrastrado; prasabham — por la fuerza; yavanena — por el yavana; balīyasā — que era muy poderoso; na avindat — no pudo recordar; tamasā — por la oscuridad de la ignorancia; āviṣṭaḥ — cubierto; sakhāyam — a su amigo; suhṛdam — siempre bienqueriente; puraḥ — desde el mismo principio.

Traducción

Violentamente arrastrado por el poderoso yavana, el rey Purañjana, debido a su gran ignorancia, ni siquiera entonces pudo recordar a su amigo y bienqueriente, la Superalma.

Significado

En el Bhagavad-gītā (5.29), el Señor Kṛṣṇa dice:

bhoktāraṁ yajña-tapasāṁ
sarva-loka-maheśvaram
suhṛdaṁ sarva-bhūtānāṁ
jñātvā māṁ śāntim ṛcchati

Para ser plenamente consciente de Kṛṣṇa y estar feliz y satisfecha, la persona solo necesita saber tres cosas: que Kṛṣṇa, el Señor Supremo, es el disfrutador de todo beneficio, que es el propietario de todo, y que es el amigo supremo de todas las entidades vivientes. El que no sabe esto y, por el contrario, actúa bajo la influencia del concepto corporal, vive siempre hostigado por los sufrimientos que inflige la naturaleza material. En realidad, el Señor Supremo está al lado de todos: īśvaraḥ sarva-bhūtānāṁ hṛd-deśe ’rjuna tiṣṭhati (Bg. 18.61). La entidad viviente y la Superalma están la una al lado de la otra en el mismo árbol, pero la necia entidad viviente, a pesar del sufrimiento que le infligen las leyes de la naturaleza material, no se vuelve a pedir protección a la Suprema Personalidad de Dios; cree que puede protegerse a sí misma de las estrictas leyes de la naturaleza material; eso, sin embargo, no es posible. La entidad viviente debe volverse hacia la Suprema Personalidad de Dios y entregarse a Él. Solo entonces se salvará del violento ataque del poderoso yavana, Yamarāja.

La palabra sakhāyam («amigo») es muy significativa en este verso, porque la presencia de Dios al lado de la entidad viviente es eterna. Al Señor Supremo se Le describe también con la palabra suhṛdam («eterno bienqueriente»). El Señor Supremo es siempre nuestro bienqueriente, como un padre o una madre. A pesar de todas las ofensas que el hijo pueda cometer, los padres siempre son sus bienquerientes. De la misma manera, a pesar de todas nuestras ofensas, y de que desafiamos los deseos de la Suprema Personalidad de Dios, el Señor siempre está dispuesto a liberarnos de todas las dificultades con que nos atosiga la naturaleza material; solo tenemos que entregarnos a Él, como se confirma en el Bhagavad-gītā (mām eva ye prapadyante māyām etāṁ taranti te). Por desgracia, debido a las malas compañías y al gran apego que sentimos por la complacencia de los sentidos, no podemos recordar a nuestro mejor amigo, la Suprema Personalidad de Dios.

Texto

taṁ yajña-paśavo ’nena
saṁjñaptā ye ’dayālunā
kuṭhāraiś cicchiduḥ kruddhāḥ
smaranto ’mīvam asya tat

Palabra por palabra

tam — a él; yajña-paśavaḥ — los animales de sacrificio; anena — por él; saṁjñaptāḥ — matados; ye — todos los que; adayālunā — por el muy cruel; kuṭhāraiḥ — con hachas; cicchiduḥ — despedazado; kruddhāḥ — muy furiosos; smarantaḥ — recordando; amīvam — actividad pecaminosa; asya — de él; tat — aquella.

Traducción

El muy cruel rey Purañjana había matado muchos animales en sus sacrificios. Ahora todos aquellos animales aprovechaban la oportunidad para atravesarle con sus cuernos. Era como si le estuvieran despedazando con un hacha.

Significado

Los fervientes partidarios de la matanza de animales en nombre de la religión o como alimento deben saber que después de la muerte les espera un castigo similar. Las palabra māṁsa («carne») indica que los animales que matamos recibirán la oportunidad de matarnos. Aunque en realidad no se puede matar a la entidad viviente, después de la muerte tendremos que sufrir las heridas de los cuernos de los animales. Sin saber esto, los sinvergüenzas no titubean en seguir matando a pobres animales. Con pretextos religiosos o de alimentación, la mal llamada civilización humana ha abierto muchísimos mataderos de animales. Los que son un poco religiosos matan animales en los templos, mezquitas o sinagogas, y los más caídos abren numerosos mataderos. En la sociedad humana civilizada, la ley es ojo por ojo y diente por diente, y la ley del Señor Supremo es que ninguna entidad viviente puede abusar de ninguna otra. Todos deben ser libres para vivir a expensas del padre supremo, y la Suprema Personalidad de Dios nunca aprueba la matanza de animales, sea por religión o por alimento. En el Bhagavad-gītā (16.19), el Señor Kṛṣṇa dice:

tān ahaṁ dviṣataḥ krūrān
saṁsāreṣu narādhamān
kṣipāmy ajasram aśubhān
āsurīṣv eva yoniṣu

«A aquellos que son envidiosos y malvados, que son lo más bajo entre los hombres, Yo los arrojo perpetuamente al océano de la existencia material, en diversas especies de vida demoníaca». Los que matan animales (dviṣataḥ), como envidian a otras entidades vivientes y a la Suprema Personalidad de Dios, son enviados a la oscuridad y no pueden entender el significado y el objetivo de la vida. Esta explicación se completa en los siguientes versos.

Texto

ananta-pāre tamasi
magno naṣṭa-smṛtiḥ samāḥ
śāśvatīr anubhūyārtiṁ
pramadā-saṅga-dūṣitaḥ

Palabra por palabra

ananta-pāre — ilimitadamente expandida; tamasi — en la oscuridad de la existencia material; magnaḥ — inmerso; naṣṭa-smṛtiḥ — carente por completo de inteligencia; samāḥ — por muchos años; śāśvatīḥ — durante la práctica totalidad de la eternidad; anubhūya — experimentar; ārtim — las tres miserias; pramadā — de mujeres; saṅga — por relación; dūṣitaḥ — contaminada.

Traducción

Debido a su contaminada relación con mujeres, las entidades vivientes como el rey Purañjana padecen eternamente todos los sufrimientos de la existencia material y permanecen en la oscura región de la vida material, sin poder recordar nada durante muchísimos años.

Significado

Aquí encontramos una descripción de la existencia material que experimenta aquel que se apega a una mujer y olvida su verdadera identidad como sirviente eterno de Kṛṣṇa (naṣṭa-smṛtiḥ). De esa forma, pasando de un cuerpo a otro, la entidad viviente sufre eternamente las tres miserias de la existencia material. Este movimiento se ha fundado para salvar a la civilización humana de la oscuridad de la ignorancia. El principal objetivo del movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa es iluminar a la entidad viviente que se encuentra sumida en el olvido, y hacerle recordar su estado original de conciencia, el estado de conciencia de Kṛṣṇa. De esa forma, la entidad viviente puede salvarse tanto de las catastróficas consecuencias de la ignorancia como de la transmigración a otros cuerpos. Como ha explicado Śrīla Bhaktivinoda Ṭhākura en una canción:

anādi karama-phale, paḍi’ bhavārṇava-jale,
taribāre nā dekhi upāya
e viṣaya-halāhale, divā-niśi hiyā jvale,
mana kabhu sukha nāhi pāya

«Debido a mis pasadas actividades fruitivas, ahora he caído en un mar de nesciencia. No veo la manera de salir de este gran mar, que en verdad es como un mar de veneno. Tratamos de ser felices por medio del disfrute de los sentidos, pero en realidad ese supuesto disfrute es como un alimento demasiado caliente que nos quema en el corazón. Siento que ardo sin cesar, día y noche, y mi mente no puede encontrar satisfacción».

En la existencia material la ansiedad es constante. La gente trata sin cesar de descubrir una manera de mitigar esa ansiedad, pero al carecer de la guía de un verdadero líder, buscan olvidar las ansiedades materiales dándose a la bebida y a la vida sexual. Los necios no saben que, al tratar de escapar de la ansiedad con la bebida y la vida sexual, lo único que hacen es aumentar la duración de su vida material. Es imposible escapar de la ansiedad material de esa manera.

La palabra pramadā-saṅga-dūṣitaḥ indica que, sin contar otros tipos de contaminación, la sola contaminación que supone el permanecer apegado a una mujer es suficiente para prolongar nuestra miserable existencia material. Por esa razón, la civilización védica educa a la persona desde el principio de su vida para que abandone el apego a las mujeres. La primera etapa de la vida es brahmacārī, la segunda, gṛhastha, la tercera, vānaprastha, y la cuarta etapa es sannyāsa. Esta división en etapas tiene por finalidad permitirnos que nos desapeguemos de la relación con mujeres.

Texto

tām eva manasā gṛhṇan
babhūva pramadottamā
anantaraṁ vidarbhasya
rāja-siṁhasya veśmani

Palabra por palabra

tām — su (de ella); eva — ciertamente; manasā — con la mente; gṛhṇan — aceptar; babhūva — pasó a ser; pramadā — mujer; uttamā — muy bien situada; anantaram — después de la muerte; vidarbhasya — de Vidarbha; rāja-siṁhasya — del muy poderoso rey; veśmani — en la casa.

Traducción

Cuando abandonó el cuerpo, el rey Purañjana estaba recordando a su esposa; en consecuencia, en su siguiente vida fue una mujer muy bella y de buena familia. Nació como hija del rey Vidarbha en la misma casa del rey.

Significado

En el momento de la muerte, el rey Purañjana pensó en su esposa; debido a ello, en su siguiente vida obtuvo un cuerpo de mujer. Eso confirma el siguiente verso del Bhagavad-gītā (8.6):

yaṁ yaṁ vāpi smaran bhāvaṁ
tyajaty ante kalevaram
taṁ tam evaiti kaunteya
sadā tad-bhāva-bhāvitaḥ

«El estado de existencia que se recuerda al abandonar el cuerpo, ¡oh, hijo de Kuntī!, es el estado que, indefectiblemente, se va a alcanzar».

Cuando una entidad viviente se acostumbra a pensar en un determinado tema, o está absorta en determinada forma de pensar, en el momento de la muerte pensará en ese tema. En el momento de la muerte, pensará en el tema que ha ocupado su vida mientras estaba despierto, medio dormido o profundamente dormido. La entidad viviente, tras caer y abandonar la compañía del Señor Supremo, transmigra de una forma corporal a otra, conforme a las leyes de la naturaleza, hasta que, por último, llega a la forma humana. Si está absorto en pensamientos materiales e ignora la vida espiritual y no se refugia bajo los pies de loto de la Suprema Personalidad de Dios, Govinda, que resuelve todos los problemas del nacimiento y la muerte, y especialmente si piensa en su esposa, en su siguiente vida nacerá como mujer. Como se afirma en el Śrīmad-Bhāgavatam (3.31.1): karmaṇā daiva-netreṇa. La entidad viviente actúa de un modo piadoso, de un modo impío, o a veces de ambas maneras. Habida cuenta de todas sus actividades, las autoridades superiores le ofrecen un nuevo cuerpo. A pesar de que estaba demasiado apegado a su esposa, el rey Purañjana ejecutó muchas actividades fruitivas piadosas. Por consiguiente, aunque nació en un cuerpo de mujer, se le permitió nacer como hija de un poderoso rey. En el Bhagavad-gītā (6.41), se confirma:

prāpya puṇya-kṛtāṁ lokān
uṣitvā śāśvatīḥ samāḥ
śucīnāṁ śrīmatāṁ gehe
yoga-bhraṣṭo ’bhijāyate

«Después de muchísimos años de disfrute en los planetas de las entidades vivientes piadosas, el yogī que fracasa nace en una familia de personas virtuosas, o en una familia de la rica aristocracia».

La persona que cae del sendero del bhakti-yoga, de la comprensión de Dios, debido al apego por las actividades fruitivas, la especulación filosófica o el yoga místico, recibe una nueva oportunidad naciendo en una familia aristocrática y rica. Con esto, las autoridades superiores designadas por la Suprema Personalidad de Dios hacen justicia a la entidad viviente conforme a lo que ella ha deseado. El rey Purañjana estaba muy absorto en pensar en su esposa, y debido a ello nació como mujer; a pesar de todo, sus actividades piadosas pasadas le llevaron a nacer en la familia de un rey. La conclusión es que, antes de concedérsenos otro cuerpo, se nos tienen en cuenta todas las actividades. Por esa razón, Nārada Muni aconsejó a Vyāsadeva que hay que emprender el sendero de conciencia de Kṛṣṇa, el servicio devocional, y abandonar todos los deberes prescritos comunes. Ese mismo consejo lo dio también el propio Señor Kṛṣṇa. El devoto, aunque caiga del sendero de conciencia espiritual, alcanzará un cuerpo humano en el hogar de un devoto o de un hombre rico. De ese modo podrá continuar con su servicio devocional.

Texto

upayeme vīrya-paṇāṁ
vaidarbhīṁ malayadhvajaḥ
yudhi nirjitya rājanyān
pāṇḍyaḥ para-purañjayaḥ

Palabra por palabra

upayeme — casada; vīrya — de valor o de poderío; paṇām — el premio; vaidarbhīm — hija de Vidarbha; malaya-dhvajaḥ — Malayadhvaja; yudhi — en la lucha; nirjitya — después de vencer; rājanyān — a otros príncipes; pāṇḍyaḥ — el mejor de los eruditos, o nacido en el país de Pāṇḍu; para — trascendental; puram — ciudad; jayaḥ — conquistador.

Traducción

Se estableció que Vaidarbhī, la hija del rey Vidarbha, se casaría con Malayadhvaja, un hombre muy poderoso que habitaba en el país de Pāṇḍu. Después de vencer a otros príncipes, Malayadhvaja se casó con la hija del rey Vidarbha.

Significado

Es costumbre entre los kṣatriyas ofrecer en matrimonio a una princesa bajo determinadas condiciones. La mano de Draupadī, por ejemplo, se ofreció al que pudiera clavar una flecha en un pez del que solo se veía la imagen reflejada. Kṛṣṇa Se casó con una de Sus reinas después de vencer a siete grandes toros. El sistema védico es que el matrimonio de la hija de un rey se establezca bajo determinadas condiciones. Vaidarbhī, la hija de Vidarbha, se debía casar con un rey que fuera muy poderoso y un gran devoto. Al reunir esas dos cualidades, ser un rey poderoso y un gran devoto, el rey Malayadhvaja cumplía todos los requisitos. Su nombre, Malayadhvaja, viene a significar «un gran devoto cuya posición es tan firme como el monte Malaya, y que, con su propaganda, hace que otros devotos sean tan firmes como él». Un mahā-bhāgavata así puede imponerse por encima de todas las opiniones ajenas. El devoto fuerte hace propaganda contra todos los demás conceptos espirituales, es decir, jñāna, karma y yoga. Con su bandera devocional al viento, siempre está dispuesto a salir victorioso frente a otros conceptos acerca de la comprensión trascendental. En un debate entre un devoto y un no devoto, el devoto fuerte y puro siempre sale victorioso.

La palabra pāṇḍya viene de la palabra paṇḍā, que significa «conocimiento». Solo una persona muy erudita puede imponerse a los conceptos no devocionales. La palabra para significa «trascendental», y pura significa «ciudad». El para-pura es Vaikuṇṭha, el reino de Dios, y la palabra jaya se refiere a «aquel que puede conquistar». Esto significa que el devoto puro, que es fuerte en el servicio devocional y ha derrotado todos los conceptos no devocionales, también puede conquistar el reino de Dios. En otras palabras, el reino de Dios, Vaikuṇṭha, solo se puede conquistar por medio del servicio devocional. La Suprema Personalidad de Dios recibe el nombre de ajita, nombre que significa que nadie puede conquistarle. Sin embargo, el devoto puede conquistarle con facilidad, mediante un servicio devocional intenso y un apego sincero a la Suprema Personalidad de Dios. Para todos el Señor Kṛṣṇa personifica el miedo, pero por Su propia voluntad sintió miedo ante la vara de madre Yaśodā. A Kṛṣṇa, Dios, nadie puede conquistarle, con excepción de Su devoto. Y un devoto de esa talla fue el que tuvo la bondad de casarse con la hija del rey Vidarbha.

Texto

tasyāṁ sa janayāṁ cakra
ātmajām asitekṣaṇām
yavīyasaḥ sapta sutān
sapta draviḍa-bhūbhṛtaḥ

Palabra por palabra

tasyām — por medio de ella; saḥ — el rey; janayām cakre — engendró; ātmajām — hija; asita — azules o negros; īkṣaṇām — cuyos ojos; yavīyasaḥ — más jóvenes, muy poderosos; sapta — siete; sutān — hijos; sapta — siete; draviḍa — provincia de Draviḍa, la India del Sur; bhū — de la tierra; bhṛtaḥ — reyes.

Traducción

El rey Malayadhvaja fue padre de una hija, que tenía los ojos muy negros. Tuvo además siete hijos, que más adelante gobernaron el territorio de Draviḍa. Por consiguiente, aquel territorio tuvo siete reyes.

Significado

El rey Malayadhvaja era un gran devoto, y después de casarse con la hija del rey Vidarbha, le dio una hija muy hermosa y de ojos negros. En sentido simbólico, esto significa que la hija del rey Malayadhvaja también había sido dotada con servicio devocional, pues sus ojos estaban siempre fijos en Kṛṣṇa. En su vida, el devoto ve única y exclusivamente a Kṛṣṇa. Los siete hijos son los siete procesos del servicio devocional: escuchar, cantar, recordar, ofrecer adoración, ofrecer oraciones, ofrecer servicio amoroso trascendental, y servir los pies de loto del Señor. Los procesos del servicio devocional son nueve, pero solo siete se dieron inmediatamente. Los otros dos, que son la amistad y la entrega de todo, iban a aparecer más adelante. En otras palabras, el servicio devocional se divide en dos categorías, vidhi-mārga y rāga-mārga. Los procesos de hacer amistad con el Señor y sacrificarlo todo por Él pertenecen a la categoría de rāga-mārga, la etapa de servicio devocional maduro. Los procesos importantes para el neófito son: escuchar y cantar (śravaṇaṁ kīrtanam), recordar a Kṛṣṇa, adorar a la Deidad en el templo, ofrecer oraciones, ocuparse siempre en el servicio del Señor, y adorar los pies de loto del Señor.

La palabra yavīyasaḥ indica que esos procesos son muy poderosos. Después de haberse consolidado en la práctica de los procesos de śravaṇaṁ kīrtanaṁ viṣṇoḥ smaraṇaṁ pāda-sevanam/ arcanaṁ vandanaṁ dāsyam, el devoto podrá ofrecer servicio devocional espontáneo, es decir, sakhyam y ātma-nivedanam. Los grandes ācāryas que predican servicio devocional por todo el mundo suelen entrar en la categoría de sakhyam ātma-nivedanam. En realidad, un devoto neófito no puede ser un predicador. Al neófito se le aconseja la ejecución de servicio devocional en los otros siete campos (śravaṇaṁ kīrtanam, etc.). El que puede practicar con éxito las siete etapas preliminares, en el futuro podrá situarse en el plano de sakhyam ātma-nivedanam.

La mención específica de Draviḍa-deśa se refiere a los cinco Draviḍa-deśas de la India del Sur, regiones en las cuales se practican con mucha fuerza los procesos devocionales preliminares (śravaṇaṁ kīrtanam). De Draviḍa-deśa proceden también algunos grandes ācāryas predicadores, como Rāmānujācārya y Madhvācārya, que estaban situados en el nivel de sakhyam ātma-nivedanam.

Texto

ekaikasyābhavat teṣāṁ
rājann arbudam arbudam
bhokṣyate yad-vaṁśa-dharair
mahī manvantaraṁ param

Palabra por palabra

eka-ekasya — de cada uno; abhavat — allí fueron; teṣām — de ellos; rājan — ¡oh, rey!; arbudam — diez millones; arbudam — diez millones; bhokṣyate — se gobernó; yat — cuyos; vaṁśa-dharaiḥ — por descendientes; mahī — el mundo entero; manu-antaram — hasta el final de un manu; param — y después.

Traducción

Mi querido rey Prācīnabarhiṣat, los hijos de Malayadhvaja tuvieron muchos miles de hijos, que han estado protegiendo el mundo entero durante toda la vida de un manu, e incluso después.

Significado

En un día de Brahmā hay catorce manus. Un manvantara, el tiempo de vida de manu, son 71 veces 4 320 000 años. Cuando un manu muere, otro comienza su período de vida. Así transcurre el ciclo vital del universo. Como se confirma en el Bhagavad-gītā (4.1), el proceso de conciencia de Kṛṣṇa se transmite a cada nuevo manu:

śrī-bhagavān uvāca
imaṁ vivasvate yogaṁ
proktavān aham avyayam
vivasvān manave prāha
manur ikṣvākave ’bravīt

«La Personalidad de Dios, el Señor Śrī Kṛṣṇa, dijo: Yo enseñé esta ciencia imperecedera del yoga al dios del Sol, Vivasvān, y Vivasvān se la enseñó a Manu, el padre de la humanidad, y Manu, a su vez, se la enseñó a Ikṣvāku». Vivasvān, el dios del Sol, transmitió el Bhagavad-gītā a un manu, y ese manu la transmitió a su hijo, quien, a su vez, la hizo llegar al siguiente manu. Así pues, la propagación del proceso de conciencia de Kṛṣṇa nunca se interrumpe. Nadie debe pensar que el actual movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa es un movimiento nuevo. Como se confirma en el Bhagavad-gītā y en el Śrīmad-Bhāgavatam, es un movimiento antiquísimo, pues ha ido transmitiéndose de cada manu al siguiente.

Entre vaiṣṇavas, y debido a la identidad personal de cada uno, puede haber alguna diferencia de opinión; sin embargo, y a pesar de todas las diferencias personales, el culto de conciencia de Kṛṣṇa debe seguir adelante. Podemos ver que, en los últimos cien años, Śrīla Bhaktisiddhānta Sarasvatī Gosvāmī Mahārāja, siguiendo las instrucciones de Śrīla Bhaktivinoda Ṭhākura, comenzó a predicar el movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa de una forma organizada. Todos los discípulos de Śrīla Bhaktisiddhānta Sarasvatī Gosvāmī Mahārāja somos hermanos espirituales, y a pesar de algunas diferencias de opinión, y aunque no estamos actuando de común acuerdo, cada uno de nosotros está difundiendo el movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa conforme a su propia capacidad, e iniciando a muchos discípulos a fin de propagarlo por todo el mundo. En lo que a nosotros respecta, hemos fundado la Asociación Internacional para la Conciencia de Krishna, y muchos miles de europeos y americanos se han unido a nuestro movimiento. En verdad, se está propagando como un incendio. El culto de conciencia de Kṛṣṇa, que se basa en los nueve principios del servicio devocional (śravaṇaṁ kīrtanaṁ viṣṇoḥ smaraṇaṁ pāda-sevanam/ arcanaṁ vandanaṁ dāsyaṁ sakhyam ātma-nivedanam), nunca se detendrá. Seguirá adelante sin consideraciones de casta, credo, color o país. Nadie lo puede detener.

En este verso es muy importante la palabra bhokṣyate. Tal como un rey protege a sus súbditos, estos devotos, siguiendo los principios del servicio devocional, protegerán a toda la población mundial. En todo el mundo, la gente se está viendo acosada por svāmīs, yogīs, karmīs y jñānīs que, supuestamente, siguen principios religiosos; sin embargo, ninguno de ellos puede mostrar el modo correcto de elevarse hasta el plano espiritual. Básicamente, las escuelas que están difundiendo el servicio devocional por todo el universo son cuatro: la Rāmānuja-sampradāya, la Madhva-sampradāya, la Viṣṇusvāmi-sampradāya y la Nimbārka-sampradāya. De entre ellas, la Madhva-Gauḍīya-sampradāya procede del Señor Caitanya Mahāprabhu. Todos esos devotos están propagando el movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa por todo el mundo, protegiendo así a la gente inocente, que está confundida con tantos seudo avatāras, svāmīs, yogīs y demás.

Texto

agastyaḥ prāg duhitaram
upayeme dhṛta-vratām
yasyāṁ dṛḍhacyuto jāta
idhmavāhātmajo muniḥ

Palabra por palabra

agastyaḥ — el gran sabio Agastya; prāk — primera; duhitaram — hija; upayeme — se casó; dhṛta-vratām — que había hecho votos; yasyām — por medio del cual; dṛḍhacyutaḥ — llamado Dṛḍhacyuta; jātaḥ — nació; idhmavāha — llamado Idhmavāha; ātma-jaḥ — hijo; muniḥ — el gran sabio.

Traducción

El gran sabio Agastya se casó con la primogénita de Malayadhvaja, que era una devota consagrada del Señor Kṛṣṇa. De ella nació un hijo, que se llamó Dṛḍhacyuta, quien, a su vez, fue padre de Idhmavāha.

Significado

Es muy significativo el nombre Agastya Muni. Agastya Muni representa a la mente. La palabra agastya indica que los sentidos no actúan de modo independiente, y la palabra muni significa «mente». La mente es el centro de todos los sentidos, que, por lo tanto, no pueden actuar con independencia de ella. La mente, al adoptar el culto del bhakti, se ocupa en servicio devocional. Ese culto del bhakti (bhakti-latā) es la hija mayor de Malayadhvaja, y como antes se explicó, sus ojos están siempre fijos en Kṛṣṇa (asitekṣaṇām). El bhakti no se puede ofrecer a los semidioses. El bhakti solo se puede ofrecer a Viṣṇu (śravaṇaṁ kīrtanaṁ viṣṇoḥ). Los māyāvādīs creen que la Verdad Absoluta no tiene forma, y dicen que la palabra bhakti es válida para todo tipo de adoración. Si así fuera, el devoto podría adorar a cualquier semidiós o forma divina que imaginase. Sin embargo, no es esa la realidad. La realidad es que el bhakti se refiere exclusivamente al Señor Viṣṇu y a Sus expansiones. Por lo tanto, bhakti-latā es dṛḍha-vrata, el gran voto, pues cuando la mente se ocupa por completo en servicio devocional, no cae. Quien trate de avanzar por otros medios —karma-yoga o jñāna-yoga— caerá, pero el que está firmemente establecido en el bhakti, nunca cae.

Tenemos pues que de bhakti-latā nace un hijo llamado Dṛḍhacyuta, el cual, a su vez, es padre de Idhmavāha. La palabra idhma-vāha se refiere a aquel que cuando se presenta ante un maestro espiritual, le lleva leña para que la queme durante el sacrificio. Lo principal es que el culto de bhakti-latā, el culto de la devoción, nos establece firmemente en la posición espiritual. El que está fijo de esa forma, nunca desciende, y engendra hijos que son seguidores estrictos de los mandamientos de los śāstras. En los Vedas se dice:

tad-vijñānārthaṁ sa gurum evābhigacchet
samit-pāṇiḥ śrotriyaṁ brahma-niṣṭham

Los que han recibido iniciación en el sendero del servicio devocional son estrictos seguidores de los mandamientos de las Escrituras védicas.

Texto

vibhajya tanayebhyaḥ kṣmāṁ
rājarṣir malayadhvajaḥ
ārirādhayiṣuḥ kṛṣṇaṁ
sa jagāma kulācalam

Palabra por palabra

vibhajya — habiendo dividido; tanayebhyaḥ — entre sus hijos; kṣmām — el mundo entero; rāja-ṛṣiḥ — el gran rey santo; malayadhvajaḥ — llamado Malayadhvaja; ārirādhayiṣuḥ — deseando adorar; kṛṣṇam — al Señor Kṛṣṇa; saḥ — él; jagāma — fue; kulācalam — a Kulācala.

Traducción

Después de esto, Malayadhvaja, el gran rey santo, dividió todo su reino entre sus hijos, y para centrar toda su atención en la adoración del Señor Kṛṣṇa, se fue a un lugar solitario llamado Kulācala.

Significado

Malayadhvaja, el gran rey, era un verdadero mahā-bhāgavata, un devoto en el nivel más elevado. Como resultado de su servicio devocional, tuvo muchos hijos y discípulos para propagar el culto del bhakti (śravaṇaṁ kīrtanaṁ viṣṇoḥ). En realidad, el mundo debería repartirse entre discípulos como esos. Todo el mundo debe ocuparse en predicar el culto de conciencia de Kṛṣṇa. En otras palabras, cuando los discípulos han madurado y están preparados para predicar, el maestro espiritual debe retirarse y sentarse en un lugar solitario para escribir y ejecutar nirjana-bhajana. Esto significa sentarse en silencio en un lugar solitario y ejecutar servicio devocional. Nirjana-bhajana, que consiste en adorar al Señor Supremo en silencio, no le es posible al devoto neófito. Śrīla Bhaktisiddhānta Sarasvatī Ṭhākura nunca recomendó a los devotos neófitos que se retirasen a un lugar solitario para ocuparse en servicio devocional. De hecho, a este respecto dice en una canción:

duṣṭa mana, tumi kisera vaiṣṇava?
pratiṣṭhāra tare, nirjanera ghare,
tava hari-nāma kevala kaitava

«Mi querida mente, ¿qué clase de devoto eres? En busca de adoración barata, te sientas en un lugar solitario y finges cantar el mahā-mantra Hare Kṛṣṇa, pero todo eso no es más que un engaño». Con esas palabras, Bhaktisiddhānta Sarasvatī Ṭhākura está diciendo que todo devoto, bajo la guía de un maestro espiritual experto, debe predicar el culto del bhakti, el proceso de conciencia de Kṛṣṇa, por todo el mundo. Solo un devoto maduro puede sentarse en un lugar solitario y retirarse de la prédica activa por todo el mundo. Siguiendo ese ejemplo, en la actualidad los devotos de la Asociación Internacional para la Conciencia de Krishna prestan servicio como predicadores en muchas partes del mundo. Ahora pueden permitir al maestro espiritual que se retire de las actividades de prédica activa. En la última etapa de la vida del maestro espiritual, sus devotos deben asumir las actividades de prédica. De esa manera el maestro espiritual puede sentarse en un lugar solitario y ofrecer nirjana-bhajana.

Texto

hitvā gṛhān sutān bhogān
vaidarbhī madirekṣaṇā
anvadhāvata pāṇḍyeśaṁ
jyotsneva rajanī-karam

Palabra por palabra

hitvā — abandonando; gṛhān — hogar; sutān — hijos; bhogān — felicidad material; vaidarbhī — la hija del rey Vidarbha; madira-īkṣaṇā — de ojos encantadores; anvadhāvata — siguió; pāṇḍya-īśam — al rey Malayadhvaja; jyotsnā iva — como la luz de la luna; rajanī-karam — a la luna.

Traducción

Tal como la luz de la luna sigue a la luna por la noche, inmediatamente después de que el rey Malayadhvaja partiera hacia Kulācala, su devota esposa, de encantadores ojos, le siguió, abandonando por completo la felicidad del hogar, a pesar de la familia y los hijos.

Significado

De la misma manera que en la etapa de vānaprastha la esposa sigue al esposo, cuando el maestro espiritual se retira para ejecutar nirjana-bhajana, algunos de sus devotos avanzados le siguen y se ocupan en su servicio personal. En otras palabras, los que están muy atraídos por la vida familiar deben ofrecer servicio al maestro espiritual y abandonar la supuesta felicidad que ofrecen la sociedad, la amistad y el amor. A este respecto es muy significativo un verso de Śrīla Viśvanātha Cakravartī Ṭhākura en su Gurv-aṣṭaka: yasya prasādād bhagavat-prasādaḥ. El discípulo siempre debe recordar que sirviendo al maestro espiritual podrá avanzar fácilmente en el proceso de conciencia de Kṛṣṇa. Todas las Escrituras nos recuerdan que complacer al maestro espiritual y servirle directamente es la manera de alcanzar la etapa más elevada de perfección en el servicio devocional.

En este verso también es significativa la palabra madirekṣaṇā. En su Sandarbha, Śrīla Jīva Gosvāmī ha explicado que la palabra madira significa «embriagante». A la persona cuyos ojos se embriagan al ver a la Deidad, se le puede aplicar el adjetivo madirekṣaṇa. Los ojos de la reina Vaidarbhī eran encantadores, madirekṣaṇa, tal como los ojos de alguien que se ocupa en ver a la Deidad en el templo. Solo el devoto que es avanzado puede fijar los ojos en la Deidad del templo.

Texto

tatra candravasā nāma
tāmraparṇī vaṭodakā
tat-puṇya-salilair nityam
ubhayatrātmano mṛjan
kandāṣṭibhir mūla-phalaiḥ
puṣpa-parṇais tṛṇodakaiḥ
vartamānaḥ śanair gātra-
karśanaṁ tapa āsthitaḥ

Palabra por palabra

tatra — allí; candravasā — el río Candravasā; nāma — llamado; tāmraparṇī — el río Tāmraparṇī; vaṭodakā — el río Vaṭodakā; tat — de esos ríos; puṇya — piadosos; salilaiḥ — con las aguas; nityam — diariamente; ubhayatra — de ambas maneras; ātmanaḥ — de sí mismo; mṛjan — aseo; kanda — bulbos; aṣṭibhiḥ — y con semillas; mūla — raíces; phalaiḥ — y con frutas; puṣpa — flores; parṇaiḥ — y con hojas; tṛṇā — hierba; udakaiḥ — y con agua; vartamānaḥ — subsistir; śanaiḥ — gradualmente; gātra — su cuerpo; karśanam — adelgazando; tapaḥ — austeridad; āsthitaḥ — realizó.

Traducción

En la provincia de Kulācala había varios ríos, cuyos nombres eran Candravasā, Tāmraparṇī y Vaṭodakā. El rey Malayadhvaja solía ir a esos ríos piadosos para bañarse en ellos. De esa forma se purificó, tanto externa como internamente. Se bañaba y comía bulbos, semillas, hojas, flores, raíces, frutas y hierbas; para beber, tomaba agua. De esa forma se sometió a rigurosas austeridades. Con el tiempo, se quedó muy delgado.

Significado

Definitivamente podemos constatar que para avanzar en el proceso de conciencia de Kṛṣṇa hay que controlar el peso del cuerpo. Cuando alguien engorda demasiado, debe entenderse que no está avanzando espiritualmente. Śrīla Bhaktisiddhānta Sarasvatī Ṭhākura censuraba con gran severidad a los discípulos que eran gruesos. Quien se proponga avanzar en el proceso de conciencia de Kṛṣṇa tiene que saber que no debe comer demasiado. En el pasado, los devotos se retiraban a los bosques y a las cumbres de las montañas, o viajaban como peregrinos; en estos días, sin embargo, esas rigurosas austeridades son imposibles de realizar. Basta con comer solamente prasāda, pero no más de lo preciso. En el calendario vaiṣṇava hay muchos días de ayuno, como los ekādaśīs y los días en que se celebra el advenimiento o la partida de Dios y de Sus devotos. Esos días son para reducir la grasa del cuerpo, a fin de no dormir más de lo deseado y no caer en la inactividad y en la pereza. Comer demasiado nos hará dormir más de lo necesario. La forma humana de vida es para la austeridad, y austeridad significa controlar la vida sexual, la cantidad de comida, etc. De esa forma la persona puede ahorrar tiempo para ocuparlo en actividades espirituales, y puede purificarse tanto interna como externamente. Así puede limpiar tanto el cuerpo como la mente.

Texto

śītoṣṇa-vāta-varṣāṇi
kṣut-pipāse priyāpriye
sukha-duḥkhe iti dvandvāny
ajayat sama-darśanaḥ

Palabra por palabra

śīta — frío; uṣṇa — calor; vāta — viento; varṣāṇi — y estaciones lluviosas; kṣut — hambre; pipāse — y sed; priya — agradable; apriye — y desagradable; sukha — felicidad; duḥkhe — y aflicción; iti — de ese modo; dvandvāni — dualidades; ajayat — superó; sama-darśanaḥ — equilibrado.

Traducción

Mediante la austeridad, el rey Malayadhvaja poco a poco logró ser ecuánime en cuerpo y mente con respecto a las dualidades del calor y del frío, la felicidad y la aflicción, el viento y la lluvia, el hambre y la sed, lo agradable y lo desagradable. De ese modo, superó todas las relatividades.

Significado

La liberación supone quedar libre de las relatividades del mundo. Con excepción de la persona autorrealizada, todo el mundo tiene que someterse a las dualidades de la lucha en el mundo relativo. En el Bhagavad-gītā, el Señor Kṛṣṇa aconseja a Arjuna que supere todas las relatividades mediante la tolerancia. El Señor Kṛṣṇa indica que son las relatividades, como el invierno y el verano, lo que nos perturba en el mundo material. En invierno no nos gusta bañarnos, pero en verano queremos bañarnos dos o tres veces al día, e incluso más. Por lo tanto, Kṛṣṇa nos aconseja que no nos dejemos perturbar por las cosas relativas y duales que vienen y van.

El hombre común, para lograr el equilibrio frente a la dualidad, tiene que someterse a muchas austeridades. Cuando alguien se agita ante las relatividades de la vida, es porque ha aceptado una posición relativa; por consiguiente, tiene que someterse a las austeridades que se prescriben en los śāstras para trascender el cuerpo material y acabar definitivamente con la existencia material. El rey Malayadhvaja se sometió a rigurosas austeridades; abandonó su hogar y fue a Kulācala, donde se bañaba en los ríos sagrados y solamente comía productos vegetales como tallos, raíces, semillas, flores y hojas, rechazando todo tipo de cereales o alimentos cocinados. Todas esas prácticas son extremadamente austeras. En esta era es muy difícil abandonar el hogar y marcharse al bosque o a los Himālayas para someterse a un proceso de austeridades. De hecho, es prácticamente imposible. Muchas personas se muestran incapaces incluso de seguir un consejo como el de abandonar el consumo de carne, la bebida, los juegos de azar y las relaciones sexuales ilícitas. ¿Qué harían entonces si fuesen a los Himālayas o a Kulācala? Esos actos de renunciación no son posibles en esta era; por esa razón, el Señor Kṛṣṇa nos ha aconsejado que adoptemos el proceso de bhakti-yoga. El bhakti-yoga, de un modo natural, libera a la persona de las dualidades de la vida. En el bhakti-yoga, el centro es Kṛṣṇa, y Kṛṣṇa siempre es trascendental. De modo que, para trascender las dualidades hay que ocuparse siempre en el servicio del Señor, como se confirma en el Bhagavad-gītā (14.26):

māṁ ca yo ’vyabhicāreṇa
bhakti-yogena sevate
sa guṇān samatītyaitān
brahma-bhūyāya kalpate

«Aquel que se dedica por completo al servicio devocional, firme en todas las circunstancias, trasciende de inmediato las modalidades de la naturaleza material y llega así al plano del Brahman».

Cuando alguien se ocupa realmente en el servicio del Señor, bhakti-yoga, de un modo natural puede controlar sus sentidos, su lengua y muchas otras cosas. Para el que se ocupa en el proceso de bhakti-yoga con toda sinceridad, no hay la menor posibilidad de caída. E incluso si llegara a caer, no perdería nada. Sus actividades devocionales quedarían estancadas o paralizadas durante un tiempo, pero tan pronto como tuviese otra oportunidad, comenzaría de nuevo desde el mismo punto en que lo dejó.

Texto

tapasā vidyayā pakva-
kaṣāyo niyamair yamaiḥ
yuyuje brahmaṇy ātmānaṁ
vijitākṣānilāśayaḥ

Palabra por palabra

tapasā — con austeridad; vidyayā — con educación; pakva — quemó; kaṣāyaḥ — toda la suciedad; niyamaiḥ — con principios regulativos; yamaiḥ — con dominio de sí mismo; yuyuje — fijó; brahmaṇi — en iluminación espiritual; ātmānam — su ser; vijita — completamente controlados; akṣa — sentidos; anila — vida; āśayaḥ — conciencia.

Traducción

Por medio de la adoración, las austeridades y los principios regulativos, el rey Malayadhvaja adquirió dominio sobre sus sentidos, su vida y su conciencia. De esa forma lo fijó todo tomando como punto central el Brahman Supremo [Kṛṣṇa].

Significado

Siempre que aparece la palabra brahman, los impersonalistas creen que se refiere a la refulgencia impersonal, el brahmajyoti. Sin embargo, en realidad el Parabrahman, el Brahman Supremo, es Kṛṣṇa, Vāsudeva. Como se afirma en el Bhagavad-gītā (7.19): vāsudevaḥ sarvam iti: Vāsudeva Se extiende por todas partes en la forma de Brahman impersonal. No se puede fijar la mente en un «algo» impersonal. Por eso el Bhagavad-gītā (12.5) dice: kleśo ’dhikataras teṣām avyaktāsakta-cetasām: «Para aquellos cuya mente está apegada al aspecto no manifestado e impersonal del Supremo, el avance es muy penoso». En consecuencia, cuando aquí se dice que el rey Malayadhvaja fijó su mente en Brahman, «Brahman» significa la Suprema Personalidad de Dios, Vāsudeva.

Texto

āste sthāṇur ivaikatra
divyaṁ varṣa-śataṁ sthiraḥ
vāsudeve bhagavati
nānyad vedodvahan ratim

Palabra por palabra

āste — permanece; sthāṇuḥ — inmóvil; iva — como; ekatra — en un lugar; divyam — de los semidioses; varṣa — años; śatam — cien; sthiraḥ — estable; vāsudeve — al Señor Kṛṣṇa; bhagavati — la Suprema Personalidad de Dios; na — no; anyat — nada más; veda — conocía; udvahan — poseyendo; ratim — atracción.

Traducción

De esa forma, permaneció inmóvil en un mismo lugar durante cien años de los semidioses. Pasado ese tiempo, nació en él una atracción devocional pura por Kṛṣṇa, la Suprema Personalidad de Dios, y se mantuvo fijo en esa posición.

Significado

bahūnāṁ janmanām ante
jñānavān māṁ prapadyate
vāsudevaḥ sarvam iti
sa mahātmā sudurlabhaḥ

«Después de muchos nacimientos y muertes, aquel que verdaderamente posee conocimiento se entrega a Mí, sabiendo que Yo soy la causa de todas las causas y de todo lo que existe. Esa gran alma es muy difícil de encontrar» (Bg. 7.19). Vāsudeva, la Suprema Personalidad de Dios, Kṛṣṇa, lo es todo, y el que sabe eso es el más grande de los trascendentalistas. En el Bhagavad-gītā se afirma que esto se puede comprender después de muchísimas vidas. Lo mismo se confirma en este verso con las palabras divyaṁ varṣa-śatam («cien años de los semidioses»). Un día (doce horas) de los semidioses equivale a seis meses en la Tierra. Cien años de los semidioses vendrían a ser treinta y seis mil años terrestres. Tenemos entonces que el rey Malayadhvaja ejecutó austeridades y penitencias durante treinta y seis mil años. Pasado ese tiempo, quedó fijo en el servicio devocional del Señor. En la Tierra, para vivir tantos años, hay que nacer muchas veces. Esto confirma la conclusión de Kṛṣṇa. Llegar a la conclusión consciente de Kṛṣṇa, permanecer fijo en la comprensión de que Kṛṣṇa lo es todo, y ofrecer servicio a Kṛṣṇa, son características del estado de perfección. Como se dice en el Caitanya-caritāmṛta (Madhya 22.62): kṛṣṇe bhakti kaile sarva-karma kṛta haya. Aquel que, adorando a Kṛṣṇa u ofreciéndole servicio devocional, llega a la conclusión de que Kṛṣṇa lo es todo, alcanza la verdadera perfección en todo aspecto. No solo hay que llegar a la conclusión de que Kṛṣṇa lo es todo, sino que hay que permanecer fijo en esa comprensión. Esa es la perfección más elevada de la vida, la perfección que obtuvo finalmente el rey Malayadhvaja.

Texto

sa vyāpakatayātmānaṁ
vyatiriktatayātmani
vidvān svapna ivāmarśa-
sākṣiṇaṁ virarāma ha

Palabra por palabra

saḥ — el rey Malayadhvaja; vyāpakatayā — por ser omnipresente; ātmānam — la Superalma; vyatiriktatayā — por distinguir; ātmani — en su propio ser; vidvān — perfectamente educado; svapne — en un sueño; iva — como; amarśa — de reflexión; sākṣiṇam — el testigo; virarāma — se volvió indiferente; ha — ciertamente.

Traducción

El rey Malayadhvaja alcanzó el nivel de conocimiento perfecto, y podía distinguir a la Superalma del alma individual. El alma individual está en un solo lugar, mientras que la Superalma está en todas partes. El rey obtuvo la perfección en el conocimiento de que el cuerpo material no es el alma sino que el alma es el testigo del cuerpo material.

Significado

El alma condicionada ve a menudo cómo fracasan sus intentos de entender las diferencias entre el cuerpo material, la Superalma y el alma individual. Hay dos tipos de filósofos māyāvādīs; unos siguen la filosofía budista, y otros siguen la filosofía de Śaṅkara. Los seguidores de Buddha no reconocen la existencia de nada más allá del cuerpo; la conclusión de los seguidores de Śaṅkara es que Paramātmā, la Superalma, no tiene una existencia separada. Los seguidores de Śaṅkara creen que, en última instancia, el alma individual es idéntica a Paramātmā. El filósofo vaiṣṇava, que tiene conocimiento perfecto, sabe que el cuerpo está hecho de energía externa, y que la Superalma, Paramātmā, la Suprema Personalidad de Dios, está junto al alma individual y es diferente de ella. Esto lo confirma el Señor Kṛṣṇa en el Bhagavad-gītā (13.3):

kṣetrajñaṁ cāpi māṁ viddhi
sarva-kṣetreṣu bhārata
kṣetra-kṣetrajñayor jñānaṁ
yat taj jñānaṁ mataṁ mama

«¡Oh, vástago de Bharata!, debes comprender que Yo soy también el conocedor en todos los cuerpos, y entender el cuerpo y a su propietario se denomina conocimiento. Esa es Mi opinión».

Se considera que el cuerpo es el campo, y que el alma individual es el trabajador en ese campo. Existe, sin embargo, otra persona, la Superalma, que está con el alma individual y actúa como testigo. El alma individual trabaja y saborea los frutos del cuerpo, mientras que la Superalma Se limita a ser testigo de las actividades del alma individual, pero no saborea los frutos de esas actividades. La Superalma está en todos los campos de actividad, mientras que el alma individual está limitada a un solo cuerpo. El rey Malayadhvaja alcanzó esa perfección del conocimiento y pudo ver la diferencia entre el alma y la Superalma, y entre el alma y el cuerpo material.

Texto

sākṣād bhagavatoktena
guruṇā hariṇā nṛpa
viśuddha-jñāna-dīpena
sphuratā viśvato-mukham

Palabra por palabra

sākṣāt — directamente; bhagavatā — por la Suprema Personalidad de Dios; uktena — instruido; guruṇā — el maestro espiritual; hariṇā — por el Señor Hari; nṛpa — ¡oh, rey!; viśuddha — puro; jñāna — conocimiento; dīpena — con la luz de; sphuratā — iluminando; viśvataḥ-mukham — todos los puntos de vista.

Traducción

De esa forma, el rey Malayadhvaja alcanzó el conocimiento perfecto, pues había llegado al estado de pureza y recibía instrucciones directamente de la Suprema Personalidad de Dios. Iluminado con ese conocimiento trascendental, podía entenderlo todo desde todos los puntos de vista.

Significado

En este verso son muy significativas las palabras sākṣād bhagavatoktena guruṇā hariṇā. Cuando el devoto, por ofrecer servicio devocional al Señor, se ha purificado, la Suprema Personalidad de Dios habla directamente al alma individual. Esto lo confirma el Señor Kṛṣṇa en el Bhagavad-gītā (10.10):

teṣāṁ satata-yuktānāṁ
bhajatāṁ prīti-pūrvakam
dadāmi buddhi-yogaṁ taṁ
yena mām upayānti te

«A aquellos que están constantemente consagrados a servirme con amor, Yo les doy la comprensión con la cual pueden llegar hasta Mí».

El Señor es la Superalma que está en el corazón de todos, y actúa como caitya-guru, el maestro espiritual interior. Sin embargo, Él solo da instrucciones directas a los devotos avanzados, los devotos puros. En el comienzo, si un devoto es serio y sincero, el Señor le dirige desde dentro para que acuda a un maestro espiritual. Cuando ha sido educado por el maestro espiritual conforme a los principios regulativos del servicio devocional, y está situado en el plano del apego espontáneo por el Señor (rāga-bhakti), el Señor también le da instrucciones desde dentro (teṣāṁ satata-yuktānāṁ bhajatāṁ prīti-pūrvakam/ dadāmi buddhi-yogaṁ tam). Se trata de una ventaja especial que solo obtiene el alma liberada. Habiendo alcanzado esa etapa, el rey Malayadhvaja estaba en contacto directo con el Señor Supremo y recibía instrucciones de Él directamente.

Texto

pare brahmaṇi cātmānaṁ
paraṁ brahma tathātmani
vīkṣamāṇo vihāyekṣām
asmād upararāma ha

Palabra por palabra

pare — trascendental; brahmaṇi — en el Absoluto; ca — y; ātmānam — el ser; param — el Supremo; brahma — Absoluto; tathā — también; ātmani — en sí mismo; vīkṣamāṇaḥ — observando entonces; vihāya — abandonar; īkṣām — reservas; asmāt — de ese proceso; upararāma — retiró; ha — ciertamente.

Traducción

El rey Malayadhvaja podía entonces observar que la Superalma estaba a su lado, y que él, como alma individual, estaba al lado de la Superalma. Como ambos estaban juntos, no era necesario mantener intereses distintos; de modo que abandonó esa clase de actividades.

Significado

En la etapa avanzada del servicio devocional, el devoto no ve ninguna diferencia entre sus propios intereses y los intereses de la Suprema Personalidad de Dios. Ambos intereses se unifican, pues el devoto no actúa por intereses personales. Todo lo que hace, lo hace en interés de la Suprema Personalidad de Dios. En esa etapa, lo ve todo en la Suprema Personalidad de Dios, y ve a la Suprema Personalidad de Dios en todo. Habiendo alcanzado ese nivel de comprensión, no ve diferencia alguna entre el mundo espiritual y el material. Para quien tiene una visión perfecta, el mundo material es el mundo espiritual, pues se trata de la energía externa del Señor Supremo. Para el devoto perfecto, la energía no es diferente de la fuente de energía. Así, el supuesto mundo material se vuelve espiritual (sarvaṁ khalv idaṁ brahma). Todo lo que hay, existe para el servicio del Señor Supremo, y el devoto experto puede utilizar cualquier cosa supuestamente material para servir al Señor. No se puede servir al Señor sin haber llegado al plano espiritual. Por lo tanto, un objeto supuestamente material que se emplea en el servicio del Señor, ya no se puede seguir considerando material. Así, el devoto puro, con visión perfecta, ve desde todos los puntos de vista.

Texto

patiṁ parama-dharma-jñaṁ
vaidarbhī malayadhvajam
premṇā paryacarad dhitvā
bhogān sā pati-devatā

Palabra por palabra

patim — a su esposo; parama — supremo; dharma-jñam — conocedor de los principios religiosos; vaidarbhī — la hija de Vidarbha; malaya-dhvajam — llamado Malayadhvaja; premṇā — con amor y afecto; paryacarat — sirvió con actitud devocional; hitvā — abandonar; bhogān — disfrutes de los sentidos; — ella; pati-devatā — aceptando a su esposo como Señor Supremo.

Traducción

Para la hija del rey Vidarbha, su esposo era exactamente como el Supremo. Abandonó por completo el disfrute sensual, y con una actitud de renunciación completa, siguió los principios de su esposo, que era muy avanzado. De esa forma, permaneció ocupada en su servicio.

Significado

En sentido simbólico, el rey Malayadhvaja es el maestro espiritual, y su esposa, Vaidarbhī, el discípulo. Para el discípulo, el maestro espiritual es como la Suprema Personalidad de Dios. Viśvanātha Cakravartī Ṭhākura dice en el Gurv-aṣṭaka: sākṣād-dharitvena: «Al guru, el maestro espiritual, se le acepta directamente como la Suprema Personalidad de Dios». Hay que considerar al maestro espiritual, no como los filósofos māyāvādīs, sino del modo que se recomienda en este verso. El maestro espiritual es el sirviente más íntimo del Señor; por lo tanto, debe recibir exactamente el mismo trato que la Suprema Personalidad de Dios. Nunca se debe desatender ni desobedecer al maestro espiritual, como si se tratara de una persona corriente.

La mujer que tenga la buena fortuna de ser la esposa de un devoto puro puede servir a su esposo sin ningún deseo de complacencia de los sentidos. Si permanece ocupada en el servicio de su glorioso esposo, de manera natural alcanzará las perfecciones espirituales de su esposo. El discípulo de un maestro espiritual genuino, por el simple hecho de satisfacer a su maestro, puede tener una oportunidad similar de servir a la Suprema Personalidad de Dios.

Texto

cīra-vāsā vrata-kṣāmā
veṇī-bhūta-śiroruhā
babhāv upa patiṁ śāntā
śikhā śāntam ivānalam

Palabra por palabra

cīra-vāsā — llevar ropas viejas; vrata-kṣāmā — flaca y delgada por las austeridades; veṇī-bhūta — enredado; śiroruhā — su cabello; babhau — ella brillaba; upa patim — cerca de su esposo; śāntā — apacible; śikhā — llamas; śāntam — sin agitarse; iva — como; analam — fuego.

Traducción

La hija del rey Vidarbha vestía ropas viejas, y debido a sus votos de austeridad, estaba muy flaca y delgada. Como dejó de peinarse, su cabello estaba enmarañado. Aunque siempre estaba cerca de su esposo, debido a su silencio y a que nunca se agitaba, parecía una llama ardiendo sin vacilaciones.

Significado

Cuando se enciende un fuego, las primeras llamas se agitan envueltas en humo. La leña al principio arde con dificultad, pero cuando el fuego está completamente encendido, las llamas se estabilizan. De manera similar, cuando los cónyuges siguen los principios regulativos de austeridad, guardan silencio y no viven agitados por los impulsos sexuales. Cuando eso ocurre, ambos se benefician espiritualmente. A esa etapa de la vida se puede llegar cuando se abandona por completo todo tipo de lujos.

La palabra cīra-vāsā de este verso se refiere a ropas muy viejas y rotas. La esposa debe llevar una vida especialmente austera, sin desear un nivel de vida elevado y unos vestidos lujosos. Debe conformarse con lo mínimo imprescindible, y reducir al mínimo sus horas de sueño y su comida. Debe haber abandonado definitivamente la vida sexual. La esposa que se ocupe en el servicio de un esposo glorioso, que debe ser un devoto puro, nunca sentirá la agitación de los impulsos sexuales. Así es la etapa de vānaprastha. La esposa sigue con su esposo, pero se somete a rigurosas austeridades y penitencias a fin de evitar por completo la vida sexual. De esa forma, los esposos pueden vivir juntos de modo permanente. La esposa es más débil que el esposo, y esa debilidad viene expresada en este verso con las palabras upa-patim. Upa significa «cerca de», o «casi igual a». El esposo, por ser varón, casi siempre es más avanzado que la esposa. Aun así, ella debe abandonar todos los hábitos de lujo. No debe cuidar su forma de vestir, ni peinarse. Este hábito de peinarse es una de las principales ocupaciones de las mujeres. En la etapa de vānaprastha, la esposa no debe cuidarse el cabello; entonces se enredará formando nudos y con ello, dejará de ser atractiva para su esposo, y ella misma quedará libre de la agitación de los impulsos sexuales. De esa forma, los esposos pueden avanzar en el cultivo de conciencia espiritual. Esa etapa avanzada recibe el nombre de etapa paramahaṁsa; una vez que se alcanza, tanto él como ella se liberan de la conciencia corporal. El discípulo que permanece estable en el servicio del maestro espiritual no tiene por qué caer de nuevo en las garras de māyā.

Texto

ajānatī priyatamaṁ
yadoparatam aṅganā
susthirāsanam āsādya
yathā-pūrvam upācarat

Palabra por palabra

ajānatī — sin ningún conocimiento; priya-tamam — su muy querido esposo; yadā — cuando; uparatam — haber partido; aṅganā — la mujer; susthira — firme; āsanam — en el asiento; āsādya — llegar hasta; yathā — como; pūrvam — antes; upācarat — continuó sirviendo.

Traducción

Él estaba firmemente sentado en una postura, y la hija del rey Vidarbha continuó sirviéndole como solía hasta que tuvo la certeza de que había abandonado el cuerpo.

Significado

Parece ser que la reina servía a su esposo sin ni siquiera hablar. Simplemente ejecutaba sus deberes prescritos sin hablar. Así no dejó de servir a su esposo hasta que tuvo la certeza de que había abandonado el cuerpo.

Texto

yadā nopalabhetāṅghrāv
ūṣmāṇaṁ patyur arcatī
āsīt saṁvigna-hṛdayā
yūtha-bhraṣṭā mṛgī yathā

Palabra por palabra

yadā — cuando; na — no; upalabheta — notó; aṅghrau — en los pies; ūṣmāṇam — calor; patyuḥ — de su esposo; arcatī — mientras servía; āsīt — ella quedó; saṁvigna — llena de ansiedad; hṛdayā — en el corazón; yūtha-bhraṣṭā — sin su esposo; mṛgī — la cierva; yathā — como.

Traducción

Mientras servía a su esposo dándole masajes en las piernas, notó que sus pies ya no daban calor; entonces se dio cuenta de que había abandonado el cuerpo. Al quedarse sola, sintió una gran ansiedad. Sin la compañía de su esposo, se sentía como una cierva separada de su pareja.

Significado

Tan pronto como la circulación de sangre y aire en el cuerpo se detienen, debe entenderse que el alma ha abandonado el cuerpo. El hecho de que la sangre ya no circula puede percibirse por el enfriamiento de las manos y los pies. La manera de saber si un cuerpo está vivo o no es comprobar los latidos del corazón y la temperatura de los pies y de las manos.

Texto

ātmānaṁ śocatī dīnam
abandhuṁ viklavāśrubhiḥ
stanāv āsicya vipine
susvaraṁ praruroda sā

Palabra por palabra

ātmānam — por sí misma; śocatī — lamentarse; dīnam — desdichada; abandhum — sin un amigo; viklava — con el corazón roto; aśrubhiḥ — con lágrimas; stanau — sus senos; āsicya — humedecer; vipine — en el bosque; susvaram — en voz alta; praruroda — comenzó a llorar; — ella.

Traducción

Sola y viuda en medio del bosque, la hija de Vidarbha comenzó a lamentarse a grandes voces, derramando lágrimas incesantes que humedecieron sus senos.

Significado

En sentido simbólico, se considera que la reina es el discípulo del rey; cuando el cuerpo mortal del maestro espiritual expira, sus discípulos deben llorar tanto como la reina cuando el rey abandona el cuerpo. Sin embargo, el discípulo y el maestro espiritual nunca se separan, porque si el discípulo sigue estrictamente las instrucciones del maestro espiritual, él siempre le acompaña. Esa relación se denomina vāṇī (palabras). La presencia física se denomina vapuḥ. Mientras el maestro espiritual está físicamente presente, el discípulo debe ofrecer servicio a su cuerpo físico, y cuando la existencia fisica del maestro espiritual llega a su fin, el discípulo debe ofrecer servicio a sus instrucciones.

Texto

uttiṣṭhottiṣṭha rājarṣe
imām udadhi-mekhalām
dasyubhyaḥ kṣatra-bandhubhyo
bibhyatīṁ pātum arhasi

Palabra por palabra

uttiṣṭha — por favor, levántate; uttiṣṭha — por favor, levántate; rāja-ṛṣe — ¡oh, rey santo!; imām — esta Tierra; udadhi — por el mar; mekhalām — rodeada; dasyubhyaḥ — de los bandidos; kṣatra-bandhubhyaḥ — de los reyes corruptos; bibhyatīm — muy temerosa; pātum — proteger; arhasi — tú debes.

Traducción

¡Oh, tú, el mejor de los reyes! ¡Por favor, levántate! ¡Levántate! Mira este mundo rodeado de agua e infestado de bandidos y falsos reyes. Es un mundo atemorizado, y tú tienes el deber de protegerlo.

Significado

El ācārya, siguiendo las órdenes superiores de la Suprema Personalidad de Dios o de Su representante, viene a establecer los principios de la religión tal como se enuncian en el Bhagavad-gītā. Religión significa seguir las órdenes de la Suprema Personalidad de Dios. Los principios religiosos comienzan en el momento en que nos entregamos a la Suprema Personalidad de Dios. El ācārya tiene el deber de propagar un sistema religioso genuino e inducir a todo el mundo a postrarse ante el Señor Supremo. Los principios religiosos se ponen en práctica mediante la ejecución de servicio devocional, y específicamente, mediante los nueve procesos que comienzan con escuchar, cantar y recordar. Por desgracia, cuando el ācārya se va, los bandidos y no devotos aprovechan para introducir principios desautorizados, haciéndose pasar por svāmīs, yogīs, filántropos, asistentes sociales, etc. En realidad, la misión de la vida humana es ejecutar las órdenes del Señor Supremo, como se afirma en el Bhagavad-gītā (9.34):

man-manā bhava mad-bhakto
mad-yājī māṁ namaskuru
mām evaiṣyasi yuktvaivam
ātmānaṁ mat-parāyaṇaḥ

«Ocupa siempre tu mente en pensar en Mí, sé Mi devoto, ofréceme reverencias y adórame. Estando completamente absorto en Mí, ten la seguridad de que vendrás a Mí».

El principal deber de los miembros de la sociedad humana es pensar en la Suprema Personalidad de Dios en todo momento, ser Sus devotos, adorar al Señor Supremo y postrarse ante Él. El ācārya, el representante autorizado del Señor Supremo, establece esos principios, pero cuando él se va, de nuevo vuelve a imperar el desorden. Los discípulos perfectos del ācārya tratan de remediar la situación siguiendo sinceramente las instrucciones del maestro espiritual. En la actualidad, el mundo entero está atemorizado por los bandidos y no devotos; por eso hemos fundado el movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa, con el fin de salvar al mundo de la influencia de los principios irreligiosos. Todos deben colaborar con este movimiento a fin de traer al mundo paz y felicidad verdaderas.

Texto

evaṁ vilapantī bālā
vipine ’nugatā patim
patitā pādayor bhartū
rudaty aśrūṇy avartayat

Palabra por palabra

evam — así; vilapantī — lamentarse; bālā — la inocente mujer; vipine — en el bosque solitario; anugatā — seguidora muy fiel; patim — a su esposo; patitā — cayendo; pādayoḥ — a los pies; bhartuḥ — de su esposo; rudatī — mientras lloraba; aśrūṇi — lágrimas; avartayat — derramó.

Traducción

La muy obediente esposa cayó a los pies de su esposo muerto y comenzó a llorar lastimosamente en aquel bosque solitario. Sus ojos derramaron muchas lágrimas.

Significado

El desconsuelo del discípulo cuando el maestro espiritual se va de este mundo es como la aflicción que siente una esposa devota ante la muerte de su esposo.

Texto

citiṁ dārumayīṁ citvā
tasyāṁ patyuḥ kalevaram
ādīpya cānumaraṇe
vilapantī mano dadhe

Palabra por palabra

citim — pira funeraria; dāru-mayīm — hecha con madera; citvā — habiendo amontonado; tasyām — sobre ella; patyuḥ — del esposo; kalevaram — el cuerpo; ādīpya — después de encender; ca — también; anumaraṇe — para morir con él; vilapantī — lamentarse; manaḥ — su mente; dadhe — fijó.

Traducción

Entonces reunió leña y preparó una pira ardiente sobre la cual puso el cadáver de su esposo. Cuando terminó, se lamentó con gran dolor y se dispuso a morir en el fuego con su esposo.

Significado

Según la antigua tradición védica, la esposa fiel muere con su esposo. Eso se denomina saha-maraṇa. En la India esa tradición se mantuvo en vigor hasta la dominación británica. Sin embargo, en aquella época, cuando una viuda no quería morir con su esposo, a veces sus familiares la obligaban. En el pasado eso no era así. La viuda entraba en el fuego por voluntad propia. El gobierno británico acabó con esa práctica, considerándola inhumana. Sin embargo, en la historia antigua de la India vemos que Mahārāja Pāṇḍu, al morir, dejó dos viudas, Mādrī y Kuntī, ante quienes se planteó el dilema de si debían morir las dos o una sóla. Mādrī y Kuntī acordaron que una debía quedarse y la otra debía irse. Mādrī moriría con su esposo en el fuego, y Kuntī se quedaría para cuidar de los cinco niños Pāṇḍavas. Incluso en una fecha tan reciente como 1936, hemos visto a una mujer consagrada a su marido entrar voluntariamente en la pira funeraria del esposo.

Esto indica que la esposa de un devoto debe estar dispuesta a actuar de ese modo. De la misma manera, un discípulo consagrado a su maestro espiritual debe preferir morir con el maestro espiritual antes que fracasar en el cumplimiento de la misión del maestro espiritual. Tal como la Suprema Personalidad de Dios, que desciende a la Tierra para restablecer los principios de la religión, Su representante, el maestro espiritual, también viene para restablecer los principios religiosos. Los discípulos tienen el deber de asumir la misión del maestro espiritual y ponerla debidamente en práctica. De lo contrario, el discípulo debe tomar la decisión de morir junto con el maestro espiritual. En otras palabras, para ejecutar la voluntad del maestro espiritual, el discípulo debe estar dispuesto a dar su vida y abandonar todas las consideraciones de tipo personal.

Texto

tatra pūrvataraḥ kaścit
sakhā brāhmaṇa ātmavān
sāntvayan valgunā sāmnā
tām āha rudatīṁ prabho

Palabra por palabra

tatra — en aquel lugar; pūrvataraḥ — anterior; kaścit — alguien; sakhā — amigo; brāhmaṇaḥ — un brāhmaṇa; ātmavān — un gran sabio erudito; sāntvayan — consolar; valgunā — con muy dulces; sāmnā — palabras de consuelo; tām — a ella; āha — dijo; rudatīm — mientras ella lloraba; prabho — mi querido rey.

Traducción

Mi querido rey, un brāhmaṇa, viejo amigo del rey Purañjana, llegó a aquel lugar, y comenzó a consolar a la reina con dulces palabras.

Significado

Es muy significativo que apareciera un viejo amigo en forma de brāhmaṇa. En Su aspecto de Paramātmā, Kṛṣṇa es el viejo amigo de todos. Los Vedas afirman que Kṛṣṇa está al lado de la entidad viviente. Según el śruti-mantra (dvā suparṇā sayujā sakhāyāḥ), el Señor está en el corazón de todas las entidades vivientes y es suhṛt, su mejor amigo. El Señor siempre está deseoso de que la entidad viviente regrese al hogar, de vuelta a Dios. Acompañando a la entidad viviente como testigo, el Señor le abre todas las posibilidades de disfrute material, pero siempre que tiene oportunidad, le da buenos consejos y le sugiere que abandone sus intentos de ser feliz por medio de ajustes materiales, y que en lugar de ello vuelva su rostro hacia la Suprema Personalidad de Dios y se entregue a Él. Cuando un discípulo es serio en cumplir la misión del maestro espiritual, su resolución equivale a ver a la Suprema Personalidad de Dios. Como antes se explicó, esto significa encontrar a la Suprema Personalidad de Dios en la instrucción del maestro espiritual. Eso, técnicamente, se denomina vāṇī-sevā. En su comentario sobre el Bhagavad-gītā, Śrīla Viśvanātha Cakravartī Ṭhākura, cuando se refiere al verso vyavasāyātmikā buddhir ekeha kuru-nandana (Bg. 2.41), afirma que el discípulo debe ofrecer servicio a las palabras del maestro espiritual. El discípulo debe seguir estrictamente absolutamente todas las órdenes del maestro espiritual. El que sigue esa línea de conducta, ve a la Suprema Personalidad de Dios.

La Suprema Personalidad de Dios, Paramātmā, Se presentó ante la reina en forma de brāhmaṇa, pero ¿por qué no Se presentó en Su forma original de Śrī Kṛṣṇa? Śrīla Viśvanātha Cakravartī Ṭhākura subraya que solo aquellos que son muy elevados en el amor a la Suprema Personalidad de Dios pueden verle tal y como es. Con todo, de una manera u otra, el que sigue estrictamente los principios que establece el maestro espiritual, está en contacto con la Suprema Personalidad de Dios. El Señor está en el corazón, y por lo tanto puede aconsejar al discípulo sincero desde dentro. Esto se confirma también en el Bhagavad-gītā (10.10):

teṣāṁ satata-yuktānāṁ
bhajatāṁ prīti-pūrvakam
dadāmi buddhi-yogaṁ taṁ
yena mām upayānti te

«A aquellos que están constantemente consagrados a servirme con amor, Yo les doy la comprensión con la cual pueden llegar hasta Mí».

En conclusión, cuando un discípulo es muy serio en ejecutar la misión del maestro espiritual, entra inmediatamente en contacto con la Suprema Personalidad de Dios mediante vāṇī o vapuḥ. Este es el único secreto del éxito en lo que se refiere a ver a la Suprema Personalidad de Dios. Hay quien, al mismo tiempo que manifiesta un gran deseo de ver a la Suprema Personalidad de Dios en los arbustos de Vṛndāvana, se ocupa en actividades de complacencia de los sentidos; si en lugar de eso se atuviese estrictamente al principio de seguir las palabras del maestro espiritual, esa persona no tendría dificultad alguna en ver a la Suprema Personalidad de Dios. Por esa razón, Śrīla Bilvamaṅgala Ṭhākura ha dicho:

bhaktis tvayi sthiratarā bhagavan yadi syād
daivena naḥ phalati divya-kiśora-mūrtiḥ
muktiḥ svayaṁ mukulitāñjali sevate ’smān
dharmārtha-kāma-gatayaḥ samaya-pratīkṣāḥ

«Cuando estoy ocupado en Tu servicio devocional, mi querido Señor, me es muy fácil percibir Tu presencia en todas partes. Y en lo que se refiere a la liberación, sé que está a mi puerta, con las manos juntas, esperando servirme, y con ella aguardan todas las ventajas materiales de dharma [religiosidad], artha [crecimiento económico], y kāma [complacencia de los sentidos]» (Kṛṣṇa-karṇāmṛta 107). Para el devoto muy avanzado en servicio devocional, ver a la Suprema Personalidad de Dios no representa dificultad alguna. El que se ocupa en el servicio del maestro espiritual, no solo ve a la Suprema Personalidad de Dios, sino que también alcanza la liberación; las ventajas materiales vienen de manera natural, como las sirvientas que siguen a una reina allí donde vaya. Para el devoto puro, la liberación no representa problema alguno, y las ventajas materiales están a su disposición en todas las etapas de su vida.

Texto

brāhmaṇa uvāca
kā tvaṁ kasyāsi ko vāyaṁ
śayāno yasya śocasi
jānāsi kiṁ sakhāyaṁ māṁ
yenāgre vicacartha ha

Palabra por palabra

brāhmaṇaḥ uvāca — el erudito brāhmaṇa dijo; — quién; tvam — tú; kasya — de quién; asi — eres; kaḥ — quién; — o; ayam — este hombre; śayānaḥ — que yace; yasya — por quien; śocasi — te lamentas; jānāsi kim — ¿conoces?; sakhāyam — amigo; mām — a Mí; yena — con quien; agre — en el pasado; vicacartha — has consultado; ha — ciertamente.

Traducción

El brāhmaṇa le preguntó: ¿Quién eres?; ¿de quién eres esposa o hija?; ¿quién es el hombre que yace ahí? Parece que te lamentas por ese cadáver. ¿No Me reconoces? Soy tu amigo eterno. Tal vez recuerdes que en el pasado Me has consultado muchas veces.

Significado

Cuando un familiar muere, la renunciación se manifiesta de manera natural. Solo el que está completamente libre de la contaminación del apego material puede consultar directamente con la Superalma que está en el corazón de todos. El que es sincero y puro tiene la oportunidad de consultar con la Suprema Personalidad de Dios en Su aspecto Paramātmā, que está en el corazón de todos. Paramātmā es siempre el caitya-guru, el maestro espiritual interior, y Se manifiesta externamente ante la persona en forma de maestro espiritual instructor e iniciador. El Señor puede residir en el corazón, y también puede salir y presentarse ante la persona para darle instrucciones. Por lo tanto, el maestro espiritual no es diferente de la Superalma que está en el corazón. Un alma o entidad viviente que esté libre de contaminación podrá tener la oportunidad de ver a la Superalma cara a cara. Y, de la misma manera que se tiene la posibilidad de consultar con Paramātmā en el corazón, también cabe la posibilidad de verle en persona. Entonces se pueden recibir instrucciones directamente de la Superalma. Ese es el deber del devoto puro: acudir al maestro espiritual genuino y consultar con la Superalma que está en el corazón.

Cuando el brāhmaṇa preguntó a la mujer quién era el hombre que yacía en el suelo, ella le contestó que era su maestro espiritual, y que, en su ausencia, no sabía qué debía hacer. En esas circunstancias la Superalma aparece inmediatamente, siempre y cuando el devoto haya purificado su corazón siguiendo las indicaciones del maestro espiritual. El devoto sincero que siga las instrucciones del maestro espiritual recibirá, sin duda alguna, instrucciones directas de la Superalma desde el corazón. De esa forma, el devoto sincero siempre cuenta con la ayuda, directa o indirecta, del maestro espiritual y de la Superalma. Esto se confirma en el Caitanya-caritāmṛta: guru-kṛṣṇa-prasāde pāya bhakti-latā-bīja. Si el devoto sirve al maestro espiritual con sinceridad, de manera natural Kṛṣṇa Se siente complacido. Yasya prasādād bhagavad-prasādaḥ: Quien satisface al maestro espiritual, satisface también a Kṛṣṇa. De este modo, ambos, el maestro espiritual y Kṛṣṇa, enriquecen espiritualmente al devoto. La Superalma es el amigo eterno de la entidad viviente, y siempre permanece con ella. La Superalma siempre ha estado dispuesta a ayudar a la entidad viviente, incluso antes de la creación del mundo material. Por esa razón, en este verso se afirma: yenāgre vicacartha. La palabra agre significa «antes de la creación». Por lo tanto, la Superalma ha estado acompañando a la entidad viviente desde antes de la creación.

Texto

api smarasi cātmānam
avijñāta-sakhaṁ sakhe
hitvā māṁ padam anvicchan
bhauma-bhoga-rato gataḥ

Palabra por palabra

api smarasi — recuerdas; ca — también; ātmānam — a la Superalma; avijñāta — desconocido; sakham — amigo; sakhe — ¡oh, amigo!; hitvā — abandonar; mām — a Mí; padam — posición; anvicchan — desear; bhauma — material; bhoga — disfrute; rataḥ — apegada a; gataḥ — tú estuviste.

Traducción

El brāhmaṇa continuó: Mi querida amiga, tal vez no puedas reconocerme inmediatamente, pero ¿no recuerdas que en el pasado tenías un amigo muy íntimo? Por desgracia, abandonaste Mi compañía y adoptaste una posición de disfrutador del mundo material.

Significado

Como se afirma en el Bhagavad-gītā (7.27):

icchā-dveṣa-samutthena
dvandva-mohena bhārata
sarva-bhūtāni sammohaṁ
sarge yānti parantapa

«¡Oh, vástago de Bharata!, ¡oh, conquistador del enemigo!, todas las entidades vivientes nacen bajo la influencia de la ilusión, confundidas por las dualidades que surgen del deseo y la aversión». Esto explica la forma en que cae al mundo material la entidad viviente. En el mundo espiritual no existen ni la dualidad ni la aversión. La Suprema Personalidad de Dios Se expande en muchos. A fin de disfrutar de una felicidad cada vez mayor, el Señor Supremo Se expande en múltiples categorías. Como se menciona en el Varāha Purāṇa, Él Se expande como viṣṇu-tattva (la expansión svāṁśa), y como Su potencia marginal (vibhinnāṁśa, la entidad viviente). Las entidades vivientes que se expanden de Él son innumerables, como las diminutas moléculas de luz solar, que son innumerables expansiones del Sol. Las expansiones vibhinnāṁśa, las potencias marginales del Señor, son las entidades vivientes. Estas, cuando desean disfrutar, se forjan una conciencia de dualidad y llegan a sentir aversión por el servicio del Señor. De esa forma, caen en el mundo material. En el Prema-vivarta se dice:

kṛṣṇa-bahirmukha hañā bhoga-vāñchā kare
nikaṭa-stha māyā tāre jāpaṭiyā dhare

La posición natural de la entidad viviente es servir al Señor con una actitud de amor trascendental. La entidad viviente cae en el mundo material cuando desea ser Kṛṣṇa mismo o imitar a Kṛṣṇa. Kṛṣṇa es el padre supremo, y por lo tanto, el afecto que siente por la entidad viviente es eterno. Cuando la entidad viviente cae en el mundo material, el Señor Supremo, por medio de Su expansión svāṁśa (Paramātmā), Se mantiene a su lado. De esa forma, la entidad viviente podrá un día regresar al hogar, de vuelta a Dios.

Por abusar de su independencia, la entidad viviente cae de la posición de servicio al Señor a una posición de disfrutador en el mundo material. Es decir, la entidad viviente asume su posición en un cuerpo material. Ha deseado una posición muy elevada, pero en lugar de ello, se enreda en un ciclo de nacimientos y muertes, seleccionando su posición, bien sea como ser humano, semidiós, gato, perro, árbol, etc. De ese modo, escoge un cuerpo de entre 8 400 000 formas distintas, y trata de obtener satisfacción con esa diversidad de disfrutes materiales. A la Superalma, sin embargo, no Le gusta que haga eso. Por consiguiente, le da instrucciones, diciéndole que se entregue a la Suprema Personalidad de Dios. Cuando la entidad viviente lo hace, el Señor Se encarga de ella. Sin embargo, la entidad viviente no puede entregarse al Señor Supremo a no ser que esté libre de la contaminación de los deseos materiales. En el Bhagavad-gītā (5.29), el Señor dice:

bhoktāraṁ yajña-tapasāṁ
sarva-loka-maheśvaram
suhṛdaṁ sarva-bhūtānāṁ
jñātvā māṁ śāntim ṛcchati

«La persona que tiene plena conciencia de Mí, sabiendo que Yo soy el beneficiario final de todo sacrificio y austeridad, el Señor Supremo de todos los planetas y semidioses, y el benefactor y bienqueriente de todas las entidades vivientes, se libera de los tormentos de las miserias materiales».

El Señor Supremo es el amigo supremo de todos; sin embargo, nadie puede beneficiarse de las instrucciones del amigo supremo mientras siga elaborando sus propios planes para ser feliz y enredándose en las modalidades de la naturaleza material. En cada creación, las entidades vivientes adoptan distintas formas conforme a sus deseos pasados. Esto significa que todas las especies o formas de vida fueron creadas simultáneamente. La teoría de Darwin, que afirma que el ser humano no existía en principio, sino que es un producto de muchísimos años de evolución, es una teoría de lo más disparatada. En las Escrituras védicas descubrimos que la primera criatura del universo es el Señor Brahmā. Él, que es la persona más inteligente, se encargó de la creación de toda la diversidad que se manifiesta en el mundo material.

Texto

haṁsāv ahaṁ ca tvaṁ cārya
sakhāyau mānasāyanau
abhūtām antarā vaukaḥ
sahasra-parivatsarān

Palabra por palabra

haṁsau — dos cisnes; aham — Yo; ca — y; tvam — tú; ca — también; ārya — ¡oh, gran alma!; sakhāyau — amigos; mānasa-ayanau — juntos en el lago Mānasa; abhūtām — llegamos a estar; antarā — separados; — en verdad; okaḥ — del hogar original; sahasra — miles; pari — sucesivamente; vatsarān — años.

Traducción

Mi querida y amable amiga, tú y Yo somos como dos cisnes. Vivimos juntos en el mismo corazón, que es como el lago Mānasa. Aunque llevamos viviendo juntos muchos miles de años, todavía estamos muy lejos de nuestro hogar original.

Significado

El hogar original de la entidad viviente y de la Suprema Personalidad de Dios es el mundo espiritual. En él, el Señor y las entidades vivientes viven juntos en gran armonía. Mientras la entidad viviente permanece ocupada en el servicio del Señor, ambos comparten una vida llena de dicha en el mundo espiritual. Sin embargo, cuando desea su propio disfrute, la entidad viviente cae en el mundo material. Sin embargo, el Señor, en forma de Superalma, su amigo íntimo, permanece con ella incluso en esa situación. Bajo la influencia del olvido, la entidad viviente no sabe que el Señor Supremo la acompaña en forma de Superalma. De esa forma, la entidad viviente prosigue su vida condicionada milenio tras milenio. Aunque el Señor la acompaña como un amigo, la entidad viviente, a causa del olvido que provoca la existencia material, no Le reconoce.

Texto

sa tvaṁ vihāya māṁ bandho
gato grāmya-matir mahīm
vicaran padam adrākṣīḥ
kayācin nirmitaṁ striyā

Palabra por palabra

saḥ — ese cisne; tvam — tú misma; vihāya — abandonar; mām — a Mí; bandho — ¡oh, amigo!; gataḥ — fuiste; grāmya — material; matiḥ — cuya conciencia; mahīm — a la Tierra; vicaran — viajar; padam — posición; adrākṣīḥ — has visto; kayācit — por alguien; nirmitam — fabricada; striyā — por una mujer.

Traducción

Mi querida amiga, tú sigues siendo para Mí la misma amiga. Desde que Me dejaste, te has vuelto cada vez más materialista, y sin verme, has estado viajando de cuerpo en cuerpo, pasando por diversas formas, por todo el mundo material, que es la creación de alguna mujer.

Significado

Cuando cae de su posición, la entidad viviente desciende al mundo material, que es una creación de la energía externa del Señor. Este verso se refiere a esa energía externa diciendo que es como «alguna mujer», o prakṛti. El mundo material está compuesto de elementos materiales que proceden del mahat-tattva, la energía material total. El mundo material, creación de la energía externa, se convierte en el falso hogar del alma condicionada. Esta acepta vivir en diversas viviendas, es decir, en diversas formas corporales, y viaja por todo el mundo material. A veces recorre los sistemas planetarios superiores, a veces los sistemas inferiores. A veces viaja en especies de vida superiores, y a veces en especies inferiores. De este modo vaga por el universo material desde tiempo inmemorial. Tal como explica Śrī Caitanya Mahāprabhu:

brahmāṇḍa bhramite kona bhāgyavān jīva
guru-kṛṣṇa-prasāde pāya bhakti-latā-bīja

La entidad viviente vaga por muchas especies de vida, pero es afortunada cuando vuelve a encontrar a su amigo, ya sea personalmente o por medio de Su representante.

En realidad quien aconseja a todas las entidades vivientes que regresen al hogar, de vuelta a Dios, es el propio Kṛṣṇa. Kṛṣṇa a veces envía a Su representante, que entrega el mismo mensaje de Kṛṣṇa y anima a todas las entidades vivientes a regresar al hogar, de vuelta a Dios. Por desgracia, la entidad viviente está tan apegada al disfrute material que no toma en serio las instrucciones de Kṛṣṇa o de Su representante. Esa tendencia material se define en este verso con la palabra grāmya-matiḥ (complacencia de los sentidos). La palabra mahīm significa «en el mundo material». En el mundo material, todas las entidades vivientes tienen inclinaciones sensuales. Como consecuencia, se enredan en diversos cuerpos y sufren los tormentos de la existencia material.

Texto

pañcārāmaṁ nava-dvāram
eka-pālaṁ tri-koṣṭhakam
ṣaṭ-kulaṁ pañca-vipaṇaṁ
pañca-prakṛti strī-dhavam

Palabra por palabra

pañca-ārāmam — cinco jardines; nava-dvāram — nueve puertas; eka — un; pālam — protector; tri — tres; koṣṭhakam — viviendas; ṣaṭ — seis; kulam — familias; pañca — cinco; vipaṇam — almacenes; pañca — cinco; prakṛti — elementos materiales; strī — mujer; dhavam — dueña.

Traducción

En esa ciudad [el cuerpo material], hay cinco jardines, nueve puertas, un protector, tres viviendas, seis familias, cinco almacenes, cinco elementos materiales y una mujer, que es la señora de la casa.

Texto

pañcendriyārthā ārāmā
dvāraḥ prāṇā nava prabho
tejo-’b-annāni koṣṭhāni
kulam indriya-saṅgrahaḥ

Palabra por palabra

pañca — cinco; indriya-arthāḥ — objetos de los sentidos; ārāmāḥ — los jardines; dvāraḥ — puertas; prāṇāḥ — aperturas de los sentidos; nava — nueve; prabho — ¡oh, rey!; tejaḥ-ap — fuego, agua; annāni — cereales o tierra; koṣṭhāni — viviendas; kulam — familias; indriya-saṅgrahaḥ — cinco sentidos y la mente.

Traducción

Mi querida amiga, los cinco jardines son los cinco objetos del disfrute de los sentidos, y el protector es el aire vital, que pasa por las nueve puertas. Las tres viviendas son los elementos principales, el fuego, el agua y la tierra. Las seis familias son el agregado compuesto por la mente y los cinco sentidos.

Significado

Los cinco sentidos con los que se adquiere conocimiento son la vista, el gusto, el olfato, el oído y el tacto, los cuales se valen de las nueve puertas, que son los ojos, los oídos, la boca, las fosas nasales, los genitales y el recto. Esos orificios se comparan a las puertas de las murallas de la ciudad. Los elementos principales son la tierra, el agua y el fuego, y el agente principal es la mente, que está bajo el control de la inteligencia (buddhi).

Texto

vipaṇas tu kriyā-śaktir
bhūta-prakṛtir avyayā
śakty-adhīśaḥ pumāṁs tv atra
praviṣṭo nāvabudhyate

Palabra por palabra

vipaṇaḥ — almacenes; tu — entonces; kriyā-śaktiḥ — la energía para las actividades, o los sentidos para la acción; bhūta — los cinco elementos densos; prakṛtiḥ — los elementos materiales; avyayā — eternos; śakti — la energía; adhīśaḥ — controlador; pumān — hombre; tu — entonces; atra — aquí; praviṣṭaḥ — habiendo entrado; na — no; avabudhyate — expuesta al conocimiento.

Traducción

Los cinco almacenes son los cinco órganos de los sentidos para la acción, que llevan a cabo sus transacciones por medio de la fuerza combinada de los cinco elementos, que son eternos. Más allá de toda esa actividad está el alma, que en realidad es una persona y un disfrutador. Sin embargo, ahora, como está oculta en la ciudad del cuerpo, carece de conocimiento.

Significado

La entidad viviente entra en la creación material con la ayuda de los cinco elementos —tierra, agua, fuego, aire y éter—, y así se forma su cuerpo. La entidad viviente, aunque actúa desde dentro, es desconocida. La entidad viviente entra en la creación material, pero como está confundida por la energía material, parece estar oculta. El predominio del concepto corporal de la vida se debe a la ignorancia (nāvabudhyate). A la inteligencia suele atribuírsele género femenino, pero en este verso se habla de ella como adhīśaḥ, el controlador, debido al papel predominante que juega en todas las actividades. La entidad viviente vive mediante el fuego, el agua y los cereales. El cuerpo se mantiene gracias a la combinación de esos tres elementos. Por consiguiente, el cuerpo recibe el nombre de prakṛti, creación material. Los elementos se combinan y forman carne, huesos, sangre, etc., que pueden considerarse como diversas viviendas. En los Vedas se dice que los alimentos digeridos acaban dividiéndose en tres partes: La parte sólida se convierte en excremento, y la parte semilíquida, en carne. La parte líquida se vuelve amarilla y se vuelve a dividir en tres partes. Una de esas partes líquidas es la orina. De manera similar, la parte de fuego se divide en tres, una de las cuales se llama hueso. Entre los cinco elementos, los más importantes son el fuego, el agua y los cereales. Esos tres son los que se mencionan en el verso anterior, mientras que el cielo (éter), y el aire, no se mencionan. Todo esto se explica en el Bhagavad-gītā (13.20):

prakṛtiṁ puruṣaṁ caiva
viddhy anādī ubhāv api
vikārāṁś ca guṇāṁś caiva
viddhi prakṛti-sambhavān

«Debes saber que la naturaleza material y las entidades vivientes no tienen principio. Sus transformaciones y las modalidades de la materia son productos de la naturaleza material». Prakṛti, la naturaleza material, y puruṣa, la entidad viviente, son eternas. Cuando se ponen en contacto, se producen una serie de reacciones y manifestaciones, todas las cuales deben considerarse el resultado de la interacción de las tres modalidades de la naturaleza material.

Texto

tasmiṁs tvaṁ rāmayā spṛṣṭo
ramamāṇo ’śruta-smṛtiḥ
tat-saṅgād īdṛśīṁ prāpto
daśāṁ pāpīyasīṁ prabho

Palabra por palabra

tasmin — en esa situación; tvam — tú; rāmayā — con la mujer; spṛṣṭaḥ — estar en contacto; ramamāṇaḥ — disfrutar; aśruta-smṛtiḥ — sin recordar la existencia espiritual; tat — con ella; saṅgāt — por relación; īdṛśīm — como esto; prāptaḥ — tú has obtenido; daśām — un estado; pāpīyasīm — con muchas actividades pecaminosas; prabho — Mi querido amigo.

Traducción

Mi querido amigo [Purañjana], cuando entras en ese cuerpo junto con la mujer de los deseos materiales, quedas completamente absorto en el disfrute de los sentidos. Debido a ello, has olvidado tu vida espiritual. Por tus conceptos materiales, tienes que pasar por condiciones miserables.

Significado

La persona que está demasiado absorta en la materia no tiene capacidad para escuchar acerca de la existencia espiritual. Y quien olvida la existencia espiritual se enreda cada vez más en la existencia material. Ese es el resultado de la vida pecaminosa. Los distintos tipos de actividades pecaminosas son la causa de la formación de diversos cuerpos a partir de los elementos materiales. El rey Purañjana, como resultado de sus actividades pecaminosas, recibió un cuerpo de mujer, y nació como Vaidarbhī. El Bhagavad-gītā dice claramente (striyo vaiśyās tathā śūdrāḥ) que esa clase de cuerpo es un nacimiento inferior. Sin embargo, quien se refugia en la Suprema Personalidad de Dios puede elevarse hasta la perfección más elevada, aunque su nacimiento sea bajo. Los nacimientos inferiores son resultado de la disminución de la inteligencia espiritual.

Texto

na tvaṁ vidarbha-duhitā
nāyaṁ vīraḥ suhṛt tava
na patis tvaṁ purañjanyā
ruddho nava-mukhe yayā

Palabra por palabra

na — no; tvam — tú; vidarbha-duhitā — hija de Vidarbha; na — no; ayam — este; vīraḥ — héroe; su-hṛt — esposo bienqueriente; tava — tuyo; na — no; patiḥ — esposo; tvam — tú; purañjanyāḥ — de Purañjanī; ruddhaḥ — cautivo; nava-mukhe — el cuerpo, que tiene nueve puertas; yayā — por la energía material.

Traducción

En realidad, tú no eres la hija de Vidarbha, ni este hombre, Malayadhvaja, es tu esposo y bienqueriente. Y en realidad, tampoco eras el esposo de Purañjanī. Simplemente estabas cautivo en este cuerpo de nueve puertas.

Significado

En el mundo material, muchas entidades vivientes entran en contacto las unas con las otras, y con el aumento de su apego por un determinado tipo de cuerpo, establecen lazos familiares como padres, esposos, madres, esposas, etc. En realidad, toda entidad viviente es un ser individual con identidad propia, y el hecho de que entre en relación con otros cuerpos y establezca vínculos falsos se debe a su contacto con la materia. Debido a esos cuerpos falsos, nos unimos formando familias, comunidades, sociedades y naciones. Lo cierto es que todas las entidades vivientes son partes integrales de la Suprema Personalidad de Dios; sin embargo, están demasiado absortas en el cuerpo material. Kṛṣṇa, la Suprema Personalidad de Dios, adviene y deja Sus enseñanzas en la forma del Bhagavad-gītā y las Escrituras védicas. El Señor Supremo deja esas enseñanzas porque es el amigo eterno de todas las entidades vivientes. Sus enseñanzas son importantes porque, con ellas, la entidad viviente puede llegar a liberarse del cautiverio corporal. La corriente de un río arrastra muchas briznas de hierba y paja de la orilla, que durante un tiempo siguen la corriente juntas, hasta que, con los movimientos de las olas, se separan, y cada una de ellas sigue un rumbo diferente. De la misma manera, las innumerables entidades vivientes del mundo material son arrastradas por las olas de la naturaleza material. A veces las olas las unen, y las entidades vivientes establecen amistad y relaciones familiares, comunitarias o nacionales, todo ello basado en el cuerpo. Con el paso del tiempo, las olas de la naturaleza material las separan de nuevo. Este proceso tiene lugar desde la creación de la naturaleza material. Con respecto a esto, Śrīla Bhaktivinoda Ṭhākura dice en una canción:

miche māyāra vaśe, yāccha bhese’,
khāccha hābuḍubu, bhāi
jīva kṛṣṇa-dāsa, e viśvāsa,
karle ta’ āra duḥkha nāi

«Mis queridas entidades vivientes, están siendo arrastradas por las olas de la naturaleza material. A veces están en la superficie, a veces se hunden. De esa forma echan a perder su vida eterna. Solo tienen que aferrarse a Kṛṣṇa y al refugio de Sus pies de loto; entonces de nuevo estarán libres de todas las miserables condiciones materiales».

En este verso son muy significativas las palabras suhṛt («bienqueriente») y tava («tuyo»). Ningún supuesto esposo, familiar, hijo, padre o lo que sea puede ser un verdadero bienqueriente. Solo el propio Kṛṣṇa es un verdadero bienqueriente, tal como el mismo Kṛṣṇa confirma en el Bhagavad-gītā (5.29): suhṛdaṁ sarva-bhūtānām. La sociedad, la amistad, el amor y los bienquerientes son solo el resultado de nuestro enjaulamiento en diversos cuerpos. Debemos saber bien esto y tratar de salir del enjaulamiento material en que nos vemos arrojados vida tras vida. Hay que refugiarse en la Suprema Personalidad de Dios, Kṛṣṇa, y regresar al hogar, de vuelta a Dios.

Texto

māyā hy eṣā mayā sṛṣṭā
yat pumāṁsaṁ striyaṁ satīm
manyase nobhayaṁ yad vai
haṁsau paśyāvayor gatim

Palabra por palabra

māyā — energía ilusoria; hi — ciertamente; eṣā — esta; mayā — por Mí; sṛṣṭā — creada; yat — de la cual; pumāṁsam — un varón; striyam — una mujer; satīm — casta; manyase — tú crees; na — no; ubhayam — ambos; yat — porque; vai — ciertamente; haṁsau — libre de la contaminación material; paśya — tan solo mira; āvayoḥ — nuestra; gatim — verdadera posición.

Traducción

A veces te consideras un hombre, a veces una mujer casta, y a veces, un estéril eunuco. Todo ello se debe al cuerpo, que es una creación de la energía ilusoria. Esa energía ilusoria es Mi potencia, y en realidad, ambos, tú y Yo, somos identidades espirituales puras. Trata tan solo de entenderlo. Te estoy explicando cuál es nuestra verdadera posición.

Significado

La verdadera posición de la Suprema Personalidad de Dios y de la entidad viviente es cualitativamente la misma. El Señor Supremo es el Espíritu Supremo, la Superalma, y la entidad viviente es el alma espiritual individual. La identidad original de ambas es espiritual, pero la entidad viviente, cuando entra en contacto con la naturaleza material, olvida su identidad y queda condicionada. En ese entonces se identifica como producto de la naturaleza material. Debido al cuerpo material, olvida que es una parte integral eterna (sanātana) de la Suprema Personalidad de Dios. Esto se confirma de la siguiente manera: mamaivāṁśo jīva-loke jīva-bhūtaḥ sanātanaḥ. La palabra sanātana aparece en varios pasajes del Bhagavad-gītā. Tanto el Señor como la entidad viviente son sanātana (eternos), y más allá de la naturaleza material existe también un lugar que recibe este calificativo, sanātana. La verdadera residencia de Dios y de la entidad viviente es el ámbito de sanātana, no el mundo material. El mundo material es la energía temporal del Señor, Su energía externa, y la causa de que la entidad viviente se encuentre en él es que ha deseado imitar la posición de la Suprema Personalidad de Dios. En el mundo material, la entidad viviente trata de obtener de sus sentidos el máximo disfrute posible. Las actividades del alma condicionada en el mundo material se suceden eternamente en diversos tipos de cuerpos, pero cuando la entidad viviente adquiere una conciencia avanzada, debe tratar de corregir su situación, y de nuevo pasar a formar parte del mundo espiritual. El proceso para regresar al hogar, de vuelta a Dios, es el bhakti-yoga, que a veces se llama sanātana-dharma. En lugar de aceptar los deberes propios de una ocupación temporal basada en el cuerpo material, se debe adoptar el proceso de sanātana-dharma, o bhakti-yoga, para poner punto final al cautiverio perpetuo en cuerpos materiales y regresar al hogar, de vuelta a Dios. Mientras la sociedad humana actúe basándose en la identificación material falsa, todos los supuestos progresos de la ciencia y de la filosofía serán completamente inútiles. Solo servirán para descarriar a la sociedad humana. Andhā yathāndhair upanīyamānāḥ. En el mundo material, los ciegos guían a los ciegos.

Texto

ahaṁ bhavān na cānyas tvaṁ
tvam evāhaṁ vicakṣva bhoḥ
na nau paśyanti kavayaś
chidraṁ jātu manāg api

Palabra por palabra

aham — Yo; bhavān — tú; na — no; ca — también; anyaḥ — diferentes; tvam — tú; tvam — tú; eva — ciertamente; aham — como Yo soy; vicakṣva — solo observa; bhoḥ — Mi querido amigo; na — no; nau — de nosotros; paśyanti — observa; kavayaḥ — sabios eruditos; chidram — diferenciación errónea; jātu — en ningún momento; manāk — en pequeñas proporciones; api — incluso.

Traducción

Mi querido amigo, Yo, la Superalma, y tú, el alma individual, no somos diferentes en cualidad, pues ambos somos espirituales. De hecho, Mi querido amigo, en tu posición constitucional, y en el aspecto cualitativo, no eres distinto de Mí. Trata tan solo de entenderlo. Los eruditos verdaderamente avanzados, que poseen conocimiento, no encuentran ninguna diferencia cualitativa entre tú y Yo.

Significado

Cualitativamente, la Suprema Personalidad de Dios y la entidad viviente son uno. Entre ellos no hay verdadera diferencia. Los filósofos māyāvādīs piensan que no hay diferencia entre la Superalma y el alma individual, o que no hay Superalma; debido a ello, la energía ilusoria les derrota una y otra vez. También se equivocan cuando piensan que todo es la Superalma. Sin embargo, las personas que son kavayaḥ, los sabios eruditos, conocen la realidad de los hechos. Ellos no cometen esos errores. Saben que Dios y el alma individual son uno cualitativamente, pero que el alma individual cae bajo las garras de māyā, mientras que la Superalma, la Suprema Personalidad de Dios, es el controlador de māyā. Māyā es la creación del Señor Supremo (mayā sṛṣṭā); por lo tanto, el Señor Supremo es el controlador de māyā. El alma individual, aunque es cualitativamente una con el Señor Supremo, está bajo el control de māyā. Los filósofos māyāvādīs no pueden distinguir entre el controlador y el controlado.

Texto

yathā puruṣa ātmānam
ekam ādarśa-cakṣuṣoḥ
dvidhābhūtam avekṣeta
tathaivāntaram āvayoḥ

Palabra por palabra

yathā — como; puruṣaḥ — la entidad viviente; ātmānam — su cuerpo; ekam — uno; ādarśa — en un espejo; cakṣuṣoḥ — con los ojos; dvidhā-ābhūtam — que existe en dos; avekṣeta — ve; tathā — de manera similar; eva — ciertamente; antaram — diferencia; āvayoḥ — entre nosotros.

Traducción

Una persona no ve diferencia entre ella misma y su imagen reflejada en un espejo, mientras que otros ven dos cuerpos distintos. De la misma manera, en la posición material, en que la entidad viviente está condicionada y simultáneamente no condicionada, hay una diferencia entre Dios y la entidad viviente.

Significado

Bajo la influencia del condicionamiento material, los filósofos māyāvādīs no pueden ver la diferencia entre el Señor Supremo y la entidad viviente. El Sol, cuando se refleja en un cántaro de agua, sabe que su imagen reflejada en el agua no es diferente de él. Los que están bajo la influencia de la ignorancia, perciben muchos soles pequeños, reflejados uno en cada cántaro. Tanto el Sol original como los reflejos son muy brillantes, pero los reflejos son pequeños, mientras que el Sol original es muy grande. Los filósofos vaiṣṇavas llegan a la conclusión de que la entidad viviente es una pequeña representación de la Suprema Personalidad de Dios original. Cualitativamente, Dios y las entidades vivientes son iguales, pero cuantitativamente, las entidades vivientes son pequeños fragmentos de la Suprema Personalidad de Dios. El Señor Supremo es pleno, poderoso y opulento. En el verso anterior, el Señor dice: «Mi querido amigo, tú y Yo no somos diferentes». Ese no ser diferentes se refiere a la unidad cualitativa, ya que Paramātmā, la Suprema Personalidad de Dios, no tenía entonces necesidad de recordar al alma condicionada la desigualdad cuantitativa que existe entre ambos. El alma autorrealizada nunca se considera igual a la Suprema Personalidad de Dios en todos los aspectos. Cualitativamente son iguales, pero la entidad viviente tiene la tendencia a olvidar su identidad espiritual, mientras que la Suprema Personalidad de Dios nunca olvida. Esa es la diferencia entre lipta y alipta. La Suprema Personalidad de Dios es eternamente alipta, es decir, está libre de la contaminación de la energía externa. El alma condicionada, sin embargo, al estar en contacto con la naturaleza material, olvida su verdadera identidad; por esa razón, cuando se ve en el estado condicionado, se identifica con el cuerpo. Sin embargo, la Suprema Personalidad de Dios no ve diferencia entre el cuerpo y el alma. Todo Él es alma; no tiene cuerpo material. Tanto la Superalma como el alma individual están dentro del cuerpo, pero en la Superalma, Paramātmā, no hay identificaciones falsas, mientras que el alma condicionada se identifica con el cuerpo que posee. La Superalma recibe el nombre de antaryāmī, y Se manifiesta en infinidad de expansiones. Esto se confirma en el Bhagavad-gītā (13.3): kṣetrajñaṁ cāpi māṁ viddhi sarva-kṣetreṣu bhārata: «¡Oh, vástago de Bharata!, debes comprender que Yo soy también el conocedor en todos los cuerpos».

La Superalma está en todos los cuerpos, mientras que el alma individual está condicionada en un determinado tipo de cuerpo. El alma individual no puede saber lo que está ocurriendo en el cuerpo de otro, pero la Superalma sabe muy bien lo que está ocurriendo en todos los cuerpos. En otras palabras, la Superalma nunca desciende de la plenitud de Su posición espiritual, mientras que el alma individual tiene la tendencia a olvidar. Además de esto, el alma individual no está en todas partes. Por lo general, en el estado condicionado el alma individual no puede entender su relación con la Superalma, pero a veces, cuando está libre de todo rastro de existencia condicionada, puede ver realmente la diferencia que hay entre ella y la Superalma. Cuando la Superalma dice al alma condicionada: «Tú y Yo somos uno y el mismo», está recordándole al alma condicionada que sus identidades, desde el punto de vista cualitativo, son una sola. En el Canto Tercero del Śrīmad-Bhāgavatam (3.28.40), se dice:

yatholmukād visphuliṅgād
dhūmād vāpi sva-sambhavāt
apy ātmatvenābhimatād
yathāgniḥ pṛthag ulmukāt

El fuego presenta distintos aspectos: las llamas, las chispas y el humo. Cualitativamente, son una misma cosa, pero entre el fuego, las llamas, las chispas y el humo, hay diferencias. La entidad viviente queda condicionada, pero la Suprema Personalidad de Dios es distinta, pues nunca queda condicionada. En los Vedas se afirma: ātmā tathā pṛthag draṣṭā bhagavān brahma-saṁjñitaḥ. Tanto el alma individual como la Suprema Personalidad de Dios, que es el observador de todo, son ātmā. Ambos son espíritu, pero siempre hay una diferencia. En el smṛti se dice también: yathāgneḥ kṣudrā visphuliṅgā vyuccaranti. Las pequeñas almas individuales están en la gran llama espiritual tal como las chispas en la hoguera. En el Bhagavad-gītā (9.4), el Señor Kṛṣṇa dice: mat-sthāni sarva-bhūtāni na cāhaṁ teṣv avasthitaḥ: «Todos los seres están en Mí, pero Yo no estoy en ellos». Aunque todos los seres vivos reposan en Él, como las diminutas chispas ardientes que dependen de una llama más grande, sus respectivas posiciones son distintas. De manera similar, en el Viṣṇu Purāṇa se dice:

eka-deśa-sthitasyāgner
jyotsnā vistāriṇī yathā
parasya brahmaṇaḥ śaktis
tathedam akhilaṁ jagat

«El fuego está en un lugar determinado, desde el que reparte luz y calor. De manera similar, la Suprema Personalidad de Dios distribuye Sus energías de diversas maneras». La entidad viviente no es más que una de esas energías (energía marginal). En un sentido, la energía y la fuente de la energía son una misma cosa, pero sus posiciones, como energía y fuente de la energía, son distintas. Del mismo modo, la forma sac-cid-ānanda que se confirma en la Brahma-saṁhitā (īśvaraḥ paramaḥ kṛṣṇaḥ sac-cid-ānanda-vigrahaḥ) y la forma de la entidad viviente son distintas tanto en el estado condicionado como en el estado liberado. Solo los ateos consideran que la entidad viviente y la Suprema Personalidad de Dios son iguales en todo aspecto. Por esa razón, Caitanya Mahāprabhu dice: māyāvādi-bhāṣya śunile haya sarva-nāśa: «Quien siga las instrucciones de los filósofos māyāvādīs y crea que la Suprema Personalidad de Dios y el alma individual son iguales, perderá para siempre la posibilidad de comprender la verdadera filosofía».

Texto

evaṁ sa mānaso haṁso
haṁsena pratibodhitaḥ
sva-sthas tad-vyabhicāreṇa
naṣṭām āpa punaḥ smṛtim

Palabra por palabra

evam — así; saḥ — él (el alma individual); mānasaḥ — que viven juntos en el corazón; haṁsaḥ — como el cisne; haṁsena — por el otro cisne; pratibodhitaḥ — instruido; sva-sthaḥ — situado en el plano de la autorrealización; tat-vyabhicāreṇa — por estar separado de la Superalma; naṣṭām — que estaba perdida; āpa — obtenida; punaḥ — de nuevo; smṛtim — memoria verdadera.

Traducción

De esa forma, los dos cisnes viven juntos en el corazón. Uno de los cisnes, cuando recibe las instrucciones del otro, se sitúa en su posición constitucional. Esto significa que recupera su estado original de conciencia de Kṛṣṇa, que había perdido debido a la atracción que sentía por la materia.

Significado

Aquí se afirma claramente: haṁso haṁsena pratibodhitaḥ. El alma individual y la Superalma se comparan a los cisnes (haṁsa) por su blancura, es decir, porque están libres de contaminación. Uno de los cisnes, sin embargo, es el superior e instructor del otro. El cisne inferior, cuando se separa del otro cisne, se ve atraído por el disfrute material. Esa es la causa de su caída. Cuando escucha las instrucciones del otro cisne, entiende su verdadera posición y revive su estado original de conciencia. La Suprema Personalidad de Dios, Kṛṣṇa, desciende (avatāra) para liberar a Sus devotos y matar a los demonios. Además, también da Sus sublimes instrucciones en la forma del Bhagavad-gītā. El alma individual tiene que entender su posición por la gracia del Señor y del maestro espiritual, ya que las cualificaciones académicas no bastan para entender el texto del Bhagavad-gītā. El Bhagavad-gītā debe aprenderse de labios de un alma iluminada:

tad viddhi praṇipātena
paripraśnena sevayā
upadekṣyanti te jñānaṁ
jñāninas tattva-darśinaḥ

«Trata de aprender la verdad acudiendo a un maestro espiritual. Házle preguntas con sumisión y ofrécele servicio. Las almas autorrealizadas pueden impartirte conocimiento, porque han visto la verdad» (Bg. 4.34).

Por lo tanto, la persona debe escoger un maestro espiritual genuino e iluminarse y recobrar su conciencia original. De esa forma, el alma individual puede entender que siempre está subordinada a la Superalma. En el mismo momento en que se niega a permanecer subordinada y trata de ser el disfrutador, comienza su vida material condicionada. Cuando abandona esa mentalidad de ser un propietario o disfrutador individual, se sitúa en su estado liberado. La palabra sva-sthaḥ, que significa «situado en la propia posición constitucional», es muy significativa en este verso. El que abandona esa indeseable actitud de superioridad, se sitúa en su posición original. También es significativa la palabra tad-vyabhicāreṇa, pues indica que cuando, por desobediencia, nos apartamos de Dios, perdemos nuestro buen juicio. Pero de nuevo, por la gracia de Kṛṣṇa y del guru, podemos restablecernos adecuadamente en nuestra posición liberada. La intención de Nārada Muni en estos versos es revivir nuestra conciencia. Aunque la entidad viviente y la Superalma son cualitativamente iguales, el alma individual tiene que procurar cumplir la instrucción de la Superalma. Ese es el estado liberado.

Texto

barhiṣmann etad adhyātmaṁ
pārokṣyeṇa pradarśitam
yat parokṣa-priyo devo
bhagavān viśva-bhāvanaḥ

Palabra por palabra

barhiṣman — ¡oh, rey Prācīnabarhi!; etat — esta; adhyātmam — narración sobre la autorrealización; pārokṣyeṇa — indirectamente; pradarśitam — instruido; yat — porque; parokṣa-priyaḥ — interesante por medio de descripciones indirectas; devaḥ — el Señor Supremo; bhagavān — la Personalidad de Dios; viśva-bhāvanaḥ — la causa de todas las causas.

Traducción

Mi querido rey Prācīnabarhi, la Suprema Personalidad de Dios, la causa de todas las causas, es famoso por ser aquel a quien se conoce por medios indirectos. Por eso te he contado la historia de Purañjana. En realidad, se trata de una enseñanza que va dirigida a la autorrealización.

Significado

En los Purāṇas hay muchas historias semejantes a esta, que apuntan a la autorrealización. Como se afirma en los Vedas: parokṣa-priyā iva hi devāḥ. En los Purāṇas hay muchas historias destinadas a despertar el interés del hombre corriente en los temas trascendentales; en realidad, esas historias se basan en hechos reales. No se las debe considerar historias carentes de finalidad trascendental. Algunas de ellas se refieren a hechos históricos verdaderos. Sin embargo, nuestro interés debe centrarse en el verdadero significado de la historia. Al hombre común, las instrucciones indirectas le resultan muy fáciles de entender. En realidad, el sendero del bhakti-yoga consiste en escuchar directamente los pasatiempos de la Suprema Personalidad de Dios (śravaṇaṁ kīrtanaṁ viṣṇoḥ), pero quienes no tienen interés en escuchar directamente las actividades del Señor, o no las pueden entender, pueden obtener buenos resultados si escuchan historias y fábulas como la que en estos versos ha narrado Nārada Muni.

A continuación presentamos un glosario con algunas de las palabras importantes de este capítulo.

ādeśa-kārīLas acciones resultantes de las actividades pecaminosas.

agastyaLa mente.

amātyaEl gobernador de los sentidos, la mente.

arbuda-arbudaDistintos tipos de śravaṇa y kīrtana acerca del nombre, las cualidades, la forma, etc., del Señor Supremo.

ariInconvenientes, como las enfermedades.

bhogaDisfrute. En este contexto, la palabra se refiere al disfrute verdadero en la vida espiritual.

bhṛtyaLos sirvientes del cuerpo, es decir, los sentidos.

draviḍa-rājaEl servicio devocional; o la persona apta para ejecutar servicio devocional.

dvāraLas puertas del cuerpo, como los ojos y los oídos.

gṛhaEl hogar. Para el cultivo de la espiritualidad se precisa de un lugar libre de perturbaciones, o estar en la buena compañía de los devotos.

idhmavāhaEl devoto que acude al maestro espiritual. Idhma es la leña que se lleva para quemar en el fuego. Es deber del brahmacārī llevar ese idhma para encender el fuego que se emplea en la ejecución de sacrificios. La formación espiritual del brahmacārī le educa en la costumbre de encender un fuego y ofrecer oblaciones por la mañana. Su deber es acudir al maestro espiritual para recibir lecciones sobre temas trascendentales; el mandamiento védico estipula que al ir a ver al maestro espiritual hay que llevar leña para celebrar yajñas, sacrificios. Las palabras exactas de ese mandamiento védico son las siguientes:

tad-vijñānārthaṁ sa gurum evābhigacchet
samit-pāṇiḥ śrotriyaṁ brahma-niṣṭham

«Para aprender el tema trascendental, hay que acudir al maestro espiritual. Al hacerlo, hay que llevar leña para quemar en el sacrificio. La característica del maestro espiritual es que es experto en comprender la conclusión de los Vedas, y por esa razón se ocupa siempre en el servicio de la Suprema Personalidad de Dios» (Muṇḍaka Upaniṣad 1.2.12). Sirviendo al maestro espiritual genuino, el alma condicionada poco a poco se desapega del disfrute material y, bajo su dirección, hace firmes progresos en el sendero de la iluminación espiritual. Aquellos que se pierden bajo la influencia de la energía ilusoria no tienen el menor interés en acudir a un maestro espiritual para lograr el éxito en la vida.

jāyāLa inteligencia.

jīrṇa-sarpaEl aire vital cansado.

kālakanyāLa postración física de la vejez.

kāmaUna fiebre alta.

KulācalaEl lugar que está libre de perturbaciones.

kuṭumbinīLa inteligencia.

madirekṣaṇāMadirekṣaṇā se refiere a alguien que tiene unos ojos tan atractivos que hacen enloquecer al que los observa. En otras palabras, madirekṣaṇā se refiere a una muchacha joven y muy hermosa. Según Jīva Gosvāmī, madirekṣaṇā se refiere a la personificación de la deidad del bhakti. El que se ve atraído por el culto del bhakti se ocupa en el servicio del Señor y del maestro espiritual, y de esa forma alcanza el éxito en la vida. Vaidarbhī, la mujer, siguió a su esposo. Tal como ella abandonó su confortable hogar para servir a su esposo, el estudiante serio del entendimiento espiritual debe abandonarlo todo por el servicio a su maestro espiritual. Viśvanātha Cakravartī Ṭhākura afirma: yasya prasādād bhagavat-prasādaḥ: Quien desee el verdadero éxito en la vida, debe seguir estrictamente las instrucciones del maestro espiritual. Quien siga esas instrucciones tiene asegurado un rápido progreso en la vida espiritual. Esa afirmación de Viśvanātha Cakravartī concuerda perfectamente con la siguiente del Śvetāśvatara Upaniṣad (6.23):

yasya deve parā bhaktir
yathā deve tathā gurau
tasyaite kathitā hy arthāḥ
prakāśante mahātmanaḥ

«Solamente a aquellas grandes almas que tienen una fe absoluta en el Señor y en el maestro espiritual se les revela el significado del conocimiento védico de modo natural». En el Chāndogya Upaniṣad se dice: ācāryavān puruṣo veda: «El que acude a un maestro espiritual genuino puede entenderlo todo acerca de la iluminación espiritual».

malayadhvajaUn buen devoto, que es como la madera del sándalo.

pañcālaLos cinco objetos de los sentidos.

paricchadaTodos los sentidos en conjunto.

paura-janaLos siete elementos que constituyen el cuerpo.

pautraPaciencia y gravedad.

prajvāraUn tipo de fiebre que recibe el nombre de viṣṇu-jvāra.

pratikriyāAgentes neutralizadores, como los mantras y las medicinas.

pura-pālakaEl aire vital.

putraLa conciencia.

sainikaLa condición caracterizada por las tres miserias.

sapta-sutaLos siete hijos, es decir, escuchar, cantar, recordar, ofrecer oraciones, servir a los pies de loto del Señor, adorar a la Deidad, y ser un sirviente del Señor.

sauhṛdyaEsfuerzo.

sutaEl hijo de Vaidarbhī, o, en otras palabras, la persona que, de una u otra forma, ha progresado en el sendero de las actividades fruitivas y se ha puesto en contacto con un maestro espiritual devoto. Esa persona tiene interés en el tema del servicio devocional.

VaidarbhīLa mujer que en el pasado fue hombre, pero que en la siguiente vida, debido a un apego excesivo a la mujer, nació como mujer. Darbha significa hierba kuśa. Por lo tanto, vaidarbhī se refiere a aquel que nace en una familia de mentalidad karma-kāṇḍīya. Sin embargo, en el caso de que las actividades karma-kāṇḍa le pongan en contacto por casualidad con un devoto, como le ocurrió a Vaidarbhī cuando se casó con Malayadhvaja, su vida es un éxito. Entonces sigue el sendero del servicio devocional del Señor. Cuando sigue las instrucciones del maestro espiritual genuino, el alma condicionada se libera.

vidarbha-rājasiṁhaLa mejor de las personas expertas en actividades fruitivas.

vīryaEl que es misericordioso.

yavanaEl sirviente de Yamarāja.

Así terminan los significados de Bhaktivedanta correspondientes al capítulo vigesimoctavo del Canto Cuarto del Śrīmad-Bhāgavatam, titulado: «Purañjana se reencarna en mujer».