Skip to main content

Text 22

Text 22

Devanagari

Devanagari

नम: पङ्कजनाभाय नम: पङ्कजमालिने ।
नम: पङ्कजनेत्राय नमस्ते पङ्कजाङ्‍घ्रये ॥ २२ ॥

Text

Texto

namaḥ paṅkaja-nābhāya
namaḥ paṅkaja-māline
namaḥ paṅkaja-netrāya
namas te paṅkajāṅghraye
namaḥ paṅkaja-nābhāya
namaḥ paṅkaja-māline
namaḥ paṅkaja-netrāya
namas te paṅkajāṅghraye

Synonyms

Palabra por palabra

namaḥ — all respectful obeisances; paṅkaja-nābhāya — unto the Lord who has a specific depression resembling a lotus flower in the center of His abdomen; namaḥ — obeisances; paṅkaja-māline — one who is always decorated with a garland of lotus flowers; namaḥ — obeisances; paṅkaja-netrāya — one whose glance is as cooling as a lotus flower; namaḥ te — respectful obeisances unto You; paṅkaja-aṅghraye — unto You, the soles of whose feet are engraved with lotus flowers (and who are therefore said to possess lotus feet).

namaḥ — todas las reverencias respetuosas; paṅkaja-nābhāya — al Señor, quien en el centro de Su abdomen tiene una depresión específica que se asemeja a una flor de loto; namaḥ — reverencias; paṅkaja-māline — aquel que siempre está adornado con una guirnalda de flores de loto; namaḥ — reverencias; paṅkaja-netrāya — aquel cuya mirada es tan refrescante como una flor de loto; namaḥ te — respetuosas reverencias a Ti; paṅkaja-aṅghraye — a Ti, cuyas plantas de los pies están grabadas con flores de loto (y de quien, por ello, se dice que posee pies de loto).

Translation

Traducción

My respectful obeisances are unto You, O Lord, whose abdomen is marked with a depression like a lotus flower, who are always decorated with garlands of lotus flowers, whose glance is as cool as the lotus and whose feet are engraved with lotuses.

Mis respetuosas reverencias sean para Ti, ¡oh, Señor!, cuyo abdomen está marcado con una depresión semejante a una flor de loto, quien siempre está adornado con guirnaldas de flores de loto, cuya mirada es tan fresca como el loto, y cuyos pies están grabados con lotos.

Purport

Significado

Here are some of the specific symbolical marks on the spiritual body of the Personality of Godhead which distinguish His body from the bodies of all others. They are all special features of the body of the Lord. The Lord may appear as one of us, but He is always distinct by His specific bodily features. Śrīmatī Kuntī claims herself unfit to see the Lord because of her being a woman. This is claimed because women, śūdras (the laborer class) and the dvija-bandhus, or the wretched descendants of the higher three classes, are unfit by intelligence to understand transcendental subject matter concerning the spiritual name, fame, attributes, forms, etc., of the Supreme Absolute Truth. Such persons, although they are unfit to enter into the spiritual affairs of the Lord, can see Him as the arcā-vigraha, who descends to the material world just to distribute favors to the fallen souls, including the above-mentioned women, śūdras and dvija-bandhus. Because such fallen souls cannot see anything beyond matter, the Lord condescends to enter into each and every one of the innumerable universes as the Garbhodakaśāyī Viṣṇu, who grows a lotus stem from the lotuslike depression in the center of His transcendental abdomen, and thus Brahmā, the first living being in the universe, is born. Therefore, the Lord is known as the Paṅkajanābhi. The Paṅkajanābhi Lord accepts the arcā-vigraha (His transcendental form) in different elements, namely a form within the mind, a form made of wood, a form made of earth, a form made of metal, a form made of jewel, a form made of paint, a form drawn on sand, etc. All such forms of the Lord are always decorated with garlands of lotus flowers, and there should be a soothing atmosphere in the temple of worship to attract the burning attention of the nondevotees always engaged in material wranglings. The meditators worship a form within the mind. Therefore, the Lord is merciful even to the women, śūdras and dvija-bandhus, provided they agree to visit the temple of worship in different forms made for them. Such temple visitors are not idolaters, as alleged by some men with a poor fund of knowledge. All the great ācāryas established such temples of worship in all places just to favor the less intelligent, and one should not pose himself as transcending the stage of temple worship while one is actually in the category of the śūdras and the women or less. One should begin to see the Lord from His lotus feet, gradually rising to the thighs, waist, chest and face. One should not try to look at the face of the Lord without being accustomed to seeing the lotus feet of the Lord. Śrīmatī Kuntī, because of her being the aunt of the Lord, did not begin to see the Lord from the lotus feet because the Lord might feel ashamed, and thus Kuntīdevī, just to save a painful situation for the Lord, began to see the Lord just above His lotus feet, i.e., from the waist of the Lord, gradually rising to the face, and then down to the lotus feet. In the round, everything there is in order.

He aquí algunas de las señales simbólicas específicas del cuerpo espiritual de la Personalidad de Dios, que distinguen Su cuerpo de los cuerpos de todos los demás. Todas ellas son características especiales del cuerpo del Señor. El Señor puede que parezca ser uno de nosotros, pero Él siempre es distinto, en virtud de Sus características corporales específicas. Śrīmatī Kuntī dice que ella, por el hecho de ser mujer, no es apta para ver al Señor. Esto lo dice porque las mujeres, los śūdras (la clase obrera) y los dvija-bhandus, o los descendientes desdichados de las tres clases superiores, carecen de la inteligencia adecuada para entender el tema trascendental que trata del nombre, la fama, los atributos, las formas, etc., de la Suprema Verdad Absoluta, que son todos espirituales. Dichas personas, aunque no son aptas para participar de las actividades del Señor, pueden verlo a Él como el arcā-vigraha, el cual desciende al mundo material únicamente para distribuirles gracias a las almas caídas, incluso a las mujeres, śūdras y dvija-bandhus anteriormente citados. Como esas almas caídas no pueden ver nada que esté más allá de la materia, el Señor consiente en entrar en todos y cada uno de los innumerables universos, en forma de Garbhodakaśāyī Viṣṇu, de cuya depresión cual loto que tiene en el centro de Su abdomen trascendental crece un tallo de loto, y así nace Brahmā, el primer ser viviente del universo. En consecuencia, al Señor se le conoce como el Paṅkajanābhi. El Señor Paṅkajanābhi acepta el arcā-vigraha (Su forma trascendental) hecho de diferentes elementos, es decir, una forma dentro de la mente, una forma hecha de madera, una forma hecha de tierra, una forma hecha de metal, una forma hecha de joyas, una forma hecha de pintura, una forma dibujada en la arena, etc. Todas esas formas del Señor siempre están decoradas con guirnaldas de flores de loto, y en el templo de la adoración debe haber una atmósfera apacible, para atraer la atención ardiente de los no devotos que están siempre dedicados a pleitos mundanos. Los meditadores adoran una forma dentro de la mente. Por lo tanto, el Señor es misericordioso incluso con las mujeres, los śūdras y los dvija-bandhus, siempre y cuando accedan a visitar el templo y adoren las diferentes formas hechas para ellos. Esos visitantes de los templos no son idólatras, como alegan algunos hombres que poseen un escaso acopio de conocimiento. Todos los grandes ācāryas establecieron dichos templos de adoración en todos los lugares, tan solo para favorecer a los poco inteligentes, y uno no debe hacerse pasar por alguien que ha trascendido la etapa de la adoración en el templo, mientras se halle de hecho en la categoría de los śūdras y las mujeres, o más bajo que ellos. Uno debe comenzar a ver al Señor a partir de Sus pies de loto, elevándose gradualmente hasta los muslos, la cintura, el pecho y la cara. Uno no debe tratar de mirar al Señor a la cara, sin estar acostumbrado a ver los pies de loto del Señor. Śrīmatī Kuntī, por ser la tía del Señor, no comenzó a verlo desde los pies de loto, debido a que el Señor hubiera podido sentirse avergonzado, y, así pues, Kuntīdevī, solo para evitarle al Señor una situación incómoda, comenzó a verlo justo por encima de Sus pies de loto, es decir, desde la cintura del Señor, elevándose gradualmente hasta la cara, y descendiendo luego hasta los pies de loto. En total, allí todo está en orden.