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CAPÍTULO 10

La opulencia del Absoluto

Texto

śrī-bhagavān uvāca
bhūya eva mahā-bāho
śṛṇu me paramaṁ vacaḥ
yat te ’haṁ prīyamāṇāya
vakṣyāmi hita-kāmyayā

Palabra por palabra

śrī-bhagavān uvāca — la Suprema Personalidad de Dios dijo; bhūyaḥ — de nuevo; eva — ciertamente; mahā-bāho — ¡oh, tú, el de los poderosos brazos!; śṛṇu — oye; me — a Mí; paramam — suprema; vacaḥ — instrucción; yat — aquello que; te — a ti; aham — Yo; prīyamāṇāya — considerando que eres muy querido por Mí; vakṣyāmi — digo; hita-kāmyayā — en beneficio tuyo.

Traducción

La Suprema Personalidad de Dios dijo: Vuelve a escuchar, ¡oh, Arjuna, el de los poderosos brazos! Como tú eres Mi amigo querido, para beneficio tuyo voy a seguir hablando, y voy a impartir un conocimiento que es mejor que lo que ya he explicado.

Significado

Parāśara Muni explica la palabra Bhagavān de la siguiente manera: aquel que está colmado de seis opulencias, que tiene plena fuerza, plena fama, riqueza, conocimiento, belleza y renunciación, es Bhagavān, o la Suprema Personalidad de Dios. Mientras Kṛṣṇa se hallaba en esta Tierra, exhibió todas esas seis opulencias. Por consiguiente, grandes sabios tales como Parāśara Muni han aceptado todos a Kṛṣṇa como la Suprema Personalidad de Dios. Ahora Kṛṣṇa está instruyendo a Arjuna en un conocimiento más confidencial acerca de Sus opulencias y Su trabajo. Ya anteriormente, comenzando con el capítulo siete, el Señor explicó Sus diferentes energías y cómo éstas actúan. Pues bien, en este capítulo, Él le explica a Arjuna Sus opulencias específicas. En el capítulo anterior, Él ha explicado claramente Sus diferentes energías, para establecer la devoción con una convicción firme. En este capítulo, Él le habla a Arjuna de nuevo acerca de Sus manifestaciones y diversas opulencias.

Cuanto más se oye hablar del Dios Supremo, más se establece uno en el servicio devocional. Siempre se debe oír hablar acerca del Señor en compañía de devotos; eso realzará el servicio devocional de uno. Los discursos que se dan en la sociedad de devotos solo se pueden llevar a cabo entre aquellos que verdaderamente están ansiosos de tener conciencia de Kṛṣṇa. Los demás no pueden participar en esos discursos. El Señor le dice a Arjuna claramente que, como Arjuna le es muy querido, esos discursos se están llevando a cabo para beneficio suyo.

Texto

na me viduḥ sura-gaṇāḥ
prabhavaṁ na maharṣayaḥ
aham ādir hi devānāṁ
maharṣīṇāṁ ca sarvaśaḥ

Palabra por palabra

na — nunca; me — Mi; viduḥ — conocen; sura-gaṇāḥ — los semidioses; prabhavam — origen, opulencias; na — nunca; mahā-ṛṣayaḥ — grandes sabios; aham — Yo soy; ādiḥ — el origen; hi — ciertamente; devānām — de los semidioses; mahā-ṛṣīṇām — de los grandes sabios; ca — también; sarvaśaḥ — en todos los aspectos.

Traducción

Ni las legiones de semidioses ni los grandes sabios conocen Mi origen ni Mis opulencias, ya que, en todos los aspectos, Yo soy la fuente de los semidioses y de los sabios.

Significado

Como se afirma en la Brahma-saṁhitā, el Señor Kṛṣṇa es el Señor Supremo. Nadie es superior a Él; Él es la causa de todas las causas. Aquí, el Señor también afirma personalmente que Él es la causa de todos los semidioses y sabios. Ni siquiera los semidioses y grandes sabios pueden entender a Kṛṣṇa; ellos no pueden entender ni Su nombre ni Su personalidad, así que, ¿qué podemos decir de los supuestos eruditos de este diminuto planeta? Nadie puede entender por qué este Dios Supremo viene a la Tierra como un ser humano ordinario y ejecuta actividades tan maravillosas y fuera de lo común. Uno debe saber, entonces, que la erudición no es la cualidad necesaria para entender a Kṛṣṇa. Hasta los semidioses y los grandes sabios han tratado de entender a Kṛṣṇa mediante su especulación mental, y no lo han logrado. En el Śrīmad-Bhāgavatam también se dice claramente que ni siquiera los grandes semidioses son capaces de entender a la Suprema Personalidad de Dios. Ellos pueden especular hasta los límites de sus sentidos imperfectos y pueden llegar a la conclusión opuesta del impersonalismo, de algo que no hayan manifestado las tres cualidades de la naturaleza material, o ellos pueden imaginar algo mediante la especulación mental, pero no es posible entender a Kṛṣṇa mediante esa necia especulación.

Aquí el Señor dice indirectamente que si alguien quiere conocer a la Verdad Absoluta: «Heme aquí presente como la Suprema Personalidad de Dios. Yo soy el Supremo». Uno debe saber eso. Aunque uno no pueda entender al inconcebible Señor que está presente personalmente, no obstante Él existe. Nosotros podremos entender de hecho a Kṛṣṇa, quien es eterno y está lleno de bienaventuranza y conocimiento, si tan solo estudiamos Sus palabras en el Bhagavad-gītā y el Śrīmad-Bhāgavatam. El concepto de Dios como algún poder gobernante o como el Brahman impersonal pueden llegar a entenderlo las personas que se encuentran en el plano de la energía inferior del Señor, pero a la Personalidad de Dios no se lo puede concebir a menos que se esté en la posición trascendental.

Como la mayoría de los hombres no pueden entender a Kṛṣṇa en Su verdadera situación, Él desciende por Su misericordia sin causa a favorecer a esos especuladores. Mas, a pesar de las extraordinarias actividades del Señor Supremo, esos especuladores, debido a la contaminación de que son objeto en el plano de la energía material, siguen pensando que el Brahman impersonal es el Supremo. Solo los devotos que están plenamente entregados al Señor Supremo pueden entender, por la gracia de la Personalidad Suprema, que Él es Kṛṣṇa. Los devotos del Señor no le hacen caso a la concepción de Dios como el Brahman impersonal; su fe y devoción los lleva a entregarse inmediatamente al Señor Supremo, y, por la misericordia sin causa de Kṛṣṇa, ellos pueden entender a Kṛṣṇa. Nadie más puede entenderlo. De modo que, hasta los grandes sabios concuerdan; ¿qué es el ātmā?, ¿qué es el Supremo?: es Aquel a quien tenemos que adorar.

Texto

yo mām ajam anādiṁ ca
vetti loka-maheśvaram
asammūḍhaḥ sa martyeṣu
sarva-pāpaiḥ pramucyate

Palabra por palabra

yaḥ — todo aquel que; mām — a Mí; ajam — innaciente; anādim — sin principio; ca — también; vetti — conoce; loka — de los planetas; maha-īśvaram — el amo supremo; asammūḍhaḥ — libre de engaño; saḥ — él; martyeṣu — entre aquellos sujetos a morir; sarva-pāpaiḥ — de todas las reacciones pecaminosas; pramucyate — se libera.

Traducción

Aquel que Me conoce como el innaciente, como el que no tiene principio, como el Supremo Señor de todos los mundos, solo él, que entre los hombres está libre de engaño, se libera de las reacciones de los pecados.

Significado

Como se dice en el capítulo siete (7.3): manuṣyāṇāṁ sahasreṣu kaścid yatati siddhaye, aquellos que están tratando de elevarse hasta el plano de la comprensión espiritual, no son hombres ordinarios; ellos son superiores a millones y millones de hombres ordinarios que carecen de conocimiento acerca de la iluminación espiritual. Pero entre aquellos que verdaderamente están tratando de entender su situación espiritual, aquel que puede llegar a comprender que Kṛṣṇa es la Suprema Personalidad de Dios, el propietario de todo, el innaciente, es la persona consumada de mayor éxito espiritual. Solo en esa etapa, cuando se ha comprendido enteramente la suprema posición de Kṛṣṇa, puede uno estar libre por completo de todas las reacciones pecaminosas.

Aquí se describe al Señor con la palabra aja, que significa innaciente, pero Él es distinto de las entidades vivientes, a quienes se las describe como aja en el capítulo dos. El Señor es diferente de las entidades vivientes, que están naciendo y muriendo a causa del apego material. Las almas condicionadas están cambiando sus cuerpos, pero el cuerpo de Él es incambiable. Incluso cuando Él viene a este mundo material, lo hace como el mismo innaciente; por lo tanto, en el cuarto capítulo se dice que el Señor, en virtud de Su potencia interna, no se halla bajo el control de la energía material inferior, sino que siempre se halla en el plano de la energía superior.

En este verso, las palabras vetti loka-maheśvaram indican que uno debe saber que el Señor Kṛṣṇa es el propietario supremo de los sistemas planetarios del universo. Él existía antes de la creación, y Él es diferente de Su creación. Todos los semidioses fueron creados dentro de este mundo material, pero en lo que respecta a Kṛṣṇa, se dice que Él no es creado; así pues, Kṛṣṇa es diferente incluso de los grandes semidioses, tales como Brahmā y Śiva. Y como Él es el creador de Brahmā, Śiva y todos los demás semidioses, Él es la Persona Suprema de todos los planetas.

Śrī Kṛṣṇa es, entonces, diferente de todo lo creado, y cualquiera que lo conozca de ese modo, se libera de inmediato de todas las reacciones pecaminosas. Para tener conocimiento acerca del Señor Supremo, uno debe estar liberado de las actividades pecaminosas. A Él solo se lo puede conocer por medio del servicio devocional —y por ningún otro medio—, tal como se declara en el Bhagavad-gītā.

Uno no debe tratar de entender a Kṛṣṇa como si Él fuera un ser humano. Como se dijo antes, solo una persona necia lo considera a Él un ser humano. Ello se expresa aquí de nuevo de una manera diferente. Un hombre que no es necio, que es lo suficientemente inteligente como para entender la posición constitucional de la Divinidad, siempre está libre de todas las reacciones pecaminosas.

Si a Kṛṣṇa se lo conoce como el hijo de Devakī, entonces, ¿cómo puede ser innaciente? Eso también se explica en el Śrīmad-Bhāgavatam: cuando Él apareció ante Devakī y Vasudeva, no nació como un niño ordinario; Él apareció en Su forma original, y luego se transformó en un niño ordinario.

Todo lo que se hace bajo la dirección de Kṛṣṇa es trascendental. Ello no puede contaminarse con las reacciones materiales, las cuales pueden ser favorables o desfavorables. La concepción de que en el mundo material hay unas cosas favorables y otras desfavorables es más o menos una invención mental, pues en el mundo material no hay nada favorable. Todo es desfavorable, porque la propia cobertura material es desfavorable. Nosotros tan solo imaginamos que es favorable. Lo verdaderamente favorable depende de las actividades que se realizan en el plano de conciencia de Kṛṣṇa con plena devoción y servicio. Si de algún modo queremos, pues, que nuestras actividades sean auspiciosas, debemos trabajar entonces bajo las indicaciones del Señor Supremo. Esas indicaciones se dan en Escrituras autoritativas tales como el Śrīmad-Bhāgavatam y el Śrīmad Bhagavad-gītā, o las da un maestro espiritual genuino. Como el maestro espiritual es el representante del Señor Supremo, sus indicaciones son directamente las indicaciones del Señor Supremo. El maestro espiritual, las personas santas y las Escrituras dirigen de la misma manera. Entre estas tres fuentes no hay ninguna contradicción. Todas las acciones que se hacen bajo esa dirección, están libres de las reacciones de las actividades piadosas o impías de este mundo material. La actitud trascendental que el devoto tiene en la ejecución de actividades es de hecho una actitud de renunciación, y eso se denomina sannyāsa. Como se declara en el primer verso del sexto capítulo del Bhagavad-gītā, aquel que actúa como una cuestión de deber porque así se lo ha ordenado el Señor Supremo, y que no busca refugiarse en los frutos de sus actividades (anāśritaḥ karma-phalam), es un verdadero renunciante. Todo aquel que actúa bajo la dirección del Señor Supremo es de hecho un sannyāsī y un yogī, y no el hombre que simplemente ha adoptado el traje del sannyāsī, o un falso yogī.

Texto

buddhir jñānam asammohaḥ
kṣamā satyaṁ damaḥ śamaḥ
sukhaṁ duḥkhaṁ bhavo ’bhāvo
bhayaṁ cābhayam eva ca
ahiṁsā samatā tuṣṭis
tapo dānaṁ yaśo ’yaśaḥ
bhavanti bhāvā bhūtānāṁ
matta eva pṛthag-vidhāḥ

Palabra por palabra

buddhiḥ — inteligencia; jñānam — conocimiento; asammohaḥ — ausencia de duda; kṣamā — indulgencia; satyam — veracidad; damaḥ — control de los sentidos; śamaḥ — control de la mente; sukham — felicidad; duḥkham — aflicción; bhavaḥ — nacimiento; abhāvaḥ — muerte; bhayam — temor; ca — también; abhayam — valentía; eva — también; ca — y; ahiṁsā — no violencia; samatā — equilibrio; tuṣṭiḥ — satisfacción; tapaḥ — penitencia; dānam — caridad; yaśaḥ — fama; ayaśaḥ — infamia; bhavanti — aparecen; bhāvāḥ — naturalezas; bhūtānām — de las entidades vivientes; mattaḥ — de Mí; eva — ciertamente; pṛthak-vidhāḥ — dispuestas de diversas maneras.

Traducción

La inteligencia, el conocimiento, la ausencia de duda y engaño, la indulgencia, la veracidad, el control de los sentidos, el control de la mente, la felicidad, la aflicción, el nacimiento, la muerte, el temor, la valentía, la no violencia, la ecuanimidad, la satisfacción, la austeridad, la caridad, la fama y la infamia, todas estas diversas cualidades de los seres vivos solo son creadas por Mí.

Significado

Las diferentes cualidades de las entidades vivientes, ya sean buenas o malas, son todas creadas por Kṛṣṇa, y aquí se las describe.

«Inteligencia» se refiere a la capacidad de analizar las cosas en su correcta perspectiva, y «conocimiento» se refiere al hecho de entender lo que es el espíritu y lo que es la materia. El conocimiento ordinario que se obtiene con una educación universitaria es relativo únicamente a la materia, y aquí no se lo acepta como conocimiento. Conocimiento significa conocer la diferencia que hay entre el espíritu y la materia. En la educación moderna no hay ningún conocimiento acerca del espíritu; ellos tan solo se están ocupando de los elementos materiales y de las necesidades físicas. Por consiguiente, el conocimiento académico no es completo.

Asammoha, la ausencia de duda y engaño, se puede lograr cuando uno no vacila y cuando entiende la filosofía trascendental. Lentamente pero con certeza, uno se libra de la confusión. No se debe aceptar nada a ciegas; todo se debe aceptar con cuidado y precaución. Kṣamā, la tolerancia e indulgencia, es algo que se debe poner en práctica; uno debe ser tolerante y excusar las pequeñas ofensas de los demás. Satyam, veracidad, significa que los hechos se deben presentar tal como son, para beneficio de los demás. No se deben tergiversar los hechos. Según las convenciones sociales, se dice que uno puede hablar la verdad únicamente cuando les resulte agradable a los demás. Pero eso no es veracidad. La verdad se debe hablar de un modo franco, de manera que los demás puedan saber cuáles son los hechos. Si un hombre es un ladrón y a la gente se le advierte que él es un ladrón, ésa es la verdad. Aunque a veces la verdad sea desagradable, uno no debe dejar de hablarla. La veracidad exige que se presenten los hechos tal como son, para beneficio de los demás. Ésa es la definición de verdad.

El control de los sentidos significa que éstos no se deben emplear para el disfrute personal innecesario. No hay nada que prohíba satisfacer las verdaderas necesidades de los sentidos, pero el disfrute innecesario de los sentidos va en detrimento del avance espiritual. Por lo tanto, se debe reprimir el uso innecesario de los sentidos. De forma similar, uno debe evitar que la mente se entregue a pensamientos innecesarios; eso se denomina śama. Uno no debe perder el tiempo en considerar cómo hacer dinero. Ése es un mal uso de la capacidad de pensar. La mente se debe utilizar para entender la necesidad fundamental de los seres humanos, y ello se debe presentar de un modo autoritativo. La capacidad de pensar se debe desarrollar en compañía de personas que sean autoridades en las Escrituras, personas santas, maestros espirituales y aquellos cuyo pensamiento está sumamente desarrollado. Sukham, el placer o la felicidad, siempre debe proceder de aquello que sea favorable para el cultivo del conocimiento espiritual del proceso de conciencia de Kṛṣṇa. E, igualmente, aquello que es doloroso o que causa aflicción es aquello que es desfavorable para el cultivo de conciencia de Kṛṣṇa. Todo lo que sea favorable para el desarrollo de conciencia de Kṛṣṇa se debe aceptar, y todo lo desfavorable se debe rechazar.

Bhava, el nacimiento, se debe entender que se refiere al cuerpo. En lo que respecta al alma, para ella no hay ni nacimiento ni muerte; eso ya lo hemos discutido al comienzo del Bhagavad-gītā. El nacimiento y la muerte se le aplican al cuerpo que uno ha adquirido en el mundo material. El temor se debe a la preocupación por el futuro. Una persona con conciencia de Kṛṣṇa no tiene temor, porque por sus actividades es seguro que irá de vuelta al cielo espiritual, de vuelta al hogar, de vuelta a Dios. Así pues, su futuro es muy brillante. Otros, sin embargo, no saben lo que el futuro les depara; ellos no tienen conocimiento de lo que la siguiente vida les depara. De manera que, por eso, se hallan en un estado de ansiedad constante. Si queremos librarnos de la ansiedad, entonces lo mejor es entender a Kṛṣṇa y siempre estar situados en el plano de conciencia de Kṛṣṇa. De ese modo estaremos libres de todo temor. En el Śrīmad-Bhāgavatam (11.2.37) se declara: bhayaṁ dvitīyābhiniveśataḥ syāt, el temor lo causa nuestra absorción en la energía ilusoria. Pero aquellos que están libres de la energía ilusoria, aquellos que están seguros de que no son el cuerpo material, que están seguros de que son partes espirituales de la Suprema Personalidad de Dios, y que, por ende, están dedicados al trascendental servicio de la Divinidad Suprema, no tienen nada que temer. Su futuro es muy brillante. Ese temor es una condición propia de las personas que no se hallan en estado de conciencia de Kṛṣṇa. Abhayam, o la valentía, solo puede existir en aquel que se halla en estado de conciencia de Kṛṣṇa.

Ahiṁsā, no violencia, significa que uno no debe hacer nada que ponga a otros en una situación de sufrimiento o confusión. Las actividades materiales que prometen los muchos políticos, sociólogos, filántropos, etc., no producen muy buenos resultados, ya que los políticos y filántropos no tienen una visión trascendental; ellos no saben qué es lo verdaderamente beneficioso para la sociedad humana. Ahiṁsā significa que la gente debe ser adiestrada de modo tal que se pueda lograr la plena utilización del cuerpo humano. El cuerpo humano es para la iluminación espiritual, así que cualquier movimiento o cualesquiera comisiones que no fomenten ese fin, cometen un acto de violencia contra el cuerpo humano. Aquello que fomenta la felicidad espiritual futura de la generalidad de la gente, se denomina no violencia.

Samatā, ecuanimidad, se refiere al hecho de estar libre del apego y la aversión. Estar muy apegado o estar muy desapegado no es lo mejor. Este mundo material se debe aceptar sin apego ni aversión. Aquello que es favorable para la prosecución del cultivo de conciencia de Kṛṣṇa, se debe aceptar; aquello que es desfavorable se debe rechazar. Eso se denomina samatā, ecuanimidad. Una persona en estado de conciencia de Kṛṣṇa no tiene nada que rechazar ni nada que aceptar más que en función de la utilidad de las cosas en la prosecución del cultivo de conciencia de Kṛṣṇa.

Tuṣṭi, satisfacción, significa que uno no debe estar ansioso de adquirir cada vez más bienes materiales por medio de actividades innecesarias. Uno debe sentirse satisfecho con lo que sea que obtenga por la gracia del Señor Supremo; eso se denomina satisfacción. Tapas significa austeridad o penitencia. En los Vedas existen muchas reglas y regulaciones que se aplican aquí, como el despertarse temprano por la mañana y darse un baño. A veces es muy difícil levantarse temprano por la mañana, pero cualquier dificultad como ésa que uno afronte voluntariamente, se denomina penitencia. De igual forma, hay prescripciones por las que se debe ayunar en ciertos días del mes. Puede que uno no sienta inclinación por practicar esos ayunos, pero si está determinado a progresar en la senda de la ciencia de conciencia de Kṛṣṇa, debe aceptar esas dificultades físicas cuando se las recomiende. Sin embargo, uno no debe ayunar innecesariamente o en contra de las disposiciones védicas. Uno no debe ayunar con algún fin político; eso se describe en el Bhagavad-gītā como ayuno en el plano de la ignorancia, y todo lo que se haga bajo el influjo de la ignorancia o de la pasión no lleva al adelanto espiritual. No obstante, todo lo que se haga en el plano de la modalidad de la bondad sí hace que uno progrese, y el ayuno que se hace en términos de las disposiciones védicas lo enriquece a uno en el campo del conocimiento espiritual.

En lo que respecta a la caridad, uno debe dar el cincuenta por ciento de sus ingresos para alguna buena causa. Y, ¿qué es una buena causa? Es aquella que se conduce en términos del proceso de conciencia de Kṛṣṇa. Esa no es solo una buena causa, sino la mejor de todas. Como Kṛṣṇa es bueno, Su causa también es buena. Así pues, la caridad se le debe dar a una persona que esté dedicada al proceso de conciencia de Kṛṣṇa. De acuerdo con la literatura védica, se estipula que la caridad se les debe dar a los brāhmaṇas. Esta práctica todavía se sigue, aunque no muy de acuerdo con las disposiciones védicas. Pero, aun así, la disposición señala que la caridad se les debe dar a los brāhmaṇas. ¿Por qué? Porque ellos están dedicados al cultivo superior del conocimiento espiritual. Se espera que el brāhmaṇa consagre toda su vida a la comprensión del Brahman. Brahma jānātīti brāhmaṇaḥ: aquel que conoce el Brahman se denomina brāhmaṇa. Luego la caridad se les ofrece a los brāhmaṇas, ya que, como ellos siempre están dedicados al servicio espiritual superior, no tienen tiempo de ganarse la vida. En la literatura védica también se dice que la caridad se le debe otorgar al que renuncia a la vida ordinaria, al sannyāsī. Los sannyāsīs mendigan de puerta en puerta, mas no en busca de dinero, sino con propósitos misioneros. El sistema consiste en que ellos van de puerta en puerta para despertar del sopor de la ignorancia a los miembros del hogar. Puesto que los miembros del hogar están dedicados a los asuntos familiares y han olvidado el verdadero objetivo que deben tener en la vida —el de despertar su conciencia de Kṛṣṇa—, los sannyāsīs tienen la tarea de ir como mendigos a los hogares y animar a sus miembros a que se vuelvan conscientes de Kṛṣṇa. Como se dice en los Vedas, uno debe despertarse y lograr lo que le corresponde en esta forma de vida humana. El conocimiento y el método para ello lo distribuyen los sannyāsīs; de modo que, la caridad se les debe dar al que renuncia a la vida común, a los brāhmaṇas y a buenas causas similares, y no a cualquier causa caprichosa.

Yaśas, fama, debe ser como lo indicó el Señor Caitanya, quien dijo que un hombre es famoso cuando es conocido como un gran devoto. Eso es verdadera fama. Si uno se ha vuelto un gran hombre en el proceso de conciencia de Kṛṣṇa y ello se llega a saber, entonces se es verdaderamente famoso. Aquel que no tiene esa clase de fama, es infame.

Todas esas cualidades se manifiestan por todo el universo, en la sociedad humana y en la sociedad de los semidioses. Hay muchas formas de humanidad en otros planetas, y en ellos se encuentran esas cualidades. Ahora bien, para aquel que quiera progresar en el cultivo de conciencia de Kṛṣṇa, Kṛṣṇa crea todas esas cualidades, pero la propia persona hace que se desarrollen en ella desde dentro. En aquel que se dedica al servicio devocional del Señor Supremo se desarrollan todas las buenas cualidades, según lo dispone el Señor Supremo.

De todo lo que observemos, bueno o malo, el origen es Kṛṣṇa. En este mundo material no se puede manifestar nada que no esté en Kṛṣṇa. Eso es verdadero conocimiento. Aunque sabemos que las cosas son diferentes unas de otras, debemos darnos cuenta de que todo fluye procedente de Kṛṣṇa.

Texto

maharṣayaḥ sapta pūrve
catvāro manavas tathā
mad-bhāvā mānasā jātā
yeṣāṁ loka imāḥ prajāḥ

Palabra por palabra

mahā-ṛṣayaḥ — los grandes sabios; sapta — siete; pūrve — antes; catvāraḥ — cuatro; manavaḥmanus; tathā — también; mat-bhāvāḥ — nacidos de Mí; mānasāḥ — de la mente; jātāḥ — nacidos; yeṣām — de ellos; loke — en el mundo; imāḥ — toda esta; prajāḥ — población.

Traducción

Los siete grandes sabios, y antes que ellos los otros cuatro grandes sabios y los manus [los progenitores de la humanidad], provienen de Mí, nacidos de Mi mente, y todos los seres vivos que pueblan los diversos planetas descienden de ellos.

Significado

El Señor está presentando una sinopsis genealógica de la población del universo. Brahmā es la criatura original que nace de la energía del Señor Supremo, a quien se lo conoce como Hiraṇyagarbha. Y de Brahmā se manifiestan todos los siete grandes sabios, y antes que ellos, otros cuatro grandes sabios, llamados Sanaka, Sananda, Sanātana y Sanat-kumāra, así como también los catorce manus. Todos estos veinticinco grandes sabios son conocidos como los patriarcas de las entidades vivientes de todas partes del universo. Existen infinidad de universos e infinidad de planetas dentro de cada universo, y cada planeta está lleno de diferentes variedades de población. Todos ellos nacen de estos veinticinco patriarcas. Brahmā hizo penitencias por mil años de los semidioses, antes de que por la gracia de Kṛṣṇa llegara a percatarse de cómo crear. Luego, de Brahmā salieron Sanaka, Sananda, Sanātana y Sanat-kumāra, después Rudra, y posteriormente los siete sabios, y de ese modo todos los brāhmaṇas y kṣatriyas nacen de la energía de la Suprema Personalidad de Dios. Brahmā es conocido como Pitāmaha, el abuelo, y Kṛṣṇa es conocido como Prapitāmaha, el padre del abuelo. Eso se afirma en el undécimo capítulo del Bhagavad-gītā (11.39).

Texto

etāṁ vibhūtiṁ yogaṁ ca
mama yo vetti tattvataḥ
so ’vikalpena yogena
yujyate nātra saṁśayaḥ

Palabra por palabra

etām — toda esta; vibhūtim — opulencia; yogam — poder místico; ca — también; mama — Míos; yaḥ — todo aquel que; vetti — conoce; tattvataḥ — en verdad; saḥ — él; avikalpena — sin división; yogena — al servicio devocional; yujyate — se dedica; na — nunca; atra — aquí; saṁśayaḥ — duda.

Traducción

Aquel que está verdaderamente convencido de esta opulencia y poder místico Míos, se dedica al servicio devocional puro; de esto no hay ninguna duda.

Significado

La cumbre más elevada de la perfección espiritual la constituye el conocimiento acerca de la Suprema Personalidad de Dios. A menos que uno esté firmemente convencido de las diferentes opulencias del Señor Supremo, no puede dedicarse al servicio devocional. Por lo general, la gente sabe que Dios es grande, pero no sabe en detalle de qué modo Dios es grande. He aquí los detalles. Si uno verdaderamente sabe cómo Dios es grande, entonces de forma natural se vuelve un alma entregada y se ocupa en el servicio devocional del Señor. Cuando uno llega a conocer en verdad las opulencias del Supremo, no queda otro recurso más que el de entregarse a Él. Ese conocimiento verdadero se puede adquirir de las descripciones del Śrīmad-Bhāgavatam, el Bhagavad-gītā y Escrituras similares.

Para la administración de este universo existen muchos semidioses distribuidos por todo el sistema planetario, y entre ellos los principales son Brahmā, el Señor Śiva y los cuatro grandes Kumāras y otros patriarcas. Hay muchos antepasados de la población del universo, y todos ellos nacen del Señor Supremo, Kṛṣṇa. La Suprema Personalidad de Dios, Kṛṣṇa, es el antepasado original de todos los antepasados.

Ésas son algunas de las opulencias del Señor Supremo. Cuando uno está firmemente convencido de ellas, acepta a Kṛṣṇa con gran fe y sin ninguna duda, y se dedica al servicio devocional. Todo ese conocimiento específico es necesario para aumentar el interés de uno en el amoroso servicio devocional del Señor. Uno no debe desdeñar el esfuerzo de entender por completo cuán grande es Kṛṣṇa, ya que, al conocer la grandeza de Kṛṣṇa, se podrá estar fijo en la ejecución de un servicio devocional sincero.

Texto

ahaṁ sarvasya prabhavo
mattaḥ sarvaṁ pravartate
iti matvā bhajante māṁ
budhā bhāva-samanvitāḥ

Palabra por palabra

aham — Yo; sarvasya — de todo; prabhavaḥ — la fuente de la generación; mattaḥ — de Mí; sarvam — todo; pravartate — emana; iti — así pues; matvā — sabiendo; bhajante — se consagran; mām — a Mí; budhāḥ — los eruditos; bhāva-samanvitāḥ — con gran atención.

Traducción

Yo soy la fuente de todos los mundos materiales y espirituales. Todo emana de Mí. Los sabios que saben esto perfectamente, se dedican a Mi servicio devocional y Me adoran con todo su corazón.

Significado

Una persona muy erudita que ha estudiado los Vedas a la perfección, que ha recibido información procedente de autoridades tales como el Señor Caitanya y que sabe cómo aplicar esas enseñanzas, puede entender que Kṛṣṇa es el origen de todo tanto en el mundo material como en el mundo espiritual, y puesto que ella sabe eso a la perfección, se establece firmemente en el servicio devocional del Señor Supremo. A ella nunca la pueden apartar del sendero ninguna cantidad de comentarios insensatos ni gente necia. Toda la literatura védica acepta que Kṛṣṇa es la fuente de Brahmā, Śiva y todos los demás semidioses. En el Atharva Veda (Gopāla-tāpanī Upaniṣad 1.24) se dice: yo brahmāṇaṁ vidadhāti pūrvaṁ yo vai vedāṁś ca gāpayati sma kṛṣṇaḥ, «Fue Kṛṣṇa quien en el principio instruyó a Brahmā en el conocimiento védico y quien divulgó el conocimiento védico en el pasado». Además, el Nārāyaṇa Upaniṣad (1) dice: atha puruṣo ha vai nārāyaṇo ’kāmayata prajāḥ sṛjeyeti, «Entonces, Nārāyaṇa, la Personalidad Suprema, deseó crear entidades vivientes». El Upaniṣad continúa, diciendo: nārāyaṇād brahmā jāyate, nārāyaṇāt prajāpatiḥ prajāyate, nārāyaṇād indro jāyate, nārāyaṇād aṣṭau vasavo jāyante, nārāyaṇād ekādaśa rudrā jāyante, nārāyaṇād dvādaśādityāḥ, «De Nārāyaṇa nace Brahmā, y de Nārāyaṇa también nacen los patriarcas. De Nārāyaṇa nace Indra, de Nārāyaṇa nacen los ocho Vasus, de Nārāyaṇa nacen los once Rudras, de Nārāyaṇa nacen los doce ādityas». Ese Nārāyaṇa es una expansión de Kṛṣṇa.

En los mismos Vedas se dice: brahmaṇyo devakī-putraḥ, «El hijo de Devakī, Kṛṣṇa, es la Personalidad Suprema» (Nārāyaṇa Upaniṣad 4). Luego, se dice: eko vai nārāyaṇa āsīn na brahmā na īśāno nāpo nāgni somau neme dyāv-āpṛthivī na nakṣatrāṇi na sūryaḥ, «Al comienzo de la creación sólo existía Nārāyaṇa, la Personalidad Suprema. No había Brahmā, ni Śiva, ni el agua, ni fuego, ni Luna, ni Sol, ni cielo, ni tierra, ni estrellas en el cielo» (Mahā Upaniṣad 1.2). En el Mahā Upaniṣad también se dice que el Señor Śiva nació de la frente del Señor Supremo. Así pues, los Vedas dicen que a quien hay que adorar es al Señor Supremo, el creador de Brahmā y Śiva.

En el Mokṣa-dharma, Kṛṣṇa también dice:

prajāpatiṁ ca rudraṁ cāpy
aham eva sṛjāmi vai
tau hi māṁ na vijānīto
mama māyā-vimohitau

«Los patriarcas, Śiva y otros son creados por Mí, aunque ellos no lo saben porque están engañados por Mi energía ilusoria». En el Varāha Purāṇa también se dice:

nārāyaṇaḥ paro devas
tasmāj jātaś caturmukhaḥ
tasmād rudro ’bhavad devaḥ
sa ca sarva-jñatāṁ gataḥ

«Nārāyaṇa es la Suprema Personalidad de Dios, y de Él nació Brahmā, de quien nació Śiva».

El Señor Kṛṣṇa es la fuente de todas las generaciones, y a Él se lo llama la muy eficiente causa de todo. Él dice: «Como todo nace de Mí, Yo soy la fuente original de todo. Todo se halla por debajo de Mí; nadie está por encima de Mí». No hay ningún otro controlador supremo aparte de Kṛṣṇa. Aquel que entiende a Kṛṣṇa de ese modo con un maestro espiritual genuino y con referencias de la literatura védica, ocupa toda su energía en el proceso de conciencia de Kṛṣṇa y se convierte en un hombre verdaderamente erudito. En comparación con él, todos los demás, que no conocen bien a Kṛṣṇa, no son más que necios. Solo un necio consideraría que Kṛṣṇa es un hombre ordinario. Una persona consciente de Kṛṣṇa no debe dejarse confundir por necios; ella debe eludir todas las interpretaciones y comentarios desautorizados que se le hacen al Bhagavad-gītā, y debe proseguir por el sendero de conciencia de Kṛṣṇa con determinación y firmeza.

Texto

mac-cittā mad-gata-prāṇā
bodhayantaḥ parasparam
kathayantaś ca māṁ nityaṁ
tuṣyanti ca ramanti ca

Palabra por palabra

mat-cittāḥ — con la mente dedicada a Mí por completo; mat-gata-prāṇāḥ — con la vida consagrada a Mí; bodhayantaḥ — predicando; parasparam — entre sí; kathayantaḥ — hablando; ca — también; mām — de Mí; nityam — perpetuamente; tuṣyanti — se complacen; ca — también; ramanti — disfrutan de dicha trascendental; ca — también.

Traducción

Los pensamientos de Mis devotos puros moran en Mí, sus vidas están plenamente consagradas a Mi servicio, y ellos sienten gran satisfacción y dicha en iluminarse siempre entre sí y en conversar siempre acerca de Mí.

Significado

Los devotos puros, cuyas características se mencionan aquí, se dedican por completo al amoroso servicio trascendental del Señor. Sus mentes no pueden ser apartadas de los pies de loto de Kṛṣṇa. Sus conversaciones tratan únicamente de asuntos trascendentales. Las características propias de los devotos puros se describen en este verso de un modo específico. Los devotos del Señor Supremo se dedican las veinticuatro horas del día a glorificar las cualidades y los pasatiempos del Señor Supremo. Ellos tienen el corazón y el alma sumergidos constantemente en Kṛṣṇa, y disfrutan al discutir acerca de Él con otros devotos.

En la etapa preliminar del servicio devocional, ellos saborean el placer trascendental que procede del servicio mismo, y en la etapa madura se encuentran situados de hecho en el plano del amor de Dios. Una vez que se encuentran en esa posición trascendental pueden saborear la perfección máxima, que el Señor exhibe en Su morada. El Señor Caitanya dice que el servicio devocional trascendental es algo así como cultivar una semilla en el corazón de la entidad viviente. Existen infinidad de entidades vivientes que viajan por todos los diferentes planetas del universo, y entre ellas hay unas cuantas que son lo suficientemente afortunadas como para conocer a un devoto puro y tener la oportunidad de entender el servicio devocional. Ese servicio devocional es como una semilla, y si se planta en el corazón de una entidad viviente y ésta se dedica a oír y cantar Hare Kṛṣṇa, Hare Kṛṣṇa, Kṛṣṇa Kṛṣṇa, Hare Hare/ Hare Rāma, Hare Rāma, Rāma Rāma, Hare Hare, esa semilla fructifica de la misma manera en que la semilla de un árbol fructifica con un riego regular. La planta espiritual del servicio devocional va creciendo gradualmente, hasta que atraviesa la cobertura del universo material y entra en la refulgencia brahma-jyotir del cielo espiritual. En el cielo espiritual esa planta también sigue creciendo cada vez más, hasta que llega al planeta más elevado, que se denomina Goloka Vṛndāvana, el planeta supremo de Kṛṣṇa. Por último, la planta se refugia en los pies de loto de Kṛṣṇa y ahí descansa. Poco a poco, al igual que una planta produce frutas y flores, esa planta del servicio devocional también produce frutos, y el riego, en la forma del proceso de cantar y oír, continúa. Esa planta del servicio devocional se describe por completo en el Caitanya-caritāmṛta (Madhya-līlā, capítulo diecinueve). Ahí se explica que cuando toda la planta se refugia en los pies de loto del Señor Supremo, uno queda totalmente absorto en el amor de Dios; en ese entonces, uno no puede vivir ni por un momento sin estar en contacto con el Señor Supremo, tal como un pez no puede vivir sin agua. En ese estado, en contacto con el Señor Supremo, el devoto adquiere de hecho las cualidades trascendentales.

El Śrīmad-Bhāgavatam también está lleno de esa clase de narraciones acerca de la relación que hay entre el Señor Supremo y Sus devotos; por consiguiente, el Śrīmad-Bhāgavatam les es muy querido a los devotos, tal como se declara en el propio Bhāgavatam (12.13.18). Śrīmad-bhāgavataṁ purāṇam amalaṁ yad vaiṣṇavānāṁ priyam. En esa narración no hay nada acerca de las actividades materiales, el desarrollo económico, la complacencia de los sentidos o la liberación. El Śrīmad-Bhāgavatam es la única narración en la que se describe a plenitud la naturaleza trascendental del Señor Supremo y Sus devotos. Así pues, las almas iluminadas con conciencia de Kṛṣṇa disfrutan continuamente de la actividad de oír lo que dicen esas Escrituras trascendentales, tal como un joven y una joven disfrutan al reunirse.

Texto

teṣāṁ satata-yuktānāṁ
bhajatāṁ prīti-pūrvakam
dadāmi buddhi-yogaṁ taṁ
yena mām upayānti te

Palabra por palabra

teṣām — a ellos; satata-yuktānām — siempre dedicados; bhajatām — a prestar servicio devocional; prīti-pūrvakam — con éxtasis amoroso; dadāmi — Yo doy; buddhi-yogam — verdadera inteligencia; tam — eso; yena — por lo cual; mām — a Mí; upayānti — vienen; te — ellos.

Traducción

A aquellos que están constantemente consagrados a servirme con amor, Yo les doy la inteligencia mediante la cual pueden venir a Mí.

Significado

En este verso, la palabra buddhi-yogam es muy significativa. Recordemos que en el segundo capítulo, el Señor, al instruir a Arjuna, le dijo que Él le había hablado de muchas cosas y que lo instruiría en lo referente al proceso de buddhi-yoga. Ahora se explica el buddhi-yoga. El buddhi-yoga es de por sí acción con conciencia de Kṛṣṇa; eso constituye el máximo grado de la inteligencia. Buddhi significa «inteligencia», y yoga significa «actividades místicas» o «elevación mística». Cuando uno trata de ir de vuelta al hogar, de vuelta a Dios, y se entrega por entero al cultivo de conciencia de Kṛṣṇa por medio del servicio devocional, su acción se denomina buddhi-yoga. En otras palabras, buddhi-yoga es el proceso mediante el cual uno se sale del enredo de este mundo material. La meta última del progreso es Kṛṣṇa. La gente no lo sabe; por lo tanto, la compañía de los devotos y un maestro espiritual genuino son cosas importantes. Uno debe saber que la meta es Kṛṣṇa, y cuando se establece la meta, entonces el sendero se recorre lenta pero progresivamente, y se alcanza la meta final.

Cuando una persona sabe cuál es la meta de la vida pero está adicta a los frutos de las actividades, actúa en el plano del karma-yoga. Cuando ella sabe que la meta es Kṛṣṇa pero disfruta de las especulaciones mentales para entender a Kṛṣṇa, actúa en el plano del jñāna-yoga. Y cuando conoce la meta y busca a Kṛṣṇa por entero con conciencia de Kṛṣṇa y servicio devocional, actúa en el plano del bhakti-yoga o buddhi-yoga, que es el yoga completo. Ese yoga completo constituye la etapa más elevada y perfecta de la vida.

Puede que una persona tenga un maestro espiritual genuino y que esté apegada a una organización espiritual, pero si aun así no es lo suficientemente inteligente como para poder progresar, entonces Kṛṣṇa le da instrucciones desde dentro de modo que al final pueda llegar a Él sin dificultad. El requisito para ello es que la persona se dedique siempre al proceso de conciencia de Kṛṣṇa, y con amor y devoción preste toda clase de servicios. Ella debe realizar algún tipo de trabajo para Kṛṣṇa, y ese trabajo se debe hacer con amor. Si un devoto no es lo suficientemente inteligente como para poder progresar en la senda de la autorrealización, pero es sincero y dedicado a las actividades del servicio devocional, el Señor le da la oportunidad de progresar y al final llegar a Él.

Texto

teṣām evānukampārtham
aham ajñāna-jaṁ tamaḥ
nāśayāmy ātma-bhāva-stho
jñāna-dīpena bhāsvatā

Palabra por palabra

teṣām — para ellos; eva — ciertamente; anukampā-artham — para conferirles una misericordia especial; aham — Yo; ajñāna-jam — debido a la ignorancia; tamaḥ — oscuridad; nāśayāmi — disipo; ātma-bhāva — en sus corazones; sthaḥ — situado; jñāna — del conocimiento; dīpena — con la lámpara; bhāsvatā — brillante.

Traducción

Para otorgarles una misericordia especial, Yo, morando en sus corazones, destruyo con la deslumbrante lámpara del conocimiento la oscuridad que nace de la ignorancia.

Significado

Cuando el Señor Caitanya estaba en Benarés divulgando el canto de Hare Kṛṣṇa, Hare Kṛṣṇa, Kṛṣṇa Kṛṣṇa, Hare Hare/ Hare Rāma, Hare Rāma, Rāma Rāma, Hare Hare, miles de personas lo seguían. Prakāśānanda Sarasvatī, que en esa época era un erudito muy entendido e influyente de Benarés, se burló del Señor Caitanya diciendo que era un sentimental. A veces los filósofos māyāvādīs critican a los devotos, porque creen que la mayoría de ellos están en la oscuridad de la ignorancia y son unos sentimentales ingenuos desde el punto de vista filosófico. En realidad, no es así. Hay sabios sumamente entendidos que han expuesto la filosofía de la devoción, pero incluso si un devoto no saca provecho de las obras de ellos o de su maestro espiritual, si es sincero en su servicio devocional, el propio Kṛṣṇa lo ayuda desde dentro del corazón. De manera que, el devoto sincero que está dedicado al proceso de conciencia de Kṛṣṇa, no es posible que carezca de conocimiento. Lo único necesario es que uno haga servicio devocional con plena conciencia de Kṛṣṇa.

Los filósofos māyāvādīs creen que sin discernir no se puede tener conocimiento puro. Para ellos, el Señor Supremo da esta respuesta: aquellos que están dedicados al servicio devocional puro, aunque no tengan suficiente educación e incluso sin suficiente conocimiento acerca de los principios védicos, son ayudados por el Dios Supremo, tal como se afirma en este verso.

El Señor le dice a Arjuna que, básicamente, no hay ninguna posibilidad de entender a la Verdad Suprema, a la Verdad Absoluta, a la Suprema Personalidad de Dios, simplemente mediante la especulación, ya que la Verdad Suprema es tan grande, que no es posible entenderla ni conseguirla con solo hacer un esfuerzo mental. El hombre puede seguir especulando por varios millones de años, y si no se vuelve devoto, si no se vuelve un amante de la Verdad Suprema, nunca entenderá a Kṛṣṇa o la Verdad Suprema. A Kṛṣṇa, la Verdad Suprema, únicamente se lo complace por medio del servicio devocional, y mediante Su energía inconcebible Él puede revelársele al corazón del devoto puro. El devoto puro siempre lleva a Kṛṣṇa en el corazón; y con la presencia de Kṛṣṇa, que es como el Sol, la oscuridad de la ignorancia se disipa de inmediato. Ésa es la misericordia especial que Kṛṣṇa le proporciona al devoto puro.

Debido a la contaminación que procede de la relación con lo material a través de muchísimos millones de nacimientos, el corazón de uno siempre está cubierto con el polvo del materialismo, pero cuando uno se dedica al servicio devocional y canta Hare Kṛṣṇa de un modo constante, el polvo se limpia rápidamente y uno se eleva al plano del conocimiento puro. La meta última, Viṣṇu, se puede alcanzar únicamente por medio de ese canto y del servicio devocional, y no mediante la especulación mental y el argumento. El devoto puro no tiene que preocuparse por las necesidades materiales de la vida; él no tiene que angustiarse, porque, cuando disipa la oscuridad de su corazón, el Señor Supremo, que se siente complacido con el amoroso servicio devocional del devoto, le provee de todo automáticamente. Ésa es la esencia de las enseñanzas del Bhagavad-gītā. Mediante el estudio del Bhagavad-gītā, uno puede convertirse en un alma totalmente entregada al Señor Supremo y dedicarse al servicio devocional puro. Cuando el Señor se hace cargo, uno se libra por completo de toda clase de esfuerzos materialistas.

Texto

arjuna uvāca
paraṁ brahma paraṁ dhāma
pavitraṁ paramaṁ bhavān
puruṣaṁ śāśvataṁ divyam
ādi-devam ajaṁ vibhum
āhus tvām ṛṣayaḥ sarve
devarṣir nāradas tathā
asito devalo vyāsaḥ
svayaṁ caiva bravīṣi me

Palabra por palabra

arjunaḥ uvāca — Arjuna dijo; param — suprema; brahma — verdad; param — supremo; dhāma — sustento; pavitram — puro; paramam — supremo; bhavān — Tú; puruṣam — personalidad; śāśvatam — eterna; divyam — trascendental; ādi-devam — el Señor original; ajam — innaciente; vibhum — el más grande de todos; āhuḥ — dicen; tvām — de Ti; ṛṣayaḥ — sabios; sarve — todos; deva-ṛṣiḥ — el sabio entre los semidioses; nāradaḥ — Nārada; tathā — también; asitaḥ — Asita; devalaḥ — Devala; vyāsaḥ — Vyāsa; svayam — personalmente; ca — también; eva — ciertamente; bravīṣi — Tú estás explicando; me — a mí.

Traducción

Arjuna dijo: Tú eres la Suprema Personalidad de Dios, la morada suprema, lo más puro que existe, la Verdad Absoluta. Tú eres la persona original, trascendental y eterna, el innaciente, el más grande de todos. Todos los grandes sabios, tales como Nārada, Asita, Devala y Vyāsa, confirman esta verdad acerca de Ti, y ahora Tú mismo me lo estás expresando.

Significado

En estos dos versos, el Señor Supremo le da una oportunidad al filósofo māyāvādī, ya que aquí se deja en claro que el Supremo es diferente del alma individual. Arjuna, después de oír los cuatro versos esenciales del Bhagavad-gītā que se presentan en este capítulo, quedó completamente libre de todas las dudas y aceptó a Kṛṣṇa como la Suprema Personalidad de Dios. En seguida, él declara osadamente: «Tú eres paraṁ brahma, la Suprema Personalidad de Dios». Y antes, Kṛṣṇa declaró que Él es el originador de todo y de todos. Cada semidiós y cada ser humano depende de Él. Los hombres y los semidioses, por ignorancia, creen que son absolutos e independientes de la Suprema Personalidad de Dios. Esa ignorancia se elimina por completo con el desempeño de servicio devocional. Eso ya lo ha explicado el Señor en el verso anterior. Ahora, por Su gracia, Arjuna lo está aceptando como la Verdad Suprema, de conformidad con el mandamiento védico. No debe creerse que como Kṛṣṇa es un amigo íntimo de Arjuna, este último lo está adulando al llamarlo la Suprema Personalidad de Dios, la Verdad Absoluta. Todo lo que Arjuna dice en estos dos versos lo confirma la verdad védica. Los mandamientos védicos afirman que solo aquel que se entrega al servicio devocional del Señor Supremo puede entenderlo a Él, mientras que otros no pueden hacerlo. Todas y cada una de las palabras de este verso hablado por Arjuna las confirman los mandamientos védicos.

En el Kena Upaniṣad se declara que el Brahman Supremo es el lugar de reposo de todo, y Kṛṣṇa ya ha explicado que todo descansa en Él. El Muṇḍaka Upaniṣad confirma que el Señor Supremo, en quien todo descansa, puede ser comprendido solo por aquellos que se dedican constantemente a pensar en Él. Ese constante pensar en Kṛṣṇa es smaraṇam, uno de los métodos del servicio devocional. Solo mediante el servicio devocional que se le presta a Kṛṣṇa puede uno entender su posición y deshacerse de este cuerpo material.

En los Vedas se acepta al Señor Supremo como el más puro de los puros. Aquel que entiende que Kṛṣṇa es el más puro de los puros, puede purificarse de todas las actividades pecaminosas. Uno no puede desinfectarse de las actividades pecaminosas, a menos que se entregue al Señor Supremo. La aceptación de Kṛṣṇa como el puro supremo por parte de Arjuna, está de conformidad con los mandatos de la literatura védica. Esto también lo confirman grandes personalidades, de las cuales Nārada es la principal.

Kṛṣṇa es la Suprema Personalidad de Dios, y uno siempre debe meditar en Él y disfrutar de la relación trascendental que uno tiene con Él. Él es la existencia suprema. Él está libre de las necesidades físicas, y del nacimiento y la muerte. Esto no solo lo confirma Arjuna, sino también todas las Escrituras védicas, los Purāṇas y las historias. En todas las Escrituras védicas se describe a Kṛṣṇa de ese modo, y el propio Señor Supremo también dice en el cuarto capítulo: «Aunque Yo soy innaciente, aparezco en esta Tierra para establecer los principios religiosos». Él es el origen supremo; Él no tiene causa, pues es la causa de todas las causas, y todo emana de Él. Este conocimiento perfecto se puede adquirir por la gracia del Señor Supremo.

Arjuna se expresa aquí a través de la gracia de Kṛṣṇa. Si queremos entender el Bhagavad-gītā, debemos aceptar las declaraciones de estos dos versos. Eso se denomina el sistema paramparā, la aceptación de la sucesión discipular. A menos que uno forme parte de la sucesión discipular, no puede entender el Bhagavad-gītā. Ello no es posible mediante la llamada educación académica. Desafortunadamente, aquellos que están orgullosos de su educación académica, a pesar de las muchísimas pruebas que presentan las Escrituras védicas, se aferran a su obstinada creencia de que Kṛṣṇa es una persona ordinaria.

Texto

sarvam etad ṛtaṁ manye
yan māṁ vadasi keśava
na hi te bhagavan vyaktiṁ
vidur devā na dānavāḥ

Palabra por palabra

sarvam — todo; etat — esto; ṛtam — verdad; manye — yo acepto; yat — lo cual; mām — a mí; vadasi — Tú dices; keśava — ¡oh, Kṛṣṇa!; na — nunca; hi — ciertamente; te — Tu; bhagavan — ¡oh, Personalidad de Dios!; vyaktim — revelación; viduḥ — pueden conocer; devāḥ — los semidioses; na — ni; dānavāḥ — los demonios.

Traducción

¡Oh, Kṛṣṇa!, yo acepto totalmente como cierto todo lo que me has dicho. Ni los semidioses ni los demonios, ¡oh, Señor!, pueden entender Tu personalidad.

Significado

Arjuna confirma aquí que las personas de una naturaleza infiel y demoníaca no pueden entender a Kṛṣṇa. A Él ni siquiera lo conocen los semidioses, ¿qué puede decirse, entonces, de los supuestos eruditos de este mundo moderno? Por la gracia del Señor Supremo, Arjuna ha entendido que la Verdad Suprema es Kṛṣṇa y que Él es el perfecto. Uno debe seguir, pues, el sendero de Arjuna. Él recibió la autoridad del Bhagavad-gītā. Como se describe en el cuarto capítulo, el sistema paramparā de sucesión discipular para la comprensión del Bhagavad-gītā se perdió, y, en consecuencia, Kṛṣṇa restableció esa sucesión discipular con Arjuna, porque consideraba a Arjuna Su amigo íntimo y un gran devoto. De modo que, tal como se declara en nuestra introducción al Gītopaniṣad, el Bhagavad-gītā se debe entender mediante el sistema paramparā. Cuando el sistema paramparā se perdió, Arjuna fue seleccionado para rejuvenecerlo. La aceptación por parte de Arjuna de todo lo que Kṛṣṇa dice, debe ser emulada; así podremos entender la esencia del Bhagavad-gītā, y solo entonces podremos entender que Kṛṣṇa es la Suprema Personalidad de Dios.

Texto

svayam evātmanātmānaṁ
vettha tvaṁ puruṣottama
bhūta-bhāvana bhūteśa
deva-deva jagat-pate

Palabra por palabra

svayam — personalmente; eva — ciertamente; ātmanā — por Ti; ātmānam — Tú mismo; vettha — conoces; tvam — Tú; puruṣa-uttama — ¡oh, Tú, la más grande de las personas!; bhūta-bhāvana — ¡oh, Tú, el origen de todo!; bhūta-īśa — ¡oh, Señor de todo!; deva-deva — ¡oh, Señor de todos los semidioses!; jagat-pate — ¡oh, Señor de todo el universo!

Traducción

En verdad, solo Tú Te conoces a Ti mismo mediante Tu propia potencia interna, ¡oh, Persona Suprema, origen de todo, Señor de todos los seres, Dios de los dioses, Señor del universo!

Significado

Al Supremo Señor Kṛṣṇa lo pueden conocer las personas que están relacionadas con Él a través de la ejecución del servicio devocional, tales como Arjuna y sus seguidores. Las personas de mentalidad atea o demoníaca no pueden entender a Kṛṣṇa. La especulación mental que lo aparta a uno del Señor Supremo es un pecado grave, y aquel que no conoce a Kṛṣṇa no debe tratar de comentar el Bhagavad-gītā. El Bhagavad-gītā es la declaración de Kṛṣṇa, y puesto que es la ciencia de Kṛṣṇa, se debe entender según procede de Kṛṣṇa tal como la entendió Arjuna. No se debe recibir por intermedio de personas ateas.

Como se afirma en el Śrīmad-Bhāgavatam (1.2.11):

vadanti tat tattva-vidas
tattvaṁ yaj jñānam advayam
brahmeti paramātmeti
bhagavān iti śabdyate

A la Verdad Suprema se la llega a conocer de tres maneras: como el Brahman impersonal, como el Paramātmā localizado y, finalmente, como la Suprema Personalidad de Dios. De manera que, en la última etapa de la comprensión de la Verdad Absoluta, uno llega a la Suprema Personalidad de Dios. Un hombre común, o incluso un hombre liberado, que haya llegado a comprender el Brahman impersonal o el Paramātmā localizado, puede que no entienda la personalidad de Dios. Esa clase de hombres, por consiguiente, pueden tratar de entender a la Persona Suprema con los versos del Bhagavad-gītā, que están siendo expuestos por esta persona, Kṛṣṇa. A veces los impersonalistas aceptan a Kṛṣṇa como Bhagavān, o aceptan Su autoridad. Sin embargo, muchas personas liberadas no pueden entender a Kṛṣṇa como Puruṣottama, la Persona Suprema. Por lo tanto, Arjuna se refiere a Él como Puruṣottama. No obstante, puede que aún no se entienda que Kṛṣṇa es el padre de todas las entidades vivientes. En consecuencia, Arjuna se refiere a Él como Bhūta-bhāvana. Y si uno llega a conocerlo como el padre de todas las entidades vivientes, aun así puede que no lo conozca como el controlador supremo; por consiguiente, a Él se lo llama aquí Bhūteśa, el supremo controlador de todos. E incluso si uno conoce a Kṛṣṇa como el controlador supremo de todas las entidades vivientes, aun así puede que no sepa que Él es el origen de todos los semidioses; por lo tanto, a Él se lo llama aquí Devadeva, el venerable Dios de todos los semidioses. E incluso si uno lo conoce como el venerable Dios de todos los semidioses, puede que no sepa que Él es el propietario supremo de todo; por ende, a Él se lo llama Jagatpati. Así pues, en este verso se establece la verdad acerca de Kṛṣṇa por medio de la comprensión de Arjuna, y debemos seguir los pasos de Arjuna para entender a Kṛṣṇa tal como es Él.

Texto

vaktum arhasy aśeṣeṇa
divyā hy ātma-vibhūtayaḥ
yābhir vibhūtibhir lokān
imāṁs tvaṁ vyāpya tiṣṭhasi

Palabra por palabra

vaktum — decir; arhasi — Tú mereces; aśeṣeṇa — en detalle; divyāḥ — divinas; hi — ciertamente; ātma — Tus propias; vibhūtayaḥ — opulencias; yābhiḥ — con las cuales; vibhūtibhiḥ — opulencias; lokān — todos los planetas; imān — éstos; tvam — Tú; vyāpya — omnipresente; tiṣṭhasi — permaneces.

Traducción

Por favor, háblame en detalle de Tus poderes divinos, mediante los cuales estás omnipresente en todos estos mundos.

Significado

En este verso parece ser que Arjuna ya está satisfecho con su comprensión de la Suprema Personalidad de Dios, Kṛṣṇa. Por la gracia de Kṛṣṇa, Arjuna tiene experiencia personal, inteligencia y conocimiento, y cualquier otra cosa que una persona pueda tener, y por intermedio de todo ello, él ha entendido que Kṛṣṇa es la Suprema Personalidad de Dios. Para él no hay ninguna duda, pero, aun así, le está pidiendo a Kṛṣṇa que explique Su naturaleza omnipresente. La generalidad de la gente y los impersonalistas se interesan sobre todo en la naturaleza omnipresente del Supremo. Así que Arjuna está preguntando cómo Él existe en Su aspecto omnipresente a través de Sus diferentes energías. Ha de saberse que Arjuna está preguntando eso en nombre de la gente común.

Texto

kathaṁ vidyām ahaṁ yogiṁs
tvāṁ sadā paricintayan
keṣu keṣu ca bhāveṣu
cintyo ’si bhagavan mayā

Palabra por palabra

katham — cómo; vidyām aham — he de saber; yogin — ¡oh, místico supremo!; tvām — Tú; sadā — siempre; paricintayan — pensando en; keṣu — en lo que; keṣu — en lo que; ca — también; bhāveṣu — naturalezas; cintyaḥ asi — a Ti se Te ha de recordar; bhagavan — ¡oh, Tú, el Supremo!; mayā — por mí.

Traducción

¡Oh, Kṛṣṇa!, ¡oh, místico supremo!, ¿cómo he de meditar constantemente en Ti y cómo habré de conocerte? ¡Oh, Suprema Personalidad de Dios!, ¿en qué diversas formas debes ser recordado?

Significado

Como se afirma en el capítulo anterior, la Suprema Personalidad de Dios está cubierto por su yoga-māyā. Únicamente las almas entregadas y los devotos pueden verlo. Ahora Arjuna está convencido de que Su amigo, Kṛṣṇa, es la Divinidad Suprema, pero quiere conocer el proceso general mediante el cual el hombre común puede entender al Señor omnipresente. Los hombres comunes, entre ellos los demonios y los ateos, no pueden conocer a Kṛṣṇa, porque Él está resguardado por Su energía yoga-māyā. Una vez más, Arjuna hace estas preguntas para beneficio de ellos. El devoto superior no solo está interesado en su propia comprensión, sino también en la comprensión de toda la humanidad. De modo que Arjuna, por su misericordia, debido a que es un vaiṣṇava, un devoto, le está abriendo al hombre común el camino a la comprensión de la omnipresencia del Señor Supremo. Él se refiere a Kṛṣṇa específicamente como yogin, porque Śrī Kṛṣṇa es el amo de la energía yoga-māyā, mediante la cual Él es cubierto y descubierto ante el hombre común. El hombre común que no siente amor por Kṛṣṇa no puede pensar siempre en Kṛṣṇa; por lo tanto, él tiene que pensar de un modo material. Arjuna está considerando la manera de pensar de las personas materialistas de este mundo. Las palabras keṣu keṣu ca bhāveṣu se refieren a la naturaleza material (la palabra bhāva significa «cosas físicas»). Como los materialistas no pueden entender a Kṛṣṇa de una manera espiritual, se les aconseja que concentren la mente en cosas físicas y traten de ver cómo Kṛṣṇa se manifiesta mediante las representaciones físicas.

Texto

vistareṇātmano yogaṁ
vibhūtiṁ ca janārdana
bhūyaḥ kathaya tṛptir hi
śṛṇvato nāsti me ’mṛtam

Palabra por palabra

vistareṇa — en detalle; ātmanaḥ — Tu; yogam — poder místico; vibhūtim — opulencias; ca — también; jana-ardana — ¡oh, destructor de los ateos!; bhūyaḥ — de nuevo; kathaya — describe; tṛptiḥ — satisfacción; hi — ciertamente; śṛṇvataḥ — oyendo; na asti — no hay; me — mi; amṛtam — néctar.

Traducción

¡Oh, Janārdana!, por favor describe de nuevo detalladamente el poder místico de Tus opulencias. Yo nunca me sacio de oír hablar de Ti, pues cuanto más oigo, más quiero saborear el néctar de Tus palabras.

Significado

Los ṛṣis de Naimiṣāraṇya, encabezados por Śaunaka, le hicieron una declaración similar a Sūta Gosvāmī. Esa declaración es:

vayaṁ tu na vitṛpyāma
uttama-śloka-vikrame
yac chṛṇvatāṁ rasa-jñānāṁ
svādu svādu pade pade

«Aunque se haga continuamente, uno nunca puede saciarse de oír hablar de los trascendentales pasatiempos de Kṛṣṇa, a quien se lo glorifica con oraciones excelentes. Aquellos que han establecido una relación trascendental con Kṛṣṇa, disfrutan a cada paso de las descripciones de los pasatiempos del Señor» (Bhāg. 1.1.19). Así pues, Arjuna está interesado en oír hablar de Kṛṣṇa y, en especial, de la manera en que Él permanece como el Señor Supremo omnipresente.

Ahora bien, en lo que se refiere al amṛtam, el néctar, cualquier narración o declaración que trate de Kṛṣṇa es como un néctar. Y ese néctar se puede percibir con la experiencia práctica. Los cuentos modernos, la ficción y las historias son diferentes de los pasatiempos trascendentales del Señor, en el sentido de que uno se cansa de oír las historias mundanas, pero uno nunca se cansa de oír hablar de Kṛṣṇa. Es solo por esa razón que la historia de todo el universo está repleta de referencias acerca de los pasatiempos de las encarnaciones de Dios. Los Purāṇas son historias de épocas pasadas que relatan los pasatiempos de las diversas encarnaciones del Señor. De ese modo, el material de lectura siempre permanece fresco, a pesar de que se lea reiteradamente.

Texto

śrī-bhagavān uvāca
hanta te kathayiṣyāmi
divyā hy ātma-vibhūtayaḥ
prādhānyataḥ kuru-śreṣṭha
nāsty anto vistarasya me

Palabra por palabra

śrī-bhagavān uvāca — la Suprema Personalidad de Dios dijo; hanta — sí; te — a ti; kathayiṣyāmi — he de hablar; divyāḥ — divinas; hi — ciertamente; ātma-vibhūtayaḥ — opulencias personales; prādhānyataḥ — que son las principales; kuru-śreṣṭha — ¡oh, tú, el mejor de los Kurus!; na asti — no hay; antaḥ — límite; vistarasya — al alcance; me — Mi.

Traducción

La Suprema Personalidad de Dios dijo: Sí, te hablaré de Mis esplendorosas manifestaciones, pero solo de aquellas que son resaltantes, ¡oh, Arjuna!, pues Mi opulencia es ilimitada.

Significado

No es posible comprender la grandeza de Kṛṣṇa y Sus opulencias. Los sentidos del alma individual son limitados y no le permiten entender la totalidad de los asuntos de Kṛṣṇa. Con todo, los devotos tratan de entender a Kṛṣṇa, pero no bajo el principio de que podrán entender a Kṛṣṇa por completo en cualquier momento específico o en cualquier estado de la vida. Más bien, los propios temas acerca de Kṛṣṇa son tan sabrosos, que a los devotos les parecen néctar. De ese modo, los devotos los disfrutan. Al discutir las opulencias de Kṛṣṇa y Sus diversas energías, los devotos puros sienten un placer trascendental. En consecuencia, ellos quieren oír hablar de ellas y discutirlas. Kṛṣṇa sabe que las entidades vivientes no entienden hasta dónde llegan Sus opulencias; por eso Él accede a exponer únicamente las principales manifestaciones de Sus diferentes energías. La palabra prādhānyataḥ (“principal”) es muy importante, porque nosotros solo podemos entender unos cuantos de los principales detalles del Señor Supremo, ya que Sus características son ilimitadas. No es posible entenderlas todas. Y vibhūti, tal como se usa en este verso, se refiere a las opulencias mediante las cuales Él controla toda la manifestación. En el diccionario Amara-kośa se dice que vibhūti indica una opulencia excepcional.

El impersonalista y el panteísta no pueden entender las excepcionales opulencias del Señor Supremo ni las manifestaciones de Su energía divina. Tanto en el mundo material como en el mundo espiritual, Sus energías se distribuyen en todas las variedades de manifestaciones que hay. Ahora Kṛṣṇa está describiendo lo que el hombre común puede percibir directamente; así se describe, pues, parte de Su variada energía.

Texto

aham ātmā guḍākeśa
sarva-bhūtāśaya-sthitaḥ
aham ādiś ca madhyaṁ ca
bhūtānām anta eva ca

Palabra por palabra

aham — Yo; ātmā — el alma; guḍākeśa — ¡oh, Arjuna!; sarva-bhūta — de todas las entidades vivientes; āśaya-sthitaḥ — situado en el corazón; aham — Yo soy; ādiḥ — el origen; ca — también; madhyam — medio; ca — además; bhūtānām — de todas las entidades vivientes; antaḥ — fin; eva — ciertamente; ca — y.

Traducción

Yo soy la Superalma, ¡oh, Arjuna!, que se encuentra situada en los corazones de todas las entidades vivientes. Yo soy el principio, el medio y el fin de todos los seres.

Significado

En este verso, a Arjuna se lo llama Guḍākeśa, que significa «aquel que ha conquistado la oscuridad del sueño». Para aquellos que están durmiendo en la oscuridad de la ignorancia, no es posible entender cómo la Suprema Personalidad de Dios se manifiesta de diversas maneras en el mundo material y en el mundo espiritual. Así pues, este nombre que Kṛṣṇa le da a Arjuna es significativo. Como Arjuna está por encima de esa oscuridad, la Personalidad de Dios accede a describir Sus diversas opulencias.

En primer lugar, Kṛṣṇa le informa a Arjuna que Él es el alma de toda la manifestación cósmica por medio de Su expansión primaria. Antes de la creación material, el Señor Supremo, mediante Su expansión plenaria, adopta las encarnaciones Puruṣa, y a partir de Él comienza todo. Por lo tanto, Él es ātmā, el alma del mahat-tattva, o los elementos del universo. La energía material total no es la causa de la creación; en realidad, lo que ocurre es que el Mahā-Viṣṇu entra en el mahat-tattva, la energía material total. Él es el alma. Cuando Mahā-Viṣṇu entra en los universos manifestados, Él se manifiesta de nuevo como la Superalma que se encuentra en todas y cada una de las entidades vivientes. Nosotros tenemos la experiencia de que el cuerpo personal de la entidad viviente existe debido a la presencia de la chispa espiritual. Sin la existencia de la chispa espiritual, el cuerpo no puede desarrollarse. De igual modo, la manifestación material no puede desarrollarse, a menos que el Alma Suprema, Kṛṣṇa, entre en ella. Como se afirma en el Subāla Upaniṣad: prakṛty-ādi-sarva-bhūtāntar-yāmī sarva-śeṣī ca nārāyaṇaḥ, «La Suprema Personalidad de Dios existe en forma de la Superalma en todos los universos manifestados».

En el Śrīmad-Bhāgavatam se describe a los tres puruṣa-avatāras. También en el Sātvata-tantra. Viṣṇos tu trīṇi rūpāṇi puruṣākhyāny atho viduḥ: la Suprema Personalidad de Dios manifiesta tres aspectos —Kāraṇodakaśāyī Viṣṇu, Garbhodakaśāyī Viṣṇu y Kṣīrodakaśāyī Viṣṇu— en esta manifestación material. Al Mahā-Viṣṇu, o Kāraṇodakaśāyī Viṣṇu, se lo describe en la Brahma-saṁhitā (5.47). Yaḥ kāraṇārṇava-jale bhajati sma yoga-nidrām: el Señor Supremo, Kṛṣṇa, la causa de todas las causas, yace en forma de Mahā-Viṣṇu en el océano cósmico. Por consiguiente, la Suprema Personalidad de Dios es el comienzo de este universo, el sustentador de las manifestaciones del universo y el fin de toda la energía.

Texto

ādityānām ahaṁ viṣṇur
jyotiṣāṁ ravir aṁśumān
marīcir marutām asmi
nakṣatrāṇām ahaṁ śaśī

Palabra por palabra

ādityānām — de los ādityas; aham — Yo soy; viṣṇuḥ — el Señor Supremo; jyotiṣām — de todos los luminares; raviḥ — el Sol; aṁśu-mān — radiante; marīciḥ — Marīci; marutām — de los maruts; asmi — Yo soy; nakṣatrāṇām — de las estrellas; aham — Yo soy; śaśī — la Luna.

Traducción

De los ādityas, Yo soy Viṣṇu; de las luces, Yo soy el radiante Sol; de los maruts, Yo soy Marīci; y entre las estrellas, Yo soy la Luna.

Significado

Hay doce ādityas, de los cuales Kṛṣṇa es el principal. Entre todos los luminares que brillan en el cielo, el Sol es el principal de ellos, y en la Brahma-saṁhitā se dice que el Sol es el deslumbrante ojo del Señor Supremo. Existen cincuenta variedades de vientos que soplan por el espacio, y de esos vientos, la deidad controladora, Marīci, representa a Kṛṣṇa.

Entre las estrellas, la Luna es de lo más resaltante, en virtud de lo cual la Luna representa a Kṛṣṇa. Según este verso, parece ser que la Luna es una de las estrellas; por lo tanto, las estrellas que titilan en el cielo también reflejan la luz del Sol. La literatura védica no acepta la teoría de que en el universo hay muchos soles. El Sol es uno, y así como la Luna ilumina por el reflejo del Sol, así mismo ocurre con las estrellas. Como el Bhagavad-gītā indica aquí que la Luna es una de las estrellas, las titilantes estrellas no son soles sino que son como la Luna.

Texto

vedānāṁ sāma-vedo ’smi
devānām asmi vāsavaḥ
indriyāṇāṁ manaś cāsmi
bhūtānām asmi cetanā

Palabra por palabra

vedānām — de todos los Vedas; sāma-vedaḥ — el Sāma Veda; asmi — Yo soy; devānām — de todos los semidioses; asmi — Yo soy; vāsavaḥ — el rey del cielo; indriyāṇām — de todos los sentidos; manaḥ — la mente; ca — además; asmi — Yo soy; bhūtānām — de todas las entidades vivientes; asmi — Yo soy; cetanā — la fuerza viviente.

Traducción

De los Vedas, Yo soy el Sāma Veda; de los semidioses, Yo soy Indra, el rey del cielo; de los sentidos, Yo soy la mente; y de los seres vivos, Yo soy la fuerza viviente [la conciencia].

Significado

La diferencia que hay entre la materia y el espíritu es que la materia no tiene conciencia, y la entidad viviente sí la tiene; por lo tanto, esa conciencia es suprema y eterna. La conciencia no puede producirse por medio de una combinación de materia.

Texto

rudrāṇāṁ śaṅkaraś cāsmi
vitteśo yakṣa-rakṣasām
vasūnāṁ pāvakaś cāsmi
meruḥ śikhariṇām aham

Palabra por palabra

rudrāṇām — de todos los Rudras; śaṅkaraḥ — el Señor Śiva; ca — también; asmi — Yo soy; vitta-īśaḥ — el señor de la tesorería de los semidioses; yakṣa-rakṣasām — de los yakṣas y rākṣasas; vasūnām — de los Vasus; pāvakaḥ — fuego; ca — además; asmi — Yo soy; meruḥ — Meru; śikhariṇām — de todas las montañas; aham — Yo soy.

Traducción

De todos los Rudras, Yo soy el Señor Śiva; de los yakṣas y rākṣasas, Yo soy el Señor de la riqueza [Kuvera]; de los Vasus, Yo soy el fuego [Agni]; y de las montañas, Yo soy Meru.

Significado

Hay once Rudras, de los cuales Śaṅkara, el Señor Śiva, es el principal. Él es la encarnación del Señor Supremo que está a cargo de la modalidad de la ignorancia en el universo. Kuvera, el tesorero principal de los semidioses, es el líder de los yakṣas y rākṣasas, y él es una representación del Señor Supremo. Meru es una montaña célebre por la riqueza de sus recursos naturales.

Texto

purodhasāṁ ca mukhyaṁ māṁ
viddhi pārtha bṛhaspatim
senānīnām ahaṁ skandaḥ
sarasām asmi sāgaraḥ

Palabra por palabra

purodhasām — de todos los sacerdotes; ca — también; mukhyam — el principal; mām — a Mí; viddhi — entiende; pārtha — ¡oh, hijo de Pṛthā!; bṛhaspatim — Bṛhaspati; senānīnām — de todos los comandantes; aham — Yo soy; skandaḥ — Kārtikeya; sarasām — de todos los depósitos de agua; asmi — Yo soy; sāgaraḥ — el océano.

Traducción

De los sacerdotes, ¡oh, Arjuna!, has de saber que soy el principal, Bṛhaspati. De los generales, Yo soy Kārtikeya, y de las extensiones de agua, Yo soy el océano.

Significado

Indra es el principal semidiós de los planetas celestiales, y es conocido como el rey de los cielos. El planeta en el que él reina se denomina Indraloka. Bṛhaspati es el sacerdote de Indra, y puesto que Indra es el principal de todos los reyes, Bṛhaspati es el principal de todos los sacerdotes. Y así como Indra es el principal de todos los reyes, Skanda, o Kārttikeya, el hijo de Pārvatī y el Señor Śiva, es el principal de todos los comandantes militares. Y de todas las extensiones de agua, el océano es la mayor. Estas representaciones de Kṛṣṇa apenas dan indicios de Su grandeza.

Texto

maharṣīṇāṁ bhṛgur ahaṁ
girām asmy ekam akṣaram
yajñānāṁ japa-yajño ’smi
sthāvarāṇāṁ himālayaḥ

Palabra por palabra

mahā-ṛṣīṇām — entre los grandes sabios; bhṛguḥ — Bhṛgu; aham — Yo soy; girām — de las vibraciones; asmi — Yo soy; ekam akṣarampraṇava; yajñānām — de los sacrificios; japa-yajñaḥ — el canto; asmi — Yo soy; sthāvarāṇām — de cosas inmóviles; himālayaḥ — los montes Himālayas.

Traducción

De los grandes sabios, Yo soy Bhṛgu; de las vibraciones, Yo soy el trascendental oṁ; de los sacrificios, Yo soy el canto de los santos nombres [japa]; y de las cosas inmóviles, Yo soy los Himālayas.

Significado

Brahmā, la primera criatura viviente del universo, creó varios hijos para la propagación de diversas clases de especies. Entre estos hijos, Bhṛgu es el sabio más poderoso de todos. De todas las vibraciones trascendentales, el oṁ (oṁkāra) representa a Kṛṣṇa. De todos los sacrificios, el canto de Hare Kṛṣṇa, Hare Kṛṣṇa, Kṛṣṇa Kṛṣṇa, Hare Hare / Hare Rāma, Hare Rāma, Rāma Rāma, Hare Hare, es la representación más pura de Kṛṣṇa. A veces se recomiendan los sacrificios de animales, pero en el sacrificio de Hare Kṛṣṇa, Hare Kṛṣṇa, no hay ninguna posibilidad de violencia. Ello es lo más simple y puro que existe. Todo lo sublime que hay en los mundos es una representación de Kṛṣṇa. Por lo tanto, los Himālayas, las montañas más grandes del mundo, también lo representan a Él. La montaña llamada Meru se mencionó en el verso anterior, pero Meru a veces se mueve, mientras que los Himālayas jamás se mueven. Así pues, los Himālayas son superiores a Meru.

Texto

aśvatthaḥ sarva-vṛkṣāṇāṁ
devarṣīṇāṁ ca nāradaḥ
gandharvāṇāṁ citrarathaḥ
siddhānāṁ kapilo muniḥ

Palabra por palabra

aśvatthaḥ — el árbol baniano; sarva-vṛkṣāṇām — de todos los árboles; deva-ṛṣīṇām — de todos los sabios entre los semidioses; ca — y; nāradaḥ — Nārada; gandharvāṇām — de los ciudadanos del planeta Gandharva; citrarathaḥ — Citraratha; siddhānām — de todos los seres perfectos; kapilaḥ muniḥ — Kapila Muni.

Traducción

De todos los árboles, Yo soy el árbol baniano; y de los sabios entre los semidioses, Yo soy Nārada. De los gandharvas, Yo soy Citraratha; y entre los seres perfectos, Yo soy el sabio Kapila.

Significado

El árbol baniano (aśvattha) es uno de los árboles más altos y hermosos que existen, y en la India la gente a menudo lo adora como parte de sus rituales matutinos diarios. Entre los semidioses también se adora a Nārada, a quien se lo considera el devoto más eminente del universo. Así pues, él es la representación de Kṛṣṇa como devoto. El planeta Gandharva está lleno de entidades que cantan muy hermoso, y entre ellas el mejor cantante es Citraratha. Entre las entidades vivientes perfectas, Kapila, el hijo de Devahūti, es un representante de Kṛṣṇa. A Él se lo considera una encarnación de Kṛṣṇa, y Su filosofía se menciona en el Śrīmad-Bhāgavatam. Posteriormente, otro Kapila se hizo famoso, pero su filosofía era atea. Así pues, entre ellos hay la mar de diferencias.

Texto

uccaiḥśravasam aśvānāṁ
viddhi mām amṛtodbhavam
airāvataṁ gajendrāṇāṁ
narāṇāṁ ca narādhipam

Palabra por palabra

uccaiḥśravasam — Uccaiḥśravā; aśvānām — entre los caballos; viddhi — has de saber; mām — de Mí; amṛta-udbhavam — producido al batir el océano; airāvatam — Airāvata; gaja-indrāṇām — de los elefantes señoriales; narāṇām — entre los seres humanos; ca — y; naradhipam — el rey.

Traducción

De los caballos, has de saber que Yo soy Uccaiḥśravā, que se produjo mientras se batía el océano para obtener néctar. De los elefantes señoriales, Yo soy Airāvata; y entre los hombres, Yo soy el monarca.

Significado

Una vez, los semidioses devotos y los demonios (asuras) se pusieron a batir el mar. Como resultado de ello se produjo néctar y veneno, y el Señor Śiva se bebió el veneno. Del néctar se produjeron muchas entidades, entre las cuales había un caballo llamado Uccaiḥśravā. Otro animal que se produjo del néctar fue un elefante llamado Airāvata. Como estos dos animales se produjeron del néctar, tienen un significado especial, y ellos son representantes de Kṛṣṇa.

Entre los seres humanos, el rey es el representante de Kṛṣṇa, porque Kṛṣṇa es el sustentador del universo, y los reyes, que son nombrados en virtud de sus cualidades divinas, son sustentadores de sus reinos. Reyes tales como Mahārāja Yudhiṣṭhira, Mahārāja Parīkṣit y el Señor Rāma eran todos reyes sumamente virtuosos que siempre pensaban en el bienestar de los ciudadanos. En la literatura védica, al rey se lo considera el representante de Dios. Sin embargo, en esta era, con la corrupción de los principios de la religión, la monarquía ha decaído, y ahora ha terminado por ser abolida. No obstante, debe entenderse que en el pasado la gente era más feliz bajo el régimen de reyes virtuosos.

Texto

āyudhānām ahaṁ vajraṁ
dhenūnām asmi kāma-dhuk
prajanaś cāsmi kandarpaḥ
sarpāṇām asmi vāsukiḥ

Palabra por palabra

āyudhānām — de todas las armas; aham — Yo soy; vajram — el rayo; dhenūnām — de las vacas; asmi — Yo soy; kāma-dhuk — las vacas surabhi; prajanaḥ — la causa por la que se engendran hijos; ca — y; asmi — Yo soy; kandarpaḥ — Cupido; sarpāṇām — de las serpientes; asmi — Yo soy; vāsukiḥ — Vāsuki.

Traducción

De las armas, soy el rayo; entre las vacas, soy la surabhi; de las causas de la procreación, soy Kandarpa, el dios del amor; y de las serpientes, soy Vāsuki.

Significado

El rayo, que en verdad es un arma poderosa, representa el poder de Kṛṣṇa. En Kṛṣṇaloka, en el cielo espiritual, hay vacas que pueden ser ordeñadas en cualquier momento y que dan tanta leche como uno quiera. Claro que esa clase de vacas no existen en este mundo material, pero se dice que ellas se encuentran en Kṛṣṇaloka. El Señor tiene muchas de esas vacas, que se denominan surabhi. Se dice que el Señor se dedica a cuidar las vacas surabhi. Kandarpa es el deseo sexual con el que se engendran buenos hijos; por consiguiente, Kandarpa es el representante de Kṛṣṇa. A veces se tienen relaciones sexuales solo para el goce de los sentidos; esa clase de vida sexual no representa a Kṛṣṇa. Pero la relación sexual que se tiene para la procreación de buenos hijos se denomina Kandarpa y representa a Kṛṣṇa.

Texto

anantaś cāsmi nāgānāṁ
varuṇo yādasām aham
pitṝṇām aryamā cāsmi
yamaḥ saṁyamatām aham

Palabra por palabra

anantaḥ — Ananta; ca — también; asmi — Yo soy; nāgānām — de las serpientes de muchas cabezas; varuṇaḥ — el semidiós que controla el agua; yādasām — de todos los seres acuáticos; aham — Yo soy; pitṝṇām — de los antepasados; aryamā — Aryamā; ca — además; asmi — Yo soy; yamaḥ — el controlador de la muerte; saṁyamatām — de todos los reguladores; aham — Yo soy.

Traducción

De las nāgas de muchas cabezas, Yo soy Ananta; y entre los seres acuáticos, Yo soy el semidiós Varuṇa. De los antepasados difuntos, Yo soy Aryamā; y entre los agentes de la ley, Yo soy Yama, el señor de la muerte.

Significado

Entre las serpientes nāga de muchas cabezas, Ananta es la más importante, tal como lo es el semidiós Varuṇa entre los seres acuáticos. Ambos representan a Kṛṣṇa. Existe también un planeta de pitās, antepasados, regido por Aryamā, quien representa a Kṛṣṇa. Hay muchas entidades vivientes que castigan a los infieles, y entre ellas Yama es la principal. Yama se encuentra en un planeta cercano a este planeta Tierra. Al morir, aquellos que son muy pecadores son llevados ahí, y Yama dispone diferentes clases de castigos para ellos.

Texto

prahlādaś cāsmi daityānāṁ
kālaḥ kalayatām aham
mṛgāṇāṁ ca mṛgendro ’haṁ
vainateyaś ca pakṣiṇām

Palabra por palabra

prahlādaḥ — Prahlāda; ca — también; asmi — Yo soy; daityānām — de los demonios; kālaḥ — el tiempo; kalayatām — de los subyugadores; aham — Yo soy; mṛgāṇām — de los animales; ca — y; mṛga-indraḥ — el león; aham — Yo soy; vainateyaḥ — Garuḍa; ca — además; pakṣiṇām — de las aves.

Traducción

Entre los demonios daityas, Yo soy el devoto Prahlāda; entre los subyugadores, Yo soy el tiempo; entre las bestias, Yo soy el león; y entre las aves, Yo soy Garuḍa.

Significado

Diti y Aditi son dos hermanas. Los hijos de Aditi se llaman ādityas, y los hijos de Diti se llaman daityas. Todos los ādityas son devotos del Señor, y todos los daityas son ateos. Aunque Prahlāda nació en la familia de los daityas, desde niño fue un gran devoto. Debido a su servicio devocional y a su naturaleza divina, se considera que él es un representante de Kṛṣṇa.

Existen muchos principios subyugadores, pero el tiempo desgasta todas las cosas en el universo material, y por ello representa a Kṛṣṇa. De los muchos animales, el león es el más poderoso y feroz, y del millón de variedades de aves que hay, Garuḍa, el transportador del Señor Viṣṇu, es la más importante.

Texto

pavanaḥ pavatām asmi
rāmaḥ śastra-bhṛtām aham
jhaṣāṇāṁ makaraś cāsmi
srotasām asmi jāhnavī

Palabra por palabra

pavanaḥ — el viento; pavatām — de todo lo que purifica; asmi — Yo soy; rāmaḥ — Rāma; śastra-bhṛtām — de los portadores de armas; aham — Yo soy; jhaṣāṇām — de todos los peces; makaraḥ — el tiburón; ca — también; asmi — Yo soy; srotasām — de los fluyentes ríos; asmi — Yo soy; jāhnavī — el río Ganges.

Traducción

De los purificadores, Yo soy el viento; de los esgrimidores de armas, Yo soy Rāma; de los peces, Yo soy el tiburón; y de los fluyentes ríos, Yo soy el Ganges.

Significado

De todos los seres acuáticos, el tiburón es uno de los más grandes e, indudablemente, el más peligroso para el hombre. Así pues, el tiburón representa a Kṛṣṇa.

Texto

sargāṇām ādir antaś ca
madhyaṁ caivāham arjuna
adhyātma-vidyā vidyānāṁ
vādaḥ pravadatām aham

Palabra por palabra

sargāṇām — de todas las creaciones; ādiḥ — el principio; antaḥ — el fin; ca — y; madhyam — el medio; ca — además; eva — ciertamente; aham — Yo soy; arjuna — ¡oh, Arjuna!; adhyātma-vidyā — conocimiento espiritual; vidyānām — de toda la educación; vādaḥ — la conclusión natural; pravadatām — de los argumentos; aham — Yo soy.

Traducción

De todas las creaciones, ¡oh, Arjuna! Yo soy el principio y el fin, y también el medio. De todas las ciencias, Yo soy la ciencia espiritual del ser, y entre los lógicos, Yo soy la verdad concluyente.

Significado

Entre las manifestaciones creadas, la primera es la creación de la totalidad de los elementos materiales. Como se explicó antes, la manifestación cósmica es creada y conducida por Mahā-Viṣṇu, Garbhodakaśāyī Viṣṇu y Kṣīrodakaśāyī Viṣṇu, y luego es aniquilada de nuevo por el Señor Śiva. Brahmā es un creador secundario. Todos estos agentes de la creación, manutención y aniquilación, son encarnaciones de las cualidades materiales del Señor Supremo. Por consiguiente, Él es el principio, el medio y el fin de todo lo creado.

Para la educación superior hay varias clases de libros de conocimiento, tales como los cuatro Vedas y sus seis suplementos, y el Vedānta-sūtra, los libros de lógica, los libros de religión y los Purāṇas. Así que, en total, hay catorce divisiones en que se agrupan los libros de educación. De éstos, el libro que presenta el adhyātma-vidyā, el conocimiento espiritual —en particular, el Vedānta-sūtra—, representa a Kṛṣṇa.

Entre los lógicos hay diferentes clases de argumentos. El proceso por el cual se respalda el argumento de uno con pruebas que también respaldan el lado contrario, se denomina jalpa. El hecho de solo tratar de vencer al oponente se denomina vitaṇḍā. Pero la verdadera conclusión se denomina vāda. Esa verdad concluyente es una representación de Kṛṣṇa.

Texto

akṣarāṇām a-kāro ’smi
dvandvaḥ sāmāsikasya ca
aham evākṣayaḥ kālo
dhātāhaṁ viśvato-mukhaḥ

Palabra por palabra

akṣarāṇām — de las letras; a-kāraḥ — la primera letra; asmi — Yo soy; dvandvaḥ — la dual; sāmāsikasya — de los compuestos; ca — y; aham — Yo soy; eva — ciertamente; akṣayaḥ — eterno; kālaḥ — el tiempo; dhātā — el creador; aham — Yo soy; viśvataḥ-mukhaḥ — Brahmā.

Traducción

De las letras, Yo soy la A; y entre las palabras compuestas, Yo soy el compuesto dual. Yo soy, además, el tiempo inagotable, y de los creadores, Yo soy Brahmā.

Significado

A-kāra, la primera letra del alfabeto sánscrito, es el comienzo de la literatura védica. Sin a-kāra no se puede pronunciar nada; por lo tanto, esa letra constituye el comienzo del sonido. En sánscrito hay además muchas palabras compuestas, de las cuales la palabra dual, como rāma-kṛṣṇa, se denomina dvandva. En esa palabra compuesta, las palabras rāma y kṛṣṇa tienen la misma forma, en virtud de lo cual el compuesto se denomina dual.

Entre todas las clases de aniquiladores, el tiempo es el aniquilador supremo, porque el tiempo lo mata todo. El tiempo es el representante de Kṛṣṇa, ya que en el debido momento habrá un gran incendio y todo será aniquilado.

Entre las entidades vivientes que crean, Brahmā, que tiene cuatro cabezas, es la principal. Por consiguiente, él es un representante del Señor Supremo, Kṛṣṇa.

Texto

mṛtyuḥ sarva-haraś cāham
udbhavaś ca bhaviṣyatām
kīrtiḥ śrīr vāk ca nārīṇāṁ
smṛtir medhā dhṛtiḥ kṣamā

Palabra por palabra

mṛtyuḥ — la muerte; sarva-haraḥ — que todo lo devora; ca — también; aham — Yo soy; udbhavaḥ — generación; ca — también; bhaviṣyatām — de las manifestaciones futuras; kīrtiḥ — fama; śrīḥ — opulencia o belleza; vāk — la manera fina de hablar; ca — también; nārīṇāṁ — de las mujeres; smṛtiḥ — memoria; medhā — inteligencia; dhṛtiḥ — firmeza; kṣamā — paciencia.

Traducción

Yo soy la muerte que todo lo devora, y soy el principio generador de todo lo que está por existir. Entre las mujeres, Yo soy la fama, la fortuna, la manera fina de hablar, la memoria, la inteligencia, la constancia y la paciencia.

Significado

Cuando un hombre nace, muere a cada momento. Así pues, la muerte está devorando a cada entidad viviente en todo momento, pero el último golpe se denomina la muerte misma. Esa muerte es Kṛṣṇa. En lo que respecta al desarrollo futuro, todas las entidades vivientes pasan por seis cambios básicos. Nacen, crecen, permanecen por algún tiempo, se reproducen, decaen y, finalmente, se desvanecen. De estos cambios, el primero es el parto, y eso es Kṛṣṇa. La generación inicial es el principio de todas las actividades futuras.

Las siete opulencias enumeradas —la fama, la fortuna, la manera fina de hablar, la memoria, la inteligencia, la firmeza y la paciencia— se consideran femeninas. Si una persona las posee todas o posee algunas de ellas, se vuelve gloriosa. Si un hombre es famoso como persona virtuosa, eso lo vuelve glorioso. El sánscrito es un idioma perfecto y, en consecuencia, es muy glorioso. Si después de estudiar algo uno puede recordarlo, está dotado de una buena memoria, o smṛti. Y la habilidad de no solo poder leer muchos libros acerca de diferentes temas, pero de poder entenderlos y aplicarlos cuando es necesario, se denomina inteligencia (medhā), que es otra opulencia. La habilidad de vencer la inestabilidad se denomina firmeza o constancia (dhṛti). Y cuando se es una persona totalmente capacitada y, sin embargo, se es humilde y manso, y cuando uno es capaz de mantener su equilibrio tanto en la tristeza como en el éxtasis de la alegría, se tiene la opulencia llamada paciencia (kṣamā).

Texto

bṛhat-sāma tathā sāmnāṁ
gāyatrī chandasām aham
māsānāṁ mārga-śīrṣo ’ham
ṛtūnāṁ kusumākaraḥ

Palabra por palabra

bṛhat-sāma — el Bṛhat-sāma; tathā — también; sāmnām — de las canciones del Sāma Veda; gāyatrī — los himnos gāyatrī; chandasām — de toda la poesía; aham — Yo soy; māsānām — de los meses; mārga-śīrṣaḥ — el mes comprendido entre noviembre y diciembre; aham — Yo soy; ṛtūnām — de todas las estaciones; kusuma-ākaraḥ — la primavera.

Traducción

De los himnos del Sāma Veda, Yo soy el Bṛhat-sāma, y de la poesía, Yo soy el gāyatrī. De los meses, Yo soy mārgaśīrsa [noviembre-diciembre], y de las estaciones, Yo soy la florida primavera.

Significado

El Señor ya ha explicado que entre todos los Vedas, Él es el Sāma Veda. El Sāma Veda está colmado de hermosas canciones que tocan los diversos semidioses. Una de esas canciones es el bṛhat-sāma, que tiene una melodía exquisita y se canta a medianoche.

En sánscrito hay reglas específicas que regulan la poesía; la rima y el metro no se escriben caprichosamente, como en la mayor parte de la poesía moderna. De la poesía regulada, el mantra gāyatrī, que cantan los brāhmaṇas debidamente capacitados, es el más notable. El mantra gāyatrī se menciona en el Śrīmad-Bhāgavatam. Como el mantra gāyatrī está hecho especialmente para llegar a la comprensión de Dios, representa al Señor Supremo. Ese mantra es para gente adelantada en lo espiritual, y cuando uno tiene éxito en cantarlo, puede ingresar en el plano de la posición trascendental del Señor. Para poder cantar el mantra gāyatrī, primero uno debe adquirir las cualidades de la persona perfecta, las cualidades de la bondad según las leyes de la naturaleza material. El mantra gāyatrī es muy importante en la civilización védica, y se considera que es la encarnación sonora del Brahman. Brahmā es su iniciador, y desciende de él en sucesión discipular.

El mes comprendido entre noviembre y diciembre se considera que es el mejor de todos los meses, porque en esa época en la India se recogen los granos de los campos, y la gente se pone muy feliz. La primavera es, desde luego, una estación querida por todos, ya que ni es demasiado caliente ni demasiado fría, y en esa estación las flores y los árboles alcanzan su máximo esplendor. Durante la primavera hay, además, muchas ceremonias que conmemoran los pasatiempos de Kṛṣṇa; por eso se considera que es la estación más jubilosa de todas, y es la representante del Señor Supremo, Kṛṣṇa.

Texto

dyūtaṁ chalayatām asmi
tejas tejasvinām aham
jayo ’smi vyavasāyo ’smi
sattvaṁ sattvavatām aham

Palabra por palabra

dyūtam — la apuesta; chalayatām — de todos los tramposos; asmi — Yo soy; tejaḥ — el esplendor; tejasvinām — de todo lo espléndido; aham — Yo soy; jayaḥ — la victoria; asmi — Yo soy; vyavasāyaḥ — empresa o aventura; asmi — Yo soy; sattvam — la fuerza; sattva-vatām — del fuerte; aham — Yo soy.

Traducción

Yo soy también la apuesta de los tramposos, y de lo espléndido soy el esplendor. Yo soy la victoria, Yo soy la aventura y Yo soy la fuerza de los fuertes.

Significado

Existen muchas clases de engañadores por todo el universo. De todos los engaños, la apuesta es el supremo, y por ello representa a Kṛṣṇa. En Su carácter de Supremo, Kṛṣṇa puede ser más mentiroso que cualquier hombre ordinario. Si Kṛṣṇa decide engañar a una persona, nadie puede superarlo en Su engaño. Su grandeza no es unilateral: es absoluta.

Entre los victoriosos, Él es la victoria. Él es el esplendor de lo espléndido. Entre los emprendedores y trabajadores, Él es el más emprendedor; y entre los fuertes, Él es el más fuerte. Cuando Kṛṣṇa se hallaba en la Tierra, nadie podía superarlo en lo que a fuerza se refiere. Incluso en Su infancia, Él levantó la colina Govardhana. Nadie puede superarlo en el engaño, nadie puede superarlo en el esplendor, nadie puede superarlo en la victoria, nadie puede superarlo en la iniciativa y nadie puede superarlo en la fuerza.

Texto

vṛṣṇīnāṁ vāsudevo ’smi
pāṇḍavānāṁ dhanañ-jayaḥ
munīnām apy ahaṁ vyāsaḥ
kavīnām uśanā kaviḥ

Palabra por palabra

vṛṣṇīnām — de los descendientes de Vṛṣṇi; vāsudevaḥ — Kṛṣṇa en Dvārakā; asmi — Yo soy; pāṇḍavānām — de los Pāṇḍavas; dhanañjayaḥ — Arjuna; munīnām — de los sabios; api — además; aham — Yo soy; vyāsaḥ — Vyāsa, el compilador de toda la literatura védica; kavīnām — de todos los grandes pensadores; uśanā — Uśanā; kaviḥ — el pensador.

Traducción

De los descendientes de Vṛṣṇi, Yo soy Vāsudeva, y de los Pāṇḍavas soy Arjuna. De los sabios, Yo soy Vyāsa, y entre los grandes pensadores soy Uśanā.

Significado

Kṛṣṇa es la Suprema Personalidad de Dios original y Baladeva es la expansión inmediata de Kṛṣṇa. Tanto el Señor Kṛṣṇa como Baladeva aparecieron como hijos de Vasudeva, así que a ambos se los puede llamar Vāsudeva. Desde otro punto de vista, como Kṛṣṇa nunca se va de Vṛndāvana, todas las formas de Kṛṣṇa que aparecen en cualquier otra parte son expansiones de Él. Vāsudeva es la expansión inmediata de Kṛṣṇa. No obstante, Vāsudeva no es diferente de Kṛṣṇa. Debe saberse que el Vāsudeva al que se hace referencia en este verso del Bhagavad-gītā es Baladeva, o Balarāma, porque Él es la fuente original de todas las encarnaciones y, por ende, Él es la única fuente de Vāsudeva. Las expansiones inmediatas del Señor se denominan svāṁśa (expansiones personales), y además hay expansiones llamadas vibhinnāṁśa (expansiones separadas).

Entre los hijos de Pāṇḍu, Arjuna es famoso como Dhanañjaya. Él es el mejor hombre de todos y, por consiguiente, representa a Kṛṣṇa. Entre los munis, u hombres eruditos que están versados en el conocimiento védico, Vyāsa es el más eminente, porque él explicó el conocimiento védico de muchas maneras para que lo pudiera entender la gente común de esta Era de Kali. Y a Vyāsa también se lo conoce como una encarnación de Kṛṣṇa; por lo tanto, Vyāsa también representa a Kṛṣṇa. Los kavis son aquellos capaces de pensar a fondo acerca de cualquier asunto. Entre los kavis, Uśanā, Śukrācārya, era el maestro espiritual de los demonios; él era un político extremadamente inteligente y previsor. Así pues, Śukrācārya es otro representante de la opulencia de Kṛṣṇa.

Texto

daṇḍo damayatām asmi
nītir asmi jigīṣatām
maunaṁ caivāsmi guhyānāṁ
jñānaṁ jñānavatām aham

Palabra por palabra

daṇḍaḥ — castigo; damayatām — de todos los medios de supresión; asmi — Yo soy; nītiḥ — la moral; asmi — Yo soy; jigīṣatām — de aquellos que buscan la victoria; maunam — el silencio; ca — y; eva — también; asmi — Yo soy; guhyānām — de los secretos; jñānam — el conocimiento; jñāna-vatām — de los sabios; aham — Yo soy.

Traducción

Entre todos los medios para suprimir lo ilícito, Yo soy el castigo; y entre aquellos que buscan la victoria, Yo soy la moral. De las cosas secretas, Yo soy el silencio, y Yo soy la sabiduría de los sabios.

Significado

Existen muchos agentes represivos, de los cuales los más importantes son aquellos que combaten a los herejes. Cuando se castiga a los herejes, el medio con el que se los castiga representa a Kṛṣṇa. Entre aquellos que están tratando de triunfar en algún campo de la actividad, el elemento más triunfante de todos es la moral. Entre las actividades confidenciales de oír, pensar y meditar, el silencio es la más importante, porque por medio del silencio se puede progresar muy rápidamente. El hombre sabio es aquel que puede discernir entre la materia y el espíritu, entre las naturalezas superior e inferior de Dios. Esa clase de conocimiento es el propio Kṛṣṇa.

Texto

yac cāpi sarva-bhūtānāṁ
bījaṁ tad aham arjuna
na tad asti vinā yat syān
mayā bhūtaṁ carācaram

Palabra por palabra

yat — todo lo que; ca — también; api — sea; sarva-bhūtānām — de todas las creaciones; bījam — la semilla; tat — eso; aham — Yo soy; arjuna — ¡oh, Arjuna!; na — no; tat — eso; asti — hay; vinā — sin; yat — lo cual; syāt — existe; mayā — Mí; bhūtam — ser creado; cara-acaram — móvil e inmóvil.

Traducción

Además, ¡oh, Arjuna!, Yo soy la semilla generadora de todas las existencias. No hay ningún ser —móvil o inmóvil— que pueda existir sin Mí.

Significado

Todo tiene una causa, y esa causa o semilla de la manifestación es Kṛṣṇa. Sin la energía de Kṛṣṇa, nada puede existir; por eso a Él se lo llama omnipotente. Sin Su potencia, ni lo móvil ni lo inmóvil puede existir. Cualquier existencia que no esté fundada en la energía de Kṛṣṇa se denomina māyā, «aquello que no es».

Texto

nānto ’sti mama divyānāṁ
vibhūtīnāṁ paran-tapa
eṣa tūddeśataḥ prokto
vibhūter vistaro mayā

Palabra por palabra

na — ni; antaḥ — un límite; asti — hay; mama — Mi; divyānām — de las divinas; vibhūtīnām — opulencias; param-tapa — ¡oh, conquistador de los enemigos!; eṣaḥ — todo esto; tu — pero; uddeśataḥ — como ejemplos; proktaḥ — hablados; vibhūteḥ — de las opulencias; vistaraḥ — la extensión; mayā — por Mi.

Traducción

¡Oh, poderoso conquistador de los enemigos!, Mis manifestaciones divinas no tienen fin. Lo que te he dicho no es más que un simple indicio de Mis infinitas opulencias.

Significado

Como se afirma en la literatura védica, aunque las opulencias y energías del Supremo se entienden de diversas maneras, dichas opulencias no tienen límite; por lo tanto, no todas las opulencias y energías se pueden explicar. A Arjuna tan solo se le describen unos cuantos ejemplos para calmar su curiosidad.

Texto

yad yad vibhūtimat sattvaṁ
śrīmad ūrjitam eva vā
tat tad evāvagaccha tvaṁ
mama tejo-’ṁśa-sambhavam

Palabra por palabra

yat yat — todas; vibhūti — las opulencias; mat — que tenga; sattvam — existencia; śrī-mat — hermosas; ūrjitam — gloriosas; eva — ciertamente; — o; tat tat — todas ellas; eva — ciertamente; avagaccha — has de saber; tvam — tú; mama — Mi; tejaḥ — del esplendor; aṁśa — una parte; sambhavam — nacido de.

Traducción

Has de saber que todas las creaciones opulentas, hermosas y gloriosas brotan tan solo de una chispa de Mi esplendor.

Significado

Cualquier existencia gloriosa o hermosa ha de saberse que no es más que una manifestación fragmentaria de la opulencia de Kṛṣṇa, ya sea en el mundo espiritual o en el material. Cualquier cosa extraordinariamente opulenta ha de considerarse que representa la opulencia de Kṛṣṇa.

Texto

atha vā bahunaitena
kiṁ jñātena tavārjuna
viṣṭabhyāham idaṁ kṛtsnam
ekāṁśena sthito jagat

Palabra por palabra

atha — o; bahunā — muchos; etena — por esta clase; kim — qué; jñātena — sabiendo; tava — tu; arjuna — ¡oh, Arjuna!; viṣṭabhya — omnipresente; aham — Yo; idam — esta; kṛtsnam — entera; eka — por una; aṁśena — parte; sthithaḥ — estoy situado; jagat — el universo.

Traducción

Pero, ¿qué necesidad hay, Arjuna, de todo este conocimiento detallado? Con un solo fragmento de Mí mismo, Yo estoy omnipresente en todo este universo y lo sostengo.

Significado

El Señor Supremo está representado por todas partes de todos los universos materiales, por haber entrado en forma de la Superalma en todas las cosas. Aquí el Señor le dice a Arjuna que de nada sirve entender cómo las cosas existen en su opulencia y grandeza separadas. Él debe saber que todas las cosas existen porque Kṛṣṇa entra en ellas en forma de la Superalma. Desde Brahmā, la entidad más gigantesca que existe, hasta la hormiga más pequeña de todas, todos existen porque el Señor ha entrado en todos y cada uno de ellos y los está sustentando.

Existen algunas personas que dicen que la adoración de cualquier semidiós lo llevará a uno a la Suprema Personalidad de Dios, o a la meta suprema. Pero aquí se desalienta por completo la adoración de los semidioses, porque incluso los semidioses más eminentes de todos, tales como Brahmā y Śiva, representan únicamente parte de la opulencia del Señor Supremo. Él es el origen de todo el que ha nacido, y nadie es superior a Él. Él es asamaurdhva, lo cual significa que nadie es superior a Él y que nadie es igual a Él. En el Padma Purāṇa se dice que aquel que considera que el Supremo Señor Kṛṣṇa está en la misma categoría que los semidioses —aunque se trate de Brahmā o Śiva—, se convierte de inmediato en un ateo. Sin embargo, si uno estudia a cabalidad las diferentes descripciones de las opulencias y expansiones de la energía de Kṛṣṇa, puede entender entonces sin ninguna duda la posición del Señor Śrī Kṛṣṇa, y puede fijar la mente en la adoración de Kṛṣṇa sin desviación. El Señor es omnipresente mediante la expansión de Su representación parcial, la Superalma, que entra dentro de todo lo que existe. Por lo tanto, los devotos puros concentran la mente en el proceso de conciencia de Kṛṣṇa mediante el servicio devocional pleno; en consecuencia, ellos siempre están situados en la posición trascendental. El servicio devocional y la adoración de Kṛṣṇa se señalan muy claramente en este capítulo en los versos que van del ocho al once. Ése es el camino del servicio devocional puro. En este capítulo se ha explicado a fondo la manera en que uno puede lograr la máxima perfección devocional, la perfección de asociarse con la Suprema Personalidad de Dios. Śrīla Baladeva Vidyābhūṣaṇa, un gran ācārya que forma parte de la sucesión discipular que procede de Kṛṣṇa, concluye su comentario a este capítulo diciendo:

yac-chakti-leśāt sūryādyā
bhavanty aty-ugra-tejasaḥ
yad-aṁśena dhṛtaṁ viśvaṁ
sa kṛṣṇo daśame ’rcyate

De la poderosa energía del Señor Kṛṣṇa, incluso el poderoso Sol obtiene su poder, y al mundo entero lo mantiene la expansión parcial de Kṛṣṇa. Por consiguiente, el Señor Śrī Kṛṣṇa es digno de que se lo adore.

Así terminan los significados de Bhaktivedanta correspondientes al capítulo décimo del Śrīmad Bhagavad-gītā, titulado «La opulencia del Absoluto».