Skip to main content

Text 18

Text 18

Texto

Text

evaṁ kuṭumba-bharaṇe
vyāpṛtātmājitendriyaḥ
mriyate rudatāṁ svānām
uru-vedanayāsta-dhīḥ
evaṁ kuṭumba-bharaṇe
vyāpṛtātmājitendriyaḥ
mriyate rudatāṁ svānām
uru-vedanayāsta-dhīḥ

Palabra por palabra

Synonyms

evam — así; kuṭumba-bharaṇe — en mantener una familia; vyāpṛta — absorta; ātmā — la mente; ajita — descontrolados; indriyaḥ — los sentidos; mriyate — muere; rudatām — mientras lloran; svānām — sus parientes; uru — gran; vedanayā — con dolor; asta — privado de; dhīḥ — conciencia.

evam — thus; kuṭumba-bharaṇe — in maintaining a family; vyāpṛta — engrossed; ātmā — his mind; ajita — uncontrolled; indriyaḥ — his senses; mriyate — he dies; rudatām — while crying; svānām — his relatives; uru — great; vedanayā — with pain; asta — bereft of; dhīḥ — consciousness.

Traducción

Translation

Así muere, lleno de pesar y viendo el llanto de sus parientes, el hombre que, sin controlar sus sentidos, se ocupó en mantener una familia. Muere del modo más patético, con gran dolor y sin conciencia.

Thus the man, who engaged with uncontrolled senses in maintaining a family, dies in great grief, seeing his relatives crying. He dies most pathetically, in great pain and without consciousness.

Significado

Purport

En el Bhagavad-gītā se dice que a la hora de la muerte estaremos absortos en los pensamientos que hayamos cultivado durante la vida. Los últimos pensamientos de una persona que no pensaba más que en mantener adecuadamente a los miembros de su familia, tratarán de asuntos familiares. Ese es el curso natural de los hechos para el hombre común. No conoce qué destino le espera; durante el breve destello que es su vida, se afana por mantener a su familia. En la etapa final, el moribundo nunca está satisfecho con lo que ha hecho por mejorar la condición económica de la familia; siempre piensa que no hizo lo suficiente. Su profundo afecto por la familia le hace olvidar que su deber principal es controlar los sentidos y mejorar su conciencia espiritual. A veces, encomienda los asuntos de la familia al hijo o a algún pariente, diciendo: «Me voy. Por favor, cuida de la familia». No sabe adónde va, pero se preocupa por el sustento de la familia incluso a la hora de morir. En alguna ocasión, el moribundo ruega al médico que le prolongue la vida por unos pocos años, para que pueda completar el plan que había comenzado para mantener a la familia. Esas son las enfermedades materiales del alma condicionada. Olvida por completo su verdadera ocupación, volverse consciente de Kṛṣṇa, y siempre es serio en lo que respecta a la planificación del mantenimiento de su familia, aunque está cambiando de familia constantemente, una tras otra.

In Bhagavad-gītā it is said that at the time of death one will be absorbed in the thoughts which he cultivated during his lifetime. A person who had no other idea than to properly maintain his family members must have family affairs in his last thoughts. That is the natural sequence for a common man. The common man does not know the destiny of his life; he is simply busy in his flash of life, maintaining his family. At the last stage, no one is satisfied with how he has improved the family economic condition; everyone thinks that he could not provide sufficiently. Because of his deep family affection, he forgets his main duty of controlling the senses and improving his spiritual consciousness. Sometimes a dying man entrusts the family affairs to either his son or some relative, saying, “I am going. Please look after the family.” He does not know where he is going, but even at the time of death he is anxious about how his family will be maintained. Sometimes it is seen that a dying man requests the physician to increase his life at least for a few years so that the family maintenance plan which he has begun can be completed. These are the material diseases of the conditioned soul. He completely forgets his real engagement — to become Kṛṣṇa conscious — and is always serious about planning to maintain his family, although he changes families one after another.